Alicante es la capital de la provincia homónima y un importante destino dentro de la Comunidad Valenciana. Situada a orillas del Mediterráneo y custodiada por el monte Benacantil, esta hermosa ciudad disfruta de una gran calidad de vida, un clima agradable durante gran parte del año, un rico patrimonio histórico y playas extensas de arena dorada. A todo esto se suma una gastronomía deliciosa basada en arroces, pescados y mariscos frescos. En definitiva, Alicante es de esos destinos que lo tienen todo para seducir al viajero.

¿Qué haremos el día de hoy? Un recorrido por la capital alicantina y sus principales puntos de interés. Luego, nos adentraremos en las playas y en los atractivos turísticos de la provincia más cercanos a Alicante ciudad. De modo que puedas planificar unas vacaciones de una semana o varios días y tomarte ese merecido descanso que tanto necesitas.

Alicante-España

La provincia de Alicante se ubica al sureste de la Península Ibérica y es la más meridional y menos extensa de la Comunidad Valenciana. Como ya sabes, su capital es la ciudad homónima y aparte hay otra veintena de municipios llenos de encanto. Los mismos se distribuyen entre la costa y la zona interior montañosa y resguardan atractivos de todo tipo.

El litoral de Alicante se encuentra bañado por el Mar Mediterráneo y lleva el nombre de Costa Blanca, debido a que muchos de los pueblos que se asientan sobre él tienen este color característico. En total, la provincia cuenta con 244 km de playas, pequeñas calas y abruptos acantilados.

Alicante es un destino en donde las posibilidades de aburrirse son prácticamente nulas. Siempre encontrarás algo para hacer, ya sea en ciudad o provincia. No en vano, concentra la mitad del turismo de la Comunidad Valenciana y es la sexta provincia más visitada de España.

¿Listo para descubrir todo lo que hay para ver en Alicante ciudad y provincia? ¡Allá vamos!

¿Qué ver en Alicante ciudad en 1 día?

Si bien la ciudad de Alicante no es la más monumental de España, en su hermoso casco antiguo encontramos iglesias góticas, castillos medievales y edificios antiguos construidos entre los siglos XV y XVIII. Otro de sus principales puntos de referencia es el Castillo de Santa Bárbara, cuya posición en la cima de una montaña regala hermosas vistas de la ciudad.

Igual de famoso es su puerto deportivo, donde se agrupan muchos restaurantes y bares diversos que sirven pescados, mariscos, paellas, tapas, cócteles y excelentes vinos. Para el verano, el rincón más popular es Postiguet, un arenal del litoral alicantino situado en el corazón de la ciudad.

La ciudad de Alicante es pequeña y se recorre fácilmente en uno o dos días. De todos modos, son muchas las cosas que hay para ver allí. Por eso, hemos armado una lista muy completa de sus principales destinos y sitios de interés. Toma nota de cada uno de ellos y comienza a planificar tu recorrido. Al final de esta sección te dejamos un mapa interactivo con los sitios mencionados.

Antes de contarte qué ver en Alicante ciudad, te dejamos un par de tours interesantes para hacer en esta bonita y pequeña urbe mediterránea:

Barrio de Santa Cruz

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En la ladera del monte Benacantil encontramos un entramado de callejuelas estrechas y casas bajas encaladas pintadas de blanco correspondientes al barrio de Santa Cruz. Esta zona bohemia se corresponde con el casco antiguo de Alicante e invita a dejarse llevar y perderse entre sus cuestas, escaleras y calles.

Un buen consejo es subir por la Calle Labradores, donde encontrarás muchos bares y restaurantes para ir de tapas, luego bajar hasta la Basílica de Santa María y culminar dando un paseo por la Calle Mayor, una de las más comerciales del casco antiguo de Alicante.

Paseando por las cuestas y el entramado de calles del barrio te toparás también con la Concatedral de San Nicolás, con el famoso Ayuntamiento de Alicante y la plaza de San Cristóbal. Esta última podríamos definirla como el corazón del casco histórico y, junto con las calles Labradores y San Isidro, concentra la mayor oferta de ocio nocturno del casco antiguo.

