Viaje a la ciudad de Máribor, Eslovenia

Continuamos nuestro recorrido por Eslovenia y llegamos a Máribor, la segunda ciudad más importante del país, por detrás de la capital Ljubljana. Se encuentra ubicada en el noroeste de Eslovenia e inmersa entre viñedos y valles verdes que la dotan de paisajes muy bonitos. Es una ciudad con mucha historia, cultura, un interesante patrimonio y mucho vino. De hecho, es famosa por contener la bodega más antigua del mundo. Suena interesante, ¿no crees? 

Para hoy hemos preparado una guía muy completa con todo lo que puedes ver en Máribor y sus alrededores. Así que, ponte cómodo y disfruta del recorrido, ya que es un destino que tiene muchos para ofrecer.

Máribor es la capital de la región noroeste de Eslovenia, conocida como Baja Estiria. Esta zona quedó en manos del Reino de Yugoslavia luego de la Primera Guerra Mundial, hasta la independencia del país en 1991. Desde siempre fue una ciudad importante, tanto en términos políticos como económicos. Hoy en día, es un destino atractivo que cualquier viajero que visita Eslovenia debe visitar.

Son muchos aspectos los que hacen de Máribor una ciudad interesante. No por nada fue elegida como la capital cultural europea en el año 2012. Además, es dueña de una de las universidades más famosas del país que hace que reine un ambiente joven y animado. También se caracteriza por sus calles peatonales, plazas llenas de encantadoras terrazas, bellos entornos naturales (dados especialmente por el río Drava, que la cruza, y la montaña Pohorje); por sus espacios verdes, sus extensos carriles para andar en bicicleta y casas con tejados rojos. Su estructura urbana en cierto modo recuerda a las ciudades del centro de Europa, como Praga, pero con un aire mediterráneo.

¿Qué ver en Máribor?

A pesar de ser la segunda ciudad del país, no es demasiado grande y se puede recorrer en uno o dos días. Una forma entretenida, saludable y amigable con el medio ambiente de descubrirla es en bicicleta. Al igual que muchas otras ciudades europeas, Máribor pone a disposición del viajero este medio de transporte que cada día gana mayor popularidad.

Lo primero que debes hacer en Máribor es recorrer su casco antiguo, que es en donde se concentran la mayor parte de sus atractivos. La parte antigua de la ciudad se compone de 6 zonas muy cercanas entre sí, en torno a las cuales se concentran los principales sitios de interés. Consta de 4 plazas: Glavni, Svobode, Grajski y Slomsek, la exclusiva zona de Lent, en la ribera del río Drava y el parque Mestni, ubicado al norte de la ciudad. Veamos con detalle cada lugar.

Plaza Glavni 

Callejeando por el casco histórico de Máribor llegarás a la Plaza Glavni, la principal de la ciudad (también conocida como Plaza Mayor). Es la zona administrativa más importante y en donde se ubica el edificio del Ayuntamiento, construido en estilo renacentista y parte del patrimonio de la ciudad. 

En el centro de la plaza se encuentra una de las esculturas más famosas de Máribor. Hablamos de una columna de mármol blanco con la figura de la virgen rodeada de santos. La misma es recuerdo de la peste que azotó la ciudad en 1680 y arrasó con un tercio de la población. El primer monumento a la epidemia se construyó un año después, aunque en 1743 fue reemplazado por esta hermosa columna, considerada como uno de los monumentos barrocos más destacados de Eslovenia.

Además, es una plaza donde tradicionalmente tiene lugar el mercado de agricultores. Los días viernes por la mañana se montan distintos puestos de frutas y verduras frescas de temporada, pan y productos de pastelería.

Plaza Grajski 

El elemento más destacado de esta plaza es el Castillo de Maribor. Como muchas otras ciudades centro europeas, Máribor también se construyó en torno a un castillo. A pesar de eso, en este caso no se trata de la típica fortaleza ubicada en lo alto de un monte.

