Setenil de las Bodegas, un pueblo blanco bajo rocas

Setenil de las Bodegas es famoso por sus viviendas cueva en la provincia de Cádiz, Andalucía ¿Te imaginas vivir literalmente bajo una roca? Bienvenido al pueblo de Setenil de las Bodegas en España, donde la gente eligió establecerse en esa región por razones prácticas.

Las cuevas naturales de Setenil resultaron ser viviendas ideales, ya que, en lugar de tener que construir casas enteras para protegerse del calor en verano y del frío en invierno, todo lo que necesitaban construir era una fachada. Se cree que la gente ha estado viviendo en esta zona desde tiempos prehistóricos.

El pueblo se encuentra en una ladera que cae en cascada desde el Castillo junto al río. Su principal atractivo reside en la belleza y originalidad de sus calles, especialmente en la parte baja, donde las casas, a modo de viviendas semitrogloditas, aprovechan el abrigo de las rocas en el desfiladero creado por el río. También son de interés la fortaleza y la Iglesia de la Encarnación.

Diez kilómetros al norte de Ronda, en los confines de la provincia de Cádiz, el río Trejo, existe Setenil de las Bodegas. Durante milenios, ha excavado un profundo desfiladero en la suave piedra arenisca. En algún momento en el pasado, el río tenía mucha más agua que la que tiene hoy y el aumento del flujo esculpió balcones en las curvas exteriores, lo que provocó que la roca se alzara siniestramente por encima.

Estos refugios en cuevas naturales fueron un imán para los primeros humanos de la zona. Cuando llegaron los romanos, los habitantes habían comenzado a excavar sus propias cuevas más profundas para hacer viviendas individuales. Si te entusiasma conocer este pueblo español con sus casas bajo las rocas, te preparamos una guía para que hagas desde ya maleta, y salgamos a la aventura.

¿Qué significa la palabra Setenil?

El nombre del pueblo ‘Setenil de las bodegas’ refleja su rica historia. Setenil, del latín septem nihil – “siete veces no”, se refiere a las siete veces que los gobernantes católicos intentaron recuperar el territorio de los moros, los habitantes árabes medievales que gobernaron gran parte de España durante varios siglos.

Solo en el séptimo intento de conquistar Setenil los católicos pudieron conquistar el territorio, uno de los últimos bastiones musulmanes en Iberia. ‘Sólido como una roca‘ Setenil (juego de palabras ineludible) más tarde comenzó a utilizar las áreas frescas debajo de la roca para almacenar todo tipo de productos locales en grandes almacenes, por lo que el pueblo ganó la segunda parte del nombre, «bodegas».

¿Qué ver en Setenil de las Bodegas en un día?

En el límite norte de la provincia de Cádiz, en la ruta de los Pueblos Blancos, Setenil de las Bodegas no deja indiferente a nadie, por la importancia de su patrimonio artístico, la belleza rústica de su arquitectura popular, y sobre todo por la singularidad de sus calles de cuevas.

Siempre paralelas al río, Cuevas del Sol y su hermana, las Cuevas de la Sombra, Jabones y Cabrerizas, Calcetas, Calañas y Herrería, una de las calles más bonitas de Andalucía.

Para los más enérgicos, un paseo por la parte antigua de la ciudad revela casas, a menudo adornadas con jardineras de flores brillantes, excavadas en los acantilados, calles estrechas y empinadas, a menudo con escalones, que parecen conducir a la minúscula Plaza de Andalucía y a un tubo de cerveza en uno de los cuatro bares. En la parte superior de la plaza está la oficina de turismo y en lo alto, el castillo en ruinas del Torreón del Homenaje.

Pasear por estas calles-cueva, bajo estas piedras milenarias, es una sensación que nos adentra en un mundo irreal a medio camino entre la química mineral y la literatura romántica, porque solo en Setenil de las Bodegas se puede caminar bajo la lluvia sin mojarse, o empaparse de agua filtrada, cuando no ha llovido durante días.

Pasea por las calles cubiertas de rocas

La mayoría de los turistas que vienen a Setenil de las Bodegas, visitan el pueblo únicamente por un tiempo limitado y no se aventuran en las estrechas y hermosas calles más allá de la calle principal de las Cuevas, donde se encuentran los restaurantes cueva más populares.

Lo ideal es caminar más y explorar más, descubriendo cuevas que puedes visitar, pero también destellos de la vida local, como ropa para secar en las calles, casas decoradas con las macetas de flores más coloridas o simpáticos gatos durmiendo en el sol. Puedes pasar fácilmente un par de horas simplemente deambulando por las calles.

