La Noruega de los fiordos es el sueño de muchos viajeros, una combinación perfecta entre mar, montañas y glaciares. Los fiordos noruegos son obras de arte de la naturaleza que se formaron hace millones de años, cuando las grandes masas de glaciares se retiraron y el agua de mar inundó profundos valles en forma de U. Posiblemente, sean uno de los escenarios naturales más espectaculares del planeta.
¿No sabes cuáles visitar o en qué época del año hacerlo? ¿Cuál es la mejor manera de apreciar su inmensidad y belleza? Ponte cómodo, porque tenemos la guía más completa sobre los fiordos noruegos.
Por empezar, puede que te preguntes qué es precisamente un fiordo. Este antiguo término vikingo está relacionado con la frase noruega “der man ferder over”, que se traduce como “por donde el viajero pasa” y también con la palabra “ferje” (ferry). Concretamente, un fiordo es una ensenada larga y estrecha que se abre entre laderas empinadas o acantilados.
El oeste de Noruega es conocido como “la tierra de los fiordos”, una región donde estas maravillas naturales aparecen talladas en las montañas circundantes. En otras palabras, es una sucesión de paisajes salvajes e imposibles que son visitados por turistas de todo el mundo. Si bien no son exclusivos de este país nórdico, en pocos lugares verás fiordos más espectaculares que los noruegos.
El Geirangerfjord y el Nærøyfjord son dos fiordos noruegos que forman parte de la prestigiosa lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Por ende, no pueden quedar fuera de tu ruta. Pero, habiendo más de 1.000 opciones, no es de extrañar que haya confusión a la hora de elegir cuáles visitar. Para eso estamos nosotros y esta completa guía de los mejores fiordos noruegos.
Visitar los fiordos noruegos es adentrarse en paisajes imposibles, con miradores que parecen sacados de la postal más perfecta, inmensas cascadas, glaciares que se pueden explorar a pie y carreteras que regalan viajes panorámicos que no olvidarás. Estamos seguros de que no existe persona incapaz de rendirse ante la belleza de la Noruega de los fiordos.
¿Cómo se formaron los fiordos noruegos?
Estas obras de arte de la naturaleza se formaron hace 2,5 millones de años aproximadamente, producto de una sucesión de edades de hielo que fue tallando la superficie de la tierra creando valles en forma de U.
Es decir, en cada una de estas edades el hielo, el agua de deshielo y la grava fueron desgastando la roca como si de una lija se tratase. De ese modo, se formaron valles cada vez más profundos que se inundaron con el agua del mar cuando los glaciares se retiraron. Así fue como se formaron estos paisajes de película que son hoy los fiordos noruegos.
Øyvind Heen, experto en fiordos, dice que los podemos imaginar como grandes avenidas con calles más pequeñas y estrechos callejones que las cruzan. Los mismos corresponden a los brazos, que muchas veces son más conocidos que los fiordos principales. Entre los más espectaculares podemos mencionar los brazos Geirangerfjord, Aurlandsfjord, Nærøyfjord y Lysefjord, solo por nombrar algunos.
Tanto los fiordos como los pueblos a sus alrededores evocan recuerdos de una Noruega de antaño, cuando la gente vivía en un entorno empinado y rocoso y dependía fundamentalmente de la agricultura. Lo más increíble, es que algunas personas aún viven de ese modo, como si hubiesen elegido escapar a los avances científicos y tecnológicos. Los fiordos rememoran una época en la que se vivía de los árboles frutales en flor y de la cría de animales. Por eso mismo, son mucho más que una maravilla natural para Noruega, son parte de su historia y sus raíces.
¿Por dónde comenzar un viaje a los fiordos noruegos?
Antes que nada, tienes que saber que visitar los fiordos noruegos no solo implica conocer cascadas, glaciares, bosques y enormes paredes montañosas. También hay aldeas y pueblos de pescadores que llenan de color el paisaje.
Cada uno de estos pequeños enclaves recibe al turista con atractivos arquitectónicos, culturales y gastronómicos propios. Por eso, para capturar la verdadera esencia de los fiordos noruegos no puedes dejar de incluir un paseo por estos lugares.