Tip viajero: el mejor momento del año para recorrer las calles del barrio de Santa Cruz es durante la primera semana de mayo. Para la ocasión, tiene lugar una festividad conocida como Cruces de Mayo, durante la cual las calles se llenan de cruces de flores y coloridas ornamentaciones. La celebración recuerda el momento en que Santa Elena encontró la cruz en la que Cristo fue crucificado.

Como sea, el barrio de Santa Cruz es uno de los rincones más pintorescos y fotogénicos de Alicante.

Ayuntamiento de Alicante

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Uno de los emblemas del casco antiguo de Alicante es el Ayuntamiento, un edificio barroco del siglo XVIII que actualmente es la sede del gobierno de la ciudad.

Situado entre la Plaza del Ayuntamiento y de la Santísima Faz, en el barrio de Santa Cruz, es conocido como Palacio Municipal de Alicante y constituye uno de los edificios más bonitos de la ciudad. Se trata de una construcción monumental y de estilo barroco, cuya fachada rectangular consta de un cuerpo central de tres plantas y dos torres situadas en sus extremos.

El interior del edificio es igual de llamativo, con preciosas salas adornadas con pinturas de artistas locales. Destacan por ejemplo, el Salón de Alcaldes, el Salón Azul y el Salón de Plenos.

Los interesados en conocer la historia y detalles de este antiguo edificio pueden solicitar una visita guiada. También está la posibilidad de visitar gratuitamente la exposición conocida como “Alicante, la ciudad descubierta”, la cual expone restos  hallados durante las excavaciones de la antigua ciudad medieval. La muestra está abierta al público de lunes a viernes de 9 am a 2 pm.

Concatedral de San Nicolás

Muy cerca del Ayuntamiento encontramos otro de los emblemas del centro histórico de Alicante, la Concatedral de San Nicolás. Se trata de un antiguo templo edificado sobre los restos de una mezquita en estilo renacentista herreriano y gótico valenciano (en el caso del claustro del siglo XV). Es considerado el templo más importante de la ciudad y el punto donde más fieles y turistas se congregan.

No te conformes con apreciar únicamente su sobrio exterior, dedica también unos minutos en conocer su interior, donde se encuentran tesoros como su esbelta cúpula y las portadas del claustro.

La iglesia se puede visitar todos los días de 8:30 am a 1 pm y de 6 pm a 8:30 pm.

Monte Benacantil y Castillo de Santa Bárbara

En lo alto del monte Benacantil se alza el Castillo de Santa Bárbara, una imponente fortaleza medieval que constituye uno de los principales sitios de interés de Alicante. Por su posición privilegiada, regala hermosas vistas de la ciudad de Alicante y la playa de Postiguet.

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El castillo de Santa Bárbara fue construido por los árabes a finales del siglo IX, durante la época de la ocupación musulmana. De todos modos, debe su nombre a la festividad de Santa Bárbara, momento en el cual fue reconquistado por Alfonso de Castilla en el año 1248.

El interior del castillo cuenta con tres zonas que datan de diferentes épocas. Allí podrás ver restos árabes, construcciones realizadas en 1580 bajo las órdenes del rey Felipe II y zonas más modernas que se remontan al siglo XVIII.

Para visitar el castillo puedes apuntarte a este free tour por el castillo de Santa Bárbara. Si prefieres visitarlo por libre, tienes la opción de hacer uso del ascensor situado frente a la playa de Postiguet que por apenas 2,5 EUR llega a la cima de la colina. La entrada a la fortaleza es gratuita y todos los días se realizan visitas guiadas a las 11 am y a las 12:30 pm. Un plus son los meses estivales, cuando los viernes y sábados por la noche se celebran conciertos gratuitos en el patio.

