Visitamos Coyhaique, en la Carretera Austral chilena

Coyhaique es una parada obligada dentro de la famosa ruta de la Carretera Austral, que recorre el sur de Chile desde Puerto Montt hasta Villa O’Higgins. Es la ciudad principal de esta zona y un destino en el cual podrás recargar energías y recorrer sus alrededores, en los que encontrarás paisajes que parecen salidos de una película.

Si eres fanático de las postales patagónicas, nuestra propuesta de hoy te encantará. ¡Quédate con nosotros y descubre todo lo que puedes hacer en Coyhaique!

Coyhaique es la puerta de entrada a la Patagonia Chilena para quienes llegan en avión y una parada imprescindible para quienes vienen conduciendo por la Carretera Austral desde Puerto Montt. Si eres amante de la naturaleza y del senderismo, sin dudas que Coyhaique no debería quedar fuera de tu ruta.

Coyhaique es el núcleo poblacional más grande que encontrarás a lo largo de la Carretera Austral, la épica ruta que conecta el sur de Chile y un punto de partida inmejorable para explorar la belleza natural de la Región de Aysén (de hecho, es la capital de la región). Se trata de una ciudad pequeña en la que viven unos 70.000 habitantes, que aparece en el mapa rodeada por los ríos Simpson y Coyhaique. Es el punto de encuentro de todos los aventureros que se animan a recorrer la magnífica Carretera Austral y un destino que seguro no te defraudará.

¿Sabías qué? El nombre Coyhaique proviene de las palabras tehuelches qoi y aike, que significa “allí donde hay agua”. Cuando la visites comprenderás por qué.

La Región de Aysén

La Región de Aysén es dueña de uno de los escenarios naturales más impresionantes de la Patagonia Chilena. A pesar de que es la región más grande en términos de superficie, lo cierto es que también es la menos poblada de todo el territorio nacional, en gran parte por lo complicado que puede ser llegar a ella. Sus pueblos y ciudades aparecen salpicados en sus paisajes remotos, pero impresionantes. En otras palabras, la belleza de la Región de Aysén es capaz de satisfacer las pretensiones del viajero más exigente.

Aysén estuvo alguna vez revestida por una enorme capa de hielo que se vio afectada por los movimientos de los glaciares, quienes fueron moldeando lagos y golfos y cambiando la fisonomía de la región para siempre. De ese modo, las montañas y los ríos son los grandes protagonistas del paisaje, aunque también acompañan dos formidables campos de hielo. Como te podrás imaginar, el trekking glaciar es una de las excursiones más famosas de la región.

A pesar de lo difícil que puede ser llegar a esta región, Aysén puede presumir de tener el 50% de su territorio dentro de diferentes parques nacionales, reservas naturales o Reserva de la Biosfera. En resumen, cuenta con 8 parques nacionales, 3 santuarios de la naturaleza y 12 reservas naturales que abarcan más de 5.000 hectáreas protegidas. Además de ello, cuenta con la reserva de agua dulce más grande del planeta: el Campo de Hielo Patagónico Norte y Sur y el Campo de Hielo San Valentín, haciendo de esta región un verdadero santuario de agua dulce.

¿Qué hacer en Coyhaique?

Coyhaique se encuentra situada en un valle circular abierto que regala vistas maravillosas por donde se mire. Por eso, más allá de que es una ciudad estratégica dentro de la Carretera Austral, lo cierto es que vale la pena dedicar 2-3 días para recorrer sus alrededores.

La ciudad de Coyhaique es muy pintoresca, con sus casas construidas sobre los cerros y su hermosa Plaza de Armas como punto neurálgico. Por eso, antes de descubrir los tesoros naturales que hay cerca de ella, te sugerimos que des un paseo por sus calles.

