La Laguna Magdalena es un espejo de agua de 7 hectáreas puro y libre de contaminación, situado en el corazón del Parque Nacional Natural Puracé. Su importancia se debe a que de ella nace el río Magdalena, el más importante de Colombia.
Llegar a esta laguna no es tan sencillo, necesitarás al menos 12 horas y un espíritu aventurero (y, por sobre todo, ganas de caminar). Sin embargo, creemos que la experiencia es una oportunidad única para conocer otra cara de la geografía colombiana. ¿Te animas a vivir la experiencia?
Colombia es un país diverso, lleno de escenarios naturales que invitan a contemplar la naturaleza. La Laguna Magdalena es uno de ellos. La misma se encuentra situada en el Páramo de las Papas (también llamado nudo de Paramillo), en el interior de un cráter gigantesco de un volcán extinto localizado en la Cordillera Central. Concretamente, se halla a 3.327 metros de altura, en el punto donde la Cordillera de los Andes se desprende de otras 3 cordilleras colombianas.
El paisaje donde está inmersa la Laguna Magdalena es propio de una zona de páramo. La densa bruma se cuela entre frailejones, musgo y encinillos y se pierde en la laguna, regalando una postal de película. Con un poco de suerte, la belleza de la imagen se acrecienta con la presencia del Cóndor de los Andes, una ave que puede llegar a medir hasta 3 metros de largo de un ala a la otra.
El Parque Nacional Puracé, de 83.000 hectáreas, es el sitio donde se sitúa el páramo de las Papas y, por ende, la Laguna Magdalena. La importancia de este espacio protegido es vital para la población colombiana, puesto que el río Magdalena (el cual nace de la laguna), atraviesa casi todo el territorio nacional y de él dependen más de 30 millones de personas. Se trata, nada más y nada menos, que de la mayor fuente de agua dulce para la producción colombiana.
¿Qué esperas para conocer la hermosa laguna que da origen a este importante río?
Río Magdalena: el más importante de Colombia
Es difícil imaginar que el 80% del país necesita del agua que nace de la Laguna Magdalena. Este caudaloso río se extiende a lo largo de 1.540 km y recorre casi la totalidad del territorio nacional, hasta desembocar en el Mar Caribe, en Bocas de Ceniza. En su nacimiento el curso de agua es apacible y fresco. Sin embargo, una vez que baja el macizo del Nudo de las Papas, alcanza un tamaño realmente descomunal.
Si bien es el más importante, no es el único que nace de la Laguna Magdalena, sino que otros tres ríos se originan a partir de ella: Cauca, Caquetá y Patía. A su vez, a 2 km se encuentra la Laguna de Santiago, cuyo desagüe es el primer afluente del río Magdalena. Este sistema de manantiales se ve rodeado de parajes y caminos de mucha belleza natural, lo cual le suma riqueza paisajística.
¿Por qué el río Magdalena es el más importante de Colombia? Para que te hagas una idea de ello, más del 70% de la producción agrícola del país se abastece de estas aguas; a la vez que la producción hidroeléctrica depende en otro 70% de este río. Lo más sencillo es comparar a Colombia con el cuerpo humano y al río Magdalena con su arteria principal. Dicho de otro modo, se trata de una estructura viva de crucial importancia para el país.
Por la importancia del río y su nacimiento, en 1979 fue declarado por la UNESCO como Reserva de la Biosfera del Cinturón Andino. De ese modo, se protege toda la vida que se desarrolla en torno a él. Especies como los pumas, venados, coatíes, osos, tucanes andinos, pericos de páramo y muchas más dependen de este ecosistema.
Lamentablemente, el río Magdalena no escapa del daño constante que el hombre produce sobre los recursos naturales. Tan solo 36 km después de su nacimiento, la contaminación se hace presente. De hecho, se cree que hasta su desembocadura los 500 afluentes y 5.000 arroyos que lo nutren se encuentran contaminados.
Asimismo, se estima que un 77% de la cobertura vegetal de la cuenca del río ha sido deforestada (el 42% se produjo en las tres últimas décadas). A esto se suma la erosión, que alcanza casi el 80% de área de la cuenca, y la producción de sedimentos en suspensión. ¿Qué significa esto? Que el río transporta más de 180 toneladas de partículas de tierra y desechos cada año, posicionándose como el décimo más sedimentado del mundo. Indudablemente, el deterioro de la cuenca del Magdalena representa un serio problema para Colombia.
