Shanghái es una mega urbe de más de 23 millones de habitantes que conjuga la cara más tradicional de China y su lado más moderno. Este contraste entre la China más antigua y el mundo moderno es lo que sin dudas termina cautivando a los miles de turistas que pasan por ella año tras año. En Shanghái podrás subir a uno de los edificios más altos del planeta y a su vez visitar templos que te harán retroceder en el tiempo.
Hoy te invitamos a hacer un viaje de 3 días por Shanghái, aunque tranquilamente podrías estar una semana completa (e incluso más) y en ningún momento dejar de sorprenderte. Recorreremos sus barrios más emblemáticos, sus principales monumentos y edificios, parques, museos y más.
Además de un itinerario completo de 3 días te contamos qué comer en Shanghái, cómo moverse en la ciudad, cómo llegar y te damos otros tips que ayudarán a facilitar tu viaje por esta ciudad enorme. No olvides que estas en una de las mayores urbes del mundo y que si bien sus atractivos se encuentran relativamente cerca, su tamaño y el idioma pueden abrumar un poco.
No te preocupes, que para eso estamos nosotros. Haremos que tu viaje a Shanghái sea una experiencia memorable. Esta increíble ciudad te espera para que vivas unos días emocionantes y te empapes de cultura y esa dosis de modernidad que solamente China es capaz de ofrecer.
¿Qué ver en Shanghái?
Posiblemente te estés preguntando qué ver en una ciudad tan grande. La respuesta es simple y concisa: ¡mucho!
Shanghái tiene varias zonas y barrios interesantes para recorrer. La parte más futurista, por ejemplo, es una de las más recomendadas. Se trata de Pudong, la zona de negocios de Shanghái en la que se concentran los rascacielos más emblemáticos.
También tienes que recorrer los barrios que evocan la esencia más tradicional de China, como Old City; la zona peatonal del Bund y French Concession, que transporta al viajero a las ciudades europeas.
Shanghái es una ciudad llena de energía en la que encontrarás cosas para hacer a todas horas. Tomar una copa en algún bar, probar la gastronomía china en sus mercados, subir al mirador de algún rascacielo o visitar alguno de los pueblos de agua que se encuentran cerca son otras cosas que tienes que hacer. Por cierto, para hacer esto último necesitarás un día adicional (que valdrá mucho la pena).
Respecto a las excursiones por la ciudad, aquí te dejamos algunas buenas propuestas de Civitatis:
- Visita guiada por Shanghái
- Visita guiada privada por el Shanghái actual
- Tour privado por el Shanghái histórico
Ahora sí, te contamos qué ver en Shanghái en 3 días completos.
Día 1 en Shanghái: Bund, Mercado y Jardín Yuyuan, Templo de Dios, zona financiera Pudong
Para este primer día por Shanghái te proponemos recorrer algunos de sus rincones más emblemáticos y apreciar los contrastes entre lo antiguo y lo moderno.
Antes que nada, aclarar que el recorrido está pensado para aprovechar 3 días completos. Por eso, lo mejor es llegar a Shanghái la noche anterior y poder iniciar el recorrido temprano por la mañana del día siguiente.
The Bund
El Bund de Shanghái es uno de los epicentros turísticos de la ciudad. Esta zona peatonal tiene 2 km de longitud y recorre la parte oeste del río Huangpu, regalando las mejores vistas de los rascacielos de Pudong. Además de ofrecer esta panorámica de la cara más futurista de Shanghái, permite ir conociendo edificios históricos que combinan estilos arquitectónicos diferentes, pasando por el gótico, el románico y el renacentista.
El Bund es un legado del primer distrito comercial de Shanghái, que en aquel entonces se conocía como el «Wall Street de Oriente». Hoy en día, se ha convertido en un paseo obligado, especialmente temprano por la mañana, que es cuando menos abarrotado de turistas y locales se encuentra. Por ende, creemos que es la parada ideal para empezar a tomar contacto con la ciudad.