En los alrededores de Coyhaique disfrutarás de lo mejor de la naturaleza chilena y de actividades como la pesca recreativa en sus ríos y lagos, trekking, rafting en el río Simpson y senderismo. Las opciones son infinitas. Por ejemplo, puedes ir a Puerto Aysén y conocer la Bahía Acantilada, o bien navegar por la Laguna San Rafael partiendo desde Puerto Chacabuco.

Como queremos que no te pierdas de nada, aquí te dejamos un listado con las mejores cosas que puedes hacer en Coyhaique. ¿Comenzamos?

Plaza de Armas de Coyhaique

Lo primero que puedes hacer cuando llegues a Coyhaique es conocer su hermosa Plaza de Armas. De forma pentagonal, es el centro neurálgico de la ciudad y un rincón lleno de árboles muy pintorescos. Frente a ella hay una feria de artesanos donde podrás comprar productos típicos de la zona y una buena cantidad de tiendas.

Además, alrededor de la plaza hay numerosos restaurantes, bares y cafeterías que venden delicias locales. Desde aquí también podrás hacer una caminata de lo más tranquila por un paseo peatonal muy relajante que te llevará al monumento al Ovejero, que es un símbolo del trabajo de la Región de Aysén.

La Plaza de Armas de Coyhaique fue diseñada por Héctor Monreal, un ingeniero agrimensor, y fue construida por los mismos colonos que trabajaron en ella de manera voluntaria los fines de semana. Si bien a lo largo de los años ha sufrido varias modificaciones, nunca perdió su característica forma pentagonal que la diferencia del resto de las plazas de Chile que son cuadradas.

Cerro Mackay

A solo 2 km de Coyhaique se encuentra el guardián de la ciudad y el protagonista principal de su postal. El Cerro Mackay capta la atención por su cercanía a la ciudad y por su curiosa forma. Alcanza los 1205 metros de altura sobre el nivel del mar, marcando un punto elevado sobre el valle labrado por la confluencia de los ríos Simpson y Coyhaique.

El ascenso al cerro Mackay no tiene una ruta del todo definida, sin embargo, es posible llegar al bosque de lengas que hay en la parte superior del cerro y al espectacular mirador. La parte sur del cerro es la más sencilla para iniciar el ascenso. Seguro que en el camino te irás topando con otros senderistas y con escaladores que aprovechan su roca para hacer un poco de este deporte.

La primera parte del ascenso al Mackay es relativamente sencilla y no exige demasiado esfuerzo físico, aunque siempre es mejor estar en buen estado. A mitad de camino se encuentra la gran roca que hace de mirador de Coyhaique y sus alrededores. La última parte del ascenso es la más dura, con algunos tramos que exigen ir con pasos firmes y cuidado.

En la cima del cerro te encontrarás con un bosque de lengas intacto, que crea un panorama realmente encantador. Desde allí, ninguna foto le hará justicia a la belleza del paisaje, así que intenta disfrutar de la experiencia y dejar la postal grabada en tu memoria.

El trekking hasta la cima del cerro Mackay puede llevar un día completo, si vas haciendo paradas para descansar e hidratarse. No olvides llevar botas de montaña con suela antiderrapante, bloqueador solar, agua y algún snack.

Piedra del Indio

La naturaleza y sus caprichos ha moldeado una piedra que, si uno la ve desde el valle que encontrarás bajando por la ladera del Río Simpson, verás que simula ser el perfil de un indio (aunque siempre en estas cosas es necesario ayudar un poco con la imaginación).

El principal río de Coyhaique es precisamente el río Simpson. Por ende, una de las mejores cosas para hacer en esta localidad es admirar su curso desde alguno de los miradores de la ciudad. Desde allí podrás apreciar como el río se encajona entre montes, creando un valle muy fértil en su ribera. Pero, no te quedes solo con esta imagen. Si bajas al río y cruzas el puente de piedra que lo atraviesa podrás ver desde ese punto el perfil del indio, que se formó por la erosión de la roca con el paso de los años.

