Ubicada al oeste de Madrid y situada cerca de la frontera portuguesa, la ciudad de Salamanca en la región de Castilla y León se puede explorar fácilmente en un día. Salamanca es una ciudad histórica llena de una arquitectura impresionante. Es apto para peatones y la mayoría de los lugares de interés están a solo unos minutos de distancia entre sí.

Aunque Salamanca en un día puede no ser suficiente para explorar esta ciudad medieval, si podrás ir a los sitios más emblemáticos y populares. La comunidad todavía se conoce como una ciudad universitaria. La principal universidad de la ciudad, la Universidad de Salamanca, es la universidad más antigua de España y la tercera más antigua del mundo que sigue en funcionamiento hasta el día de hoy.

Sin duda, Salamanca es uno de los lugares más bonitos de España. Por su lugar en la cultura histórica y el arte de España, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1988.

Si tienes poco tiempo mientras viajas por España, una excursión de un día es suficiente para ver sus mejores atracciones. Sal temprano y súbete a un tren con destino a Salamanca, y sigue este itinerario de viaje para experimentar lo mejor de Salamanca en un día.

¿Qué visitar en un día en Salamanca?

La ciudad de Salamanca es una gran parada en el camino de Portugal a España, o al revés. Famosa por su vida universitaria y nocturna, y con hermosos edificios renacentistas, la ciudad tiene suficientes cosas para mantenerte ocupado por un día.

¿Listo para explorar Salamanca? Sigue este itinerario y disfruta de un agradable paseo que te llevará a los principales lugares de interés de la ciudad.

Sorpréndete con la Catedral Vieja y Nueva de Salamanca

La Catedral Vieja y la Nueva están construidas una al lado de la otra, una en el siglo IV y la otra en el siglo XV, respectivamente. El primero muestra una arquitectura románica y el segundo tiene toques renacentistas, pero en conjunto hacen un espectáculo para asombrarse.

Comienza tu día en Salamanca visitando algunos de sus edificios más impresionantes: la Catedral Vieja y la Catedral Nueva.

La Catedral Vieja o Catedral Vieja, es una estructura románica que data del siglo XII. Cuenta con una torre de reloj de 100 metros de altura, un altar mayor con uno de los órganos más antiguos de Europa y pinturas del siglo XV de escenas bíblicas.

Mientras tanto, la Catedral Nueva o Catedral Nueva del siglo XVI presenta una variedad de estilos arquitectónicos. Echa un vistazo a una de sus tallas únicas: la de un astronauta, que se agregó en 1992.

Subir a las Torres Gemelas de Clerecia (Scala Coeli)

Anteriormente conocida como Real Colegio de la Compañía de Jesús, la Iglesia de la Clerecia fue construida en 1617. Sus torres fueron construidas para acercar a los creyentes a los cielos. Con eso, también ofrecen una impresionante vista de 360 ​​grados del casco antiguo.

Una caminata rápida desde la Catedral Vieja y la Nueva lo lleva a la iglesia de Clarecia y sus impresionantes torres. Sí, los visitantes pueden subir a las torres, donde se puede disfrutar de una espectacular vista de 360 ​​grados de la ciudad.

Construido en 1617, este edificio barroco fue realizado por orden de la esposa del rey Felipe III, Margarita de Austria. Además de las vistas de la ciudad, también puede ver los interiores de La Clarecia uniéndose a una visita guiada.

Ir a observar a la gente en la Plaza Mayor

Cada rincón del casco antiguo de Salamanca tiene un valor histórico y el mejor lugar para comenzar tu visita es desde la Plaza Mayor. La plaza principal y un popular punto de encuentro para residentes y estudiantes universitarios. La Plaza Mayor está presidida por la torre del reloj del ayuntamiento y rodeada por nada menos que 88 arcos.

Terminada en 1755, la Plaza Mayor es el centro ajetreado de la ciudad. Es por esto que probablemente verás personas o estudiantes de todos los continentes, así como a los lugareños haciendo sus rutinas diarias. ¿Qué podría ser mejor que mirar entonces en una tarde?

Desde La Clarecia, lo más probable es que hayas visto la amplia Plaza Mayor, considerada la gran atracción principal del centro de la ciudad de Salamanca.

Simplemente no puedes perderte la arquitectura barroca de los edificios que lo rodean, con sus contraventanas antiguas, intrincados trabajos en piedra, placas, estatuas y medallones con rostros. Esta plaza pública está llena de una variedad de tiendas y restaurantes, donde puedes sentarte y observar a la gente.