Visita el Castillo Árabe

El Castillo Árabe de Setenil de las Bodegas fue construido en el siglo XII, durante la ocupación del Califato Almohade. Durante su época de esplendor, el castillo solía tener 40 torres, de las cuales solo queda una en la actualidad.

El Castillo Nazarí de Setenil de las Bodegas fue muy difícil de conquistar, llevándose a cabo las tropas cristianas del Reino de Castilla en siete intentos para arrebatárselo definitivamente a los moros, desde 1407 hasta 1484.

Como queda muy poco del siglo XIII, Es difícil imaginar cómo lucía entonces la fortificación. Desde la azotea del castillo se pueden admirar hermosas vistas sobre el pueblo y todo el valle que lo rodea. Cuesta 1 euro para visitar la torre.

Disfruta de los miradores de Setenil

Los miradores más bonitos de Setenil son desde lo alto de la torre del Castillo Nazarí. Otro gran mirador sobre el pueblo, el valle, hasta Olvera, que está a 15 kilómetros, se encuentra en lo alto de la colina, por encima del pueblo.

Para un mirador especial de Setenil de las Bodegas, dirígete al puente del pueblo, desde donde verás pasar el río a través de las casas subiendo en la colina.

Iglesias de Setenil de las Bodegas

Aunque Setenil de las Bodegas solo tiene 3000 habitantes, hay cinco iglesias en el pueblo. La más importante es la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación, construida sobre la antigua mezquita.

Tiene una arquitectura gótica con elementos del Renacimiento y se encuentra cerca del Castillo Árabe. El interior de la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación es todo blanco, con una estatua de la crucifixión sobre el altar, atrevida del siglo XVII. La iglesia es de visita libre. Otra iglesia que vale la pena visitar es la hermosa pero muy pequeña Ermita San Benito.

Disfruta de la gastronomía local

Una de las cosas más divertidas que hacer en Setenil de las Bodegas es sentarse en uno de los restaurantes debajo de las rocas y deleitarte con la gastronomía local. Embutidos, platos de cerdo, revueltos de espárragos o boniatos con miel son algunos de los platos típicos que puedes disfrutar en los restaurantes de Setenil.

El plato tradicional de la zona de Setenil de las Bodegas es la sopa cortijera, una sopa de espárragos trigueros enriquecida con huevos duros, chorizo, pan rústico y pimentón. Es un plato cálido y reconfortante para los días fríos.

Conduce por la carretera entre Setenil y Olvera

Olvera se encuentra a tan solo 15 kilómetros de Setenil, pero el trayecto hasta allí no puede ser más espectacular. El camino sigue el río hasta el corazón del cañón, únicamente para volver a subir por la ladera de las colinas plantadas de olivos.

Este camino es para ser conducido lentamente y admirado. Y, con límites de velocidad que a menudo son tan bajos como 30 km/hora, disfrutar de este viaje no es nada difícil de hacer.

Visita las cercanas ruinas de Acinipo

Acinipo es una joya escondida. Estas ruinas romanas se encuentran a solo 10 minutos en auto de Setenil y se pueden visitar de forma gratuita. Se cree que Acinipo fue fundado por los soldados romanos hace más de 2000 años. Incluso, aunque hoy no queda mucho y tu imaginación debe trabajar duro para imaginar la ciudad entera, el anfiteatro sigue en pie, casi intacto.

No está abierto todos los días, así que asegúrate de consultar el horario antes de tu visita. Hay un montón de aparcamiento gratuito en frente de las puertas.

Cómo llegar a Setenil de las Bodegas

Llegar a Setenil de las Bodegas desde Málaga es bastante sencillo, por una vía rápida. El viaje de 96 km toma alrededor de 1 hora y 20 minutos, dependiendo del tráfico. Desde Málaga, sigue la A35 hasta justo después de Ardales, luego incorpórate a la A367 en dirección Ronda hasta llegar a Cuevas del Becero, donde tomarás la carretera comarcal MA 414.

Aunque Setenil suele llamar la atención y el turismo por su espectacular entorno, nos deja una lección importante gracias al trato habitual que reciben los habitantes del pueblo y otras cuevas de la zona. Estas viviendas muy eficientes y de bajo impacto han estado en uso durante 500 años o más, y son un asombroso ejemplo de cómo una característica que, normalmente impediría el asentamiento, puede transformarse en una gran ventaja para quienes viven allí.