Paseo por la histórica Avenida de Mayo

Hoy vamos a conocer una de las arterias más famosas y emblemáticas de la Ciudad de Buenos Aires: la Avenida de Mayo. Situada en el barrio de Monserrat, se trata de la columna vertebral del centro histórico y el primer boulevard que tuvo Buenos Aires. Una vía histórica, llena de edificios y con una arquitectura a destacar. Si viajas a Buenos Aires, pasear por la famosa Avenida de Mayo es tarea obligada. Descubre aquí su historia, sus edificios más emblemáticos, los mejores sitios para comer y más.

La Avenida de Mayo se extiende a lo largo de 10 cuadras que comunican la histórica Plaza de Mayo con la Plaza del Congreso. Si bien hoy en día queda opacada por las avenidas Corrientes, 9 de julio y Santa Fe, no pierde el esplendor de sus épocas de antaño. Además, es una propuesta imperdible para conocer el pasado de la ciudad.

A lo largo de su historia, la Avenida de Mayo se transformó en el epicentro de las relaciones hispano-argentinas y en el escenario de grandes manifestaciones sociales. Por esto y más, en 1997 fue declarada como Lugar Histórico Nacional.

Además de historia, la Avenida de Mayo tiene mucha vida, bares, restaurantes, cafeterías, tiendas de ropa. Por eso, es también una vía comercial y un paseo de compras. Sea cual sea el motivo que te lleve a recorrerla, estamos seguros de que pasear por esta avenida emblemática de Buenos Aires será algo que disfrutarás hacer.

Historia de la Avenida de Mayo

Si te gusta la historia y la arquitectura, tienes que saber que ambas confluyen en la Avenida de Mayo. Un dicho popular dice que fue diseñada por franceses, construida por italianos y habitada por españoles. El mismo hace referencia a que es un testimonio fiel de las corrientes inmigratorias que pasaron por Argentina en el siglo pasado. Es decir, que un poco de cada uno de estos países se aprecia en ella.

La Avenida de Mayo fue pensada por Torcuato de Alvear, el primer intendente de Buenos Aires. Aunque, no llegó a ver la obra completa, puesto que falleció en julio de 1894, cuatro años antes de su inauguración. La construcción de la avenida comenzó en 1883 y llevó poco más de 10 años, debido a que hubo muchos enredos y pleitos legales en el medio.

La Avenida de Mayo se puso en funcionamiento 78 años después de la Independencia de Argentina declarada por el Congreso de Tucumán. Por eso, se dice que esta gran arteria marcó un antes y un después entre el pueblo que era hasta entonces y la ciudad que se comenzó a forjar luego de ese acontecimiento histórico.

Su diseño estuvo inspirado en los bulevares de París, aunque lo cierto es que posee una marcada influencia hispana. Los bares, restaurantes, el Teatro Avenida y los hoteles muestran la impronta de la colectividad española que se instaló en la ciudad el siglo pasado. De allí que su diseño te recordará por momentos a la Gran Vía madrileña.

Todas estas construcciones elegantes le dieron a la calle mucha categoría y pronto se convirtió en un popular punto de encuentro. La gente se reunía en sus sofisticados bares y cafés a beber algo y compartir las novedades. En otras palabras, la Avenida de Mayo no tardó en cobrar vida.

A su vez, en los bares y cafés de la Avenida de Mayo se percibía una atmósfera intelectual y bohemia. Las personas que se reunían en sus mesas eran en gran medida inmigrantes, poetas, pintores y periodistas; aunque también se congregaron funcionarios del gobierno para discutir temas relacionados con la política.

Sobre la Avenida de Mayo funcionaban también las oficinas y redacciones de los periódicos más importantes del momento, como La Prensa, La Razón y Crítica.

Hoy en día, esta avenida de casi 1 km es recorrida a diario por locales y turistas que se mueven de punta a punta, ya sea a pie o tomando el subte de la línea A. En sus extremos se localizan hacia el este la Casa Rosada (o Casa de Gobierno) y hacia el oeste el edificio del Congreso Nacional. De allí que desde siempre ha sido escenario de todo tipo de manifestaciones populares y políticas, ya sean protestas o de índole festiva.