El horario de visita es todos los días de 10 am a 8 pm, aunque en los meses de verano cierra a las 10 pm. El mejor horario para subir al Castillo de Santa Bárbara es al atardecer.

¿Sabías qué? El escarpado contorno del monte Benacantil dibuja una silueta que con un poco de imaginación recuerda al perfil de un guerrero árabe. De allí que se lo conozca con el nombre de Cara del Moro. El mejor sitio para apreciar esto es desde la playa del Postiguet.

Mercado Central de Alicante

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Un poco más arriba, es decir, yendo en dirección contraria al mar, encontramos el Mercado Central, otro de los sitios que ver en Alicante. Este edificio de dos plantas fue construido en 1911 y cuenta con elementos modernistas muy interesantes. Además de la arquitectura, es uno de los mejores puntos de la ciudad para tomar contacto con la gente local.

El interior del mercado está abarrotado de puestos que venden frutas y verduras provenientes de las huertas de la zona, mariscos y pescados del día, salazones, carnes y más. Todos los ingredientes de la tradicional paella alicantina podrás conseguirlos aquí, por ende, si deseas elaborar por tu cuenta este delicioso plato, ya tienes otro motivo para visitar el mercado.

Plaza de Luceros

A unas cuadras del mercado encontramos la Plaza de Luceros, una de las más emblemáticas de la ciudad. Situada en pleno centro moderno, consiste en un espacio abierto en cuya parte central hay una fuente monumental. Allí se celebran entre el 20 y el 24 de junio las populares fiestas de las Fogueres de Sant Joan.

Desde esta plaza puedes tomar la Avenida Doctor Gadea y caminar hasta llegar a la Explanada de España.

Explanada de España

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Otro de los rincones más fotografiados de la ciudad es la Explanada de España, una avenida de unos 500 metros que corre paralela al puerto.

Este corto paseo peatonal flanqueado por altas palmeras es uno de los puntos de reunión y recreo favorito de los alicantinos. Se distingue principalmente por su suelo que forma un mosaico de más de 6 millones de teselas de colores rojo alicante, negro marquina y crema marfil. El mismo imita las olas del Mediterráneo, que se encuentra muy cerquita.

La Explanada de España es el lugar perfecto para pasear, salir a comer o ir de compras. Durante la temporada estival se monta allí una colorida feria de artesanías donde podrás comprar recuerdos de viaje, comida y mucho más. Mientras paseas verás algunos edificios históricos, como la Casa Carbonell, hasta llegar al puerto deportivo.

Puerto de Alicante

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El puerto de Alicante es uno de los más antiguos de la región y otro de los rincones más animados de la ciudad de Alicante. Se encuentra situado en una bahía protegida por los vientos y es el punto donde atracan tanto las pequeñas barcas de pescadores como los barcos deportivos y cruceros.

El puerto concentra una gran oferta de ocio, restaurantes y bares donde comer algo con hermosas vistas al Mediterráneo.

Plus: Isla de Tabarca

Si tienes más de un día para visitar Alicante, hacer una excursión a la isla de Tabarca es otra de las actividades imperdibles.

Situada a 4 km del Cabo de Santa Pola, es la única isla habitada de la Comunidad Valenciana y un sitio al cual podrás llegar fácilmente cogiendo un ferry o taxi acuático en la propia ciudad de Alicante o la población de Santa Pola, desde donde el trayecto dura apenas 15 minutos en lancha rápida. Otra opción es contratar esta excursión a la isla de Tabarca y palmeral de Elche o contratar tu ferry desde aquí: ferry a la isla de Tabarca.

La isla Tabarca posee 1800 metros de largo y 450 de largo, por lo que es muy pequeña. Su población de 55 habitantes pasa a más de 4.000 en verano, cuando los turistas copan el lugar buscando playas cristalinas y puntos de snorkel. Dar un paseo por la isla, conocer el pequeño pueblo fortificado, la Torre de San José y el faro son actividades que complementan y enriquecen el paseo por la isla.