Reserva Nacional Coyhaique

Una de las mejores experiencias que puedes vivir durante el viaje es conectar con la naturaleza de la Reserva Nacional Coyhaique. Esta área protegida llena de senderos para recorrer está repleta de bosques de lengas, ñires, ciruelillos, calafates y especies animales como pumas y los majestuosos cóndores, solamente por mencionar algunos.

La Reserva Nacional Coyhaique es un lugar de gran belleza que no puedes dejar de visitar, además de hacer alguna de sus rutas que te adentrarán en sus rincones más mágicos.

El paisaje de la reserva va desde suaves lomas hasta montañas más grandes, como el Cerro Cinchao, de poco más de 1300 metros de altura. A su vez, posee 4 lagunas de pequeño tamaño, siendo la mayor la de todas Los Mallines, seguida de la laguna Verde, Venus y Los Sapos.

El parque cuenta con un buen número de senderos habilitados que transcurren por diferentes paisajes y miradores de la ciudad. Algunos de ellos son: Los Leñeros, Los Carreros, Laguna Verde, Los Troperos y muchos más.

El acceso al parque se encuentra sobre la ruta 240-CH que comunica Coyhaique con Puerto Aysén, a tan solo 5 km de la Plaza de Armas.

Para disfrutar de la belleza de la reserva deberás previamente abonar tu entrada. Para ello simplemente debes ingresar al sitio web de reservas de CONAF y seguir los pasos para adquirir tu ticket. A modo orientativo, la entrada para los adultos nacionales cuesta 3.000 pesos chilenos (3,6 USD) y 6000 pesos chilenos para los adultos extranjeros (7,2 USD). Los niños menores de 11 años no pagan entrada, los adolescentes nacionales 1500 pesos chilenos (1,8 USD), mientras que los adolescentes extranjeros 3000 (3,6 USD).

Catedrales de mármol

Otro sitio de enorme belleza que puedes visitar desde Coyhaique son las catedrales de mármol.

No, no son catedrales construidas por el hombre. Son monumentos naturales del Lago Carrera que se formaron hace miles de años por efecto del agua y del viento. Estas formaciones milenarias son un sitio único en el mundo que realmente vale la pena ver de cerca.

El lago General Cabrera es uno de los más grandes de Sudamérica y el más grande de Chile. Ocupa una superficie de más de 900 km² en el territorio chileno y en total 1850 km² (el resto se encuentra del lado argentino). Es un monstruo de agua rodeado de vegetación que varía en cada kilómetro y el sitio que acoge estas impresionantes moles de mármol. Es precisamente el mármol el que impide que el viento y el agua sigan erosionando la piedra, logrando que esta maravilla natural resista al paso del tiempo.

Los paseos en lancha para visitar las catedrales de mármol salen desde Puerto Río Tranquilo, una localidad remota ubicada a 215 km de Coyhaique, en la zona sur de la Carretera Austral.

El viaje en coche desde Coyhaique hasta Puerto Río Tranquilo lleva alrededor de cuatro horas y el paseo es sumamente pintoresco. Si no tienes coche, pero no quieres dejar de vivir esta experiencia, puedes tomar un bus con destino a Cochrane y bajarte en la estación de Puerto Río Tranquilo. Un detalle a tener en cuenta es que los buses no salen con mucha frecuencia, por lo que te recomendamos que previamente averigües los horarios y reserves el boleto con anticipación.

También podrás visitar las catedrales de mármol desde Argentina. En este caso, debes dirigirte a la localidad de Los Antiguos, donde se encuentra el paso fronterizo Jeinimeni. Sigue la ruta 265 que corre junto al Lago General Carrera y en un momento empalmarás con la Carretera Austral, desde la cual debes girar a la derecha y seguir en dirección norte.