¿Qué ver en la Avenida de Mayo?

La riqueza arquitectónica de la Avenida de Mayo es difícil de igualar. Por eso, los entendidos en esta materia se dan un verdadero festín en ella. Lo mejor de todo, es que conserva el esplendor de sus mejores tiempos, manteniendo un carácter cosmopolita y energético.

Las construcciones de la Avenida de Mayo poseen una mezcla llamativa de estilos Art Nouveau, Belle Époque y Art Déco, dando como resultado una destacada muestra arquitectónica. Por eso, no puedes caminar esta calle sin prestar atención a los cientos de detalles que lucen sus edificios. Pasar al lado del Palacio Barolo y no detenerse a admirar su grandeza sería prácticamente un pecado.

Por eso, caminar por la Avenida de Mayo es sinónimo de admirar algunos de los edificios históricos más destacados y hermosos de la ciudad. También puedes tomar algo en un café o comer un plato bien argento en sus restaurantes.

¿Te gustaría saber qué hay para ver en la Avenida de Mayo de principio a fin? Desde la Plaza de Mayo a la Plaza del Congreso, los sitios más interesantes son los que te nombramos a continuación. Al final, te dejamos un mapa con cada punto mencionado.

1- Plaza de Mayo

Ningún rincón de la ciudad supera en importancia a la Plaza de Mayo. No solo es la más antigua de la ciudad, sino que en ella tuvieron lugar los acontecimientos históricos más cruciales de la historia argentina, a excepción de la Declaración de la Independencia.

La plaza lleva su nombre en homenaje a la Revolución del 25 de Mayo de 1810, la cual tuvo lugar en esta misma plaza y fue la que dio inicio al movimiento independentista de Argentina. Allí también tuvo lugar la segunda fundación de Buenos Aires, el 11 de junio de 1580 (en aquel entonces, con el nombre de Ciudad de la Santísima Trinidad y Puerto de Santa María del Buen Ayre).

Muchos años después, en 1890, fue la sede del primer acto político de masas, en el cual se celebró la creación de la Unión Cívica, partido político que más tarde daría origen a la actual Unión Cívica Radical. Desde ese entonces y hasta el día de hoy, las manifestaciones sociales en la Plaza de Mayo son moneda corriente. A partir de 1977, se convirtió en el punto de reunión de las Madres de Plaza de Mayo, quienes reclaman por sus hijos desaparecidos durante el último proceso militar.

A su alrededor se congregan los edificios gubernamentales, civiles y religiosos más importantes de la ciudad. El Cabildo, la Catedral Metropolitana, la Casa de Gobierno (conocida popularmente como Casa Rosada), el Palacio del Gobierno de la Ciudad y el Banco de la Nación Argentina.

En la parte central se encuentra la Pirámide de Mayo, una obra de 19 metros de altura construida en 1811 para celebrar el primer aniversario de la Revolución de Mayo; y el monumento a Manuel Belgrano, el creador de la bandera nacional.

Además de fotografiar la famosa Casa Rosada, puedes conocer mejor la historia argentina en el Museo Histórico Nacional del Cabildo y de la Revolución de Mayo. El mismo funciona en el Cabildo, una construcción de 1725 que fue la antigua sede del Virreinato del Río de la Plata.

Tampoco dejes de visitar la imponente Catedral Metropolitana, cuya fachada luce un marcado estilo neoclásico, mientras que el interior parece una iglesia colonial española. Igual de imponente es el Banco de la Nación Argentina. Construido entre 1940 y 1955, lo más llamativo es su impresionante bóveda de 50 metros de diámetro.

2- Casa de la Cultura

Muy cerca de la Plaza de Mayo y sobre la Avenida de Mayo se encuentra este edificio que hizo de sede del diario La Prensa. Erigida en el siglo XIX, se trata de una de las construcciones más lujosas de la ciudad. No en vano, remite a la Belle Époque de Buenos Aires.