Claro que también vale la pena regresar por la noche, cuando en la orilla opuesta del Huangpu los rascacielos se iluminan y permiten disfrutar de una vista asombrosa. Presta atención a la orre de Shanghai, cuyos 632 metros la convierten en uno de los edificios más altos del mundo; o al Oriental Pearl Tower, uno de los rascacielos más reconocibles del skyline de Shanghái (más adelante te hablamos de ellos).
A lo largo del paseo por esta zona verás algunos edificios y monumentos famosos. Entre ellos podemos mencionar la Aduana, que destaca por la campana de la torre y su reloj; el Toro Wall Street, que se dice que fue hecho por el mismo escultor del famoso monumento de Nueva York; y la Torre de la Estación Meteorológica, uno de los edificios más interesantes del paseo. La misma guiaba a los barcos que ingresaban al puerto de Shanghái en el siglo XX.
Mercado y Jardín Yuyuan
Luego de recorrer los 2 km del Bund llegarás a la siguiente visita del día, el mercado y los jardines Yuyuan, situados en el mismo emplazamiento.
El Mercado Yuyuan recibe al visitante con su entramado de calles y tiendas por las que da gusto perderse. Temprano por la mañana es cuando menos gente hay y más podrás disfrutar del paseo. Por eso, si llegas tarde procura tomar el recorrido con tranquilidad y tener paciencia. Después de todo, estás en China, donde hay muy pocos sitios que se disfrutan en soledad.
En este bazar de estilo tradicional encontrarás lo que busques: souvenirs, restaurantes, cafeterías, locales de comida callejera y más. Por ende, es un buen sitio para comenzar a familiarizarse con la deliciosa gastronomía local.
Luego de pasear por el mercado puedes acercarte al Jardín Yuyuan, otro de los lugares más famosos de la ciudad. Construido durante la dinastía Ming, es uno de los mejores ejemplos del clásico jardín chino lleno de estanques y pabellones.
Con dos hectáreas de extensión, este precioso jardín está dividido en varias secciones por medio de grandes muros. Su principal atractivo es la Exquisita Roca de Jade, cuyos 3 metros de altura y el humo del incienso que sale desde su base crean un efecto hipnótico. Tampoco dejes de acercarte a la Gran rocalla, desde cuyos 14 metros de altura ofrece las mejores vistas del jardín.
La entrada cuesta 40 ¥ (5,75 USD). La visita a los jardines puede llevar entre 1,5-2 horas. En caso de que hagas otro tipo de recorrido del que proponemos en esta guía, podrás llegar tomando la línea 10 y bajando en la parada Yuyuan Garden.
Templo de Dios
En Shanghái hay muchos templos. Junto a la puerta sur de los jardines se encuentra uno de ellos: el Templo de Dios. Con 600 años de historia, al igual que muchos templos situados en otras ciudades chinas fue creado para proteger a los habitantes de la ciudad.
Si bien no es muy grande (la visita no te llevará más de 30 minutos), vale la pena pagar los 10 ¥ (1,44 USD) que sale la entrada para disfrutar de su ambiente.
Tras hacer esta visita puedes regresar al mercado para almorzar algo en un restaurante o puesto callejero. Es muy probable que a estas alturas del día tanto paseo haya abierto tu apetito. Por suerte, estás en el lugar indicado para recargar un poco de energía.
Zona financiera de Pudong
Tras haber comido algo en el mercado, puedes regresar al Bund para tomar el ferry que cruza a la zona financiera de Pudong, donde destinarás lo que reste del día. La zona de embarque se encuentra al lado de la Torre de la Estación Meteorológica y en apenas 10 minutos ya habrás llegado a la otra orilla del río para conocer una cara distinta de la ciudad.
El broche de oro del paseo es subir a alguna de las torres con mirador del distrito financiero para completar el atardecer sobre la ciudad. Pero, antes puedes recorrer un poco la zona.
