Visitamos Nueva Delhi y sus atractivos

La capital de la India, Nueva Delhi, puede no ser el lugar más bonito del país, pero sí uno de los más auténticos, caóticos y apasionantes a la vez. Llegar a la capital implica sumergirse en un mundo de gente (literal), olores, sabores, ruidos y mil sensaciones. Al principio puede abrumarte, sin embargo, poco a poco comienzas a descubrir su encanto.

Nueva Delhi sin dudas que merece la pena, por eso preparamos esta guía súper completa con todo lo que puedes ver y hacer allí. ¿Estás listo? Comencemos a explorar Nueva Delhi.

Nueva Delhi tiene muchísimos sitios por descubrir que seguramente te harán querer volver a la ciudad (sí, querrás volver a pesar del caos). Después de todo, debes ser consciente de que te encuentras en la India, uno de los países más poblados del mundo. Por eso mismo, lo primero que debes hacer cuando llegues a Nueva Delhi es respirar hondo y adaptarte. Luego, solo resta disfrutar de una ciudad increíble.

Delhi es la capital de la India y uno de los principales centros administrativos, políticos, comerciales y culturales del país. Después de Mumbai, es la segunda metrópolis más grande del país, con una población aproximada de 18 millones de habitantes. 

¿Cómo llegar a Nueva Delhi?

Al ser la capital nacional, Nueva Delhi posee excelentes conexiones por vía aérea, férrea y por carretera. Por eso mismo, llegar a ella no representa grandes problemas. 

La mayoría de los viajeros llegan a Nueva Delhi por vía aérea, ya que su aeropuerto (Aeropuerto Internacional Indira Gandhi) es el que mejores conexiones domésticas e internacionales posee de todo el país.

Para ir desde el aeropuerto al centro de Nueva Delhi la mejor opción es el tren Airport Express Metro, que parte desde la Terminal 3. El pasaje cuesta algo de 60 rupias (0,72 EUR) y demora únicamente 20 minutos en llegar al centro de la ciudad. También dispones de autobuses, pero en ese caso el viaje es un poco más largo (algo de 60 minutos) y cuesta 50 rupias (0,60 EUR). La opción más rápida y más cara a la vez son los taxis, que cuestan alrededor de 400 rupias (4,8 EUR).

Si prefieres moverte por vía terrestre, debes saber que Delhi es el punto desde el cual parten muchas de las rutas en tren que recorren el país. La estación principal es New Delhi, a la cual se le suman Old Delhi y Nizamuddin. 

Nueva Delhi también posee muy buenas conexiones por carretera, por lo que alquilar un coche es también una buena opción. El acceso a la ciudad se realiza por la ruta 48 y por la autopista Yamuna, viniendo desde la ciudad de Agra.

Finalmente, la India posee una red de autobuses interurbanos que llegan a las diferentes estaciones de Nueva Delhi. Si viajas desde el sur lo más habitual es llegar a la estación Sarai Kale Khan. En cambio, desde Calcuta u otras ciudades del este lo más seguro es arribar a la estación AnandVihar, que está conectada con el centro por una línea de metro. 

¿Cómo moverse por Nueva Delhi?

Moverse por Nueva Delhi es toda una aventura a la que deberás acostumbrarte. El tráfico de la ciudad es caótico, suele estar lleno de colapsos que hacen perder tiempo y conductores apurados. A ello se le suman los taxistas, que muchas veces buscan aprovecharse del turista inexperto.

Sin embargo, siempre hay una luz de esperanza en el camino. Nueva Delhi posee un sistema de metro eficiente, económico y limpio que abarca gran parte de la ciudad. Es un sistema de transporte ideal para moverse por la ciudad, que únicamente se satura de gente en las horas pico del día.

Un dato curioso del metro de Nueva Delhi es que posee un vagón reservado exclusivamente para las mujeres. De ese modo, si viajas sola podrás sentirte segura durante el viaje. Si vas en pareja, no será ningún problema hacerlo en el resto de los vagones en los cuales predominan los hombres.