Si tienes presupuesto y prefieres comodidad, podrás contratar un tour en cualquiera de las agencias de turismo de Coyhaique. Los tours de un día a las cuevas de mármol cuestan entre $45.000 y $60.000 pesos chilenos (lo que equivaldría a unos $70-$90 USD) e incluyen el traslado ida y vuelta, el almuerzo en Puerto Río Tranquilo y el tour en lancha. Sin dudas que es una opción a tener en cuenta, especialmente si no tienes muchos días. Además, los tours van realizando paradas estratégicas en el camino para que vayas captando los mejores paisajes.

Otro plan emocionante es contratar un kayak y recorrer las cuevas de mármol por este medio y con la ayuda de un guía. Las agencias de alquiler se ubican en la costanera de Puerto Río Tranquilo y el precio por persona va desde los $30.000 hasta $50.000 pesos chilenos (es decir, entre $45 y $75 USD). Los paseos duran alrededor de 3 horas y permite recorrer cada recoveco de las cuevas, en aquellos rincones donde las lanchas no llegan. De esa manera, vivirás una experiencia diferente y te llevarás las mejores postales de este tesoro natural.

Parque Nacional Laguna San Rafael

Ya que te encuentras en Puerto Río Tranquilo, puedes aprovechar la ocasión y visitar el Parque Nacional Laguna San Rafael. Esta región constituye el Campo de Hielo Patagónico Norte, del cual se desprenden brazos de hielo que dan lugar a enormes glaciares y lagos rodeados de montañas.

Dentro del parque se encuentran los glaciares San Rafael y San Quintín, los dos más grandes y majestuosos del territorio chileno. A ellos lo acompañan el Monte San Valentín, el pico más alto de los Andes del sur.

El gran protagonista de este rincón de la Región de Aysén es el extenso glaciar San Rafael, al cual la UNESCO lo nombró Reserva Mundial de la Biosfera. Los paseos al glaciar son mucho más que ver este alucinante campo de hielo, es una experiencia que te permitirá conocer lo mejor de la geografía chilena.

Hay varias formas de tomar un tour en barco por la Laguna San Rafael. Una de ellas es, precisamente, desde Puerto Río Tranquilo. Otra opción es tomar el paseo desde Puerto Chacabuco (a 78 km de Coyhaique), que se encuentra a unos 10 minutos en coche de Puerto Aysén. Las embarcaciones recorren los fiordos que rodean los cordones montañosos de la Patagonia y poco a poco se adentran entre los macizos de hielo hasta llegar al glaciar. El trayecto dura entre 4 y 5 horas e incluye el desayuno, almuerzo y un cóctel durante el viaje de regreso. Además, los guías realizan diferentes charlas informativas que permiten a los visitantes comprender la importancia del glaciar.

Si bien la excursión no es barata, cuando te enfrentes a los 70 metros de altura del glaciar sentirás que cada peso invertido valió la pena.

Tip viajero: el mejor momento del año para disfrutar de este regalo de la naturaleza (que lamentablemente está siendo afectado por el calentamiento global) es en primavera (octubre y noviembre). En esta temporada los fiordos aún están nevados, las temperaturas son amigables y los precios son menores.

Reserva Nacional Cerro Castillo

¡Todavía hay más que ver desde Coyhaique! No hemos terminado de contarte todo lo que esta región de enorme belleza tiene preparada para ti.

Ahora llegó el turno de la Reserva Nacional Cerro Castillo, que lleva el nombre del escarpado y rocoso pico que se encuentra en su parte central. Subir a su cima es una experiencia de senderismo encantadora que vale mucho la pena, especialmente si eres de los que aman esta actividad.

Lo primero que deberás hacer es llegar a Villa Cerro Castillo, ubicada a 95 km al sur de Coyhaique. Esta pequeña localidad se encuentra a los pies del cerro y es visitada especialmente por los senderistas que se animan a domar su cima. Podrás llegar en coche o tomando un autobús con dirección a Cochante y pedirle al chofer que te deje en la localidad. La villa es pequeña, pero cuenta con algunas opciones de alojamiento en caso de que quieras pasar la noche allí.