La Torre de Shanghái es la más alta de la ciudad y una de las más altas del mundo. Tiene 632 metros de altura y se aprecia desde prácticamente cualquier rincón. Además, por su forma retorcida sobre sí misma se distingue fácilmente.
El mirador de la Torre de Shanghái es el segundo más alto del mundo (por detrás del Burj Khalifa) y la entrada cuesta 180 ¥ (casi 26 USD). En caso que desees ver el atardecer desde aquí te recomendamos adquirir las entradas de forma online (que son un poco más económicas) y de ese modo ahorrar la cola de las taquillas.
Otro de los rascacielos más famosos de la zona financiera de la ciudad es Shanghai World Financial Center (SWFC). A él también lo distinguirás sin problema por su curiosa forma de abrebotellas. Tiene 462 metros de altura y desde su mirador también disfrutarás de increíbles vistas de la ciudad. La entrada cuesta 120 ¥ (17 USD).
Entre estos dos últimos se encuentra la Torre Jin Mao, otro original rascacielos que se eleva hasta los 420 metros de altura y cuenta con un mirador panorámico a los 360 metros. Lo novedoso de esta torre es su pasarela de cristal no apta para personas que le teman a las alturas. La entrada cuesta 120 ¥ (17 USD).
Finalmente, la Oriental Pearl Tower (Perla de Oriente) es otro de los rascacielos más famosos de Pudong. Esta perla del skyline de Shanghái se distingue por su aspecto único y su estructura original, con tres esferas a las cuales se puede acceder para contemplar la ciudad desde lo alto. La entrada más básica cuesta 160 ¥ (23 USD) y se puede reservar online para evitar las colas.
Entonces, el plan para esta segunda mitad del día es recorrer la zona y elegir alguna de estas torres para disfrutar del atardecer. Todas se encuentran muy cerca una de la otra, por lo que no tendrás que caminar demasiado. En el mapa te dejamos señalada la ubicación de cada una de ellas.
Una vez que hayas contemplado el atardecer desde algún rascacielos, te sugerimos tomar el ferry de regreso al Bund para apreciar las vistas de Pudong iluminado desde el otro lado del río. Con esta increíble postal en tu retina y en tu cámara de fotos darás por culminado tu primer día en Shanghái. O mejor dicho, con una buena cena en alguno de los restaurantes de la zona.
Mapa del primer día en Shanghái
Aquí tienes un mapa con cada uno de los sitios a visitar durante este primer día por Shanghái.
Día 2 en Shanghái: Templo del Buda de Jade, Templo Jing´an, Plaza del Pueblo, Museo de Shanghái, East Nanjing Road
El segundo día de paseo por Shanghái comienza en uno de los grandes atractivos de la ciudad: el Templo del Buda de Jade. Luego, visitarás otro de sus templos más emblemáticos, Jing´an, para desde allí tomar Nanjing Road y caminar hasta la Plaza del Pueblo. Muy cerca se encuentra el Museo de Shanghái, donde puedes aprender sobre la historia de la ciudad. Para finalizar, harás un recorrido por la calle comercial más larga del mundo: East Nanjing Road.
Templo del Buda de Jade
El Templo del Buda de Jade es el templo budista más famoso de Shanghái y una visita bastante interesante para hacer en la ciudad. Se encuentra situado fuera de la zona histórica, pero bien comunicado por la red de metro, por lo que podrás llegar sin problema.
El origen de este templo se remonta al año 1882, cuando un monje budista trajo desde la actual Myanmar dos figuras de Buda hechas en jade. Las mismas fueron donadas por un rico comerciante chino oriundo de Shanghái para la ciudad. En 1911 el templo fue destruido y luego de eso se trasladó a su emplazamiento actual, entre 1918-1928. A pesar de esta larga historia, sus pabellones de madera y muestras de arquitectura tradicional china se conservan en muy buen estado.
