La Gran Barrera de Coral es el gran orgullo australiano, y un imperdible de este país. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1981 y con una superficie de 344.468 km2, es el arrecife de coral más grande del mundo. Tal es así que puede verse, incluso, desde el espacio. El día de hoy te contamos todo sobre la Gran Barrera de Coral australiana, desde su importancia y situación actual, hasta el modo en que puedes descubrirla. No te vayas, tenemos mucho que contarte.
La Gran Barrera de Coral es una verdadera maravilla natural y es el hogar de 600 tipos de corales blandos y duros de diferentes colores. Esta estructura da vida a una multiplicidad de flora y fauna marina. Medusas, moluscos, más de 1600 tipos de peces, gusanos, más de 130 variedades de tiburones y rayas, ballenas, delfines y más dependen de ella.
Pero, antes de adentrarnos de lleno a descubrir la Gran Barrera de Coral australiana respondemos a una pregunta fundamental. ¿Cuál es la importancia de los arrecifes de coral? Los arrecifes de coral son algunos de los ecosistemas marinos más impresionantes del planeta tierra. Casi un cuarto de las especies marinas depende de ellos en algún momento de su vida, siendo imprescindibles para la salud de los ecosistemas marinos. Si el mundo no tuviese arrecifes de coral los ecosistemas colapsarían y la vida marina moriría.
Las primeras exploraciones
Si bien se cree que fueron los portugueses quienes descubrieron el arrecife los siglos XVI o XVII, Cook fue el primero en describirlo científicamente. Gracias a eso, los investigadores europeos supieron de su existencia, entre ellos el naturalista británico, Charles Darwin.
Durante su primer viaje para la Royal Society a bordo del HMB Endeavour, el 11 de junio de 1770, James Cook se daría de bruces con la Gran Barrera de Coral. Resulta que la nave que bordeaba la costa de Australia, rumbo al norte, quedó encallada en el arrecife. 7 semanas le tomó a la tripulación reparar los daños. Tiempo que Joseph Banks y Daniel Solander aprovecharon para recopilar la primera colección de flora australiana. Mientras tanto, Cook se dedicó a explorar, a unos 200 km del litoral, la mayor estructura viva del planeta. Sin embargo, Cook no alcanzaba a comprender qué era lo que hacía que esta enorme pared de coral se alzara desde las profundidades del océano.
En 1835, Charles Darwin fue quien dio una respuesta a esta inquietud, luego de observar la isla volcánica de Moorea. Según Darwin, a medida que la isla se hundiera, el arrecife que la rodeaba emergería hasta convertirse en un atolón.
Si bien esto suele suceder con la mayoría de los arrecifes, la Gran Barrera de Coral no se formó en torno a una isla volcánica. El origen del arrecife se remonta al final de la última era glacial, hace unos diez mil años. Cuando los polos comenzaron a derretirse, el nivel del mar subió, inundando las amplias praderas de la costa australiana. Así se trazó un nuevo litoral, que permitió al arrecife ir creciendo. Hoy en día, la Gran Barrera de Coral se compone de más de 3 mil arrecifes, lo que la convierte en el mayor ecosistema marino del planeta.
¿Dónde está la Gran Barrera del Coral en Australia?
La Gran Barrera de Coral se extiende prácticamente por toda la costa este australiana, en el estado de Queensland. Una parte de ella también está en la costa de Papúa Nueva Guinea, sin embargo, el territorio australiano es el principal dueño de este ecosistema. La barrera coralina se extiende a lo largo de 2300 kilómetros, paralelo a la costa este de Australia.
Siendo más específicos, podríamos decir que la Gran Barrera de Coral comienza en la localidad de Bundaberg (a unos 300 kilómetros de Brisbane) y termina en Cape York, en el extremo norte del país, muy cerca de Papúa Nueva Guinea. Esto corresponde a la zona tropical de Australia, turísticamente conocida Tropical North Queensland. Como no podía ser de otro modo, el mar donde está la Gran Barrera de Coral se llama Mar del Coral.
¿Qué especies de flora y fauna viven en ella?