El billete de metro cuesta algo de 30 rupias (0,36 EUR) y cada viaje implica obtener una nueva ficha. Si vas a pasar varios días en la ciudad, puedes comprar la tarjeta “Smart Card” que cuesta unas 100 rupias (1,2 EUR) y te permite ahorrar un poco en tarifas y evitarás las colas. Otra opción es sacar la tarjeta “Tourist Card”, que te permite usar el metro todas las veces que quieras (cuesta 200 rupias por un día o 500 rupias por 3 días). 

Otra de las formas que tienes para moverte en Nueva Delhi son los tuk tuk. Estos llamativos triciclos motorizados llenan la ciudad de color verde y amarillo. Un consejo que te damos si vas a vivir la experiencia de moverte de esta manera es acercarse hasta ellos con un policía, de modo que se vean obligados a prender el taxímetro y cobrarte lo que corresponde. 

Por último, no podemos dejar de mencionar a los rickshaws, unos triciclos a pedales que llevan turistas y locales de un lado a otro. Son parte de la esencia de Nueva Delhi y, a pesar de ser poco recomendables para distancias largas, todo viajero debería viajar en ellos al menos una vez.

¿Cuántos días se necesitan para conocer Nueva Delhi?

La mayoría de los viajeros pasan únicamente un día en Nueva Delhi. Ese tiempo es suficiente para ver sus sitios más emblemáticos, aun así, conviene quedarse más tiempo y sacarle el verdadero provecho a la experiencia. Nuestra sugerencia es (siempre y cuando tengas el tiempo), que pases al menos 2 o 3 días explorando la ciudad, disfrutando de su gente y amigándote con el ambiente.

¿Qué ver en Nueva Delhi?

A continuación te contamos cuáles son los atractivos más importantes de Nueva Delhi. Algunos son gratuitos y otros de pago, sin embargo, cada uno tiene su encanto y su motivo por el cual merece la pena visitarlo.

Tumba de Humayun

Comenzamos hablándote de uno de los atractivos estrellas de la ciudad, el monumental mausoleo de Humayun y fuente de inspiración del famoso Taj Mahal. La tumba donde yace el segundo monarca del Imperio Mogol es un lugar único, mucho menos famoso que el Taj Mahal, pero igual de interesante. 

Antes de seguir contándote sobre esta maravilla arquitectónica te ponemos en contexto y te contamos quién fue Humayun. Humayun era hijo del primer Emperador Mogol (Babur), nacido en el Valle de Fergana (actual Uzbekistán). Babur logró sobrevivir a la extinción de su estirpe, huir y establecerse en Kabul. Desde allí partió, en 1527, para hacerse con el poder de la India del Norte y atacar al Sultán de Delhi.

Su hijo Humayun no pudo contra la resistencia de los Rajás, por lo que debió huir a Persia. Una vez allí, siguiendo los pasos de su padre, reunió un ejército y regresó a la India para recuperar su trono y mantener así la continuidad de un imperio que durante un largo tiempo imperaría en el país.

Lo irónico de la historia de este poderoso emperador fue la forma de su muerte. Resulta, que quien parecía indestructible falleció por su afán de leer. Así como oyes, Humayun se encontraba en su biblioteca y fue a buscar uno de sus libros. Para eso debió subirse a una escalera y tuvo la mala suerte de caer y morir al instante. Años después, su esposa Hamida Begum se encargó de construir un mausoleo para honrar a su amado. 

Ahora sí, centrémonos en el mausoleo (no podemos evitar contarte un poco la historia de los sitios que visitamos). Como ya lo sabes, el complejo alberga la tumba del Rey Humayun y toda la familia real. Es un claro ejemplo de arquitectura mogol y es considerada la primera tumba-jardín de la India.

La fecha exacta de su construcción se desconoce, pero se cree que fue levantado unos 75-80 años antes que el Taj Mahal. En su diseño se aprecian claras influencias persas, indias y árabes, lo cual hace que sea verdaderamente único. Su estructura tiene forma octogonal y los elementos principales son la arenisca roja y el mármol blanco y negro, por encima de los cuales predomina una cúpula blanquecina.

