A lo largo de la provincia de Segovia encontramos muchas villas medievales que invitan a retroceder en el tiempo. Una de ellas es Maderuelo, un pueblo fortificado ubicado en lo alto de un cerro rocoso que se alza por encima de un meandro del Río Riaza, con el embalse de Linares a sus pies. Esta primera postal es preludio de lo que encontrarás detrás de los gruesos muros que rodean la villa.
Maderuelo es sin dudas un lugar recomendado para los amantes de la Edad Media y los sitios con historia. De la misma manera cautiva a quienes buscan destinos rodeados de naturaleza. Si eres uno de ellos, quédate con nosotros porque hemos preparado una guía completa con todo lo que puedes hacer en Maderuelo en un día.
La villa de Maderuelo es parte de la red de los Pueblos más Bonitos de España y, a su vez, fue declarada Conjunto Histórico-Artístico. Si a ello le sumamos el magnífico entorno natural en el que se sitúa obtenemos como resultado un destino imperdible. Además, su cercanía al Parque Natural Hoces del Río Riaza permite combinar lo mejor de la historia con una buena dosis de naturaleza en un mismo día.
Durante la Reconquista del siglo X, Maderuelo formó junto con Coca, Cuéllar, Fuentidueña y Sepúlveda la primera línea defensiva de la frontera del Duero. En su momento estaba completamente protegida por una gruesa muralla de la cual hoy se conservan algunos lienzos y el famoso Arco de la Villa. La fortificación contaba con cuatro puertas de acceso y un castillo integrado en el extremo oriental, del cual únicamente se conservan restos de una torre. A su vez, la población tuvo alrededor de 10 parroquias, quedando en pie únicamente la Iglesia de Santa María y las ermitas de San Miguel, Veracruz y Castroboda.
Estamos frente a una auténtica villa medieval que atesora gran parte de su pasado. Por eso, te proponemos conocer Maderuelo haciendo un recorrido a pie por cada uno de sus rincones. Luego, si te sobra tiempo, puedes hacer una visita al Parque Natural Hoces del Río Riaza y culminar de ese modo con un paseo increíble.
Recorrido de un día por Maderuelo
A medida que atravieses la inmensa puerta de acceso a la villa y te encuentres con sus casas antiguas, sus iglesias y restos de murallas, comenzarás a remontarte a su pasado. En otras palabras, todo el esplendor medieval de Maderuelo se abrirá ante tus ojos en una estampa inigualable.
La ruta a pie por Maderuelo te permitirá conocer sus rincones y monumentos más emblemáticos sin necesidad de caminar demasiado. Dentro del recinto amurallado encontrarás las plazas de San Miguel, del Baile y del Castillo, cada una con su encanto particular y sus edificios emblemáticos. En cuanto a las iglesias del interior de la villa, el conjunto más relevante lo conforman la Iglesia de San Miguel y la de Santa María del Castillo.
Fuera de la villa, podrás conocer la ermita de Castroboda, de la Veracruz y el embalse de Linares, que complementan enormemente la belleza paisajística de la estampa. A ello se suman el Puente Nuevo y el Puente Viejo, que si las aguas del embalse están bajas se dejará ver.
Sin más, comencemos nuestra ruta de un día por Maderuelo. Al final, te dejamos un mapa con cada uno de los puntos mencionados en el artículo.
Embalse de Linares
Lo primero que verás cuando llegues a Maderuelo será el Embalse de Linares, el cual es atravesado por un puente que conduce a la villa. Desde este sitio es posible apreciar Maderuelo desde abajo y ver todo el conjunto defensivo de la villa construida en lo alto de un risco.
El embalse fue inaugurado en 1951 y lleva el nombre del pueblo de Linares del Arroyo, que quedó sepultado bajo sus aguas. Es el mayor pantano de Segovia y tiene la función de regular las aguas del río Riaza. Además de eso, es un atractivo turístico en sí mismo, ya que es la única zona permitida de baño de toda la provincia de Segovia.
De ese modo, Maderuelo se ha convertido en un destino al cual acuden los locales a darse un baño en los cálidos días de verano. La zona ofrece una amplia playa con sectores de arena, chiringuitos, duchas y merenderos. El agua no es demasiado fría, aunque sí se recomienda ingresar con calzado.