El actual castillo de Máribor parece más bien un palacio, aunque tuvo un breve papel defensivo en la antigüedad. Más bien, era una residencia opulenta que se ha ido reformando con el paso de los años. El edificio actual posee una mezcla de estilos renacentista y barroco, destacando su hermosa galería con arcadas en su piso superior. Es sede del Museo Regional, en donde se expone el patrimonio cultural e histórico de la ciudad. 

En el centro de la plaza domina una escultura de San Florián, el patrón del fuego que protege la ciudad de posibles incendios.

Plaza Slomsek y Catedral de Máribor

Es una pintoresca plaza ajardinada rodeada de importantes edificios, ubicada en la parte occidental del casco antiguo.

Uno de los edificios más destacados a su alrededor es la Catedral de Máribor, construida en el siglo XII como edificio románico. Actualmente, posee un estilo gótico en el que destacan un largo coro, que data del siglo XVI y una nave central del siglo XV. Sin embargo, su elemento más distinguido es el campanario de 57 metros de altura y diseño clasicista, construido a finales del siglo XVIII. El campanario original tenía 76 metros de altura y fue levantado en 1623, aunque, un rayo lo destruyó parcialmente, obligando a reconstruirlo.

No dudes en subir a la plataforma de observación ubicada en el campanario de la Catedral de Máribor, desde donde se obtienen unas vistas magníficas de la ciudad. Antiguamente, también era usada como torre de vigilancia contra incendios y contaba con un pequeño apartamento donde residía el vigilante de incendios, quien debía tocar las campanas cada vez que la ciudad estaba en peligro. En 1933 se cerró la guardia de incendios y el campanario permaneció cerrado a los visitantes hasta el 2003, cuando se renovó la torre para abrirla al público.

En el 2012 se inauguró una colección museográfica conocida como «La sala de guardia de la torre», que muestra un día en la vida de un vigilante de incendios. Si quieres conocer este interesante lugar deberás subir los 162 escalones que conducen a lo alto de la torre.

A los pies de la catedral verás una estatua de Anton Martin Slomsek, quien fue el primer obispo de la ciudad y la persona que da nombre a la plaza. Alrededor de ella también conviven el Teatro Nacional, la Universidad y la Sede Central de Correos de Máribor.

Plaza Svobode 

La última de las plazas de Máribor es la Plaza Svodobe, también llamada plaza de la libertad. Lo más destacado que verás allí es un peculiar monumento negro y redondeado que homenajea a las víctimas de la guerra mundial. Los eslovenos los conocen como “Kojac”, por su parecido con la cabeza del detective Kojac, el protagonista de una serie de televisión.

Barrio de Lent

El barrio de Lent se encuentra ubicado en la ribera del río Drava y es una de las zonas con más ambiente nocturno de la ciudad. Allí destaca el puente construido en honor al mariscal Tito, político, militar y dictador comunista que fue Jefe de Estado de la Antigua Yugoslavia.

Otro de los elementos arquitectónicos distinguidos de esta zona es la antigua Torre de Agua, que pertenecía a las fortificaciones de la ciudad de Máribor. Fue construida a mediados del siglo XVI y formaba parte del nuevo sistema defensivo que instauró la ciudad para protegerse de las incursiones turcas.

La torre logró sobrevivir al paso del tiempo y luego se utilizó como sitio de almacenamiento de vinos, convirtiéndose en la bodega más antigua de Eslovenia. Este papel no ha cambiado con los años, por eso hoy en día es posible probar allí algunos vinos de Estiria en el piso superior o beberlo junto al río.

Zona judía y sinagoga

Justo enfrente del barrio de Lent se encuentra la zona judía de la ciudad, en la cual destaca la torre de los judíos y la sinagoga.