Lo más interesante de la visita es recorrer sus diferentes salas, cámaras y el patio principal. El Gran Salón, la Cámara de los Cuatro Reyes Celestiales y la Torre del Buda de Jade son los espacios principales del templo, mientras que en los laterales se abren diferentes salones.
En una de las salas se exponen dos figuras de un Buda recostado talladas en piedra blanca y custodiadas por una urna de cristal. Mientras que en otra de las salas se encuentra el famoso Buda de Jade con incrustaciones de piedras preciosas.
Se puede llegar al Templo del Buda de Jade tomando la línea 7 del metro y bajar en Changshou Road o con la línea 13 y bajar en Jiangning Road. La entrada tiene un costo de 30 ¥ (4,31 USD) y el horario de visitas es de 8 am a 4:30 pm. El tiempo estimado de visita es de una hora.
Templo Jing´an
Seguimos recorriendo los principales templos de Shanghái y es momento de visitar otro de los más famosos. Hablamos del Templo Jing’an, también conocido como Templo de la Paz y la Tranquilidad. Está situado en pleno centro de la ciudad, en una zona llena de rascacielos que crean un interesante contraste entre lo tradicional y lo moderno.
El Templo Jing´an sobresale por su arquitectura refinada, su tejado negro y dorado que se refleja en los vidrios de los edificios y por albgerar la estatua de Buda más grande de toda China.
Su origen se sitúa en el Período de los Tres Reinos (año 247), pero recién en 1216 se estableció en su localización actual. Unos 500 años más tarde fue arrasado por incendio, por lo que en 1990 se reconstruyó por completo, de allí es que su aspecto es bastante nuevo.
En el patio central del complejo hay un gran incensario en el que los fieles arrojan sus varillas de incienso. Alrededor de este patio se organizan varios salones, siendo el más importante el Salón Bodhisattva, donde se encuentra una figura de Buda hecho en madera de 6 metros de altura. Aunque, es en la Sala Mahavira donde se ubica el famoso Buda o Sakyamuni más grande de China, completamente hecho en jade.
La entrada al templo tiene un costo de 50¥ (7,19 USD) y la visita no lleva más de una hora (incluso menos). Para llegar se puede tomar las líneas 2 y 7 del metro y bajarse en la paradav“Jing’An Temple”.
Muy cerca se encuentra el Parque Jing’An, donde puedes aprovechar la ocasión para respirar un poco de verde. Si visitas el lugar un fin de semana lo encontrarás con un ambiente muy animado y con diferentes actividades dirigidas al público. O bien, puedes aprovechar para simplemente hacer un pequeño picnic antes de continuar el recorrido por la ciudad.
Plaza del Pueblo
Luego de visitar el templo y descansar un rato en el parque puedes poner rumbo a la Plaza del Pueblo (People ‘s Square). Para eso lo mejor es caminar por Nanjing Road hasta llegar a destino. Si bien son varias cuadras, no es una caminata demasiado extensa que no se pueda hacer en un rato.
La plaza es pequeña, pero muy pintoresca y está rodeada de altos edificios. Es también la más famosa de Shanghái, por lo que no puedes irte de la ciudad sin pasar por ella. Por si fuera poco, a su alrededor se ubican varios museos interesantes para visitar.
Algo curioso que ver en esta plaza es el tablón de anuncios que hay en uno de sus rincones en donde los padres intentan «vender» a sus hijos solteros. Sí, así como lees. Esta especie de mercadillo de solteros es frecuentado por familias que acuden desesperados a buscar un esposo/a para sus hijos.
En la parte norte de la plaza se encuentra Renmin Park es un pequeño oasis situado en medio de altos edificios donde también podrás respirar un poco de verde. Cuenta con algunos jardines, cafeterías y atracciones de feria.
Museo de Shanghái
El Museo de Shanghái se ubica frente a la plaza y es ideal para descubrir la historia de la ciudad y China en general. Lo mejor de todo es que la visita es gratuita, por lo que vale mucho la pena admirar su colección de más de 120.000 piezas de bronce y cerámica, monedas, muebles y sellos pertenecientes a un periodo que abarca más de 8.000 años.