En 1993 la Tumba de Humayun fue declarada Patrimonio de la Humanidad. El complejo alberga otras tumbas, mausoleos, mezquitas y construcciones que dan como resultado un espacio que transmite armonía y paz.

Fuerte Rojo

Otro de los sitios declarados Patrimonio de la Humanidad de Nueva Delhi es el Fuerte Rojo, que día tras día atrae a miles de turistas. 

El Fuerte Rojo lleva este nombre por el color de la piedra arenisca utilizada para su construcción, hecho que tuvo lugar entre los años 1638 y 1648. Se trata de un antiguo fuerte mogol que es considerado como uno de los platos fuertes de la ciudad, en parte por sus enormes murallas de más de 6 km de largo y 30 metros de alto (en algunos tramos). 

El acceso al fuerte se realiza por dos puertas principales: la puerta de Delhi y la de Lahore. La segunda es la principal y lleva este nombre por su orientación hacia la ciudad de Lahore. Ni bien ingreses al recinto aparecerá Chatta Chowk, un bazar lleno de tiendas en donde los turistas suelen hacer su primera parada. 

Al sur del complejo se encuentran dos pabellones que corresponden a las dependencias de las mujeres y un tercer pabellón en donde se ubican los aposentos imperiales. Otro de los atractivos es la Mezquita de la Perla, que fue construida en 1959 en mármol blanco, los preciosos jardines y el Templo jainista de Digambara.

El horario de visita del Fuerte Rojo es todos los días de 9:30 am a 4:30 pm y la entrada cuesta 500 rupias (6 EUR), más 25 rupias que deberás pagar en caso de que desees tomar fotografías.

Templo de Akshardham 

Otro de los lugares más espectaculares para visitar en Nueva Delhi es Akshardham, el templo hindú más grande del mundo. Se encuentra ubicado cerca del río Yamuna, al este de la ciudad, y es un espacio clave para la espiritualidad de la India. 

Se trata de un enorme complejo de templos inaugurado en el 2005 con la finalidad de mostrar la cultura india. La visita te permitirá experimentar las tradiciones y espiritualidad de la India en cada uno de sus rincones, gracias a las muchas esculturas talladas en mármol y piedra roja. Contribuyen también al encanto del sitio las cinco figuras talladas en oro ubicadas bajo la cúpula central del templo, así como los más de 100 elefantes tallados en piedra que verás en la base principal del recinto. 

El edificio principal es Akshardham Mandir, que tiene 43 metros de altura y fue construido con piedra rosada rajastaní (un símbolo de pureza y paz) y mármol proveniente de las canteras de Carrara (Italia). En su interior, bajo la gran cúpula central, podrás apreciar la estatua de Swaminarayan, que a su vez está rodeada de otras más pequeñas dedicadas a diferentes deidades del Hinduismo.

Además, el complejo cuenta con un extenso jardín en donde podrás dar largas caminatas y paseos en bote. De hecho, es tanto lo que puedes hacer y ver allí que tranquilamente puedes pasar medio día recorriéndolo a fondo. 

Una aclaración que vale la pena hacer es que los móviles y las cámaras de fotos están prohibidas (deberás dejarlos en la entrada y recogerlos a la salida). La ventaja es que la entrada es totalmente gratuita.

Mezquita Jama Masjid

La India es un país en donde conviven tres grandes religiones: el Islam, el Hinduismo y el Budismo. Por eso mismo, no debe sorprenderte el hecho de encontrar mezquitas junto a templos hinduistas y budistas. En este sentido, la mezquita Jama Masjid es una de las más grandes e impresionantes de toda Asia, por lo que tampoco debería quedar fuera de tu ruta por Nueva Delhi. 

La impactante mezquita Jama Masjid posee un interés arquitectónico y religioso especial, tal como comprobarás ni bien llegues al lugar. Su construcción ocurrió entre los años 1644 y 1656. El sitio elegido para levantarla fue una pequeña colina que permitiría obtener hermosas vistas de la parte vieja de la ciudad. Consta de tres grandes puertas, dos minaretes de 40 metros de altura, cuatro torres y un impresionante patio central con capacidad para albergar a 25.000 personas.