Por supuesto, saborear su deliciosa gastronomía basada en arroces, pescados y mariscos es otra de las actividades obligadas para hacer en allí. Su plato más famoso es el Caldero Tabarquino.

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Mapa de Alicante ciudad

Tal como te prometimos al principio, aquí te dejamos un mapa de la ciudad de Alicante y sus diferentes atractivos. Como verás, la mayoría se encuentran cerca uno del otro, por lo que caminando podrás cubrir la mayoría de las distancias.

¿Cómo llegar a Alicante?

Una manera cómoda de llegar a la capital alicantina es tomando el tren de alta velocidad AVE, el cual demora unas 2 horas y media desde Madrid.

Otra opción es volar a su aeropuerto internacional situado a 15 km del centro. El aeropuerto de Alicante está dentro de los más transitados de España y recibe vuelos procedentes del Reino Unido, Alemania y otros países del norte de Europa. Desde allí es posible llegar fácilmente al centro de la ciudad usando diferentes medios de transportes.

Una de las formas más sencillas de llegar del aeropuerto al centro es tomando el autobús C-6, el cual hace un recorrido de unos 20 minutos. El mismo opera todos los días desde las 6 am a las 11:30 pm y el precio del billete ronda los 3-4 EUR.

Dentro de la ciudad hace paradas en la Estación de Autobuses, la Plaza Puerta del Mar, la Plaza de Los Luceros y otras. Esta última conecta con la red local de tranvías, la cual permite llegar fácilmente a la mayoría de los atractivos de la ciudad.

El taxi es siempre una opción más cómoda, pero también más cara, puesto que el viaje puede costar entre 20 y 25 EUR. Los coches se toman directamente desde la parada de taxis, aunque también se pueden reservar online en la web oficial.

Finalmente, otra opción que te recomendamos es alquilar un coche y tenerlo disponible para moverte de esta manera por la provincia. El recorrido se hace por la carretera N-332. Si alquilar un coche escapa de tu presupuesto, la compañía de buses ALSA realiza viajes directos a otros destinos turísticos de la costa alicantina, como Calpe, Denia o Benidorm.

Las playas más bonitas de Alicante

El litoral de Alicante cuenta con playas hermosas para pasar unas vacaciones de verano a pleno sol. Si viajas fuera de la temporada estival, de todos modos siguen siendo espacios agradables para caminar, tomar fotografías o disfrutar de la brisa marina. Cual sea la situación, son estas las playas de Alicante que más te recomendamos visitar:

Playa Postiguet

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Este hermoso arenal se encuentra en la capital alicantina, junto al puerto y a los pies del Castillo de Santa Bárbara. Por su belleza y características, sumado al fácil acceso desde el centro histórico se ha convertido en todo un emblema de la ciudad de Alicante.

Con poco menos de 1 km de extensión, es el principal punto de encuentro de las familias locales y turistas que viajan con niños pequeños, gracias a sus aguas cristalinas, poco profundas y calmas. La arena dorada y fina resulta ideal para tomar sol, tumbarse a leer o jugar un partido de fútbol o vóley.

Junto a la playa Postiguet se encuentra el paseo marítimo de Alicante (el Paseo de la Explanada), en el cual se concentran muchas terrazas, restaurantes y el puerto deportivo. El extremo este recibe el nombre de playa del Cocó y es el punto desde el cual se lanzan los castillos de fuegos artificiales en las fiestas de las Hogueras de San Juan.

La playa dispone de todo tipo de servicios y comodidades: duchas, alquiler de hamacas, zonas de juegos infantiles, bares y chiringuitos, aparcamiento y áreas para practicar deportes como el vóley-playa.

Playa de San Juan

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A unos 8 km de Alicante se encuentra la playa de San Juan, un paraíso de arenas finas y aguas transparentes muy apreciado por los alicantinos y turistas. Se trata de un enorme arenal de 3 km de largo que se extiende desde el municipio de Campello hasta el barrio alicantino de Cabo de la Huerta. Muy cerca se encuentra el famoso club Alicante Golf, así como hoteles de diferentes categorías.