Dicho esto, veamos cómo organizar un viaje por la Noruega de los fiordos. Lo más seguro es que llegues desde otro país. Por ende, lo más probable es también que tu aventura comience en Oslo, la capital de Noruega.
Una vez allí, la mayoría de los viajeros optan por tomar un tren rumbo a Bergen, la mejor base para comenzar a explorar los fiordos; o directamente dirigirse hacia Stavanger, para desde allí continuar rumbo al norte por carretera o en barco.
Bergen
Bergen es la capital de la Noruega de los fiordos. La segunda ciudad más grande del país se ubica en el corazón de estas maravillas creadas por la Madre Tierra y mantiene el encanto propio de los pueblos nórdicos, a la vez que se presenta como una urbe moderna y muy bien preparada para el turismo.
Por ende, creemos que comenzar un viaje por los fiordos noruegos desde Bergen no solo es una excelente idea, sino también casi una tarea obligada. Antes de aventurarte en estos escenarios donde mar, montaña y glaciares se funden en un mismo paisaje, tienes que recorrer la ciudad.
No dejes de caminar las calles Patrimonio de la Humanidad del antiguo barrio de Bryggen, donde los edificios de madera pintados en vivos colores recuerdan a la época más próspera de la ciudad, cuando era la capital del país y el epicentro del comercio entre Noruega y el resto de Europa.
Por aquel entonces, desde el muelle hanseático de Bryggen se distribuía bacalao y arenques en salazón al resto del Viejo Continente. Hoy en día, dicho muelle acoge un museo, restaurantes, tiendas, galerías y es un popular punto de encuentro de turistas y locales.
Tampoco dejes de visitar el Mercado de Pescado, que desde 1276 provee a los restaurantes, bares y familias de la ciudad de pescados y mariscos frescos, además de frutas, verduras y artesanías.
Por cierto, los productos del mar son los protagonistas indiscutibles de la cocina de Bergen. Especialidades como la sopa de pescado, el persetorsk (un plato que se elabora con bacalao al vapor) y el pastel de pescado son delicias que no puedes dejar de probar.
Al ser una ciudad donde llueve mucho cuenta con varios museos y espacios culturales. Uno de los más interesantes es el Museo Hanseático, situado en un antiguo edificio de madera en el muelle. Esta construcción de 1704 es la única que conserva su interior original (puesto que muchos de estos edificios se destruyeron en sucesivos incendios). Su muestra invita a conocer cómo era el modo de vida de los comerciantes de la Liga Hanseática, recorrer sus dormitorios, talleres, oficinas y almacenes.
Si te toca un día de sol puedes subir usando el funicular Fløibanen hasta un mirador situado a 320 metros de altura que regala una panorámica hermosa del puerto de Bergen incrustado entre fiordos.
Otro de los atractivos de Bergen es Bergenhus, una de las fortalezas mejor conservadas de Noruega. Este complejo erigido en el siglo XII consta de un extenso recinto con varias zonas ajardinadas y un museo que invita a conocer la historia de la fortaleza y los diferentes usos que tuvo a lo largo del tiempo.
En cuanto al tema central que compete a este artículo, desde Bergen podrás visitar algunos de los fiordos más bonitos y famosos de Noruega. Uno de ellos es Osterfjord, al cual se puede llegar fácilmente tomando un crucero desde Bergen. El paseo dura unas 3 horas y llega hasta Mostraumen, un estrecho canal por el cual el barco se adentra.
Otra buena manera de disfrutar de Bergen es tomando alguno de estos paseos guiados:
- Tour privado por Bergen con guía en español
- Tour por Bergen + Funicular del monte Fløyen y paseo en barco
- Paseo en barco por el fiordo de Bergen
- Paseo en barco por los fiordos de Bergen y Oster + Canal de Mostraumen
Stavanger
Stavanger es una pequeña ciudad del sur de Noruega que también es el punto de partida perfecto para comenzar una ruta por los fiordos más espectaculares del país. Al igual que en el caso anterior, lo ideal es que reserves al menos medio día para conocer sus puntos más turísticos antes de aventurarte por los fiordos.
