No es ningún secreto que el Principado de Asturias está lleno de rincones de enorme belleza. Uno de ellos es Pravia, una pequeña villa del interior que se desarrolla sobre la margen izquierda del río Nalón. Puede que nunca hayas escuchado hablar de ella. Por eso, hoy te llevamos a descubrir su rico patrimonio, su iglesia prerrománica, palacios, casonas rurales y de indianos y su rica gastronomía. En pocas palabras, Pravia ofrece una experiencia de viaje que merece la pena ser vivida.
La villa de Pravia (no confundir con San Esteban de Pravia) está situada a menos de una hora de las principales ciudades de Asturias (Oviedo, Avilés y Gijón), en una posición privilegiada por su cercanía al mar y en una zona de tierras fértiles de la comarca del Bajo Nalón. A su alrededor se abren extensas vegas rodeadas por este río y el Narcea, que juntos forman la cuenca más caudalosa del Principado.
Esta villa desconocida por muchos creció gracias al comercio a través del río Nalón. Pero, su máximo esplendor lo alcanzó en plena época de la Monarquía Asturiana, cuando fue la capital del Reino de Asturias entre los años 774 y 792. De allí que conserva auténticas joyas patrimoniales, especialmente del arte prerrománico, así como muchos otros tesoros que descubrirás en esta guía de viaje.
Descubrir el rico patrimonio de Pravia es apenas una parte del viaje. Hay mucho más para hacer en esta villa y sus alrededores. Este itinerario completo te ayudará a aprovechar al máximo las horas o los días que decidas destinarle a Pravia. Sin más, comencemos.
¿Qué ver en Pravia? Principales sitios de interés
Un paseo por esta villa señorial puede ayudar a imaginar su pasado noble en el siglo XVIII, época de la cual provienen la mayoría de sus atractivos más interesantes, como el Ayuntamiento y el conjunto monumental de la plaza Sabino Moutas.
Estos son los principales sitios de interés en Pravia:
Casco histórico
El casco histórico de Pravia posee mucha riqueza monumental, de allí que está declarado Bien de Interés Cultural. Por eso, lo mejor que puedes hacer es recorrerlo con calma, apreciando cada detalle y disfrutando del ambiente animado de sus calles.
Recordemos que la villa fue un próspero centro comercial gracias al carácter navegable del río Nalón y (principalmente) a las rentas provenientes de la pesca del salmón. En el año 1240 se levantó una gruesa muralla que protegía la población. Si bien hoy no queda nada de ella, el casco histórico conserva su antiguo trazado redondeado y bellos ejemplos de arquitectura tradicional, así como casonas nobles de los siglos XVII y XVIII.
Además de estas construcciones históricas, en las calles de Pravia encontramos muchos bares, restaurantes y sidrerías que invitan a hacer un alto en el camino. Muchos de ellos se concentran en la calle Jovellanos, ideal para sentarse a comer y tomar alguna delicia típica asturiana.
Plaza del Ayuntamiento de Pravia
La plaza del Ayuntamiento y el edificio que la preside son la zona más antigua del casco viejo de Pravia. Alrededor de ella se conservan varios ejemplos de arquitectura señorial de los siglos XVII y XVIII, incluyendo el Ayuntamiento. El mismo es un edificio neoclásico erigido en 1779 gracias a las riquezas obtenidas de la pesca del salmón.
Plaza de Sabino Moutas y conjunto monumental barroco
La plaza hoy conocida como Parque de Sabino Moutas tiene como principal atractivo un majestuoso conjunto barroco que data del siglo XVIII. El mismo está conformado por la Colegiata, el Palacio de Moutas y las Casas de Los Canónigos.
La Colegiata de Santa María la Mayor es una construcción de 1715 que destaca por la sobriedad de su exterior. La fachada está realizada en sillería caliza y cuenta con una torre campanario cuadrada y un amplio pórtico de acceso con rejas de hierro.
Igual de majestuoso es el interior, que con un poco de suerte podrás visitar (puesto que suele estar cerrado). Entre otros detalles, destaca el retablo barroco cubierto en pan de oro del altar mayor, un órgano barroco que se usa en ocasiones especiales y la imagen de Nuestra Señora del Valle, la patrona de Pravia.
El Palacio de Moutas es otro integrante de este hermoso conjunto monumental. Este edificio adosado a la Colegiata es dueño de un lujo y sobriedad propio de la nobleza. De marcado estilo barroco, fue construido en sillería, con una bonita fachada enmarcada en planta baja por dos columnas toscanas. El interior se distribuye alrededor de un patio columnado, cuenta con un bello jardín trasero y conserva parte de su mobiliario original.
El último integrante del conjunto barroco son las Casas de los Canónigos, situadas frente al Palacio y la Colegiata. Estas viviendas fueron proyectadas como hogar de los capellanes, aunque únicamente se lograron levantar seis de las nueve proyectadas. Si bien no conservan su aspecto original, porque han sufrido reformas a lo largo del tiempo, no pierden su esencia original y suman mucho encanto al conjunto.