La playa de San Juan cuenta también con todo tipo de comodidades y áreas que se prestan para practicar deportes. También dispone de zonas de juegos infantiles, toboganes, aseos, servicio de socorristas, alquiler de hamacas y más. En su recorrido aparecen también muchos restaurantes y bares donde comer algo rico.

Esta playa es también el sitio donde tiene lugar la tradicional fiesta de la noche de San Juan, una festividad cristiana que se celebra cada 24 de junio, ocasión en que la costa se llena de hogueras.

Playa de Albufereta

Situada al noreste de la ciudad, entre la Serra Grossa y el Tossal de Manises, la playa de Albufereta es otra de las más famosas de Alicante. Se ubica en el centro de la zona residencial con el mismo nombre y es muy concurrida durante la temporada estival, momento en que se convierte en un popular punto de veraneo para los alicantinos.

Esta bonita playa se ubica en la zona donde se inició la ciudad de Alicante, de allí que cuenta con importantes yacimientos arqueológicos. A unos 800 metros se encuentran los restos de una embarcación romana hundida en la cual se ha realizado un fantástico trabajo de arqueología submarina.

La playa de la Albufereta tiene 400 metros de largo y se caracteriza por tener arena fina y dorada y aguas tranquilas ideales para el baño. Sus servicios incluyen duchas, puestos de socorristas, pasarelas para minusválidos, alquiler de sombrillas, zonas de juegos para niños y una amplia oferta gastronómica.

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Calas del Cabo de la Huerta

Entre las playas de San Juan y Albufereta se encuentra Cabo de la Huerta, un tramo de costa que brinda una experiencia de playa más íntima y tranquila, alejada de los puntos más concurridos del litoral de Alicante. Este rincón mediterráneo se ha convertido en una zona naturista, con calas de aguas transparentes y fondos marinos rocosos ideales para el snorkel y el buceo.

El conjunto está integrado por varias calas, entre ellas la cala de los judíos (Cala dels Jueus o dels Xodíos o Cala del Martell), un pequeño tramo de costa de 200 metros compuesto por rocas y arena fina. También tenemos la cala Cantalar o Cantalares, de 100 metros de extensión y unas bonitas vistas a la ciudad de Alicante.

Para bucear una de las mejores opciones es la cala de la Palmera, gracias a sus maravillosos fondos rocosos. Esta pequeña cala se ubica en la zona residencial cercana al famoso faro de Cabo de la Huerta. Por cierto, a los pies de esta construcción hay un conjunto de pequeñas calas muy pintorescas.

¿Te gustaría visitar las calas del Cabo de la Huerta haciendo un recorrido en kayak? No te pierdas esta actividad: tour en kayak por el Cabo de las Huertas.

Playa de Agua Amarga

¿Viajas con tu amigo peludo de cuatro patas para todos lados? Entonces esta playa “Dog-Friendly” será tu favorita de Alicante. Este arenal adaptado para perros cuenta con los servicios pertinentes y es apta para el baño de los perros. De esa manera, podrás pasar unos días de verano junto a tu mascota.

Si tienes tiempo para recorrer la costa de Alicante hay muchas otras playas hermosas que vale la pena visitar. Entre ellas encontramos:

  • Cala Granadella
  • Cala de Moraig
  • Cala de Portixol
  • Playa de Albir
  • Cala Racó del Conill

¿Qué ver en los alrededores de Alicante?

Alicante es una provincia que atesora muchas joyas escondidas a lo largo y ancho de su territorio. Muchos de sus pueblos y ciudades se ubican sobre la costa y cerca de la capital y también en su interior, donde encontrarás grandes sorpresas.

En otras palabras, luego de destinar uno o dos días a pasear por Alicante capital, puedes dedicar otros tantos días a conocer diferentes puntos de la provincia. Si no deseas alejarte demasiado de la ciudad, acá te dejamos un par de sitios cercanos a los que podrás llegar en poco tiempo.