Esta pequeña ciudad de unos 100.000 habitantes es la cuarta más grande de Noruega. En el 2008 fue elegida como la Capital Europea de la Cultura, gracias a la gran cantidad de museos que acoge. A su vez, es un destino donde el arte inunda sus calles otorgándole un atractivo muy singular.
También se la conoce como la Ciudad del Petróleo, ya que ha estado vinculada con la actividad petrolífera, a la construcción y al transporte naval gracias a su importante puerto. Actualmente, Stavanger está fuertemente ligada al turismo, ya que se ubica en una posición privilegiada para visitar los fiordos.
Un recorrido por la ciudad tiene que incluir Old Stavanger (también conocida como la Ciudad de Madera), un antiguo barrio donde encontrarás una de las mayores concentraciones de arquitectura hecha en madera de todo el norte de Europa. Pasear por estas calles donde el blanco abunda por doquier es todo un placer visual.
Lo mismo sucede con el puerto, las calles Skagenkaien y la animada Øvre Holmegate, la Catedral de San Swithun y la torre de Valbergtårnet. Si buscas una dosis de cultura e historia, entonces tienes una cita obligada en el Museo Noruego del Petróleo, el Museo Marítimo de Stavanger o el Museo Arqueológico.
De todos modos, es muy probable que tu paso por la ciudad tenga un objetivo en mente: hacer una excursión al Púlpito (o Preikestolen), un acantilado situado a 604 metros de altura que regala las vistas más increíbles sobre Lysefjord, uno de los fiordos noruegos más famosos. Claro que también se puede contemplar la belleza de este tesoro natural haciendo un crucero. Como sea, conocer el fiordo de Lyse es una de las mejores cosas para hacer en Stavanger.
Aquí te dejamos una buena opción de tour: Paseo en barco por Lysefjord para cruceros.
¿Cuáles son los mejores fiordos noruegos?
Ya sabes que en Noruega hay más de 1.000 fiordos que se pueden visitar. Claro que cada uno tiene su atractivo, por lo que cualquiera que elijas seguro que será un acierto. Al oeste del territorio se encuentran los fiordos más emblemáticos, donde montañas y cascadas se precipitan en espejos de agua de color azul y esmeralda.
¿Cuáles son los fiordos noruegos más famosos? Los que forman parte de la lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, es decir: el fiordo de Geiranger y Nærøyfjord, pero también los fiordos de Hardanger, el extenso Sognefjord y otros que te sorprenderán de igual manera.
A continuación, te contamos cuáles son los fiordos noruegos más famosos y cómo visitarlos:
Sognefjord, rey de los fiordos noruegos
Ningún fiordo del país puede competir en longitud y profundidad con Sognefjord, el más espectacular de los fiordos noruegos. Con más de 200 km de longitud y 1,3 km de profundidad, es el más largo, profundo y hermoso del país. También es el fiordo libre de hielo más largo del mundo.
Sognefjord es un laberinto acuático que deslumbra por el color esmeralda de sus aguas. Lo mejor de todo, es que se puede visitar fácilmente desde Bergen. De hecho, esta ciudad abrigada entre montañas es la puerta de entrada a Sognefjord. Contratar una excursión de un día o hacer una ruta en coche son las formas más habituales de descubrir su encanto.
Aunque, creemos que la segunda opción es la más adecuada, puesto que a su alrededor hay muchos atractivos naturales para visitar, como el Parque Nacional Jotunheimen y el Jostedalsbreen, el glaciar más grande de Europa continental.
El viaje en coche desde Bergen hasta la zona del Sognefjord dura entre 2-3 horas, mientras que desde Oslo hay que conducir durante 4-5 horas. Hacer el viaje en coche no es mala idea, puesto que podrás desplazarte con él en ferry a varios destinos situados a lo largo del fiordo, así como por algunos de sus brazos.
Desde Bergen salen también barcos rápidos que conectan la ciudad con muchas de las aldeas desparramadas por el fiordo de Sognefjord. En verano también hay barcos diarios entre Bergen y Flåm, al igual que cruceros turísticos.