El ecosistema de la Gran Barrera de Coral es el hogar de una multiplicidad de especies. De hecho, incluso sumergiéndose cada día no bastaría para conocer la enorme diversidad de flora y fauna del arrecife. Este reino de colores y formas fascinantes es poblado por 400 tipos de coral, unas 1800 especies de peces, 5000 moluscos y más de 120 tiburones. Por otro lado, 6 de las 7 tortugas marinas existentes llegan cada año a poner sus huevos en esta zona. Hasta la fecha se han avistado unas 30 especies diferentes de ballenas y delfines en esta zona, por ejemplo, la ballena jorobada.
Respecto a los tiburones, el más común del arrecife es el tiburón gris, que muy rara vez ataca a personas. Este enorme pez se alimenta de calamares, pulpos y crustáceos y habita en áreas cálidas y poco profundas.
Por otro lado, la Gran Barrera de Coral alberga una gran variedad de especies de moluscos y gasterópodos, además de más de 400 especies de corales. La Gran Barrera posee 9 especies distintas de caballitos de mar. Estos adorables animalitos, tienen el cuerpo en forma vertical, algo que los hace únicos. En pocas palabras, podría decirse que es un verdadero paraíso de color y vida.
Pero no termina aquí, ya que en los pantanos y manglares de las costas cercanas al arrecife viven especies de cocodrilos de agua salada. Por otro lado, unas 215 especies de aves visitan el lugar, armando sus nidos en las islas que se alzan en el territorio ocupado por el arrecife. Al mismo tiempo, estas islas contienen más de 2 mil especies de plantas conocidas, 3 de ellas endémicas.
¿Cómo está conformado el arrecife?
La Gran Barrera de Coral se divide en dos partes: el Arrecife Interior y el Arrecife Exterior. El primero es el que generalmente visitan las excursiones que parten desde Cairns y Port Douglas. Es el que está más cerca de la costa, rodeando las 74 Islas Whitsundays. La mayoría de las excursiones que salen desde Airlie Beach llegan hasta el Arrecife Interior, bordeando las costas de las islas y haciendo paradas en algunas de las playas más famosas, como Whitehaven Beach (catalogada como una de las más lindas del mundo).
También, tienes la opción de tomar una excursión de dos o tres días en catamarán o velero para conocer todo el archipiélago. La desventaja es que los arrecifes de coral que bordean las islas Whitsunday se encuentran en aguas poco profundas, por lo tanto, la visibilidad puede afectarse por efecto de las mareas y el viento. Además, las vistas de la Gran Barrera de Coral no son las mismas que en el Arrecife Exterior. En la zona de Cairns y Port Douglas es más probable ver mayor cantidad de corales y especies que en los arrecifes que bordean las islas Whitsundays.
El Arrecife Exterior está localizado en mar abierto, en un área donde no hay islas ni playas. Allí es posible ver especies de peces más grandes que en el Arrecife Interior. Los barcos que llegan al arrecife anclan allí para que los turistas puedan lanzarse al mar desde la parte de atrás del barco.
¿De qué modo se puede explorar la Gran Barrera de Coral?
Al ser tan extensa, existen diferentes puntos repartidos por toda la costa de Queensland que sirven de base para visitar la Gran Barrera de Coral. Dos de las mejores opciones es visitarla desde Cairns y Port Douglas o desde las Islas Whitsundays.
¿Cómo conocer la Gran Barrera de Coral? Existen diferentes maneras: haciendo snorkel, buceando o sobrevolándola en avioneta. Por supuesto que las dos primeras son las mejores formas de sentir la vida marina de la Gran Barrera. Por otro lado, sobrevolar la zona te hará tomar dimensión de la inmensidad del arrecife.
Cairns y Port Douglas son los destinos más populares para hacer base y recorrer el arrecife, motivo por el cual diariamente zarpan barcos que llevan pasajeros a explorar el arrecife. Nosotros te contaremos cómo vivir las tres experiencias, es decir, hacer snorkel, bucear o sobrevolar el área.