La plaza es también el centro neurálgico de la villa, por lo que inevitablemente pasarás por ella. Su ambiente es muy animado, ya que cuenta con varios restaurantes y bares donde sentarse a comer y beber algo.
Santuario de Nuestra Señora del Valle
Construida sobre una ermita de mediados del siglo XIV, esta pequeña capilla no solo es uno de los edificios más antiguos de Pravia, sino que en su interior resguarda uno de los tesoros renacentistas más valiosos de Asturias, la imagen de la Virgen del Valle, la patrona de Pravia.
El exterior del templo es sencillo, con una escalinata de piedra que conduce al arco de entrada. En su entorno hay un pequeño jardín con bancos de piedra que le dan bastante encanto a la postal.
Iglesia prerrománica de Santianes
La mayor joya del prerrománico en Pravia se encuentra en Santianes, a unos 4 km de Pravia y dentro de su concejo. Hablamos de la construcción más antigua de la arquitectura prerrománica asturiana y un sitio que inevitablemente tienes que visitar.
La Iglesia de San Juan Apóstol y Evangelista fue mandada a construir por el Rey Silo, luego del traslado de la corte asturiana desde Canga de Onís a Pravia. El templo se erigió entre los años 774-783 con la intención de que haga tanto de iglesia palatina como de panteón real.
Se cree que en su momento se encontraba próxima al conjunto palaciego del rey, del cual ya no queda nada, por lo que es difícil determinar esto con exactitud. Aún así, se cree que fue erigida sobre una iglesia primitiva de la cual se encontraron algunos restos en 1894.
La iglesia funcionó como monasterio, más tarde como parroquia y permaneció intacta hasta el siglo XVI, momento a partir del cual sufrió profundas transformaciones llevadas a cabo entre los siglos XVII y XIX.
Las obras de restauración del templo comenzaron en la década del 70 del pasado siglo de manos de J. Menéndez Pidal, quien fue sucedido por Javier Fernández Conde en 1987. Gracias a este arduo trabajo, la iglesia conserva elementos originales. Esto quiere decir mucho, puesto que se trata de la iglesia prerrománica más antigua de Asturias.
Algunas de las joyas que se preservan en este bello templo son la pila bautismal de tradición paleocristiana excavada en el suelo, única dentro del Prerrománico Asturiano. Por su parte, los tres arcos de ligera herradura situados en el segundo piso son una reconstrucción realizada a imagen de los templos prerrománicos asturianos. Desde allí el monarca y su familia participaban de las ceremonias religiosas.
La iglesia realiza visitas guiadas para conocer su historia de miércoles a domingo a las 4 pm. No dejes de reservar tu lugar en la Oficina de Turismo de Pravia.
Museo del Prerrománico
Junto a la iglesia se encuentra el Museo Prerrománico, el cual complementa la visita al templo y exhibe las piezas encontradas en las excavaciones realizadas en 1975.
Una de las piezas más interesantes del museo es una inscripción laberíntica (conocida como la piedra laberíntica) en la que se lee la frase “Silo Princeps Fecit”. La misma puede ser leída a partir de las S central en todas las direcciones y fue la constancia dejada por el rey Silo como testimonio de su fundación.
Otros restos que forman parte de la colección de este pequeño museo son restos de inscripciones votivas, fragmentos de canceles y de ventanales, un candelabro hispano visigodo y un grabado en una piedra que podría proceder del palacio del Rey Silo y su esposa Adosinda.
Además de las piezas exhibidas hay maquetas, paneles y una proyección audiovisual sobre la Monarquía Asturiana. Tampoco dejes de subir al piso superior, donde hay una muestra fotográfica sobre la restauración de la iglesia, al igual que bonitas vistas de la vera del río Nalón.
Edificios indianos en Pravia y alrededores
Los indianos fueron emigrantes que retornaron desde las Américas en los siglos XIX y XX con grandes fortunas. Además de impulsar el crecimiento cultural e industrial del municipio, dejaron un rico patrimonio arquitectónico en la ciudad.
Muchos de estos edificios indianos de estilo ecléctico están agrupados en torno a la Avenida de Prahúa. Los mismos son mansiones con bellos elementos del Art Decó y algunos chalets de estilo montañés.
A 13 km de Pravia encontramos el pueblo de Somao (dentro del concejo de Pravia), quien presume de tener uno de los conjuntos de arquitectura indiana más bellos y mejor conservados de Asturias. Mansiones con grandes fincas y jardines, edificios públicos construidos por los indianos y muchos más podrás ver si te sumas a algunas de las visitas guiadas que organiza el Ayuntamiento de Pravia.
