Marruecos

Viajar a Marruecos es toda una experiencia para los sentidos, es un destino interesante para quienes desean conocer una cultura distinta pero enriquecedora con su identidad y costumbres. Es un país que proporciona un miles de experiencias congeladas en el tiempo, sus monumentos y ciudades repletas de calles con colores ocres y rojizos atraen y enamoran a muchos viajeros.

Marruecos dispone de una gran riqueza geográfica, ofreciendo tanto paisajes rurales como montañosos o desérticos, lleno de olores y sabores te vas a sentir en otro mundo, o mejor dicho en otro tiempo, y es que muchos viajeros exploran Marruecos en busca de aventuras para sentirse en otra época sin necesidad de una máquina del tiempo.

También es un destino sumamente exótico y abrumador, si recorres las calles inundadas de personas, transporte, tierra y bullicio, puede ser una impresión angustiosa, pero no te preocupes, disfruta ese ambiente que de hecho es lo que hace de Marruecos un sitio tan único. ¿Preparado? Te daremos toda la información necesaria para explorar este asombroso destino.

Lugares visitados en Marruecos

Marruecos brinda un abanico de posibilidades a todo el que se atreva a adentrarse y recorrerlo. Sus medinas, desiertos y montañas son las atracciones más fascinantes, pero dentro de estos lugares, vas a conseguir recorridos increíbles que lo catalogan como un país perfecto para el turismo.

 Presupuesto para viajar por Marruecos

La moneda oficial en Marruecos es el Dírham, es importante cambiar dinero al momento de llegar al país, ya que el efectivo es lo que más se suele usar en todos los negocios. También debes tener en cuenta la tradición del regateo.

En la cultura marroquí el regateo es un arte, costumbre y tradición, si vas a comprar en una tienda o puesto de comida, lo normal es que te den precios muy elevados con el fin de que regatees y se llegue hasta un monto acorde.

Por ello, los precios en Marruecos suelen ser variados y dependen de diferentes factores, sin embargo, para que tu tranquilidad, te daremos una idea de presupuesto para que puedas planificar tu viaje.

Comida y bebida: sueles conseguir platillos completos, deliciosos y muy económicos. Por ejemplo, un almuerzo en el restaurante cuesta entre 20 y 50 dírhams marroquíes. Para que tengas una clara idea acá tienes una lista de precios en dírhams:

• Café/té 6 DH
• Zumo natural 6 DH
• Refresco 8 DH
• Cerveza 15 DH
• Cous cous 20 DH
• Tajín 40 DH
• Pastas dulces 5 DH

Alojamiento: hay muchas opciones de alojamiento en Marruecos. En términos precios, varía según la ubicación, la calificación y el período de estancia en el país.

Por ejemplo, el hotel Swani en Meknes cuesta 54 DH por noche en habitación doble. En Casablanca, el precio medio es de alrededor de 530 DH por noche y en Tánger puedes encontrar una habitación doble por 430 DH la noche.

Si quieres alojarte en casa de alguna familia de Marruecos, puedes recurrir a Airbnb y elegir quedarte en una habitación privada con una familia marroquí. Estima entre 320 y 750 DH por noche en habitación privada.

No obstante, si quieres disfrutar de un riad marroquí los precios comienzan en 320 DH y suben hasta los 2650 DH dependiendo de la ciudad.

Transporte: tienes diferentes opciones de transporte, en las ciudades, moverse en taxi sale más económico siempre que se conozcan las tarifas. El precio suele ser de 2 dírhams como tarifa base y entre 4 – 8 dírhams por kilómetro recorrido.

En cuanto al billete autobús urbano cuesta unos 4 DH, Petit taxi entre 10-20 DH y recorridos entre ciudades:

• Casablanca-Rabat: entre 25 y 60 dírhams.
• Tánger-Fez: entre 115 y 125 dírhams.
• Rabat-Marrakech: entre 135 y 190 dírhams.

Visado: muchos países no necesitan ningún visado especial para viajar a Marruecos. Sin embargo es importarte revisar si tu nacionalidad aplica. En caso de no necesitar, podrás pasearte por el país un máximo de 90 días (3 meses) siempre y cuando tengas el pasaporte en vigor y no te caduque antes de 6 meses.