Snorkel por la Gran Barrera de Coral
Posiblemente, sea la mejor manera de descubrir la Gran Barrera de Coral de Australia. El snorkel es fácilmente adaptable a niños y grandes, aunque seguramente todos se sienten como niños al comenzar a explorar el mundo marino.
Desde Cairns y Port Douglas tienes la posibilidad de tomar tours de un día, saliendo entre las 8 y 8:30 am y regresando alrededor de las 4:40 pm. Todas las excursiones que salen desde esta zona llevan al Arrecife Exterior, que es el que todos asociamos a la Gran Barrera de Coral. Primero, el barco navega durante unos 30 minutos para llegar al arrecife y una vez allí comienza la aventura.
Antes de contratar el tour procura elegir una compañía con sello ecológico. La Gran Barrera de Coral está habitada por numerosas especies y lamentablemente está siendo castigada por el cambio climático (más adelante te contamos sobre ello). Por eso mismo, debemos intentar dañarla lo mínimo posible. De hecho, los arrecifes de las zonas más turísticas ya se encuentran bastante dañados. Por otro lado, intenta contratar una empresa que no arme grupos demasiado grandes. Por un lado, te sentirás más cómodo y, por otro, será mejor para el arrecife.
Según el tour que hayas elegido realizarás las inmersiones en una zona u otra. Precisamente, para evitar las aglomeraciones cada barco tiene licencia para hacer inmersiones en un lugar determinado.
Otra alternativa es aprovechar las islas Whitsundays, Magnetic Island o las islas Green y Fitzroy, cerca de Cairns. Allí podrás pasar el tiempo que desees, disfrutando de la arena blanca, haciendo trekkings y explorando la vida marina que hay debajo de esas aguas turquesas. Sin embargo, la experiencia no será comparable con la anteriormente nombrada. El motivo es que, en la zona de Whitsunday, son poco barcos llegan al Arrecife Exterior. Los mejores arrecifes de coral de Whitsundays para hacer snorkel se encuentran a 105 km de Airlie Beach. Por el contrario, desde Cairns es mucho más sencillo explorar el Arrecife Exterior, ya que está situado tan solo a 50 km.
¿Cuál es la mejor época para hacer snorkel?
La Gran Barrera de Coral está ubicada en una zona de Australia conocida como Norte Tropical de Queensland. El clima en esta zona posee una temporada marcada de lluvias, que va desde noviembre hasta abril; y otra seca, que va de mayo a octubre. En la primera temporada hace calor húmedo y las lluvias aparecen de repente. En cambio, en la temporada seca el clima es templado y agradable. De todos modos, hoy el clima se ha vuelto impredecible, por eso, no siempre es seguro que en la época seca no vayas a tener lluvias.
Otra cosa que debes tener muy en cuenta es que la época de lluvias coincide con la temporada de medusas. Por eso mismo, si vas a visitar la Gran Barrera en esta época, asegúrate que la empresa que contrates te provea de los correspondientes trajes de neopreno que protegen de las medusas.
Buceo en la Gran Barrera de Coral
En Cairns hay varios centros de buceo en donde podrás contratar las inmersiones. Lo positivo es que, no es necesario ser un experto en buceo, ya que hay zonas en las que el arrecife no está muy profundo.
Las expediciones salen bien temprano, desde la Marina de Cairns. También, tienes la posibilidad de contratar un Crucero Vida a Bordo, que te permite pasar una o más noches en la Gran Barrera y ver el color flúor de los corales y a los tiburones cazando. Solo una cosa debes saber, para poder acceder a los mejores sitios de inmersiones el barco tiene que navegar toda la noche por mar abierto. El problema está en que, como es de esperar, el barco se mueve bastante, por lo que no olvides llevar píldoras para las náuseas. Una vez en los sitios de buceo solo resta disfrutar de la experiencia y respetar lo que tus guías te indiquen.
Principales puntos de buceo
SS YONGALA: el Yongala era buque que se vio atrapado en un ciclón frente a Townsville, en la costa noreste de Australia, hundiéndose con 122 almas a bordo. El navío permaneció oculto en el fondo del mar hasta que fue descubierto en 1958, a unos 89 kilómetros al sureste de Townsville. El enorme buque descansa sobre un fondo de arena a unos 28 metros de la superficie en su punto más profundo.