Si prefieres viajar en tren, estás de suerte. La estación de Flåm es la única que hay a lo largo del fiordo Sognefjord. ¿Sabías que en el 2014 la revista Lonely Planet lo nombró como el viaje en tren más asombroso del mundo? La ruta pasa por el fiordo Flåm hasta lo alto de las montañas, regalando paisajes que difícilmente olvidarás.
Además del fiordo en sí, el Aurland (uno de los 30 brazos que nacen de Sognefjord) es dueño de algunos de los paisajes más salvajes y sobrecogedores de la Noruega de los fiordos. También se puede recorrer en barco o bien contemplar desde la carretera panorámica que pasa por la plataforma de Stegastein, a 650 metros sobre Aurlandsfjord.
Sognefjord es perfecto para disfrutar de caminatas inolvidables, paseos por glaciares, pesca, navegar en barco o kayak y más. Por cierto, las montañas que rodean el fiordo están entre las zonas más populares de Noruega para hacer senderismo.
Nærøyfjord (fiordo de Nærøy)
Este fiordo es uno de los brazos más majestuosos de Sognefjord y otra de las excursiones más populares para hacer desde Bergen. Junto con Geirangerfjord, son los dos fiordos noruegos que forman parte del listado de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Su belleza radica en el contraste que se crea entre las altas montañas que lo rodean y la estrechez de alguno de sus puntos.
El fiordo de Nærøy posee 17 km de largo y 250 metros de ancho en su punto más estrecho. Sus paisajes son majestuosos en cualquier momento del año, ya sea con el manto de nieve del invierno como con las verdes laderas llenas de flores a su alrededor o el esplendor de la época otoñal.
No en vano, la prestigiosa revista National Geographic lo eligió como el “mejor destino de viaje virgen del mundo” en el año 2004. Por su parte, en el 2017 la CNN lo catalogó dentro de las 50 maravillas naturales más impresionantes del mundo. Un lugar con tantas menciones tiene que valer la pena, ¿no crees?
Una buena manera de conocer Nærøyfjord es realizando un viaje en barco de aproximadamente 2 horas entre Flam y Gudvangen, situado al final del brazo del fiordo. Durante el paseo pasarás por majestuosas cascadas, pueblos coloridos perdidos entre las montañas, huertos y más.
Los cruceros por el fiordo salen dos veces al día en invierno y cinco en verano, por lo que no tendrás problema para conseguir un lugar. El trayecto en realidad se puede hacer en ambos sentidos y es impresionante de todas formas, por lo que dependerá de si deseas complementar la experiencia con el viaje al tren de Flam.
Geirangerfjord, el más famoso de los fiordos noruegos
El fiordo de Geiranger (Geirangerfjord) es conocido como la joya de los fiordos noruegos. Su popularidad es tal que llegó a la pantalla grande en la película de Disney, Frozen.
Visitar el fiordo de Geiranger es sinónimo de sumergirse en un paisaje de ensueño, con enormes montañas cubiertas de nieve, majestuosas cascadas, una vegetación verde y exuberante y el intenso azul del agua.
Geirangerfjord es un brazo de 15 km del Storfjord y otro de los fiordos noruegos que fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Se encuentra situado en el distrito de Sunnmore, en Geiranger, un pueblo muy pequeño y tranquilo que sirve de punto de entrada al fiordo.
La ciudad más cercana es Ålesund, situada a unas 2 horas y media por carretera. A pesar de estar un poco más alejado, sin dudas vale la pena hacer el viaje y disfrutar de uno de los mejores fiordos de Noruega.
Se puede llegar al pueblo de Geiranger en autobús desde Oslo, Trondheim y Bergen. Otra alternativa es tomar alguno de los vuelos diarios que salen desde las principales ciudades y poblaciones de Noruega hasta el Aeropuerto Vigra de Alesund, que es el más cercano al fiordo de Geiranger.