Parque Nacional Puracé
Declarado Reserva de la Biosfera en 1979, el Parque Nacional Natural de Puracé se encuentra situado entre los departamentos del Cauca y Huila. Su atractivo como destino turístico radica en la gran variedad de ecosistemas que alberga. De ese modo, podrás encontrarte con picos nevados, lagos, páramos, volcanes y piscinas termales. Su extensión es tal, que si uno quisiera caminar el parque completo necesitaría entre 10 y 12 días.
El Parque Nacional del Puracé abarca dos regiones. En la zona norte es donde se encuentran los volcanes, mientras que la zona sur tiene como centro el Páramo de las Papas y alrededor de 30 lagunas, entre ellas, nuestra protagonista de hoy. Como ya sabes, de sus partes más altas nacen los ríos más importantes de Colombia.
El parque se encuentra situado en una zona volcánica, tal como lo demuestran la gran cantidad de manantiales de azufre que hay repartidos en su territorio. De hecho, su nombre en quechua significa «montaña de fuego» y, en este sentido, debemos mencionar el Complejo Volcánico Serranía de los Coconucos. El mismo alberga 15 cráteres volcánicos, siendo el más destacado el Pan de Azúcar (a 5.000 metros sobre el nivel del mar) y el Puracé (a 4.637 metros de altura). Este último es el único activo de todo el sistema volcánico.
Como resultado de esta actividad volcánica se forman los termales de San Juan, que tienen un total de 52 afloramientos de agua termal.
El Parque Nacional Puracé es uno de los pocos lugares en Colombia en el cual el Cóndor de los Andes se mueve libremente en su hábitat natural. Esta ave, emblema nacional de Colombia, se encuentra en peligro de extinción y es una más de las muchas especies amenazadas que hay en el territorio nacional.
Respecto a su flora, en las inmediaciones de la Laguna Magdalena y otras áreas del parque podrás ver los hermosos frailejones y algunas especies amenazadas, como la palma de cera, el roble y el pino colombiano. A ello se suma una gran cantidad de especies endémicas, como los arbustos enanos, las rosetas gigantes y las gramíneas cespitosas.
El parque es habitado por diversas comunidades indígenas, siendo la más grande Coconuco, la cual brinda servicios de hospedaje, restaurantes y guía turístico a los visitantes. Además de visitar la Laguna Magdalena, las caminatas guiadas por el parque tienen otros destinos. Entre ellos, cabe mencionar el volcán del Puracé, la Cascada de San Rafael, la laguna del Buey, el Valle de Frailejones, entre otros.
¿Cómo llegar a la Laguna Magdalena?
Llegar a la Laguna Magdalena es toda una travesía, por ende, podría decirse que la aventura comienza desde el momento en que comienzas a transitar el camino hacia este espejo de agua.
Respondiendo a la pregunta, a la Laguna Magdalena se llega transitando un sendero montañoso sumamente vistoso. Para eso, puedes partir desde dos lugares diferentes: San Agustín Huila o Popayán.
Desde Popayán
Popayán, la capital del Cauca, es accesible por vía aérea desde varias ciudades del país, incluyendo la capital, Bogotá. También es posible llegar por vía terrestre, ya que es atravesada por la Vía Panamericana, la principal carretera de Colombia.
Si tu punto de partida es Popayán, deberás viajar primero a la vereda de La Hoyola, en el corregimiento de Valencia. El mismo se encuentra ubicado en el municipio de San Sebastián, en Cauca, a unas 6 horas de Popayán.
Desde allí, te espera una caminata de unas 3 horas a través del Parque Nacional Puracé. Aunque, antes de ver la laguna, llegarás al Páramo de las Papas.
Desde San Agustín
La ruta por San Agustín es la preferida de prácticamente todos los viajeros. ¿Por qué? Por la enorme cantidad de paisajes que el macizo colombiano ofrece partiendo desde este punto. Entonces, nuestra sugerencia es que hagas esta ruta y te dejes maravillar por la geografía colombiana.