La sinagoga de Máribor es una de las más antiguas de Europa y está ubicada en la calle judía, que se remonta a la época del gueto. Su construcción data del año 1300 y es una de las dos únicas sinagogas que quedan en el país. Durante la Edad Media fue un importante enclave que tenía baños rituales, un cementerio, una escuela talmúdica y la casa para el rabino. Cuando los judíos son expulsados de la ciudad en 1497, se convirtió en una iglesia, posteriormente en un almacén militar, luego en un hogar privado y finalmente recuperó su papel original.

Hoy en día, la sinagoga de Máribor es un edificio modesto que acoge un centro cultural y museo que muestra artefactos de la población judía de la ciudad.

Bodegas Vinad, la vid más antigua del mundo

Al principio te contamos que la ciudad de Máribor se encuentra rodeada de viñedos, lo que no te dijimos es que en el barrio de Lent, en pleno casco histórico, se encuentra la vid más antigua del mundo. La misma hace honor a una larga tradición de Eslovenia, que tiene al vino como uno de los productos estrella en su gastronomía. Los viñedos más importantes se encuentran en Baja Estiria, la región vitivinícola más grande del país.

Sin dudas que es una visita imprescindible de la ciudad, ya que así no seas un amante del vino, vale la pena visitar un sitio con tanta historia. La parte más antigua de la bodega fue construida en 1847, ocupa 15.000 m² y cuenta con 2 km de pasillos subterráneos. Allí se guardan enormes barriles de madera y cisternas de hormigón que tienen capacidad para guardar 3 millones de litros de vino. Esto la convierte en la quinta bodega más grande de Europa.

El verdadero desarrollo de la bodega tuvo lugar en dos momentos. Primero, gracias a la construcción del ferrocarril entre Viena y Trieste, que mejoró notablemente las comunicaciones en el interior del país. El segundo impulso tuvo lugar luego de la Segunda Guerra Mundial, momento en que comienza a modernizarse. 

La visita guiada por la bodega se realiza en inglés, incluye un recorrido por la bodega subterránea y una cata de vinos. Es una experiencia muy recomendada que permite conocer más sobre la cultura y la historia del vino en Eslovenia.

¿Sabías que? La vid posee más de 450 años y está inscrita en el libro Guinness de los Récords como la más antigua del mundo. La misma fue plantada a finales de la Edad Media y ha sobrevivido sorprendentemente a plagas, sangrientas batallas y otros hechos históricos que hicieron peligrar su existencia.

Parques de Máribor

Además de un casco antiguo muy atractivo, Máribor cuenta con dos hermosos parques. Uno de ellos es el Parque de la Pirámide, que se encuentra al norte del centro de la ciudad. Es el lugar favorito de muchos locales y turistas que acuden allí a pasear, andar en bicicleta o simplemente descansar. Además, el parque cuenta con una colina de poco menos de 400 metros que regala unas vistas muy bonitas de la ciudad.

Entre los siglos XVI y XVIII se encontraba allí el castillo de Máribor, que luego fue derribado. Con sus escombros se construyó una estructura de piedra con forma de pirámide que le da el nombre al parque.

El Parque Mestni es conocido como el Parque de la Ciudad y se encuentra detrás del Parque de la Pirámide. Es uno de los pulmones verdes más importantes de Máribor, ya que cuenta con amplias zonas arboladas, además del lago de las Tres Ribniki. Es un lugar ideal para relajarse, caminar y tomar aire puro.

Actividades al aire libre en Maribor

Máribor se encuentra rodeada de naturaleza, algo que de hecho, predomina en casi todo el país. Los eslovenos son buenos deportistas, por lo cual no es de extrañar que haya muchas opciones en torno a diversas actividades. De hecho, es conocida como ciudad del deporte y es sede de un gran número de eventos deportivos a nivel internacional. Por ejemplo, se realiza allí todos los años la Copa del Mundo de esquí femenino en la sierra de Pohorje.