East Nanjing Road, la calle más comercial de la ciudad
Tras una lección de historia en el museo puedes caminar las pocas cuadras que hay hasta otra de las calles más famosas de Shanghái: East Nanjing Road. Junto al Bund, es la zona comercial por excelencia de la ciudad. En ella encontrarás todas las marcas internacionales y la cara más cosmopolita de la ciudad.
También está llena de grandes almacenes y casas de comida rápida, por lo que es ideal para cerrar el día comiendo algo. Por cierto, la parte más animada es la que va desde People ‘s Square hasta Henan Road.
Mapa del segundo día en Shanghái
Día 3 en Shanghái: French Concession, Xintiandi, Parque Fuxing, Tianzifang
El tercer día de recorrido por Shanghái te llevará a conocer otros atractivos de la ciudad que merecen mucho la pena. Concretamente, visitaremos 3 barrios o zonas que todavía conservan el ambiente tradicional de la ciudad: Tianzifang y Xintiandi (donde se ven casas estilo Shikumen) y al barrio francés y sus viviendas de la época colonial.
French Concession (Barrio Francés de Shanghái)
En French Concession no encontrarás hanoks o casas tradicionales, pero sí calles y viviendas de estilo colonial europeo que te trasladarán a cualquier ciudad del Viejo Continente. El motivo es que esta zona de Shanghái estuvo ocupada por los franceses desde 1849 hasta 1946, dejando así este rico legado en la ciudad.
Para llegar puedes hacer uso de varias líneas del metro: la 10 o la 13 y bajar en la estación Xintiandi; la 13 y bajar en Middle Huaihai Road o las líneas 1 , 9 u 11 y bajar en Xujiahui.
Las calles más destacadas y representativas del barrio son Wukang, Yongfu, Changle, Xinle y Julu Road, en las que puedes estar tranquilamente toda la mañana paseando. Las mismas están llenas de casas coloniales y adornadas con grandes árboles.
Xintiandi
Este barrio forma parte del anterior, por lo que muestra una fusión entre la arquitectura china y occidental y un contraste entre los grandes comercios y la vida local. En la parte norte del barrio verás la cara más comercial y muchos restaurantes de moda. En cambio, si te vas más al sur encontrarás las shikumen, unas construcciones de mediados del siglo XIX características de Xintiandi.
Por cierto, el estilo Shikumen combina elementos arquitectónicos occidentales y chinos y en su momento representó más de la mitad de las viviendas de Shanghái. Se trata de construcciones de dos o tres plantas, con muros de ladrillos y un patio pequeño en su interior. Si bien hoy muchas han sido reemplazadas por rascacielos y edificios de hormigón, en la zona del callejón Tian Zi Fang se preservan varias de ellas.
Por cierto, puedes recorrer esta zona de la ciudad contratando este crucero nocturno y paseo por Xintiandi.
Fuxing Park
Tras finalizar tu recorrido por Xintiandi, no puedes dejar de acercarte caminando a este parque que muestra la cara más auténtica de la ciudad. Aquí se reúnen habitualmente los jubilados de la zona a charlar, bailar, cantar, hacer ejercicios en grupo y jugar al bádminton.
Además de ser el parque más antiguo de la ciudad, es una de las mejores zonas para escapar del bullicio y respirar un poco de aire fresco.
Su origen data de 1909, cuando fue construido como un lugar de esparcimiento para la comunidad francesa. Aunque, lo cierto es que previo a ello había un jardín privado de la dinastía Ming que los franceses ampliaron. Por ende, en sus diferentes sectores se mezclan elementos propios de los clásicos jardines chinos con elementos típicos de jardines franceses o versallescos.
Tianzifang
La última visita del día es el barrio de Tianzifang, también dentro de la zona de French Concession y a 1 km de Fuxing Park, por lo que puedes llegar caminando sin problema. Es bastante pequeño, pero conserva algunos ejemplos de arquitectura tradicional, especialmente en sus pequeños callejones decorados con farolillos.