La forma clásica de conocer el fiordo es a través de un crucero. A lo largo del paseo se visualizan numerosas granjas abandonadas, siendo las más visitadas las granjas Skagefla, Knivsfla y Blomberg.
En el recorrido verás también varias cascadas impresionantes, especialmente las de Las Siete Hermanas y El Pretendiente, a quien también se la conoce con el nombre de El Enamorado. Ambas cascadas se encuentran enfrentadas, por eso se dice que el pretendiente está intentando cortejar a las hermanas. El Velo de la Novia es otro de los saltos de agua más hermosos del fiordo, y recibe este nombre porque el agua cae delicadamente sobre un borde rocoso. Cuando el sol la ilumina por detrás simula ser un velo fino sobre las rocas.
Si bien los cruceros son la actividad más popular para recorrer el fiordo, alquilar un kayak y navegar por sus tranquilas aguas es otra alternativa divertida y emocionante. En el pueblo de Geiranger podrás alquilar kayaks y todo el equipo necesario para vivir una aventura a pleno, ya sea en solitario o con un guía que te lleve a hacer el recorrido. Es una actividad más que recomendada, porque te aleja del bullicio de los cruceros y te permite conectar mejor con el entorno.
Hardangerfjord (fiordo de Hardanger)
A una hora y media de Bergen encontramos el Hardangerfjord, otro de los mejores fiordos noruegos. Es el segundo más largo del país y uno de los más visitados gracias al Trolltunga, la famosa roca que sobresale al abismo y regala unas vistas majestuosas del fiordo. Otros escenarios naturales imponentes ubicados en Hardangerfjord son el glaciar Folgefonna y la cascada Vøringsfossen.
El fiordo de Hardanger es el más cercano a Bergen, por lo que llegar a él es muy sencillo. La cercanía entre ambos destinos permite que haya muchas opciones de transportes y tours ofrecidos por diferentes agencias.
Desde el puerto de Bergen salen todos los días ferrys a los principales pueblos situados alrededor de Hardangerfjord. Nuestro consejo es que te movilices de esta manera, puesto que así podrás disfrutar de una vista del fiordo diferente a la que se aprecia por carretera. Te recomendamos especialmente hacer una parada en Rosendal, un precioso pueblo situado a orillas del fiordo de Hardanger.
Ya sabes que una de las principales cosas para hacer en Hardangerfjord es la ruta de ascenso al Trolltunga (más adelante te brindamos más detalles). De todos modos, no es el único atractivo de la zona (más teniendo en cuenta que el camino es bastante exigente y no apto para todo el mundo). Los paseos en kayak, los recorridos guiados por el glaciar Folgefonna o la visita a la estación de esquí de verano Fonna son otras propuestas interesantes.
Alejándote un poco del fiordo encontramos la estación de esquí de Myrkdalen, un auténtico paraíso invernal donde los amantes de la nieve y los deportes afines a ella se dan cita todos los años. Se encuentra a unos 130 km de Bergen, comunicado por una carretera de maravilla que atraviesa lagos helados, ríos salvajes y pequeñas construcciones coloridas que se funden con el paisaje blanco. Es el destino ideal para disfrutar del esquí alpino, esquí de fondo, paseos en trineo y con raquetas de nieve, entre otras cosas.
En este fiordo encontramos también una de las cascadas más famosas del país: Voringsfossen. No hay foto que haga justicia a la belleza de este salto de agua de 187 metros de altura, por lo que es mejor que lo descubras por ti mismo. Desde la carretera principal que va desde Myrkdalen a Eidfjord, un pequeño pueblo situado a orillas del fiordo, se obtienen las mejores vistas de la cascada.
Lysefjord, uno de los fiordos de Noruega más accesibles
Lysefjord es uno de los mejores fiordos noruegos para visitar desde la ciudad de Stavanger. De hecho, está dentro de los más fotografiados del país gracias al Preikestolen o Púlpito.
De hecho, la fama de este fiordo se la lleva su mirador, una roca plana y cuadrada que se asoma al agua por encima de los 600 metros de altura. Así no subas al Preikestolen, el fiordo de Lyse no deja de ser una maravilla. Ya más adelante te hablamos de esta famosa roca, ahora queremos contarte un poco más sobre este fiordo. Después de todo, el Preikestolen no sería lo mismo si el fiordo de Lyse no estuviera a sus pies.
