El Parque Nacional de Doñana es una de las reservas de humedales más importantes de Europa y un sitio importante para las aves migratorias. Algunas de las características que hacen única al parque Doñana, es su clima mediterráneo con influencias atlánticas, situación geográfica entre dos continentes, excepcional productividad, inaccesibilidad y diversidad de ambientes.
Es un área inmensa, el propio parque y el espacio natural que rodea al parque Doñana suman más de 1,300 km2 en las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz. Es internacionalmente reconocida por su gran riqueza ecológica. Doñana se ha convertido en un centro clave en el mundo del conservacionismo.
El parque Doñana es bien conocido por su enorme variedad de especies de aves, ya sean residentes permanentes, visitantes invernales del norte y centro de Europa o visitantes estivales de África, como sus numerosos tipos de gansos y coloridas colonias de flamencos. Tiene una de las colonias más grandes del mundo de águilas imperiales españolas. El parque en su conjunto comprende tres tipos distintos de ecosistemas: las marismas, el matorral mediterráneo y las dunas móviles litorales con sus playas.
Fue reconocido como Reserva de la Biosfera por el Programa El Hombre y la Biosfera de la UNESCO en 1981. Si te intriga visitar uno de los humedales más grandes y conocidos de España, quédate en este artículo donde te daremos todos los datos para explorar y visitar el parque Doñana.
¿Cómo se puede visitar el parque Doñana?
La entrada al parque está estrictamente controlada. No se permiten vehículos de motor no autorizados. Puedes visitar los escondites de aves y explorar los alrededores a lo largo de paseos marítimos desde los diversos centros de visitantes. También puedes realizar excursiones de medio día al parque con guías oficiales y empresas de turismo.
Centro de Visitantes de El Acebuche
Para visitar el principal centro de visitantes de El Acebuche, hay que tomar la A-483 al sur de Almonte y a unos 12 km de El Rocío se encuentra el desvío señalizado en el Km. 37.8 hacia el Centro de Recepción El Acebuche.
Alternativamente, puedes conducir 3 km al norte de Matalascañas hasta el desvío en el Km 37.8. El centro cuenta con una exposición sobre el parque, una cafetería y una tienda de mapas y libros. Desde el centro parte un sendero señalizado de 5 km entre monte bajo y pinares. Junto al centro se encuentra la laguna El Acebuche, con observatorios de aves, donde se pueden observar gallinetas moradas, entre otras aves.
Un corto paseo te lleva a la laguna de El Acebuche, que está dominada por siete grandes escondites de madera. La laguna es a menudo el mejor lugar para ver patos ferruginosos y calamones morados, entre muchas otras aves acuáticas. Un sendero de paseo marítimo atraviesa el bosque y los matorrales hacia el oeste, hay más escondites y, por lo general, muchas aves.
Centro de Visitantes de La Rocina
Justo al sur del Puente Rocío se encuentra el Centro de Visitantes de La Rocina. Se encuentra a 500 metros del pueblo Rocío y junto a la carretera de Matalascañas. Dispone de información sobre el parque y un sendero natural de 3 km por el lago de agua dulce y la marisma Charco de la Boca, que desemboca en las Madres de la Marismas en El Rocío.
El sendero cuenta con cinco observatorios de aves y es posible observar gallinetas moradas, abubillas, garzas y currucas cabecinegras, entre otras aves.
Centro de Visitantes Palacio del Acebrón
Siete kilómetros de La Rocina se encuentra el Palacio del Acebrón, un antiguo pabellón de caza que contiene exposiciones sobre el parque. En el recinto hay un agradable sendero natural de 1 kilómetro y medio a través del bosque y alrededor de un pequeño lago, el Charco del Acebrón.
Centro de Visitantes José Antonio Valverde
Ubicado en el extremo norte del parque, tiene excelentes oportunidades para la observación de aves. Se encuentra a 30 km al sur de la localidad de Villamanrique de la Condesa, desde donde está señalizado.