Benidorm

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Una de las ciudades costeras más famosas de España es la turística Benidorm. Situada a los pies del Mediterráneo y a tan solo 45 km al norte de Alicante, es un destino sumamente bien preparado para recibir a sus visitantes. De hecho, junto con Madrid y Barcelona es la ciudad con más plazas hoteleras de todo el país, lo cual es una muestra clara de su importancia turística.

Su playa principal es la del Levante, un arenal urbano de 2 km de longitud repleto de servicios y acompañado de un animado paseo marítimo. Más extensa aún es la playa del Poniente, cuyos 3 km de extensión están más orientados al turismo familiar. Las aguas son limpias, cristalinas y calmas, perfectas para ir con niños. A 3 km del centro encontramos la pequeña cala de Finestrat, un rincón hermoso para pasar la tarde.

Benidorm conserva un pintoresco casco antiguo y el famoso Balcón del Mediterráneo, situado en la parte histórica de la ciudad. Este hermoso mirador marca el límite entre las playas del Levante y del Poniente y regala una postal fabulosa de la costa.

Altea

Altea-España

Un poco más allá de Benidorm se encuentra Altea, cuyas casas encaladas frente al mar ofrecen una postal de singular belleza. Dueña de un coqueto casco histórico, Altea es de esos rincones de visita obligada.

Una de las mejores cosas que hay para hacer en Altea es subir por las calles de su casco antiguo hasta la iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, famosa por sus dos cúpulas cubiertas de azulejos azules. Desde allí se aprecia el cúmulo de casas que caen desde la ladera hasta la orilla del Mediterráneo. Un consejo es que te dejes llevar por estas calles laberínticas y estrechas repletas de detalles que le dan su sello distintivo a Altea.

A pocos metros de la iglesia encontramos el mejor punto panorámico de Altea, el mirador de los Cronistas o mirador de la Muralla. Desde allí no solo se aprecia la ciudad y sus casas blancas, sino también el puerto, los acantilados de Sierra Helada y, si el tiempo lo permite, el emblemático Peñón de Ifach

Altea cuenta también con un paseo marítimo lleno de bares y restaurantes, un pequeño mercado y playas como la Olla, Roda y del Espigón.

Calpe

Calpe-Alicante

Otro pueblo (o ciudad pequeña) situado cerca de Alicante es Calpe. Custodiado por el Peñón de Ifach (una monte de piedra caliza de más de 300 metros de altitud), esta pequeña localidad es ideal para recorrerla a pie, visitar su lonja y presenciar una subasta, ir a las Salinas para avistar flamencos y otras aves migratorias, conocer los Baños de la Reina y más. Calpe es simplemente otro imperdible de la costa alicantina.

Calpe cuenta con más de 12 km de costa salpicada de playas largas, calas pequeñas y escondidas y muchos rincones de encanto. Yacimientos arqueológicos que se remontan a la Edad del Bronce, un pintoresco casco antiguo lleno de detalles y una gastronomía basada en productos frescos de mar enriquecen aún más su cartera turística.

El protagonista indiscutible de su paisaje es el majestuoso Peñón de Ifach, considerado uno de los accidentes geográficos más bonitos del Mediterraneo español. La postal mas hermosa se obtiene al atardecer, cuando los rayos del sol tiñen de color rojizo este imponente promontorio de roca caliza. Los más aventureros y activos pueden subir hasta su punto más alto y llevarse una postal envidiable.

Debajo del peñón se encuentra la hermosa y pequeña cala El Racó, cuyas aguas cristalinas atraen a los buceadores. A partir de allí comienza un agradable paseo marítimo completamente peatonal que culmina en el puerto de Calpe.

Guadalest

Guadalest-España

Abandonamos la costa por un rato y nos vamos a Guadalest, un pequeño pueblo del interior de Alicante que enamora gracias a la belleza de su casco histórico. En cada esquina encontrarás un sitio para tomar una foto, un monumento, un museo, un bar o un restaurante.