El acceso es gratuito siempre y cuando no lleves cámara de fotos (en caso de querer tomar fotografías deberás pagar un ingreso). Una vez que llegues al patio central te encontrarás con la zona de oración en donde los musulmanes llevan a cabo diferentes prácticas. Definitivamente es una visita interesante para acercarte a esta religión.

Gurudwara Bangla Sahib

Otro templo que es muestra del crisol de culturas y religiones que conviven en la ciudad es Gurudwara Bangla Sahib. Se trata del principal templo Sij de Nueva Delhi, una religión que surgió en la India en el año 1500 tras un conflicto entre el Hinduismo y el Islam.

Este hermoso templo construido en mármol es un sitio que desde el primer momento te transmitirá paz, por lo que no dudes en visitarlo. Está ubicado en las inmediaciones de la zona conocida como Connaught Place y destaca por su cúpula dorada y una piscina sagrada muy fotogénica. La entrada es gratuita y (al igual que la mayoría de los templos de la ciudad), implica respetar las normas de vestimenta y respeto.

Entre sus numerosas estancias destaca la sala de oración, una escuela, una galería de arte y un comedor al cual puede asistir cualquier invitado, independientemente de la religión que profese. Por su parte, el enorme estanque está rodeado de un camino decorado con dibujos geométricos de colores vivos.

Main Bazaar

No puedes irte de Nueva Delhi sin visitar alguno de sus bazares, puesto que allí se aprecia verdaderamente la esencia de la ciudad. La calle Main Bazaar está situada en el barrio mochilero de Paharganj y es uno de los mercados más conocidos de la capital.

Allí encontrarás lo que busques, desde esculturas de budas hasta la mejor comida callejera. Lo mejor es ir con tiempo y con calma, puesto que los vendedores se acercarán a ti todo el tiempo queriendo ofrecerte sus productos. La calle puede ser un poco caótica, pero es clave para comprender el ritmo de la ciudad. Allí las personas se mezclan con rickshaws, tuk tuks y animales. Además, desde esta calle principal salen las callejuelas más estrechas del barrio que también son muy auténticas.

Connaught Place

Cerca de Main Bazaar te toparás con la zona más occidental de la ciudad. Hablamos de la Plaza de Connaught y todo lo que gira alrededor de ella. Su construcción se remonta a la época de la ocupación británica, por lo cual posee una arquitectura colonial victoriana muy bonita. Toda la zona que la rodea representa uno de los centros financieros y comerciales más importantes de Nueva Delhi.

Podríamos decir que esta plaza es el verdadero centro neurálgico de la ciudad, ya que en torno a ella se concentran numerosas tiendas, restaurantes, hoteles, un parque central y mucho más. En la zona también se encuentra la avenida Rajpath, la más grande de Delhi, en la cual verás los edificios del gobierno y la gran Puerta de India. En otras palabras, Connaught Place sería como el km 0 a partir del cual conviene desandar la ciudad.

De los sitios que ya te mencionamos, el templo Sij Gurudwara Bangla Sahib se encuentra en esta zona, por lo que no deberás recorrer mucho para llegar él. Otro de los atractivos alrededor de la plaza es el Parque Central, ubicado muy cerca de la mítica estación de metro Rajiv Chowk. Los amantes de las compras se darán un festín en los shoppings de la zona, en el centro comercial Palika Bazar y en las muchas tiendas donde podrás comprar artículos artesanales, saris y sedas. Finalmente, si te gusta el arte puedes disfrutar de la galería Indian Atrs Palace.

Puerta de la India de Nueva Delhi

Uno de los monumentos más famosos de Nueva Delhi es la Puerta de la India, construida en memoria a los soldados que perdieron su vida en la Primera Guerra Mundial.

La encontrarás sobre la avenida Rajpath y te será difícil no divisarla a la distancia. La piedra angular fue colocada en 1921 y su construcción llevó 10 años. En 1971 fue colocada allí la llama eterna, conocida como la “llama del guerrero inmortal”, que recuerda a los soldados muertos en el enfrentamiento entre India y Pakistán ocurridos ese mismo año. Sin dudas otro emblema de la ciudad que merece la pena ser visitado.