Tiene ventanas panorámicas y un paseo marítimo corto con mosquitero que da a un lago permanente adyacente. Este lago es el hogar de una gran colonia de anidación de ibis brillosos, así como colonias de otras especies de garzas.
Playa de Castilla cerca al parque Doñana
La Playa de Castilla, a la que se llega a pie al este de Matalascañas, discurre junto al límite del parque. Aunque no se puede entrar en Doñana por esta zona, se puede caminar a lo largo de la playa. Es un hermoso tramo de costa virgen con buenas posibilidades de observación de aves. La playa se extiende 30 km hasta Sanlúcar y es el lugar del Triatlón Desafío Doñana anual.
Ferry de Sanlúcar
También se puede llegar al parque, aunque no entrar, tomando el ferry que cruza el río Guadalquivir desde Sanlúcar de Barrameda. Hay un centro de visitantes, el Centro de Visitantes Fábrica de Hielo, con exposiciones en Doñana.
Puedes tomar el barco Real Fernando todos los días (excepto en enero) desde Sanlúcar durante 13 km río arriba del Guadalquivir, deteniéndose en algunos lugares para realizar caminatas guiadas por el parque. Es recomendable reservar con antelación, especialmente durante el verano y las vacaciones.
Visitas por tours en parque Doñana
Desde el centro de visitantes de El Acebuche, hay excursiones de tres a cuatro horas al parque, que deben reservarse con antelación. El vehículo de camión con tracción en las cuatro ruedas tiene capacidad para 21 personas y los guías hablan algo de inglés.
Normalmente, hay dos viajes al día (excepto los lunes en invierno y los domingos en verano), a las 8:30 y a las 15:00 (17:00 en verano). También se pueden organizar excursiones de día completo para grupos, con almuerzo en Sanlúcar de Barrameda. Un viaje típico abarcará los tres ecosistemas del parque: dunas, matorrales y marismas, pero la cantidad de exposición a cada entorno varía según las estaciones.
Si estás interesado, te dejamos una opción que puedes tomar para hacer una excursión a bordo de un todoterreno, pasando por dunas, playas, bosques y marismas en el Parque Nacional de Doñana.
¿Qué ver en el parque Doñana?
Flora
El parque admite una increíble variedad de vegetación en una gran cantidad de hábitats vírgenes. En el interior se encuentran grandes extensiones de pino piñonero, así como matorral mediterráneo, con brezo de hoja estrecha, lentisco, romero, matorral de jara, cristalería, espliego, romero y tomillo.
También hay enebros y bosques de alcornoques, conocidos como «las pajareras» por la enorme cantidad de aves que anidan en ellos. Entre las plantas con flores se encuentran la lavanda, los brezales, los gladiolos, los lirios y las jaras. En primavera los pantanos se cubren de flores.
Fauna
Este es un vasto lugar que sustenta una riqueza inigualable de fauna. Se sabe que aquí residen 125 especies de aves, así como 125 especies de aves migratorias, 17 reptiles, nueve anfibios y ocho especies de peces.
Hay una rica variedad de mamíferos, 28 especies en total, con algunas en peligro de extinción, como el lince y la mangosta egipcia. También aquí hay tejones, conejos y nutrias. La caza también es abundante, con ciervos, gamos y jabalíes.
Observación de aves
Doñana comprende aguas del delta que se inundan en invierno y luego bajan en primavera dejando ricos depósitos de limo y arenales elevados e islas. Estas condiciones son perfectas en invierno para gansos y patos, pero son más emocionantes en primavera cuando atraen a cientos de bandadas de aves reproductoras.
Si tienes suerte, también puedes echar un vistazo al Águila imperial española, que ahora se ha reducido a 15 parejas reproductoras. En las marismas y entre los bosques de alcornoques que hay detrás, hay muchas posibilidades de ver garzas reales, halcones lanner, tórtolas, perdices, picabueyes, garcillas bueyeras, cigüeñas y buitres.