Miradores de Pravia
¿Quieres llevarte la mejor panorámica del pueblo y sus alrededores? Tienes suerte, porque Pravia cuenta con una red de miradores que permiten contemplar los paisajes más hermosos del municipio. Acá te contamos cuáles son tus opciones:
- Mirador de Monteagudo: este punto panorámico está situado entre el pueblo de Pravia y Somao y regala unas vistas inmejorables de la desembocadura del Nalón y buena parte del casco urbano praviano. En su entorno hay un área recreativa ideal para pasar un momento agradable en contacto con la naturaleza o para ir de picnic. El acceso al mirador se puede hacer en coche, tomando la pista forestal que parte de la carretera AS-368.
- Mirador de La Peñona: situado en las faldas de La Peñona, este hermoso mirador permite contemplar las formas del relieve del municipio, con el mar Cantábrico a lo lejos. Acá también encontrarás un área recreativa y una zona arbolada perfecta para un picnic. El acceso se puede hacer en coche desde Pravia pasando por los pueblos de Escoredo y Villafría.
- Mirador de Las Mestas: desde este bonito punto se aprecia la confluencia de los ríos Narcea y Nalón. Se encuentra junto a la carretera AS-16 y posee bancos de madera perfectos para sentarse a contemplar las vistas.
- Mirador de El Cueto: posiblemente, regala las mejores vistas de la villa de Pravia. Se encuentra situado muy cerca de la Oficina de Turismo y la Biblioteca Municipal, cuenta con bancos de descanso y marca el comienzo o fin de la ruta circular conocida como Los Marineros.
Los alrededores de Pravia
Pravia es un destino ideal para disfrutar de potenciales excursiones. Por ejemplo, hacia el norte encontramos la hermosa villa de Cudillero, mientras que al este se abre la animada ciudad de Avilés, uno de los principales centros urbanos del Principado de Asturias. Por otro lado, Gijón y Oviedo también son escapadas posibles para hacer desde Pravia (y viceversa).
Un paseo más corto es el que lleva al pequeño pueblo de Luerces, donde encontramos la conocida como capilla sixtina praviana. Hablamos en la sencilla iglesia románica de San Miguel de Luerces, cuyo interior conserva pinturas del siglo XVII.
Dichas pinturas hacen un recorrido por la vida y muerte de Cristo, desde su Nacimiento hasta la Crucifixión. Otras muestran las figuras de Adán y Eva, además del Tetramorfos, uno de los símbolos por excelencia de las iglesias románicas. Tanto la tonalidad como la gama policromática las convierten en uno de los ejemplos más notables de pinturas del románico en Asturias.
En Luerces también encontraremos viviendas tradicionales y hórreos muy bien conservados, en ambos casos valiosas muestras del patrimonio etnográfico asturiano. Por cierto, desde la Oficina de Turismo de Pravia se organizan visitas guiadas por Luerces.
Otro rincón interesante para ver en los alrededores de Pravia es Puentevega, el centro neurálgico del Valle de Arango, un precioso enclave situado a pocos minutos de Pravia.
En este pequeño pueblo se conserva un conjunto etnográfico conformado por una bolera de barro, un lavadero y un potro. La primera es una de las pocas que se conservan en Asturias y un poco antes de llegar a ella se encuentra el lavadero y el potro de herraje, que se usaba antiguamente para el herraje de los animales.
Comer en Pravia
Otro motivo para visitar Pravia es su sabrosa gastronomía. No lo mencionamos antes, pero a este concejo se lo conoce como la “Huerta de Asturias”, dada la gran cantidad de productos de la huerta que brindan sabor, color y textura a sus platos.
Las huertas pravianas son regadas por las fértiles aguas del Nalón, proveyendo frutas y verduras de gran calidad. Un producto estrella son las fabes (un tipo de legumbre propio de la región asturiana) de la granja, posiblemente una de las mejores de Asturias. Por ende, comer una rica fabada o un buen pote asturiano es un plan que tendrías que considerar si visitas Pravia.
Igual de importante es el salmón. Patés, calderetas, a la plancha, a la sidra, al papillote… Son muchas las posibilidades para disfrutar de esta delicia. Por otro lado y al igual que en toda Asturias, la mesa praviana se caracteriza por la presencia de deliciosas carnes y embutidos.
Otro alimentos que le da mucha categoría a la oferta gastronómica de Pravia es el queso. En este sentido, visitar la Quesería Rey Silo es una experiencia culinaria imperdible para hacer en la villa. Los productos aquí se elaboran con la mejor materia prima, dando como resultado el queso más rico de la zona. No dejes de sumarte a una visita guiada para conocer cómo se elaboran estos manjares. Además, en muchas tiendas de Pravia y alrededores podrás adquirirlos.
Ya lo sabes, sobran los motivos por los cuales deberías visitar Pravia. Lo único que tienes que hacer es planificar una escapada a esta villa del interior de Asturias situada a pocos kilómetros de las grandes ciudades. Arte prerrománico, miradores, platos tradicionales, casas indianas y muchos tesoros más te esperan en Pravia.
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