Lysefjord es el fiordo más austral de Noruega. Sus 42 km de longitud se extienden desde Lysebotn (al este) y Forsand/Oanes (al oeste), dos localidades situadas en orillas opuestas al fiordo.
Además de apreciar su belleza desde lo alto, Lysefjord es ideal para dar paseos en kayak, cruceros y una ruta en coche por la carretera Lysevegen. Otra de las cosas que puedes hacer en torno a este hermoso fiordo es poner a prueba tu resistencia física subiendo los 4.444 escalones de la escalera más alta del mundo, en Flørli.
Para esto último hay que tomar un crucero desde el puerto de Stavanger. Durante la navegación pasarás por increíbles paisajes y verás el majestuoso Preikestolen desde lo bajo. Una vez que llegues al pueblo sin carreteras de Flørli podrás subir por esta escalera, que tiene la fama de ser la más larga del mundo. Si bien puede ser agotador, desde los 750 metros de altura en los que se ubica la cima se aprecia el fiordo y las montañas que rodean el Preikestolen.
Hjørundfjord, fiordo de Hjørund
El fiordo de Hjørund es otro de los más hermosos de Noruega. Se trata de un brazo de 35 km de largo que nace del gran fiordo de Stor, el cual se extiende hacia el sur desde Ålesund. Rodeado por los Alpes de Sunnmøre, cuyos picos alcanzan los 1.700 metros de altura, regala paisajes que te harán sentir muy pequeño ante tanta majestuosidad.
El fiordo de Hjørund está adornado con densos bosques hacia ambos lados, producto de las lluvias abundantes de la zona. A su vez, a lo largo de su extensión aparecen varios pueblos pequeños y pintorescos, como es el caso de Bjørke, Øye, Trandal o Sæbø.
Un buen plan es tomar uno de los cruceros que salen desde Ålesund hasta Øye y navegan por este hermoso fiordo rodeado de picos de más de 1.700 metros de altura. En verano los cruceros desde Ålesund hasta Øye salen varias veces al día. Además, desde este pueblito puedes continuar viaje hasta Hellesylt, donde puedes embarcarte en un crucero por el fiordo de Geiranger.
Otro de los pueblos más idílicos situados alrededor del fiordo es Trandal. Este pequeño enclave sin carreteras tiene apenas un puñado de habitantes que viven en completa armonía con la naturaleza. Uno de sus grandes reclamos turísticos es el antiguo asentamiento agrícola conocido como Christian Gard Bygdetun. Situado en la ladera de un acantilado, las vistas que regala de los Alpes Sunnmøre y del Hjørundfjord te van a dejar sin palabras.
Además, la excusa de conocer este fiordo es perfecta para de paso dar un paseo por Ålesund. Esta hermosa ciudad se encuentra rodeada por el océano, las montañas y numerosas islas que le dan un panorama realmente encantador. Además, posee una arquitectura exquisita, miradores y muchas propuestas de actividades al aire libre.
Trollfjord, uno de los fiordos noruegos de más difícil acceso
Nuestra lista de los mejores fiordos noruegos es amplia y abarcativa, tanto que hemos decidido hablarte de uno de los menos accesibles del país. Sí, para visitar Trollfjord tienes que viajar al Ártico, concretamente a las islas Lofoten.
Trollfjord está situado en Raftsundet, en el extremo oriental de Austvågøy, en Lofoten. Si bien tiene apenas 2,5 km de largo y 100 de ancho, esta estrechez y las montañas escarpadas de más de 1.000 metros de altura que lo rodean son motivos más que suficientes para que esté dentro de los más hermosos del país.
No hay carreteras que lleven a él, por lo que la única vía de acceso a Trollfjorden es el barco. Si bien las dimensiones del fiordo son pequeñas, hay un puñado de compañías que ofrecen excursiones a lo largo de él. Aquí te dejamos una propuesta de nuestros amigos de Civitatis que puedes aprovechar: crucero por Trollfjord.