El trekking al Cerro Castillo dura entre 7 y 8 horas (ida y vuelta) y es bastante exigente, tanto por las características del terreno como por la pendiente. La última parte del sendero transcurre por una zona de precipicios que puede dar un poco de vértigo, por lo que conviene ir mentalmente preparado. Cuando llegues a la cima, las vistas te dejarán sin palabras. Desde allí se aprecia un enorme glaciar encaramado a las rocas y una laguna azul creada por las aguas del deshielo.

Mapa de Coyhaique

Datos prácticos sobre Coyhaique

Aquí te dejamos algunos datos prácticos sobre Coyhaique que te ayudarán a planificar mejor tu paso por la ciudad.

• La Oficina de Turismo es la más completa de la región y una parada imprescindible. Si te encuentras viajando por la Carretera Austral, allí te brindarán información muy práctica y actualizada de la ruta (estado de los caminos, opciones de transporte, hospedaje y más).
• Como te contamos al principio, la ciudad es la mejor preparada para recibir al viajero. En ella podrás aprovechar para hacer compras, ya que hay muchas más alternativas, extraer dinero del cajero automático o cambiar moneda extranjera (más adelante es difícil que puedas hacerlo).
• En Coyhaique encontrarás varias agencias locales e internacionales para alquilar un coche y seguir recorriendo la Carretera Austral por este medio. La ciudad posee también conexiones con autobús con otros destinos más al sur, aunque si planeas hacer la ruta por este medio no quedará otra que hacerla en tramos.
• Las opciones de alojamiento son muchas, aunque en temporada alta es mejor reservar con anticipación, ya que la demanda suele ser alta. La oferta de alojamiento incluye hoteles, cabañas, hostales, campings y departamentos de alquiler. Los habitantes de la localidad también alquilan habitaciones de sus viviendas a los turistas, una alternativa más económica si viajas con poco presupuesto.
• Si te encuentras haciendo una ruta en coche, en Coyhaique encontrarás todo lo necesario para tu vehículo (repuestos, servicios de grúa, talleres mecánicos, etc.), por lo que no está de más hacerle un pequeño chequeo al vehículo antes de seguir viaje.
• El terminal de autobuses se encuentra en la calle Lautaro, esquina Magallanes. Allí podrás comprar tus boletos hacia otros destinos de la Carretera Austral (Cochrane, La Junta, Osorno, Puerto Montt, Punta Arenas, Puyuhuapi y otros).

¿Cómo llegar a Coyhaique?

La gran mayoría de los viajeros que visitan Coyhaique lo hacen en el marco de un viaje por la Carretera Austral. De todos modos, el coche no es la única alternativa que tienes para llegar a este bello rincón de la Patagonia Chilena.

Por carretera

Si te encuentras haciendo un viaje por la Carretera Austral, entonces tendrás la excusa perfecta para hacer una parada en Coyhaique. El viaje puede llevarte varios días, pero te compensará gratamente con la belleza de los paisajes que irán apareciendo antes tus ojos. La postal se alterna entre cerros verdes, ríos, lagunas y la imponente Cordillera de los Andes con sus picos nevados como telón de fondo.

Viajar en coche propio es, para nosotros, la mejor manera de hacer esta ruta y llegar a Coyhaique. De ese modo tendrás la libertad de parar siempre que desees y viajar a tu ritmo. Si no tienes coche, una buena opción es alquilar uno en Puerto Montt.

Para entrar a la Carretera Austral deberás, en primera instancia, tomar el ferry que cruza por Caleta La Arena hasta Caleta Puelche. Una vez allá, encontrarás el empalme con esta carretera (que se corresponde con la Ruta 7) que da comienzo a la aventura.

Otra manera de llegar a la carretera es viajar a Hornopirén, desde donde deberás tomar un segundo ferry con destino a Leptepu o Caleta Gonzalo. El cruce tiene una duración aproximada de 4 horas y cuesta entre $30.000 y $60.000 pesos chilenos por automóvil (36-72 USD), más $10.000 (12 USD) por pasajero (los precios pueden cambiar, así que recuerda chequearlos previamente).