En este mismo lugar, se ha creado un ecosistema en sí mismo, encontrándose un montón de vida marina, desde peces payaso hasta tiburones, serpientes marinas y pulpos. Quizá sea uno de los puntos de buceo más famosos de toda Australia. En la parte más profunda es posible ver varios meros de Queensland, famosos por su gran tamaño. Incluso, por su naturaleza curiosa, suelen acercarse por su propia cuenta a los buzos. De todos modos, esta experiencia no es para cualquiera. Por la profundidad a la que se encuentra, solo podrás bucear aquí si tienes un nivel PADI Avanzado o equivalente.
Ribbon Reef, también conocida como la cinta de arrecifes, se ubica a unos 100 km de la costa, al norte de Cairns. Aquí encontrarás varios puntos de inmersión, siendo los más famosos:
- Steve’s bombee: se trata de un gran peñasco de coral, ubicado a 25 metros de profundidad, lleno de vida. Con un poco de suerte, podrás ver los tiburones del arrecife, el famoso pez payaso (cuyo representante más conocido es Nemo) o los grandes Napoleones.
- Clam Garden: esta zona se caracteriza por poseer grandes jardines de coral repletos de ostras gigantes que se cierran con el movimiento. También, son propios de esta zona los tiburones punta blanca y los enormes bancos de peces de colores.
- Norman Reef: es el arrecife más cercano a la costa, que alcanza una profundidad de 27 metros. Allí podrás ver los peces Wally, también conocidos como pez Napoleón.
- Shark feed: aquí es donde ocurre el verdadero espectáculo y donde se realiza la técnica del feeding. Es decir, se atrae a los tiburones lanzándoles comida para que se acerquen a los barcos.
- Snake Pit: este punto del arrecife posee una profundidad de 10-12 metros y las verdaderas protagonistas son las tortugas verdes y tortugas de Coral, las serpientes de mar y los nudibranquios de todos los colores y formas.
Osprey Reef: es otro punto de buceo de la Gran Barrera de Coral, ubicado a 350 km al norte de la ciudad de Cairns. Es el arrecife más lejano de la costa y el más interesante. Sin embargo, no hay tantos centros de buceo que visiten este punto.
Mejor época para bucear en el arrecife
Desde diciembre a febrero el agua es más cálida y la visibilidad es mejor. De noviembre a mayo, la temperatura del agua ronda los 26-29ºC, lo cual implica que también es temporada de medusas. En cambio, desde junio a noviembre la temperatura del agua es más fría, aunque es el periodo más seco, con lluvias escasas.
La ventaja de bucear en la Gran Barrera de Coral durante los meses de junio y julio es que tendrás la oportunidad de ver y disfrutar de las ballenas Minke, que pueden medir hasta 9 metros de largo. Durante estos meses la temperatura del agua puede bajar hasta los 22ºC, pero no hay medusas.
En noviembre tienes la oportunidad de ver el desove de los corales y, si puedes ir más al norte, ver la puesta de huevos de las Tortugas en el extremo Noreste de Australia.
En conclusión, la mejor época para visitar la Gran Barrera de Coral es durante la temporada seca. No solo por el clima, sino también para tener mayor una mayor oferta turística. Como suele coincidir con la época que más turistas llegan a la zona, lo mejor será hacer todas tus reservas con antelación.
Sobrevolar la Gran Barrera de Coral
Otro clásico es sobrevolar la Gran Barrera de Coral y poder apreciarla desde las alturas. Sin dudas, que es la mejor manera de tomar dimensión de la cantidad de colores y formas increíbles que yacen bajo las aguas. Al mismo tiempo, la inmensidad de este ecosistema se abrirá ante tus ojos, en una postal que difícilmente olvides.