Desde San Agustín puedes conducir en tu propio coche o tomar una chiva (unos camiones de carga típicos de Colombia) hasta la vereda Villa Fátima, ubicada a 30 km. Desde aquí en adelante comienza una caminata muy extensa, que puedes hacer también contratando un transporte a caballo.
Camino Nacional de Quinchana
A partir de ahora es cuando comienza la parte más emocionante del viaje. El Camino Nacional de Quinchana, más conocido como Camino Nacional de las Papas, es el que finalmente te llevará a la Laguna Magdalena.
El primer tramo de la ruta son 5 horas de caminata hasta la vereda San Antonio. Una vez allí, podrás elegir un hospedaje de montaña para pasar la noche y recargar las energías. La ruta del segundo día te llevará hasta el Parque Nacional Puracé.
En esta jornada de caminata pasarás por diferentes lugares hasta llegar al puente de Santa Marta, el cual cruza el río Magdalena y marca la entrada al parque nacional. Una vez dentro, la ruta continúa hasta una pequeña quebrada que nace en la Laguna de Santiago, pasando antes por varios puntos interesantes.
Más adelante, verás que el camino presenta una bifurcación conocida como la “Y”. Aquí tienes dos opciones: seguir por el camino viejo o por el más reciente. Los dos conducen al mismo destino, con la diferencia de que el nuevo es más sencillo y pasa por el Páramo de las Papas, que es donde se encuentra la Laguna del Magdalena (en el corazón del Parque Nacional Puracé).
El camino nuevo se extiende en línea recta a través de todo el páramo y desde algunos puntos regala unas vistas muy bonitas de la Laguna Magdalena. En determinado momento llegarás al punto en el cual confluyen los caminos nuevo y viejo y, luego, a la vereda La Hoyola (Cauca), donde hay una cabaña de control y vigilancia del Parque Natural Puracé.
En La Hoyola podrás pasar la noche, para el día siguiente visitar finalmente la Laguna Magdalena. El camino te llevará hacia este famoso cuerpo de agua, a la vez que te permitirá ver el nacimiento del río homónimo.
¿Qué hacer en la Laguna Magdalena?
El turismo de la Laguna del Magdalena está puramente relacionado con el disfrute de la naturaleza. Aquí encontrarás paisajes hermosos que logran escapar de los daños causados por el hombre. Además, si haces la visita en la época del florecimiento de los frailejones, el paisaje tendrá todavía mayor encanto.
En la Laguna Magdalena podrás recorrer la zona caminando y avistar la flora y fauna silvestre. No dejes de dar la vuelta completa al cuerpo de agua y ver el lugar exacto en donde nace el río. Aquí, el poderoso río Magdalena tiene apenas 1 metro de ancho, algo que realmente sorprende si tienes en cuenta las dimensiones que alcanza al salir del páramo. Cuando veas el nacimiento, te costará creer que desde allí se desprende la arteria más importante de Colombia.
Además, podrás combinar el paseo con otros atractivos interesantes, como el Estrecho del Magdalena, la cascada de los Tres Chorros, el nacimientos de los ríos Caquetá y Cauca o los termales de Coconuco. Por supuesto, todo dependerá del tiempo con el que cuentes, aunque pasar un par de días recorriendo otros atractivos del parque es un excelente plan.
Ten en cuenta que el páramo en donde se ubica la laguna se caracteriza por su clima frío, su neblina (muchas veces constante, otras veces transitoria) y la llovizna. Por ende, es fundamental que lleves ropa de abrigo, calzado adecuado y una campera para la lluvia.
San Agustín y Popayán: dos visitas complementarias a la Laguna Magdalena
Antes te contamos que el inicio del largo camino a la Laguna Magdalena puede hacerse desde estas dos localidades. Lo que no te contamos, es que son el complemento de viaje perfecto, puesto que cada una tiene grandes tesoros que vale la pena descubrir. Por eso, nuestro consejo es que antes o después de visitar la laguna, hagas una parada de uno o dos días en la localidad que más cómoda te quede.
San Agustín
San Agustín es la capital arqueológica del departamento de Huila y un destino mágico que vale mucho la pena conocer. Su riqueza está dada fundamentalmente por su historia, que cuenta que hace más de 5.000 años la zona estuvo habitada por dos culturas indígenas ancestrales. Ambas estaban separadas por enormes montañas y ríos, aunque eso no les impidió hacer una ruta comercial para transportar las mercancías que llegaban a San Agustín.