Lo que se ve en Doñana depende de la época del año y de la suerte. Entre noviembre, diciembre y enero constituyen la temporada baja para los visitantes, pero es una época ideal para las aves acuáticas, ya que las lluvias otoñales devuelven la vida a las marismas y llena las lagunas.
Gradualmente, el agua alcanza una profundidad uniforme de 30-60 centímetros, sobre vastas áreas y las marchas resultantes atraen enormes bandadas de aves silvestres, patos, gansos y otras aves acuáticas de la más variada especie.
¿Qué aves se ven en el parque Doñana?
A finales de febrero los gansos que han emigrado hasta aquí desde el norte de Europa inician su viaje de regreso, pero al mismo tiempo llegan las espátulas del norte de África para anidar en los alcornoques.
En marzo las aguas comienzan a retroceder y la primavera comienza en serio. Es también la época en la que el águila imperial empolla sus huevos. Recientemente se contabilizaron en el parque 15 parejas reproductoras de estas formidables cazadoras, más de un tercio de todas las águilas imperiales que se sabe que sobreviven en España.
Cada pareja requiere cerca de 2,600 hectáreas de tierra para cazar en verano y aún más en invierno. Este está lejos de ser un entorno perfecto para estas grandes aves y las parejas de Doñana rara vez crían tantas crías como en otras partes de España.
En primavera, las marismas están llenas de pájaros, algunos se establecen para reproducirse, otros en ruta hacia climas más septentrionales. Un gran número de cometas cuelgan en el aire, los aguiluchos envían al pato corriendo hacia el cielo temiendo por sus vidas.
Hay agujas colinegras y gorgueras que se dirigen a Holanda y más allá, madeja verde y andarríos macizos con destino a Escandinavia, andarríos correlimos y zarapitos que se dirigen al norte de Siberia y, por lo general, un andarríos de pantano que debería estar mil kilómetros o más al este.
En lo alto, grandes bandadas de charranes bigotudos dan vueltas y círculos junto con unos cuantos charranes picogaviota y cantineros picantes. Abundan las golondrinas, algunas de rabadilla roja, y los abejarucos y las carracas se posan en postes y alambres. Todo esto y más se puede ver desde el puente de El Rocío, quizás la mejor observación de aves gratuita en Europa.
Épocas para ver las aves
Desde los observatorios de aves en el centro de la reserva, justo al sur del puente, escucharás las currucas de Cetti y Savi y observarás cómo van y vienen las garcetas, las garzas y los pequeños avetoros. Aguiluchos laguneros y milanos están continuamente a la vista y, en ocasiones, una majestuosa águila imperial planeará desde los bosques de Doñana sobre El Rocío hasta el Coto del Rey.
En pleno verano la temperatura en las marismas resecas supera fácilmente los 40 °C. Las aves acuáticas que quedan en las charcas estancadas mueren de botulismo, y cada año mueren miles más durante el avance de la sequía en Doñana.
En agosto ya casi no queda nada de la fauna acuática de la marisma, pero es un buen momento para observar a decenas de veraneantes, entre los que destacan el buitre leonado, el águila calzada, el milano real y negro, el águila culebrera, el polluelo de Baillon, la gallineta violeta, cuco moteado, autillo, chotacabras cuellirrojo, comedor de abejas, abubilla, calandra, alondras culebrera y culebrera, oropéndola, urraca azur.
Ríos
Como parte del delta del Guadalquivir, el parque está plagado de riachuelos y arroyos, siendo los principales el Brazo de la Torre, el Caño de Guadiamar y el Caño Real. El parque está salpicado de estanques que, al igual que las propias marismas, pueden secarse casi por completo en verano.
Senderos de Doñana
El núcleo del parque está fuera del alcance de los caminantes independientes. Hay senderos, a menudo con nidos de pájaros, que parten de los siguientes centros de visitantes: El Acebuche, La Rocina y El Palacio del Acebrón.