Los dos principales lugares desde los cuales podrás tomar vuelos panorámicos por encima de la Gran Barrera de Coral son Cairns y Airlie Beach. Ambas localidades se encuentran separadas por unos 620 kilómetros. Sin embargo, una de las mejores opciones es contratar un vuelo escénico sobre la Gran Barrera y las islas Whitsunday, así puedes disfrutar tanto del coral como de las increíbles islas. Con esta última opción, tendrás unas vistas privilegiadas de los bosques típicos de la zona, el puerto Shute Harbour, las islas Long, Dent y Hamilton (del archipiélago de las Whitsundays) y la playa Whitehaven (además del coral, obviamente).
La Gran Barrera de Coral hoy: los efectos del cambio climático
No es novedad que el rápido avance del calentamiento global poco a poco va devastando ecosistemas imprescindibles del planeta. Lamentablemente, la Gran Barrera de Coral australiana no escapa de este fenómeno. De hecho, hoy se sabe que ha perdido el 50% de sus poblaciones de corales en las últimas tres décadas, como consecuencia del calentamiento global.
Según las declaraciones de Terry Hughes, profesor del Centro de Excelencia ARC para Estudios de Arrecifes de Coral, el número de corales pequeños, medianos y grandes de la Gran Barrera disminuyó en más del 50% desde la década de 1990. Números que alarman y dan nota de la necesidad urgente de frenar la emisión de gases de efecto invernadero.
Un nuevo estudio realizado por la Coral Reef Watch, que se vale de sensores remotos y modelos para predecir y controlar los signos de blanqueamiento en los arrecifes de coral, apoya este informe. Según la Coral Reef Watch el blanqueamiento acontecido en el 2016 y el 2017 fue extremadamente intenso, concentrándose el daño en algunos puntos críticos de las partes norte y central del arrecife australiano. Este evento, produjo una disminución de la población de especies de coral de aguas poco profundas y profundas, siendo los corales ramificados y en forma de mesa los más afectados.
¿Qué es el blanqueamiento de corales? Este fenómeno se da cuando los corales se vuelven blancos, como un modo de respuesta al estrés producido por las altas temperaturas del agua. Es decir, debido a las altas temperaturas, los corales expulsan las algas que crecen dentro de ellos, liberándose así de su principal fuente de energía y color.
Si bien el blanqueamiento no mata el coral inmediatamente, si las temperaturas altas se perpetúan el coral terminará muriendo, destruyendo el hábitat natural de cientos de miles de especies marinas. De hecho, cuando los corales se blanquean, mueren de hambre, se lesionan y se vuelven más sensibles a las enfermedades. La recuperación de los mismos dependerá de cuánto tiempo están sometidos al estrés por el calor, y de la intensidad del mismo.
No es la primera vez que esto sucede, de hecho, la Gran Barrera de Coral se ha enfrentado a otros episodios de blanqueamiento en los últimos años. Sin embargo, el blanqueamiento del 2016 y 2017 ha sido mucho más amplio en extensión que en ocasiones anteriores.
Por otro lado, los expertos afirman que la parte sur del arrecife estuvo expuesta a temperaturas récords a principios de 2020. Según Hughes, el gran tamaño de la barrea de coral australiana no es suficiente para hacerle frente al blanqueamiento. Del mismo modo es contundente al decir que el cambio climático es el gran responsable de la perturbación de los arrecifes, y que no hay tiempo que perder.
Tomará décadas para que la Gran Barrera de Coral se recupere completamente del blanqueamiento sufrido. Lamentablemente, producto de las enormes cantidades de calor que han absorbido los océanos del mundo, probablemente el arrecife no pueda recuperarse antes que aparezca un nuevo fenómeno de blanqueamiento.
Si bien los investigadores de todo el mundo estudian nuevas formas de revivir a los arrecifes, es un hecho que el mundo debe reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero, antes que sea demasiado tarde.
La Gran Barrera del Coral de Australia es un tesoro de la madre tierra y todos somos responsables, en alguna medida, de su cuidado. Ante esto, el conocimiento de su situación actual y las amenazas a las que se enfrenta es indispensable. Si te gustó el artículo, comparte en tus redes sociales así más personas pueden conocer sobre este impresionante ecosistema.