Visitar el Parque Arqueológico de San Agustín te permitirá conocer esta historia en profundidad. Aunque, no es el único atractivo de este destino, que tiene como principal ventaja su ambiente acogedor, alejado del turismo de masas. El hecho de que no forme parte de la ruta habitual por Colombia hace que puedas pasear con tranquilidad por sus calles y tomar contacto con los locales. Si eres amante de la arqueología, sin dudas deberías visitar San Agustín.
Además de pasear por el pueblo y visitar el Parque Arqueológico, si tienes tiempo puedes aprovechar y conocer otros atractivos cercanos. Entre ellos podemos mencionar los Parques Arqueológicos Alto de las Piedras y Alto de los Dioses, El Purutal, La Chaquira, el Estrecho del río Magdalena y algunas cascadas cercanas, entre otros.
En otras palabras, hay muchísimas cosas para ver y hacer en San Agustín y sus alrededores, de manera que puedes pasar 2 o 3 días recorriendo la zona y no aburrirte en ningún momento. Ten en cuenta que la visita al Parque Arqueológico de San Agustín puede llevarte tranquilamente medio día, de allí que necesitarás más tiempo para conocer otros sitios arqueológicos.
Estrecho del Magdalena
De todos los atractivos que hay en San Agustín, queremos hablarte con más detalle de este, dado que está muy relacionado al río del cual ya te hemos hablado. Tal como lo indica su nombre, este atractivo natural se forma cuando el río se ve obligado a reducirse y pasar entre las rocas que forman un canal de poco más de 1,5 metros de ancho.
El Estrecho del Río Magdalena se encuentra apenas a 9 km de San Agustín, aunque el mal estado de la carretera hace que se demore entre 30 y 40 minutos en llegar. A pesar de eso, vale mucho la pena por la belleza del entorno. Además, en este tramo las aguas del río adquieren un sorprendente color verde claro y una pureza que no se observa en otros tramos del río.
Las aguas anteriores y posteriores al estrecho se utilizan para 2 famosas rutas de rafting. La primera es de grado 4 y corre desde el sitio Mulales a El Estrecho. La segunda, en cambio, es de grado 5 y se extiende desde El Estrecho hasta el Puente de Sombrerillos. Si buscas un poco de adrenalina, ya sabes en dónde encontrarla.
Popayán
Popayán es conocida como la Ciudad Blanca y es otro destino de Colombia por el que deberías pasar. Su arquitectura imponente y ancestral, sus tradiciones y sus festividades son algunos de los platos fuertes de esta localidad, que tampoco recibe turismo de masas.
¿Sabías qué? A Popayán también se la conoce como la Ciudad Fecunda, ya que es el enclave que mayor número de presidentes ha dado a Colombia, además de una gran cantidad de poetas y escritores. Por otro lado, su apodo de Ciudad Blanca se lo ganó en el siglo XX, cuado los frentes de las viviendas eran de color blanco. Al día de hoy, la mayoría de las construcciones de la ciudad siguen siendo de este color.
Popayán es la capital del departamento de Cauca y es un destino pacífico y encantador que enamora gracias a su arquitectura colonial bien conservada. Pasear por sus calles estrechas y empedradas, a la vez que vas descubriendo sus edificios históricos, es un verdadero placer.
Por otro lado, se la conoce como la capital religiosa de Colombia, gracias a las animadas procesiones y celebraciones que cobran vida durante la Semana Santa. Alrededor de la ciudad hay varios miradores, un curioso mercado indígena y muchos museos. En definitiva, en Popayán también encontrarás un gran número de cosas por hacer. ¿Qué esperas para conocerla?
Colombia es un país emocionante que amerita un viaje de unos cuantos días (y que es mucho más que sus paradisíacas playas). Por eso, si tienes en mente conocer este destino, agenda la Laguna Magdalena en tu itinerario. Aquí tendrás una buena dosis de naturaleza y tranquilidad, todo lo que se necesita para descansar un poco de la rutina y despejar la mente. Si eres amante de los paisajes agrestes, la montaña y el avistamiento de flora y fauna, sin dudas que la Laguna Magdalena es para ti.
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