La Plaza Mayor de Salamanca también alberga la torre del reloj y el ayuntamiento, es el corazón de Salamanca y es ampliamente considerada como una de las plazas más bellas de España.

Visita la antigua biblioteca pública

Por supuesto, no tendría tiempo para leer algo, pero vale la pena hacer un recorrido rápido por una de las bibliotecas más antiguas del mundo. Está ubicado en la Casa de las Conchas y ofrece muchas maravillas literarias.

A pocos pasos de la Plaza Mayor, la antigua biblioteca pública de Salamanca es una visita obligada incluso si no tienes suficiente tiempo para leer un libro. Tanto si te gustan los libros como si no, es todo un placer estar dentro de una de las bibliotecas más antiguas del mundo. Se encuentra en la Casa de las Conchas, y el hogar de un número impresionante de maravillas literarias.

También es conocida como La Biblioteca Pública del Estado, el edificio donde se encuentra, que es otra visita obligada cuando se está en Salamanca.

Explora la Universidad de Salamanca

Todavía dentro del centro histórico y a unos siete minutos a pie del Mercado Central se encuentra la impresionante Universidad de Salamanca. Considerada como una de las universidades más bellas del mundo, esta también se encuentra entre las más antiguas.

Fundada entre 1425 y 1433, la universidad es conocida por la hermosa fachada de su edificio principal. Las tallas de esta fachada se consideran un ejemplo estelar del estilo plateresco. Una de las tallas más famosas se encuentra en la puerta antigua, llamada ‘rana en una calavera’.

A menudo se dice que el edificio de la universidad en su conjunto es una de las maravillas arquitectónicas de la ciudad, una visita obligada cuando visite Salamanca.

Puerta Antigua de la Universidad de Salamanca

La Universidad de Salamanca no solo es conocida por su historia, sino también por su edificio de intrincado diseño. La talla más famosa de todas las que han adornado la fachada es la “rana sobre una calavera”.

A la gente le cuesta encontrarlo. La leyenda dice que, si lo encuentras sin ninguna ayuda o pista, aprobarás tus exámenes ¿Por qué no darle una oportunidad?

Camina unos pasos a tu derecha y verás la oficina, biblioteca y museo de uno de los ensayistas más queridos de España, Miguel de Unamuno, quien se desempeñó como rector de la Universidad, pero luego fue destituido por Franco.

Contar las conchas en Casa de las Conchas

Se llama la Casa de las Conchas porque tiene más de 300 conchas que salpican su fachada. El edificio fue construido originalmente entre 1493 y 1517 por Rodrigo Arias de Maldonado, profesor de la Universidad de Salamanca y caballero.

Es uno de los monumentos más conocidos de Salamanca. El edificio también cuenta con hermosos trabajos en piedra y se considera una de las estructuras más ornamentadas de la ciudad.

La fachada de este edificio gótico también presenta el escudo de los Reyes Católicos y cuatro ventanas de diferentes formas. La entrada tiene el escudo de armas de la familia Maldonado, mientras que los arquitrabes presentan delfines, símbolo renacentista del amor, y vegetales.

Echa un vistazo al interior del Convento de San Esteban

Si está abierto, ve y echa un vistazo. El Convento de San Esteban sirvió inicialmente como convento de la Orden de los Dominicos. Al echar un vistazo al interior, verás el interior del convento de intrincado diseño con tres claustros, incluido el Claustro Real.

Desde la universidad, se tarda unos siete minutos en caminar hasta su última parada, el intrigante Convento de San Esteban. Este lugar es otra de las maravillas arquitectónicas de la ciudad.

Fundado en el siglo XVI, este monasterio es conocido por sus impresionantes interiores e incluye tres claustros. Todo en el Convento de San Esteban refleja el arte de quienes participaron en su construcción, así como de la época en que se construyó.

De visita obligada es la escalera de piedra del retablo mayor, obra maestra de Rodrigo Gil de Hontañón, arquitecto del Renacimiento.

Piérdete deambulando

Además de las atracciones mencionadas, hay muchas rutas de senderismo que serpentean por la ciudad. De hecho, algunas, si no todas, de estas rutas conectan más de una atracción de la ciudad. Por lo tanto, podrías explorar mucho simplemente caminando.

Regresa a la Plaza Mayor para almorzar en cualquiera de los restaurantes, restaurantes y bares de tapas para experimentar algunas de las sabrosas ofertas gastronómicas del centro de España. Los ingredientes utilizados en sus comidas son siempre frescos y de origen local.