La Casa de la Cultura pertenece al Gobierno de la Ciudad y, además de albergar oficinas públicas, en ella se celebran todo tipo de espectáculos, cursos y talleres. Cuenta con 6 pisos y 2 subsuelos estructurados en base un gran patio central. Coronando el edificio, se aprecia una farola de bronce dorado que representa la diosa de la sabiduría Palas Atenea.

Una curiosidad de este lugar se remonta a la época en que funcionaba allí el periódico La Prensa. El mismo tenía una metodología un tanto particular: antes de anunciar sus noticias más importantes hacía sonar una sirena. Este sistema novedoso se usó por primera vez en 1900, cuando asesinaron al rey Humberto I de Italia; también cuando Argentina salió campeona en el Mundial de Fútbol de 1978; y en 1983 para celebrar el regreso a la democracia y la asunción del presidente Raúl Alfonsín.

3- London City

Pegado a la Casa de la Cultura se encuentra este clásico bar de la Ciudad de Buenos Aires. Si recorres la Avenida de Mayo, puedes hacer una parada técnica para comer y tomar algo y de paso admirar el ritmo de vida de la capital argentina.

London City tiene una ubicación estratégica en la esquina de Avenida de Mayo y la calle Perú. Por ello mismo, es el punto de encuentro de los locales que buscan reunirse cerca de la zona bancaria de la ciudad o como lugar de almuerzo para los empleados que trabajan en la zona. Desde siempre, ha sido testigo del movimiento incesante de esta activa zona de la ciudad.

4- Pasaje Roverano

Situado en la Avenida de Mayo, frente a la Casa de Cultura y al lado del Museo Histórico Nacional del Cabildo y de la Revolución de Mayo, se encuentra el Pasaje Roverano. El mismo representa la galería comercial más antigua de la ciudad, cuyo aspecto original no se ha perdido pese al paso del tiempo.

Desde este punto se accede a la estación de subte Perú, la cual conserva el aspecto típico de principio de siglo XX.

5- Café Tortoni, el más antiguo de la Avenida de Mayo

Un poco más adelante (en Avenida de Mayo 826), encontramos otro de los bares más emblemáticos de esta vía y todo el barrio de Monserrat. El Café Tortoni fue fundado en 1858 y es el más antiguo de la Ciudad de Buenos Aires. Por ende, visitarlo es sinónimo de hacer un viaje al pasado.

El Café Tortoni recibe a sus visitantes con su atmósfera bohemia, sus mesas de mármol y sus paredes que cuentan la historia de la ciudad. A lo largo de su trayectoria, ha sido el punto de encuentro de los escritores, poetas, pintores y músicos más aclamados. Por él pasaron nada más y nada menos que Quinquela Martín, Juan de Dios Filiberto, Arturo Rubinstein, Federico García Lorca, Alfonsina Storni, Jorge Luis Borges y muchas otras figuras ilustres.

Hoy en día, es uno de los establecimientos gastronómicos más turísticos de la Avenida de Mayo. Por eso, no dudes en tomarte un rico café, una taza de chocolate o de leche merengada. Antes o después, llévate una foto de recuerdo de su fachada. Y, si te gusta el jazz y el tango, no dejes de asistir a alguno de los espectáculos que se celebran en su subsuelo.

6- Academia Nacional de Tango y Museo Mundial de Tango

Otro de los edificios históricos de la Avenida de Mayo es el de la Academia Nacional de Tango. Creada en 1990, alberga el Museo Mundial del Tango, una galería de arte, el instituto Liceo Superior (que dictan cursos de tango de 3 años) y salones donde se dan clases de baile. Visitar el museo y los edificios es, sin dudas, la mejor manera de tomar contacto con este baile emblemático de Argentina.

7- Monumentos al Quijote

Siguiendo por Avenida de Mayo te toparás con esta obra del escultor andaluz Aurelio Teno. El monumento al Quijote llegó a Buenos Aires en 1890 como regalo del gobierno español para conmemorar el aniversario n.º 400 de la ciudad.

El mismo rinde homenaje al ingenioso don Quijote de la Mancha, el protagonista de la célebre obra escrita por Miguel de Cervantes Saavedra a comienzos del siglo XVII.