También se puede caminar junto al límite del parque en la Playa de Castilla, cerca de Matalascañas. Un paseo señalizado, el Sendero Laguna del Jaral Médano del Asperillo, sale de la A494 en el Km 47. Desde Matalascañas, hay un aparcamiento a la izquierda con un panel informativo y un mapa.
Es un desafiante sendero circular de 5.6 km que cruza dunas de arena y bosques de pinos y tomará alrededor de 3 horas y media. Tiene magníficas vistas al mar. Asegúrate de llevar mucha agua y de ir cuando no hagas demasiado calor.
También está señalizado el Sendero Cuesta del Maneli. Se trata de un recorrido circular entre dunas y pinares entre la carretera y la playa. Tiene 2.3 km de largo y toma alrededor de 1 hora y media, es más fácil que el Sendero Laguna del Jaral Médano del Asperillo. Para llegar hay que desviarse de la carretera A494 Matalascañas – Mazagón y en el Km 38 hay un aparcamiento y un panel de información.
Alojamiento en el parque Doñana
El alojamiento más cercano al punto de entrada de El Acebuche en el parque está en Matalascañas, a unos 3 km de El Acebuche. Diez kilómetros al norte de El Acebuche se encuentra el pueblo de El Rocío, con varios hoteles.
Alternativamente, está Mazagón en la costa o Villamanrique de la Condesa al norte del parque. El alojamiento será muy difícil de encontrar (o extremadamente caro) en la época de la Romería de El Rocío durante abril/mayo. Durante los meses de verano, los balnearios de Matalascañas y Mazagón también están muy concurridos, así que reserva con antelación en esta época.
Camping
Hay muchos campings cerca de la Playa de Castilla a lo largo de la A494 entre Mazagón y Matalascañas, que discurre junto al límite del parque. En verano merece la pena reservar con antelación cuando los campings pueden estar llenos, sobre todo en agosto.
- Camping Doñana. En el extremo de Mazagón de la A494 en el km 34.6, este umbroso camping dispone de cabañas y tiendas de madera en alquiler y piscina.
- La Aldea. Situado tierra adentro, en las afueras del pueblo de El Rocío, cerca de las marismas, este camping dispone de bungalows de alquiler, bar y tienda.
- Camping Rocío Playa. En la carretera A494 Mazagón – Matalascañas en el km 45.2, se encuentra este gran camping. Las instalaciones incluyen restaurante, pista de tenis, campo de fútbol y un bar con maravillosas vistas. Hay bungalows de madera y tiendas de campaña para alquilar.
Mejor tiempo para visitar el parque Doñana
El Parque Nacional en sí no está abierto al público, solo el personal del parque y los científicos registrados pueden ingresar para sus proyectos específicos. Sin embargo, existen visitas guiadas, operadas por empresas y particulares autorizados, es necesario reservarlas con mucha antelación.
Incluso cuando las aves invernantes se van, hay muchos migrantes que llegan en marzo y abril. Las plantas, los insectos y los reptiles se pueden encontrar en cualquier momento, aunque hay un aumento notable en la actividad en primavera.
Los niveles de agua varían con la lluvia, algunos años son muy secos y, a veces, la mayor parte del parque parece estar inundado. En general, de octubre a mayo se considera el mejor. Las marismas se alimentan principalmente de las lluvias, por lo que en verano pueden secarse por completo, y las aves se trasladan a otros humedales, como las Marismas del Odiel que son mareales.
A menos que realmente estés allí para el festival, es mejor evitar el área en Pentecostés (siete semanas después de Pascua) cuando hasta un millón de peregrinos convergen para la Fiesta de Nuestra Señora del Rocío.
La relevancia internacional del Parque Nacional de Doñana, uno de los más importantes de Europa, viene avalada por prestigiosos reconocimientos internacionales. Así que, si buscas un destino para admirar la belleza natural, el parque Doñana espera por ti.
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