Conocido como el Castell de Guadalest, este pueblo de apenas 200 habitantes se encuentra situado en el valle formado por las sierras de Xortá, Serrella, Aitana y Berna. Su sello distintivo es el Castell de Guadalest, una fortaleza de la época hispanomusulmana (del siglo XI) por cuyos muros pasaron tropas árabes, la Corona Española y familias nobiliarias.

Otro sello de identidad es la entrada al pueblo: un túnel que atraviesa la montaña en lo alto de la cual se alza el castillo. Una vez adentro te encontrarás con hermosas casitas de color blanco y prolijamente decoradas que conducen a la plaza del Ayuntamiento. Desde allí se obtienen unas vistas hermosas de la provincia de Alicante, con el embalse de Guadalest y la frondosa vegetación verde del valle como protagonistas indiscutibles.

¿Sabías que Guadalest es el municipio con mayor cantidad de museos por habitante de toda España? Así es, por ende, encontrarás muchas propuestas culturales para disfrutar de tu paseo por este pintoresco pueblo.

Elche y su famoso palmeral

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A menos de 30 km por carretera de Alicante encontramos Elche, otra joya del interior que te invitamos a conocer. Conocida como la “ciudad de las palmeras”, es la tercera más poblada de la Comunidad Valenciana y un destino que ofrece muchas posibilidades a sus visitantes.

Elche conserva un bien cuidado casco antiguo lleno de construcciones de diversas épocas y estilos arquitectónicos. Pero, si por algo es famosa la ciudad es por su palmeral, que presume de ser el más grande de Europa en su especie. El Palmeral de Elche es Patrimonio de la Humanidad, se ubica en plena ciudad y debe su presencia a los árabes.

En su interior se divide en diferentes zonas o huertos y ofrece un paseo muy placentero que sumerge al visitante en un verdadero oasis sin salir de la ciudad. Uno de sus rincones más destacados es el Jardín Huerto del Cura, el cual cuenta con alrededor de 1.000 palmeras y plantas mediterráneas y tropicales. La más famosa es la Palmera Imperial, cuyo tronco se ramifica en 7 brazos.

Con el Palmeral ya tienes un motivo más que válido para visitar Elche, aunque no es el único. En todo caso, merece la pena hacer el corto viaje entre Alicante y esta bonita ciudad y descubrirlos por ti mismo, ¿no crees?

Villajoyosa

Villajoyosa-Alicante

Muy cerquita de Alicante encontramos otra pequeña joya de la Costa Blanca, Villajoyosa. Situada a 30 km de la ciudad, esta villa sorprende por sus casas coloridas y su ambiente tradicional de pueblo de pescadores. De todos modos, no faltan actividades recreativas ni propuestas gastronómicas enfocadas al turismo.

Lo más destacado de este pueblo marinero son sus chocolaterías, sus pintorescas calles, sus antiguas murallas, el Barrio del Arsenal y sus casitas coloridas, sus museos y playas. En otras palabras, Villajoyosa es otra parada fundamental de la costa de Alicante que sin dudas disfrutarás mucho de conocer.

Santa Pola

A 20 km de Alicante encontramos Santa Pola, una antigua villa marinera que hace de puerta de entrada a la isla de Tabarca. Se trata de uno de los principales núcleos turísticos del sur de la provincia y un destino con una larga historia y un rico patrimonio que conserva huellas de su pasado.

El Parque Natural de las Salinas de Santa Pola es otro de sus principales reclamos turísticos. Este escenario natural de gran belleza es el hogar de muchas especies de aves acuáticas, incluyendo algunas migratorias. Por ende, es una escapada ideal para los amantes de la observación de aves.

En Santa Pola encontramos también un puerto y restaurantes en donde el pescado está a la orden del día. Del mismo modo, encantadoras playas que convierten a esta localidad en un paraíso en la época estival. Entre ellas destaca la playa Lisa, Tamarit, La Gola, Pinet, entre otras. Con más de 300 días de sol al año, Santa Pola es un refugio mediterráneo que se disfruta en todo momento.