Si bien no deja de ser una zona bastante comercial, su ambiente es muy acogedor e invita a dar un paseo o comer algo en sus puestos de comida callejera. La zona se debe recorrer sin rumbo, dejando que los sentidos guíen el camino por su entramado de calles estrechas repletas de detalles.
Con esta bonita postal comenzarás a despedirte de la ciudad. Hemos hecho un recorrido por sus dos caras, la más tradicional y moderna. Así es Shanghái, una ciudad de contrastes con muchos atractivos por descubrir.
Mapa del tercer día en Shanghái
Adicional: excursión de un día a Suzhou y Tongli o Zhouzhuang
Suzhou y Tongli son dos ciudades que se encuentran relativamente cerca de Shanghái y cerca una de la otra. Por ende, las puedes visitar por libre en un mismo día o bien contratando esta excursión a Suzhou con guía en español.
Suzhou es considerada una de las «Venecia de China», gracias a los canales que surcan las calles. Si bien hoy en día es una urbe con más de 10 millones de habitantes, todavía conserva el encanto de hace tiempo, con hermosos jardines que se remontan a la época de la dinastía Ming y Qing y canales por los que se puede navegar. Por eso, creemos que la excursión a Suzhou es una de las más adecuadas para hacer desde Shanghái.
Si en lugar de contratar la excursión prefieres viajar por tu cuenta, podrás hacerlo sin problema tomando un tren. Existen dos opciones, el rápido y el lento. El primero es el que más te recomendamos, ya que por poca diferencia de dinero tardarás media hora en hacer los 90 km que separan las estaciones de Shanghai y Suzhou.
Tip viajero: para comprar el billete lo mejor es hacer uso de las webs Trip o Viaje a China, que te permitirá adquirir los tickets con antelación. Procura salir temprano, especialmente si deseas visitar también la ciudad de Tongli en un mismo día.
El principal atractivo de Suzhou son sus jardines, pagodas, canales y puentes. Si solo vas a visitar esta ciudad puedes hacer un recorrido más completo. Por ejemplo, en la excursión de Civitatis conocerás los Jardín de los Leones y el Jardín del Administrador Humilde, harás un paseo en barco y recorrerás las calles más importantes de la ciudad.
El Jardín del Administrador Humilde tiene fama de ser el más bello y grande de la ciudad. Este sitio Patrimonio de la Humanidad tiene sus orígenes en el año 1509 (dinastía Ming), 52.000 m2 de superficie y muchos senderos que lo recorren. El paseo es encantador y te llevará a caminar entre bosques de pino y bambú, estanques repletos de flores de loto, arroyos, pabellones y más.
Los canales de Suzhou son el otro plato fuerte de la ciudad. Frente a la puerta de entrada al jardín verás la calle Pingjiang, que discurre pegada a uno de ellos. Caminar por esta vía peatonal flanqueada por casas bajas y tiendas es todo un placer, así que no dejes de hacerlo.
Por su parte, Tongli es una ciudad más pequeña y ordenada que mantiene un centro histórico encantador, capaz de hacer retroceder al viajero en el tiempo. Por ende, si deseas conocer también esta ciudad puedes tomar un taxi desde Suzhou e ir y venir en el mismo día. Desde Suzhou no tienes más que regresar a Shanghái en el tren rápido. Tampoco es mala idea pasar la noche en esta ciudad que cuenta con varios alojamientos en el centro histórico.
Así como Suzhou es famosa por sus jardines, Tongli lo es por sus canales. Muchos de ellos son navegables en barcas a remo, aunque también puedes fotografiarlos desde los puentes de piedra construidos durante las dinastías Ming y Qing. Perfectamente conservados, atraviesan los canales y regalan una postal encantadora de los mismos.
También te sugerimos hacer una caminata por el centro histórico para ver sus antiguas casas de madera, especialmente las construidas durante las dinastías Ming y Qing, que están en perfecto estado de conservación.