Rutas panorámicas por los fiordos noruegos
Imagina contemplar la inmensidad de los fiordos noruegos desde la carretera. Si bien navegar a través de ellos es una de las maneras más clásicas de apreciar su belleza, las rutas panorámicas de Noruega cuentan con imponentes miradores que permiten disfrutar de los fiordos desde otra perspectiva.
En total, encontramos 18 carreteras en donde la naturaleza, el diseño y la arquitectura se complementan a la perfección. Las mismas se ubican en la zona oeste, centro y norte de Noruega y transcurren entre la costa y la montaña. En total, cubren 2.136 km, pasando por rincones que te dejarán una constante expresión de asombro plasmada en el rostro. Las mismas están perfectamente equipadas con miradores, áreas de descanso y otras comodidades para hacer un viaje confortable.
Antes de hacer una ruta por alguna de las carreteras panorámicas para ver los fiordos de Noruega y otros atractivos cercanos a ellos tienes que tener en cuenta algunas cuestiones. Por empezar, saber que algunas de estas carreteras son bastante estrechas, especialmente para caravanas o autocaravanas. De todos modos, hay varios puntos designados especialmente para dar paso a los vehículos que viajan en sentido contrario. Ve con paciencia, especialmente en temporada alta, cuando es probable que se formen algunas colas.
Otra cosa a tener en cuenta es que en invierno algunas rutas permanecen cerradas, por lo que se recomienda previamente consultar el estado de las mismas.
Las mejores rutas de senderismo para disfrutar de los fiordos noruegos
Los amantes del senderismo y el trekking tienen varias opciones para disfrutar de los fiordos noruegos haciendo un poco de ejercicio al aire libre. Todo aquel que busque un desafío puede subir al Trolltunga, el Preikestolen y Kjeragbolten, consideradas las 3 rutas más espectaculares de Noruega.
El Preikestolen
El Preikestolen se encuentra en la región de los fiordos, más precisamente sobre el bellísimo fiordo de Lyse. Esta plataforma no apta para personas que sufren de vértigo se conoce también como el Púlpito de los Dioses. ¿Por qué? Porque desde esta altura y ante semejante inmensidad uno comprende lo pequeños que somos ante la naturaleza.
La ruta de trekking que lleva a esta famosa roca transcurre por un sendero escarpado de casi 8 km y dificultad media, atravesando paisajes increíbles. Entre la ida y la vuelta son aproximadamente 4 horas, destinando 2 para subir y otras 2 para bajar, aunque depende del estado físico de cada persona. El desnivel a sortear es de un poco más de 600 metros y se realiza en diferentes etapas, algunas más llevaderas y otras mucho más duras. El ascenso comienza en el refugio de montaña Preikestolen Fjellstue.
Desde lo alto del Preikestolen te encontrarás con una de las imágenes más bellas de tu vida. Desde allí podrás apreciar el impecable del fiordo Lyse, su enorme extensión y los muchos cruceros que lo recorren de punta a punta.
Una vez que llegues a la meseta del Púlpito verás una pequeña ruta que asciende unos cuantos metros por encima de la gran roca. Te recomendamos que la hagas, ya que desde arriba obtendrás unas vistas excepcionales de la meseta y el modo en que se asoma al abismo. Además, desde allí se aprecia mejor la gran grieta que atraviesa el Púlpito, dando la sensación que va a desprenderse en cualquier momento.
Para subir al Preikestolen no es indispensable estar en buena forma física, pero sin dudas que tener buen estado te ayudará. Un buen consejo para que disfrutes mejor de la experiencia es que vayas bien preparado. Si vas a hacer el trekking en primavera o verano lo mejor es llevar varias capas de ropa, teniendo en cuenta que arriba puede hacer hasta 0° C. No olvides llevar alguna campera impermeable y rompevientos, un gorro, guantes y bufanda, calzado de montaña o zapatillas de trekking.