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Parque Natural del Montgó

Nos vamos al otro extremo de la provincia, al límite norte. Allí encontramos una de las joyas naturales más destacadas del litoral de Alicante: el Parque Natural del Montgó. Este espacio protegido se ubica entre Dénia y Jávea y alrededor del macizo del Montgó y es la escapada soñada para los amantes del senderismo.

El Montgó posee un gran valor ecológico, arqueológico y cultural. En sus cuevas se han hallado vestigios que se remontan al Paleolítico Superior y Neolítico, desde objetos hasta pinturas rupestres bien conservadas. También se preservan restos de poblados íberos, romanos y musulmanes.

La mejor manera de conocer las maravillas del parque es haciendo sus rutas de senderismo. No dejes de acercarte al Centro de Interpretación y consultar por las diferentes opciones, recorridos y precauciones a tener en cuenta.

Mapa de los alrededores de Alicante

Claro que quedan más cosas por ver en Alicante. De todos modos, creemos que con los sitios propuestos ya tienes suficiente para entretenerte unos cuantos días. En este mapa podrás ver la ubicación de cada uno de ellos.

¿Qué comer en Alicante?

Para cerrar este artículo sobre Alicante te hablaremos un poco de su gastronomía, la cual será un ingrediente muy importante del viaje.

Como buena ciudad mediterránea, los sabores alicantinos provienen principalmente de los pescados y mariscos del día, del aceite de oliva y del arroz. La montaña también provee materias primas de gran valor, de allí que su cultura culinaria resulte de la fusión entre el mar y la montaña. Con estos ingredientes los chef deleitan el paladar de los comensales que se sientan en sus bares y restaurantes a recargar energías.

¿Sabías que el ingrediente estrella de la gastronomía alicantina es el arroz? Con este producto se combinan otros ingredientes propios de la dieta mediterránea: aceite de oliva virgen extra, azafrán de hebra, tomate, ajo y la ñora, así como las verduras más frescas y los productos del mar obtenidos con la pesca de todos los días. La ciudad cuenta con muchos restaurantes certificados con el sello Alicante Ciudad del Arroz que ofrecen los mejores platos con este ingrediente.

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Hay cientos de platos con arroz para comer en Alicante. Uno de ellos es el arroz a banda, un plato típico de los pescadores que tiene un origen humilde. Lo encontrarás en la carta de la mayoría de los restaurantes de la ciudad.

El Caldero es un plato tradicional de la Isla de Tabarca que también tiene su origen en las raíces pesqueras de la población. Igual de popular es el cocido de mar, que consta de arroz y pescado acompañado de patatas hervidas y alioli.

Otra auténtica delicia alicantina es el arroz negro, que debe su color intenso a la tinta de calamar. Generalmente se acompaña con sepias frescas, pulpitos y, por supuesto, calamares.

Un plato que se consume mucho en Alicante, a pesar de que es originario de la ciudad de Valencia, es el all i pebre. Se trata de un guiso que se cocina con anguila troceada, guindilla, ajo, pimentón dulce, aceite de oliva y perejil, aunque en ocasiones se agregan patatas, salsa de almendras trituradas y pan tostado. Los podrás comer en cualquier restaurante de la Explanada de España junto con una buena copa de vino.

Podríamos dedicar un artículo completo a hablar sobre la gastronomía de Alicante y no aburrirnos. Lo que hemos hecho aquí es una invitación a que pruebes sus platos más típicos. Después de todo, Alicante es de esos destinos que se disfrutan también con el paladar. Sus sabores, texturas y colores hablan mucho de la esencia de esta provincia de la Comunidad Valenciana que te terminará enamorando.

Así es Alicante, una tierra de mar y montañas, playas amplias y llenas de servicios, calas pequeñas y pedregosas, ciudades cómodas para caminar, pueblos de pescadores, escenarios naturales de postal y más.

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