Una vez que hayas llegado a Caleta Gonzalo volverás a tomar la Carretera Austral y luego de conducir unos 470 km habrás llegado a Coyhaique. Sí, al igual que sucede con el sur de Argentina, en Chile las distancias son también muy largas. Por eso es primordial viajar con paciencia, sin apuros y bien equipados. No hay mejor experiencia que hacer una ruta en coche por la Patagonia, así que seguro lo disfrutarás.

En autobús

Es posible llegar a Coyhaique en autobús, aunque no es lo ideal, puesto que las frecuencias de los viajes son pocas. Si viajas de norte a sur, las vías de acceso son las localidades de Chaitén, Puyuhuapi o Puerto Cisnes. En cambio, de sur a norte la vía de acceso es la localidad de Cochrane. Como sea, no olvides chequear previamente los horarios de viaje.

En Avión

Otra alternativa más rápida, en caso de que no tengas tanto tiempo de viajar durante tantos días, es llegar a Coyhaique en avión. En este caso, tu punto de llegada será el aeródromo de Balmaceda, situado a unos 45 minutos por carretera de Coyhaique.

El aeródromo de Balmaceda posee conexiones directas con Santiago de Chile, Punta Arenas y Puerto Montt vía Latam o Sky. La desventaja es que los precios de los vuelos suelen ser bastante elevados, en todo caso, deberás estar atento a las promociones. Desde Balmaceda podrás alquilar un coche o tomar un bus de la empresa Buses Suray a Coyhaique.

Cuando aterrices en Balmaceda te encontrarás con la infinita pampa patagónica, aunque a medida que avances hacia Coyhaique, irán apareciendo ante tus ojos los cordones montañosos que rodean la ciudad, con sus bosques de ñires y lengas.

En ferry

La última alternativa para llegar a Coyhaique es en ferry. En este caso, la empresa Naviera Austral hace la ruta desde Quellón (en la Isla de Chiloé) hasta Puerto Chacabuco. El viaje dura 31 horas, ya que es una distancia muy considerable la que se debe recorrer.

Una vez en Puerto Chacabuco deberás coger un taxi hasta Puerto Aysén y desde allí tomar un bus a Coyhaique.

¿Cuál es la mejor época para viajar a Coyhaique?

La región de Aysén y Coyhaique posee un clima océanico, por ende, la mejor época para viajar es desde enero hasta abril y desde octubre a diciembre. Una cosa que debes tener en cuenta es que te encuentras en plena Patagonia, es decir, independientemente de la época que sea siempre deberás llevar abrigo. En enero, por ejemplo, la temperatura máxima ronda los 15°C, mientras que en junio apenas alcanza los 3°C.

Los meses menos recomendados son mayo, junio, julio y agosto, que es cuando más frío hace. Además, muchas veces las intensas nevadas suelen bloquear los caminos y suspender excursiones.

La primavera (de octubre a diciembre) es quizá la época más recomendada por varios motivos: el clima es más ameno, los precios son más bajos y no hay excesiva aglomeración de turistas. En estos meses es cuando más disfrutarás de las actividades al aire libre, desde la navegación hasta el senderismo y el trekking. Además, los paisajes están inundados de verde, flores y picos nevados. El verano también es una buena opción, pero coincide con la temporada alta, lo que se traduce en precios más altos y más turistas.

Coyhaique es uno más de los muchos tesoros que tiene el sur de Chile, una escapada memorable a la que difícilmente podrás resistirte. Esta zona verde y fértil inmersa en frondosos bosques invita a vivir unos días desconectado de la rutina y el ruido de las ciudades. Por eso, si te encuentras pensando en tu próximo destino y aún no te decides a dónde ir, considera seriamente nuestra propuesta de hoy. Estamos seguros de que vivirás una experiencia única.