Ermita de la Veracruz
Tras los muros que protegen Maderuelo y junto al puente se encuentra este sencillo templo románico. La Ermita de la Veracruz fue declarada Monumento Nacional en 1924 y sorprende especialmente por su interior. En él se encontró un conjunto de frescos románicos que son considerados los más importantes de España. Con el fin de protegerlos, en 1947 (cuando se construyó el embalse) fueron extraídos del lugar mediante una técnica llamada strappo y fueron trasladados al Museo del Prado.
Por eso, lo que verás hoy en día es una réplica de las pinturas originales realizada en el 2011. A pesar de eso, se trata de una obra de arte magnífica en la que se distinguen figuras de los apóstoles, ángeles y escenas del Evangelio. Como se trata de pinturas románicas, no poseen volumen ni profundidad. En caso de que desees ver las pinturas originales, deberás ir al Museo del Prado, en Madrid.
La Ermita de la Veracruz es el templo más antiguo de Maderuelo y todo parece indicar que se construyó sobre una antigua ermita visigoda. Según la tradición, era un sitio donde se rendía culto a los muertos y por el cual pasaron los templarios, quienes custodiaban allí uno de los fragmentos de la Santa Cruz que llegaron a la península Ibérica. De hecho, se cree que quienes la construyeron fueron precisamente los templarios.
La zona de baño sobre el embalse que mencionamos antes se encuentra precisamente al lado de la ermita.
Puente Viejo de Maderuelo
En épocas de antaño, un puente partía desde la Ermita de la Veracruz y llevaba hacia Maderuelo. Se trata de una antigua construcción de cinco ojos que hoy quedó semienterrada en el lodo del embalse. Sin embargo, cuando las aguas bajan, el Puente Viejo de Maderuelo se une a la postal de la villa.
Hoy en día, el acceso se realiza a través del Puente Nuevo, que corre paralelo al viejo. De ese modo, los visitantes pueden acceder a la parte alta del pueblo y dejar el coche en el parking a las afueras de la Puerta de la Villa.
Arco de la Villa
Cómo ya sabes, la villa de Maderuelo estaba rodeada completamente por una muralla y tenía un castillo que la hacían parte del sistema defensivo de la margen izquierda del Duero.
De todo este impresionante conjunto defensivo queda poco en pie. Además de algunos tramos de muro, se conserva el Arco de la Villa adosado a los restos de la muralla en la zona oeste. Hasta principios del siglo XX, el arco contaba con un foso y un puente que lamentablemente se perdieron.
La estructura cuenta con un arco abovedado y un matacán que protegía el acceso a la villa. Al día de hoy todavía son visibles los cerrojos y sus puertas de madera con adornos y policromía del siglo XV.
Plaza y Ermita de San Miguel
Lo primero que verás tras cruzar la Puerta de la Villa es la Plaza de San Miguel. Se trata de un pequeño espacio triangular rodeado de edificios medievales con portadas románicas y una gótica. Si buscas un poco, en las paredes de una casa observarás una estrella de David que da muestra de que Maderuelo también estuvo habitada por una comunidad judía.
La Plaza de San Miguel posee una escalinata de piedra que sube al patio o atrio de la Ermita de San Miguel, un templo románico que le da el nombre a la plaza.
La Ermita de San Miguel es una de las pocas construcciones religiosas que sobrevivieron al paso del tiempo. Se sitúa en el centro de la plaza, un poco por encima del resto de las edificaciones. Lo primero que llamará tu atención es el grosor de sus muros y sus aspilleras, lo cual hace creer que en su momento cumplió un importante rol defensivo. De todos modos, con el tiempo fue sufriendo varias remodelaciones que cambiaron su fisonomía. Por ejemplo, en el siglo XV se adosó una segunda nave rectangular y el campanario de la construcción original se convirtió en una vivienda.
Además de llamar la atención por fuera, también lo hace su interior, en donde se aprecian sepulcros ubicados por debajo de unos arcos góticos. Otros elementos a destacar son la talla policromada de san Miguel del siglo XVI y una imagen de la Virgen de los Descalzos que ya se encontraba en la antigua ermita.
Calle de Abajo y Calle de Arriba
Desde la plaza de San Miguel se bifurcan las dos calles más importantes de Maderuelo que llevan al otro extremo de la villa. Ambas se encuentran interconectadas por una serie de callejones transversales que se fueron construyendo con el tiempo.
En estas calles observarás un caserío con una estructura totalmente irregular. Las viviendas en su mayoría están deshabitadas, pero algunas han sido reacondicionadas en restaurantes, tiendas y hoteles. Otras construcciones se encuentran abandonadas y en estado ruinoso.