8- Teatro Avenida

Poco después de cruzar la intersección de Avenida de Mayo con Avenida 9 de Julio, te encontrarás con el Teatro Avenida.

El edificio fue inaugurado en 1908 y reconstruido en 1994 y luce un marcado estilo francés. En 1945 se estrenó en él la obra de Federico García Lorca “La casa de Bernarda Alba” y desde siempre se han presentado diferentes obras de España, entre ellas zarzuelas. También es habitual que haya espectáculos de música lírica y ópera.

9- Palacio Barolo, un imperdible de la Avenida de Mayo

Una de las construcciones más majestuosas que verás a lo largo de la Avenida de Mayo es el Palacio Barolo. Su construcción se remonta a 1921 y estuvo a cargo del arquitecto italiano Mario Palanti, quien diseñó este magnífico edificio para el empresario Luigi Barolo. En 1923 fue inaugurado y en ese entonces representó el edificio más alto de Sudamérica, hasta que se construyó el Kavanagh en 1935.

Por otro lado, el Palacio Barolo fue el primer edificio de hormigón armado de casi 100 metros de altura. En el piso 22 estaba rematado por un faro giratorio que en 1923 transmitió con sus luces el resultado de la pelea entre Luis Angel Firpo y Jack Dempsey por el título mundial de boxeo en Nueva York.

Otro detalle del edificio es que rinde una especie de homenaje a la Divina Comedia de Dante. Tanto Palanti como Barolo eran admiradores de Alighieri, por lo que en muchos rincones hay referencias a su obra más emblemática. Por ejemplo, la división general del proyecto en tres partes haría alusión al infierno, el purgatorio y el cielo de la Divina Comedia de Dante. Incluso, se dice que era tal el fanatismo de Barolo que quería depositar los restos del poeta y escritor italiano en el palacio.

Por otro lado, también se aprecian reminiscencias de la arquitectura de la India. El motivo de ello es que Palanti tomó algunas referencias del Palacio de los Vientos en Jaipur y del templo Rajarani en Bhubaneshvar.

Finalmente, otro detalle es que sus 22 pisos de altura tienen diferentes formas. La torre y el farol de la parte superior fueron restaurados en el 2010 y lucen todo su esplendor. Por esto y más, el Palacio Barolo es una de las grandes maravillas arquitectónicas de la ciudad.

Si quieres conocerlo a fondo, no dejes de sumarte a alguno de los recorridos guiados que organiza el lugar para conocer su historia, curiosidades e infinidad de detalles.

10- Edificio La Inmobiliaria

Junto al Palacio Barolo se encuentra una de las esquinas más fotografiadas de la Avenida de Mayo, el edificio La Inmobiliaria.

Se trata de un complejo edilicio levantado en el año 1910 que sorprende por sus altas cúpulas rojas. Es obra del arquitecto italiano Luis Broggi y sede de una de las primeras compañías de seguros de Buenos Aires. Su estilo es marcadamente ecléctico, con influencias neoclásicas y del Art Nouveau.

11- Plaza Congreso

Finalizando tu recorrido por la Avenida de Mayo llegarás a otro de los puntos más importantes de la ciudad: la Plaza Congreso. Al igual que la Plaza de Mayo, es habitual que en ella haya manifestaciones y reclamos de los ciudadanos.

Su creador fue el arquitecto y paisajista francés Carlos Thays, quien también trazó importantes espacios verdes de la ciudad, como el Parque Tres de Febrero (Bosques de Palermo) y la Plaza San Martín. Su inauguración tuvo lugar durante los festejos del centenario de la Revolución de Mayo de 1810.

Tal como indica su nombre, el edificio más representativo de la plaza es el Palacio del Congreso de la Nación Argentina. Su construcción comenzó en 1897 y, aunque fue inaugurado en 1906, la obra estuvo finalizada recién en 1946. Quien dio vida a esta obra fue el arquitecto Victor Meano (el mismo que construyó el hermoso del Teatro Colón). Su fachada con características clásicas es una maravilla.