El Trolltunga, la lengua del troll
La lengua del Trolltunga asomándose al vacío por encima del lago Rindegal ofrece, para muchos, la ruta de senderismo más espectacular de Noruega. Esta formación rocosa significa “lengua de troll” en noruego y realmente lo parece. Está situada a 1.100 metros sobre el nivel del mar y a 700 metros por encima del lago Ringedal (Ringedalsvatnet).
El camino para llegar a ella es complicado y exigente. Implica sudor, esfuerzo físico y mental y una inversión de aproximadamente 10 horas para sortear los 22 km en total que tiene la ruta. Los terrenos son exigentes, a la vez que están inmersos en los más bellos escenarios naturales.
Pero, todo esfuerzo tiene su recompensa. Cuando llegues a la lengua del troll y te asomes al impresionante acantilado sentirás que todo el sudor dejado en el ascenso valió la pena. Incluso, deberías sentirte afortunado de poder estar parado ante semejante belleza.
El punto de partida para hacer el trekking es el pueblo de Tyssedal, situado a orillas de uno de los brazos de Hardangerfjord, uno de los fiordos noruegos de los que te hemos hablado. Si tienes planeado subir al Trolltunga en una sola jornada lo mejor será que comiences lo más temprano posible, puesto que la travesía demanda el día completo. Esto es especialmente importante durante el invierno y el comienzo de la primavera, cuando hay muy pocas horas de luz.
El mejor mes para hacer el trekking al Trolltunga es julio, cuando las temperaturas medias rondan los 13 °C. Diciembre es el mes más lluvioso, por ende, no es un buen momento para ir. Enero y febrero son los meses más fríos y que más nieve acumulan.
Kjeragbolten o la roca colgante
Junto al Preikestolen y el Trolltunga, es la tercera ruta de senderismo más famosa del país. Se la conoce como la roca colgante, ya que se encuentra encajada entre dos grandes montañas y parece desafiar la gravedad. Tener una foto allí es el sueño de muchos. Aunque claro, para lograrlo hay que poner una buena dosis de esfuerzo.
Se encuentra en Lysefjord, por ende, es una oportunidad imperdible de admirar uno de los mejores fiordos noruegos desde otra perspectiva. Incluso, la roca se visualiza desde los cruceros que navegan por el fiordo. Eso sí, tienes que saber que el recorrido es bastante más complicado que el del Preikestolen.
La famosa roca de Kjeragbolten se ubica a unos 1.084 metros sobre el nivel del mar, en el pico Kjerag, el más alto del fiordo Lysefjord. La ruta de trekking tiene una duración aproximada de 6-10 horas, según el estado físico de cada persona, y sortea un desnivel de 800 metros. Algunos tramos son complicados incluso para los senderistas más avanzados, por lo que se recomienda ir con un guía de turismo. La travesía comienza desde el aparcamiento en Øygardstøl.
Disfruta de los fiordos noruegos durante todo el año
Los fiordos noruegos son escenarios naturales que se disfrutan en todo momento del año. En verano son realmente hermosos. Pero, posiblemente sean las estaciones intermedias quienes regalan los paisajes más deslumbrantes. La paleta de colores propia de la primavera, cuando las flores inundan los huertos de las colinas circundantes a los fiordos, o las tonalidades ocres, naranjas y amarillas del otoño dan lugar a postales de ensueño.
El verano, primavera y otoño son ideales para navegar en kayak, hacer un crucero por los fiordos o bien calzarse las botas y disfrutar de largas jornadas de senderismo. Hay rutas para todos los gustos, como ya sabes, algunas más duras que otras.
Durante el invierno, las fabulosas estaciones de esquí repartidas en los fiordos noruegos adquieren todo el protagonismo. Stranda, Sogndal, Myrkdalen o Voss son algunas de las más conocidas, pero hay otras en las que podrás subir al máximo tus niveles de adrenalina.
Mapa de los fiordos noruegos
Si viajas a Noruega inevitablemente tienes que conocer sus fiordos. Estos escenarios naturales de enorme belleza enamoran hasta al viajero más exigente. Estamos seguros que disfrutarás mucho de la grandeza de los fiordos noruegos.
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