En cuanto a los jardines, hay dos que vale la pena visitar. Uno de ellos es el Pearl Tower Garden y el otro es Tuisi Garden, cuyo lago está rodeado de hermosos pabellones.
Zhouzhuang, por su parte, es la ciudad con los canales más antiguos de China y otra opción de excursión perfecta para hacer desde Shanghái. Situada a 80 km, aquí también encontrarás canales, puentes y casas históricas con más de 900 años de antigüedad. Al igual que en las ciudades anteriores, gran parte de estas construcciones datan de la época de las dinastías Ming y Qing.
Hacer una excursión a Zhouzhuang te llevará a conocer sus rincones más emblemáticos, como el puente Fuanqiao; las mansiones Shen y Zhang y el Templo Taoísta Chengxu. Vale mucho la pena, puesto que también tendrás toda la atención del guía para ti y tu grupo.
¿Cómo llegar a Shanghái?
Shanghái se encuentra en el corazón de China y perfectamente comunicada con el resto del país. Es decir, que llegar a ella no será ningún problema.
Shanghái es la principal puerta de entrada a China junto con Pekín. Muchos de los viajeros que planean una ruta por el país ingresan por una ciudad y salen por la otra, ahorrando así tiempo y dinero en desplazamientos. Por ende, lo más seguro es que pases por el aeropuerto internacional de Shanghái durante tu viaje.
Llegar a Shanghái en avión
Para llegar a Shanghái en avión desde países europeos o asiáticos puedes hacer uso de las aerolíneas Emirates Airlines y Qatar Airways, que son las que ofrecen las rutas más rápidas. Aerolíneas como Turkish Airlines y Lufthansa también son muy recomendables, al igual que Alitalia, British Airways y Air France. De todos modos, desde prácticamente cualquier ciudad europea que viajes tendrás que hacer escala previa.
El Aeropuerto Internacional de Pudong está situado a 30 km de la ciudad y muy bien conectado con el centro gracias a la extensa red de metros con la que cuenta la ciudad. La parada de los mismos se encuentra entre la terminal doméstica e internacional y no tendrás problema para llegar a ella.
La línea 2 de metro conecta los dos aeropuertos de la ciudad (Pudong y Hongqiao, que es el de vuelos domésticos) y pasa por el centro de Shanghái (People’s Square), por lo que es la mejor manera de llegar de manera cómoda y rápida a la zona más turística. Los billetes tienen un costo que va entre los 3 ¥ (0,43 USD) y 9 ¥ (1,29 USD) y el servicio opera desde las 6:30 am a las 9 pm.
Otra manera de llegar del Aeropuerto Internacional de Shanghái al centro es usando el tren Maglev, considerado el más rápido del mundo. Este moderno tren comunica con la estación Logyang Road en aproximadamente 8 minutos, por lo que es un medio mucho más rápido que el metro.
El principal inconveniente es que la estación del Maglev no se encuentra en el centro, por lo que tendrás que tomar el metro o un taxi para llegar a tu alojamiento. El precio del billete es de 50 ¥ (7,19 USD) por trayecto (80 en caso de que adquieras el ticket de ida y vuelta) y el servicio opera cada 20 minutos desde 6:50 am hasta las 9:50 pm.
Por último, contratar un servicio de traslado privado desde el aeropuerto al alojamiento siempre es una buena opción. Puedes contratar directamente desde aquí: traslados en Shanghái. Un conductor te estará esperando en el aeropuerto con un cartel con tu nombre y te llevará a tu alojamiento sin inconvenientes de por medio.
Llegar a Shanghái en tren
Otra manera rápida y cómoda de llegar a Shanghái es en tren desde otras ciudades chinas. Eso sí, tendrás que reservar los billetes con antelación (especialmente si deseas viajar en los trenes nocturnos), puesto que son muchísimas las personas que usan este medio de transporte.
