China es un país con una densa población, sin embargo vale la pena destacar las curiosas ciudades desoladas que se encuentran en el país. Estas ciudades están formadas por edificios, autopistas, centros comerciales, parques y todas las comodidades de una urbe moderna, pero hace falta el elemento primordial que da vida a una metrópolis: los habitantes.
La visión de los promotores chinos es construir primero toda la ciudad para habitar después. Por tanto esto le atribuyen que muchas ciudades están construidas y listas para ser pobladas, pero aun las personas no se han mudado a ellas. Por ejemplo la ciudad de Dantu, distrito en Jiansu, provincia al este de China, tardó 10 años en habitarse, hoy cuenta con 380.000 personas.
China afirma que las ciudades fantasmas son un fenómeno transitorio que se debe al proceso de urbanización propio del país y no se debe a un proceso de abandono. Sin embargo a pesar de esto, existe una ciudad famosa por su poca y casi nula población, llamada Ordos.
Ordos Kangbashi: la ciudad fantasma más grande de China
Está situada en el norte de China, en el límite con Mongolia. Ordos Kangbashi fue una ciudad diseñada para albergar a más de 1 millón de habitantes. Sin embargo, la ciudad solamente cuenta con un décimo de la población para la cual está preparada.
Fue construida a finales del año 2000. La razón principal de su construcción, fue gracias al descubrimiento de unos importantes depósitos de carbón en la zona cercana a la ciudad. Sin embargo, la crisis económica causó una significativa caída en el precio del carbón, que iba a ser la principal actividad de la ciudad, por lo cual muchos planes no pudieron concretarse.
Generando una posible causa de la falta de población en la ciudad, a pesar de contar con grandes edificios y estructuras terminadas. Cuenta con avenidas, circunvalaciones, jardines, parques y zonas de recreación. Tiene todos los elementos necesarios para ser una gran ciudad.
Pero dada la poca cantidad de habitantes, sus calles son desoladas, sin tráfico ni personas, los centros comerciales vacíos y con pocas tiendas abiertas, dando un aire y sensación apocalíptica. Calles vacías y miles de edificios de viviendas permanecen abandonados a pesar de los esfuerzos del gobierno por repoblarla, convirtiéndola en un lugar insólito y de culto.
A pesar de su desafortunada situación, la ciudad cuenta con una belleza arquitectónica producto de la inversión realizada en su construcción, que es resaltada por el inusual ambiente que la hace parecer casi una ciudad fantasma.