Puedes dedicar un día a recorrer el centro histórico y alguna bodega de la ciudad, para luego dedicarte a hacer alguna actividad. Dicho de otro modo, no dudes en salir a recorrer los alrededores de Máribor en bicicleta, a caballo o caminando. Te sorprenderá la cantidad de opciones que encontrarás.

Senderismo y ciclismo en el Monte Pohorje

Eslovenia se disfruta en cualquier época del año. Durante el invierno, actividades como el esquí, las caminatas con raquetas de nieve o los paseos en trineos son las favoritas. En verano, las estaciones de esquí se vuelven ideales para hacer descensos en bici, rutas a caballo y senderismo por caminos bien delimitados. Este es el caso de la montaña de Máribor, Pohorje, un verdadero pulmón verde que nutre de vida a la ciudad. Para subir puedes usar las telecabinas, que en 10 minutos te llevan a lo alto de la montaña. Desde allí las vistas de los viñedos y la ciudad son espectaculares y las actividades para hacer infinitas. 

Las telecabinas que llevan al monte son tan grandes que incluso puedes cargar tu bicicleta para hacer alguna de las diferentes rutas posibles. Los más atrevidos y experimentados cuentan con un circuito de descenso en bici de montaña que incluye saltos.

Cabalgatas

Los paseos a caballo son otra actividad popular para hacer en los alrededores de Máribor. Para averiguar las rutas disponibles ve a la Oficina de Turismo donde te darán detalles de las empresas que operan los paseos. 

Navegación en el río Drava

El río Drava cruza la ciudad y no solo la dota de mucha belleza, sino que también abre un abanico de actividades para hacer. Tanto si deseas pasar un rato agradable remando río abajo o bien recorrer parte de él a pie, será un excelente plan.

A 7 km del centro de Máribor se encuentra Drava Center, en donde se pueden alquilar kayaks y canoas para explorar el río Drava a fondo. De la mano de un guía, recorrerás las aguas tranquilas del Drava, mientras aprecias la ciudad desde una perspectiva diferente.

¿Cómo llegar a Máribor?

Si bien Máribor cuenta con aeropuerto, la mayoría de los vuelos internacionales llegan a Ljubljana. La distancia desde la capital es de 130 km por carretera a través de la cual se puede comprobar por qué a Eslovenia se la conoce como “el tesoro verde de Europa”. Los bosques ocupan un 60% de la superficie del país y aparecen a ambos lados de la carretera, junto con grandes extensiones de prados y viñedos.

¿Qué ver en los alrededores de Máribor?

Si te quedan ganas de seguir descubriendo este país tan bello, cerca Máribor encontrarás algunos destinos muy interesantes. Uno de los destinos cercanos que puedes visitar es Ptuj, la ciudad más antigua de Eslovenia, ubicada a media hora en coche de Máribor. La misma destaca por su gran castillo, que es una visita obligada, aunque tiene mucho más para ver.

Otro destino que puedes visitar es Celje, ubicada a una hora en coche de Máribor. Al igual que Ptuj, posee un impresionante castillo amurallado que se eleva sobre la ciudad a modo de custodio y que te dejará sin palabras. Una vez que lo visites, quedará en tu memoria para siempre.

Si prefieres seguir explorando la naturaleza, puedes entonces ir de excursión al lago Črno jezero, que posee un ambiente muy tranquilo, aire fresco y una naturaleza virgen que impacta. El lago está cubierto de pinos y musgo de turba y tiene la particularidad de que sus aguas parecen estar llenas de tinta. Lo cierto es que son cristalinas y en realidad adquirieron esa apariencia por los restos orgánicos de plantas y animales muertos que acumularon en el fondo del lago y con el paso del tiempo crearon una gruesa capa de limo de color negro.

Máribor es un destino muy completo, con una gran oferta turística. La segunda ciudad de Eslovenia debería ser una parada obligada de este país en donde impera la naturaleza. Esperamos que te haya gustado el recorrido y que no dudes en visitar Máribor. ¡Hasta nuestro próximo destino!