El ticket se puede adquirir directamente en las estaciones principales, donde un operario que habla inglés te ayudará con la compra. En las estaciones más pequeñas es posible que no cuentes con ese servicio.
El tren de alta velocidad es una buena opción para ir desde la capital china (Pekín) a Shanghái. El viaje de 1.300 km se sortea en apenas 4-6 horas y es una experiencia bastante interesante, especialmente para quien no está acostumbrado a viajar en este tipo de trenes.
¿Cómo moverse por Shanghái?
Si bien los principales sitios que ver en Shanghái se encuentran relativamente cerca unos de otros, no podemos dejar de lado el hecho de que es una ciudad enorme, por lo que para recorrerla a pie necesitarías mucho tiempo.
En zonas como el Bund, Pudong y East Nanging Road podrás moverte a pie sin problemas, pero para llegar a otros sitios tendrás que hacer uso del metro, que por cierto, es muy eficiente.
Metro de Shanghái
La red de metro de Shanghái es la más extensa y utilizada de China, además que es económica y puntual. Por ende, creemos que es la mejor manera de moverse de un lugar a otro.
El plano del metro está en todas las estaciones y los nombres de cada parada están escritos en chino y en inglés, por lo que es difícil perderse. Las horas más complicadas para viajar son las pico, aunque el resto del día no tendrás problema para ir cómodo y no sentirte agobiado.
Los billetes del metro se adquieren fácilmente en cada estación. El idioma no será un problema, porque todo está traducido al inglés. Por ende, solo tienes que buscar la línea del metro en el listado que arroje la máquina, la estación de destino y hacer la compra.
Las tarifas del metro varían en función a la distancia del trayecto. Los primeros 6 km cuestan 3 ¥ (0,43 USD) y a partir de allí se suma un yuan por cada 10 km adicionales. Pero, en líneas generales es difícil pagar más de 14 ¥ (2 USD). También hay pases para varios días, pero únicamente vale la pena si vas a hacer mucho uso de este medio de transporte.
El horario del metro de Shanghái varía en función a cada línea, pero en general opera desde las 5:30 am hasta las 11 de la noche.
Taxi
Otra manera cómoda y rápida de moverse por Shanghái es en taxi. El precio también es económico y permite llegar a diferentes puntos de la ciudad sin gastar demasiado dinero (especialmente si lo comparamos con las principales capitales europeas). Por ejemplo, los trayectos por la zona turística de la ciudad no suelen superar los 30 ¥ (4,31 USD).
La política de tarifas de los taxis en Shanghái es similar a la del metro. Es decir, los primeros 3 km tienen un costo de 14 ¥ (2 USD) y por cada kilómetro adicional se cobran 2,50 ¥ (0,36 USD).
Dos consejos a tener en cuenta para viajar en taxi por la ciudad: ten cuidado con las estafas y lleva un mapa para señalar el lugar al cual quieras ir o la tarjeta de tu alojamiento (la mayoría de los taxistas no hablan el inglés).
Ferry
La manera más rápida, económica y pintoresca de cruzar el Río Huangpu es el ferry. En tu viaje de 3 días por Shanghái seguramente harás el cruce de las orillas Puxi y Pudong al menos una vez.
La ciudad cuenta con 18 líneas de ferry que hacen este trayecto. La más práctica es la línea Dongjin, que comunica el Bund con la zona de los rascacielos de Pudong. El ferry de esta línea sale de la nueva terminal de cruceros, tiene un costo de 2 ¥ (0,29 USD) y opera de 7 am a 10 pm.
Ya tienes toda la información necesaria para viajar a Shanghái. Como pudimos ver, la ciudad está llena de tesoros por descubrir. Que su imponente tamaño no te abrume. A Shanghái hay que recorrerla con calma, paciencia y siempre con una cámara de fotos en la mano. Anímate a descubrir sus contrastes, subir a sus rascacielos, pasear por sus barrios más tradicionales y empaparte de la rica y milenaria cultura china.
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