Este paseo por las sinuosas calles de Maderuelo te guiará hasta la Plaza del Baile, también conocida como Plaza Seoane, en honor a un benefactor del pueblo. En la misma se celebra cada año el famoso mercado medieval y otras fiestas y eventos culturales. Un poco más adelante de esta plaza se encuentra el antiguo edificio del Ayuntamiento, con su portada del siglo XVI.
Iglesia de Santa María del Castillo
La siguiente parada del paseo es en la Iglesia de Santa María del Castillo, la cual se encuentra en una plaza rodeada de viviendas de poca altura. Se trata del templo más importante de la villa, por ende, una parada obligada.
Esta plaza rectangular cuenta con dos accesos, uno por el este y otro por el oeste, que cruzan bajo dos arcos adosados a una gran espadaña. Según una leyenda, en el subsuelo de la Plaza de Santa María hay unos pasadizos en donde el señor de la villa, Don Álvaro de Luna, escondió sus tesoros durante el siglo XV. En la parte central de la plaza se ubica una picota en donde se colocaba a los condenados por la autoridad civil en la época feudal.
La Iglesia de Santa María del Castillo consiste en un templo mudéjar que a lo largo de su historia ha pasado por diversos estilos arquitectónicos. Es el único templo segoviano con restos del estilo califal y románico, correspondientes a una construcción anterior. Además, a diferencia de la plaza, mantiene inalterado su aspecto medieval y cuenta con una curiosa mezcla de elementos de ladrillo, mampostería y sillería.
Luego de un incendio en el siglo XVI la iglesia debió ser reconstruida con materiales que procedían de parroquias antiguas de la villa. Su espadaña se reconstruyó en el siglo XVIII y hoy en día cuenta con un campanario con cinco campanas. La nave principal llama la atención por su altura, su ábside semicircular y su techo de madera. Igual de llamativas son las cúpulas y ventanas mudéjares construidas en ladrillo en la nave lateral.
Por su parte, en el interior del templo se combina el ladrillo con la mampostería, destacando de manera especial la pila bautismal, algunas pinturas y el retablo mayor del siglo XVI adornado con relieves de la vida de Cristo.
El interior del templo también resguarda una momia hallada durante una de las obras de remodelación. Se trata de una joven fallecida a los 16 años que, por la ropa que llevaba puesta, se dedujo que pertenecía a una familia noble. Además, solamente los miembros de esta clase tenían el privilegio de ser enterrados en una iglesia.
El Arcacel: mirador de Maderuelo
En uno de los laterales de la iglesia se encuentra este mirador que regala una hermosa postal del embalse de Linares y la ermita de la Veracruz. El mismo ocupa un espacio comprendido entre la barbacana de la iglesia y la muralla y era el sitio donde antiguamente se sembraba cebada con la cual se alimentaba al burro o caballo del cura de la iglesia.
Otro de los detalles interesantes del mirador es que contiene una reproducción de una catapulta. La misma se utiliza para dar muestra al viajero de las armas con las que se defendía Maderuelo en épocas de antaño. Se cree que esta función defensiva fue especialmente importante durante la época del dominio musulmán.
Torreón del castillo
Si continúas hasta el final de la Calle Mayor llegarás a los restos del torreón, lo único que queda en pie del castillo de Maderuelo. La torre protegía el acceso norte de la villa y su estado ruinoso se debe a la caída de varios rayos que fueron derribando sus muros. De todos modos, todavía puede verse la disposición cuadrada del baluarte, en cuyo subsuelo existe un aljibe.
Puerta del Barrio
Una vez que llegues al final del recorrido por la Calle Mayor, puedes emprender el regreso por la Calle de Abajo, la cual desemboca en la Puerta del Barrio. Se trata de la segunda puerta de la muralla que se conserva en el pueblo, ubicada bajo una torre defensiva.
Es la única vía de acceso a Maderuelo por el norte, junto a la cual se encontraba el antiguo barrio judío de la villa, de allí que también se la conoce como Puerta del Barrio. Junto a ella hay un almacén de adobe que hacía de hospital y albergue de peregrinos.
Ermita de Castroboda
Si tienes tiempo, puedes acercarte a la Ermita de Castroboda, construida a finales del siglo XVIII en estilo neoclásico. Se encuentra ubicada afuera del municipio, a 1 km de la Puerta de la Villa y es accesible tanto en coche como a pie.