Lodhi Gardens

Si deseas escapar un rato de la vorágine de la ciudad, el mejor lugar son estos jardines ubicados en el corazón de Nueva Delhi, que albergan diferentes tumbas y monumentos.

Lodhi Gardens abarcan una extensión de 360.000 m² y cuentan con sendas que permiten dar paseos en medio de la naturaleza y conducen a diferentes tesoros culturales. Los jardines comenzaron a nacer como tal en 1494, con la construcción de la tumba de Mohammed Shah, el último de los líderes de la dinastía Sayyid. A medida que el tiempo transcurrió, cada nuevo dirigente fue adaptando el espacio a sus necesidades (por ejemplo, los mogoles usaron el área como un observatorio). Finalmente, la mujer del gobernador de la India rediseñó estos jardines en 1936 englobando todos sus monumentos.

Algunos de los muchos antiguos palacios y tumbas que encontrarás allí son, por ejemplo, la tumba de Mhammed Shah (el tercer sultán de Nueva Delhi), ubicada en la entrada suroeste del parque. También destaca la Gran Cúpula, considerada la más antigua de la ciudad o la Tumba de Sikandar Lodh, un mausoleo de estilo indio-islámico de planta octogonal. 

Qutab Minar 

Otro de los sitios declarados Patrimonio de la Humanidad de Nueva Delhi es este minarete de ladrillos, considerado el más alto del mundo. 

Esta impresionante torre de más de 72 metros de altura tiene 5 pisos distintos marcados por balcones. Su construcción se inspiró en el Minarete de Jam de Afganistán y empezó en 1193, demorando más de 160 años en terminarse. Se trata de una clara muestra del arte islámico, ya que sus 5 plantas fueron diseñadas de forma diferente y poseen versos del Corán tallados en sus paredes de piedra arenisca roja.

Decididamente, es otro de los sitios de la ciudad que no puedes perderte. Además, muy cerca se encuentra la mezquita Quwwat y las ruinas del imperio hinduista que gobernó la región hasta la llegada de los mogoles.

Templo de Loto

Estamos finalizando nuestro recorrido por Nueva Delhi, pero todavía nos quedan dos lugares más de los que queremos hablarte. 

Uno de ellos es una de las construcciones más llamativas y peculiares de la ciudad. Hablamos del Templo de Loto o Casa de Culto Bahai, un centro de oración y meditación que impresiona por su diseño. 

Con solo verlo desde lejos comprenderás el por qué de su nombre, puesto que te encontrarás con un edificio con forma de flor de loto blanca semiabierta. El mismo posee 27 pétalos de mármol y una enorme sala en su interior totalmente vacía. La misma es una muestra de austeridad y hace referencia a los 3 principios en los que se fundamenta el bahaísmo: la unidad de la humanidad, la unidad de Dios y la unidad de la religión.

Por eso mismo, cualquiera puede acceder a este templo, descalzarse y sentarse en silencio para meditar.

Raj Ghat

Para el final dejamos la frutilla del postre. El Raj Ghat no solo es uno de los sitios más tranquilos que encontrarás en la ciudad, sino también el lugar en donde Mahatma Gandhi pasó sus últimos días de vida.

Mahatma Gandhi fue asesinado el 30 de enero de 1948, pero antes, dio sus últimos pasos en este hermoso jardín que hoy puedes visitar. Allí encontrará un museo donde se exponen fotos y objetos del líder espiritual y personaje clave en la independencia de la India. Una de las curiosidades del mausoleo, es que se puede leer allí la frase “Hey Ran” (Oh Señor), que fueron las últimas palabras que pronunció antes de morir.

Ahora sí, hemos llegado al final de este recorrido completo por Nueva Delhi. Seguramente pudiste ver que la ciudad está llena de atractivos que harán de tu visita una experiencia inolvidable. Como te dijimos al principio, no es el destino más popular de la India, pero sí un enclave necesario para comprender al país. Si ya conoces Nueva Delhi, cuéntanos tu experiencia en los comentarios, estaremos encantados de leerte.