Para el almuerzo, algunos platos imperdibles son el jamón ibérico, el chorizo, los hornazos (pasteles rellenos de carne), el farinato (salchicha blanca), los quesos añejos y el mazapán de postre.

Compra en el Mercado Central

Después del almuerzo, ve y busca cosas para llevar a casa, desde alimentos hasta recuerdos. El Mercado Central de Salamanca se encuentra a pocos pasos de la Plaza Mayor, un mercado histórico ubicado en un edificio del siglo XIII.

Aquí es donde los lugareños obtienen productos frescos, carnes y mariscos. Para los turistas, este es el mejor lugar para comprar jamones, vinos y quesos españoles para llevar a casa.

También hay un bar de tapas en el Mercado Central si aún no ha tenido suficiente de la sabrosa comida española.

El edificio de las Escuelas Menores

Se envuelve alrededor del patio frente a las Escuelas Mayores. Encuentra El Cielo de Salamanca (Cielo de Salamanca), una interesante representación de un mapa astrológico de Fernando Gallego. Datada en el siglo XV, la pintura mural formaba parte originalmente de la Biblioteca Histórica. Fue descubierta accidentalmente en el siglo XX durante unas obras de reforma, y ​​trasladada a las Escuelas Menores.

Universidad, Jardín de Calisto y Melibea

Para comer te recomendamos el restaurante El Laurel, en Calle San Pablo 49, donde podrás degustar sabores típicos españoles con un coste medio de 12,00 €. Es hora de visitar la Universidad, con su impresionante fachada.

También se esconden en esta pared algunas figuras insólitas, como unos delfines y la famosa rana, que también se ha convertido en el símbolo de la ciudad. Continuando por la calle Los Libreros y pasando La Casa Lis, Museo Art Nouveau y Art Déco, llegarás a las antiguas murallas de la ciudad.

Aquí se encuentra el Jardín de Calisto y Melibea, uno de los rincones más románticos de la ciudad. Otra leyenda rodea este rincón de Salamanca, se dice que este fue el lugar de encuentro de los dos jóvenes protagonistas de la Celestina, una de las obras más importantes de la literatura española.

Cueva de Salamanca

Dejando atrás el Jardín, llegarás a la plaza de Carvajal donde se encuentra la cueva de Salamanca, otro lugar mágico de esta pequeña pero sorprendente ciudad. Se trata de una cripta que, según cuenta la leyenda, se dice que fue la sede de una escuela de ciencias ocultas donde el mismo diablo se manifestó para robar la sombra de un noble.

Otros, sin embargo, piensan que la cueva es la puerta de entrada a otra ciudad escondida. Si tienes la suerte de visitar Salamanca un viernes o un sábado, podrás disfrutar de un bonito espectáculo de luz y sonido por la noche. A la derecha también está el imponente edificio del convento y la iglesia de San Esteban, también visitada por Cristóbal Colón. Continuando por San Pablo también verás la Torre del Clavero y el Palazzo della Salina.

Espera al atardecer para ver la Ciudad Dorada

Los edificios de Salamanca están hechos de una cálida arenisca marrón que brilla con tonos dorados al atardecer y al amanecer, lo que le da a la ciudad su apodo.

Edificios como el Convento de San Esteban o el Palacio de la Salina son especialmente impresionantes al atardecer, y puedes seguir hasta el puente romano, uno de los lugares más bonitos de la ciudad, para hacer unas últimas fotos. Seguro que te llevarás a casa hermosos recuerdos, incluso con una breve visita a Salamanca.

Cuando cae el sol en Salamanca, la actividad más recomendable es acercarse al puente romano y dar un paseo junto al río. En este momento y desde este lugar puedes tomar las fotos más particulares y hermosas de la ciudad. Si prefieres algo más animado, explora los alrededores de la Plaza Mayor, de la plaza de San Justo y de las calles Bordadores y Gran Vía.

Recuerda que Salamanca es una ciudad universitaria y por ello la diversión y la fiesta nunca fallan. De hecho, en las áreas enumeradas anteriormente encontrará discotecas, bares y clubes también decorados de una manera extraña pero ideal para pasar una velada diferente a las demás.

Mejor tiempo para visitar

Aunque Salamanca es un destino para todo el año, encontrarás que el mejor momento para visitar esta ciudad española es en primavera y otoño. Es probable que encuentres temperaturas agradables y menos multitudes.

Salamanca se enriquece con una rica historia. Por supuesto, no se puedes ver todo Salamanca en un día. Sin embargo, un solo día es suficiente para pasear por los lugares mencionados que te darán una buena idea de la historia y vida de la región.

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