La construcción de la Ermita de Castroboda se llevó a cabo en el siglo VIII sobre los restos de una ermita anterior dedicada a San Roque. El concejo y los vecinos de la villa fueron quienes financiaron la obra, con el fin de darle un hogar a su patrona, la Virgen de Castroboda, la cual es venerada desde la Edad Media.
Si bien la construcción es sencilla, vale la pena acercarse a ella para disfrutar de las vistas espectaculares que posee de todo el conjunto defensivo de Maderuelo.
Plan alternativo: Hoces del Río Riaza
Si te queda tiempo, desde Maderuelo puedes emprender un pequeño y encantador recorrido por la comarca de la Serrezuela para ver de cerca el cañón fluvial de las Hoces del Río Riaza. El enclave se presenta como una de las mejores alternativas para los amantes del senderismo y la observación de aves.
El parque posee varios accesos, siendo uno de los más populares el que se realiza desde Montejo de la Vega de la Serrezuela. En esta localidad se encuentra la Casa del Parque y permite conectar con el sendero circular PRC-SG-5. Desde Maderuelo se puede llegar a pie recorriendo la senda circular PRC-SG-10.
El Parque Natural de las Hoces del Río Riaza es uno de los tesoros mejor guardados de la provincia de Segovia. Es un sitio de enorme belleza paisajística y un refugio de aves rapaces por el cual transcurre el río Riaza. Esto último permite que el parque funcione como estepario, presentando a su vez un fuerte contraste con el valle lleno de vegetación.
Las Hoces del Río Riaza son un verdadero santuario natural y un territorio protegido. Por eso, para regular la afluencia de turismo, desde el 1 de enero al 31 de julio, se necesita pedir un permiso especial para recorrer la zona de la reserva. Dicha autorización se puede obtener en la Casa del Parque Hoces del Río Riaza, en Montejo de la Vega. Entre diciembre y agosto el permiso no es necesario.
El Parque Natural se encuentra muy próximo al límite con la de Burgos y el curso del río Riaza lo divide en tres grandes zonas. La primera se localiza entre Maderuelo y la presa de Linares y la segunda entre la presa y el arroyo de El Casuar. En esta zona el río se encajona en piedras calizas formando un cañón de hasta 150 metros de profundidad. La última zona se localiza a partir de dicho arroyo hasta la localidad de Montejo de la Vega. En este sector el río deja atrás las piedras calizas y forma un valle hermoso.
Además de ser el sitio ideal para hacer un poco de senderismo, podrás visitar el Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega, que protege una de las reservas de buitres leonados más importante del continente europeo.
Mapa de Maderuelo
Fiestas y gastronomía de Maderuelo
Si bien Maderuelo es un pueblo que enamora en cualquier momento del año, hay ocasiones especiales donde su encanto es mayor. Dos ejemplos de ellos son las celebraciones de la Virgen de Águeda, que tienen lugar en febrero, y las de Nuestra Señora de Castroboda, en septiembre.
De todos modos, el mejor momento del año para visitar esta villa es durante el mes de agosto. En este momento, la villa hace un viaje al medioevo y sorprende a sus visitantes con su Fiesta Medieval, también llamada “Maderuelo Siglo XII”. Para la ocasión, los vecinos recrean los principales aspectos de aquella época, ya sea a través de tradiciones, comidas y simulaciones de batallas.
La gastronomía es otro de los elementos destacados de esta festividad. Los platos principales son el lechón asado y el cordero, muy valorado por su sabor. Acompañan los quesos curados, las setas y, por supuesto, exquisitos vinos con Denominación de Origen Ribera del Duero.
¿Cómo llegar a Maderuelo?
Maderuelo se sitúa al noreste de la provincia de Segovia, cerca del límite con las provincias de Burgos y Soria. En el primer caso, el viaje entre ambas localidades dura una hora y media y se sortea por la A-1. La misma carretera se usa para llegar desde Madrid, aunque el viaje es un poco más largo. La capital provincial, Segovia, se encuentra a 100 km de Maderuelo y conectada a ella mediante la N-110.
Maderuelo es un destino soñado que ha sido capaz de construir su encanto y conservarlo a través de los siglos. La riqueza natural de su entorno y su posición privilegiada en lo alto del risco hacen que la villa sea igual de atractiva para los amantes de la historia, como de la naturaleza. Este binomio de historia y encanto natural hacen que Maderuelo se convierta en una parada única.
Ya lo sabes, coge tu maleta y ponte en marcha. Maderuelo te espera con toda su magia.
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