Atractivos turísticos: algunas actividades de ocio son gratuitas, como las visitas al zoco para aprender a regatear o visitar ciertos monumentos.

Toda visita a Marruecos debe incluir una excursión por el desierto como las Dunas de Merzouga o el desierto del Sáhara. Esta excursión por el desierto a partir de unos 550 DH en 2 días.

Mejor época para viajar a Marruecos

Marruecos se puede visitar durante todo el año, ya que tiene una gran diversidad climática. La mejor época no depende solo de la región que quieras visitar, sino también de tus preferencias, por ejemplo, puedes disfrutar de trekking en el desierto en febrero, playas en Essaouira en julio, el verano será una temporada propicia en las montañas del Atlas, mientras que visitar las ciudades imperiales es muy recomendable en abril.

En términos generales, la mejor época para visitar cualquier parte de Marruecos es en los meses de abril, mayo, junio, septiembre y octubre.

Gastronomía marroquí ¿Qué comer en tu visita por Marruecos?

Uno de los platos más populares es el cuscús, elaborado a base de sémola de trigo, verduras, garbanzo, cordero o pollo, y condimentado con Ras al hanout, hay muchas formas de prepararlo y combinarlo con otros ingredientes.

Una de las técnicas tradicionales de cocción en Marruecos es el tajín, un recipiente conformado por un plato de barro y una tapa cónica del mismo material, cuya función es mantener el calor y el vapor de los alimentos. Puede ser de pollo, sardina, cordero, ternera y hasta de atún.

Otro de los platos nacionales de Marruecos es la harira, se trata de una mezcla de verduras, legumbres, cereales y un poco de carne.

En cuanto a una mezcla sabores dulces y salados tienes la pastela, elaborada con masa estilo hojaldre llamada filo que se rellena con carne de pollo o paloma.

Por otra parte, para los marroquíes beber té es un símbolo de hospitalidad y se toma durante todo el año, principalmente una mezcla de menta, té verde y azúcar morena.

Fiestas populares

La fiesta en Marruecos tiene dos grandes razones fundamentales, la cultura tradicional y la religión. Se celebran los recursos locales, se consagran las artes y a las tradiciones populares, se rinde homenaje a hombres santos, cualquier ocasión es buena para organizar una gran celebración.

En cada una verás bailes, cantos, trajes tradicionales y podrás participar en las procesiones y en las degustaciones típicas. Estas manifestaciones a menudo dependen de las cosechas o del calendario lunar, por lo que es difícil dar las fechas exactas.

Ritmos, bailes y cantos y aspectos múltiples de una tradición oral secular, marcados por su originalidad y su diversidad, impregnadas por las artes populares. En la cultura marroquí se mezclan coreografía, melodías y ritmos tanto pasados, así como actuales.

Costumbres a tener en cuenta en tu viaje por Marruecos

Como todos los países, Marruecos tiene sus propias tradiciones que deben ser conocidas y respetadas.

Tomar el té

Ofrecer un té es un gesto de hospitalidad, que los marroquíes llevan a cabo incluso con desconocidos, como es el caso de turistas.

Descalzarse para entrar en una casa

Otra de las tradiciones de Marruecos es descalzarse al entrar en una casa. Y puesto que la mezquita es la casa de Dios, también deberás hacer lo mismo al entrar en uno de estos templos de oración.

Respetar el Ramadán

Una de las muchas tradiciones para los musulmanes es el Ramadán. Si tu viaje coincide con este periodo de ayuno, no hará falta que lo cumplas, pero sí puedes respetarlo al no comer en lugares públicos ni ante la mirada de otras personas.

Comer y saludo con la mano derecha

Otra costumbre a tener en cuenta es la de comer con la mano derecha. La izquierda es considerada impura, pues se utiliza para el aseo íntimo. También tendrás que utilizar tu mano derecha para los saludos.

El regateo es una obligación

Una de las cosas que te puede llamar la atención cuando viajes por Marruecos es la costumbre de regatear. Algunos comerciantes se pueden ofender si el cliente acepta el precio a la primera.

Alcohol

Si te apetece tomar una cerveza, hazlo siempre en los bares donde esté permitido, nunca en la calle. Tampoco está bien visto que una persona dé síntomas de que se ha tomado una copa de más.