Frente al Congreso de la Nación Argentina verás el Monumento de los dos Congresos. Esta obra inaugurada en 1914 es una creación de los belgas Jules Lagae y Eugenio D’Huicque. La escultura principal del monumento está realizada en bronce oscuro y simboliza la República; a ella se suman dos figuras femeninas que evocan la Asamblea de 1813 y el Congreso de Tucumán de 1816, cuando se declaró la Independencia Nacional. Hacia el este se extiende una fuente que representa el Río de la Plata y dos figuras que simbolizan los ríos Uruguay y Paraná.

Junto a ella se encuentra la Plaza Mariano Moreno, cuyo elemento más distinguido es la famosa escultura de Augusto Rodin conocida como el “Pensador”. También verás un monolito blanco y cuadrado que marca el kilómetro 0 de las rutas nacionales.

Admirando el imponente edificio del Congreso y este famoso monumento es donde darás por concluido tu paseo por la Avenida de Mayo.

Sin dudas, es una de las visitas obligadas para hacer en Buenos Aires. Recorrerla puede llevarte tiempo, más aún si te detienes a tomar fotografías, te sientas en un bar o visitas algún museo. Lo mejor es hacer el paseo tranquilo y sin prisas. Buenos Aires es una ciudad dinámica en la que sus ciudadanos viven acelerados. Tú como turista, te puedes dar el lujo de pasear por sus calles sin necesidad de correr. Después de todo, estás en un destino imponente, lleno de sorpresas y tesoros por descubrir.

Comer en la Avenida de Mayo

Comer en Avenida de Mayo es posible gracias a la enorme cantidad de bares y restaurantes que se concentran en este kilómetro de longitud. Además de London Bar y el Café Tortoni, hay otros espacios que combinan historia, arquitectura y las más arraigadas tradiciones culinarias.

Por ende, la Avenida de Mayo es una invitación constante a descubrir sus encantos con el paladar. En London City, por ejemplo, puedes hacer como Cortázar y pedir un té con leche y una porción de torta a elección, una rosca de almendras o una porción de budín inglés. Para los amantes de lo salado no faltan los sándwiches de miga, los fosforitos y las tostadas con manteca.

La propuesta emblema del Bar Tortoni es el chocolate con churros. El chocolate se sirve normal o espeso, acompañado de tres churros calientes bañados con azúcar. Una propuesta irresistible para los golosos.

Otro sitio emblemático de Avenida de Mayo es Baguetín Castelar, el bar del histórico Hotel Castelar. La especialidad de la casa es un sándwich relleno de puntas de espárragos, tomate, rúcula y queso blanco. Sin dudas, una opción novedosa, sabrosa y saludable.

¿Sabías qué? El escritor español Federico García Lorca estuvo hospedado durante seis meses en el Hotel Castelar. Desde su balcón, espiaba la siempre activa Avenida de Mayo y encontraba inspiración para sus obras. Hoy en día, su habitación (la 704) permanece abierta al público como museo y también se realizan visitas guiadas para conocer la historia.

El Bar Iberia (en Avenida de Mayo 1196) es otro sitio ideal para sentarte a comer algo rico. Las picadas son el sello distintivo de este bar, que es el segundo más antiguo de Buenos Aires. Además, puedes comer tapas españolas, pastas, pizzas y las clásicas milanesas.

¿Quieres comer pizzas y empanadas? Entonces tienes que ir a Los 36 Billares. Este bar restaurado en 2014 además de comida rica, brinda a sus comensales mesas de billar y pool para pasar el rato. No dejes de probar la famosa empanada de locro, la cual se elabora con maíz blanco, porotos, garbanzos, panceta, carne y chorizo colorado. Ideal para un día fresco o lluvioso.

Mapa de la Avenida de Mayo

Aquí tienes un mapa con cada punto mencionado a lo largo del artículo. Esperamos que este paseo por los puntos más emblemáticos de la Avenida de Mayo haya sido de tu agrado. Sin dudas, caminar por esta vía famosa y comprender que ocurrió en sus edificios más importantes es algo que le da un plus al recorrido.

Ya lo sabes, si vas a visitar la Ciudad de Buenos Aires, ¡no dejes de descubrir su avenida más histórica!