Buendía es un pequeño pueblo de la provincia de Cuenca, ubicado muy cerca de la frontera con Guadalajara y famoso por la llamada Ruta de las Caras. Es un destino con mucho encanto, tanto dentro de su núcleo urbano como en sus alrededores. Su ubicación junto al embalse que lleva su mismo nombre, las muchas rutas de senderismo y varias opciones de turismo rural, han puesto a Buendía en la mira de muchos turistas.
Buendía es una importante localidad turística de la Alcarria Conquense, que se encuentra rodeada por el Embalse de Buendía y la Sierra de Altamira. Esta situación geográfica inmejorable favoreció la presencia humana en la zona desde la prehistoria. Hoy en día, atrae cada vez a más turistas, de hecho, en el 2018 fue elegido como el pueblo más bonito de Castilla La Mancha. Posiblemente, sea el trazado medieval, el resto de murallas o sus atractivos naturales lo que hacen de Buendía una escapada perfecta de fin de semana.
¿Sabías qué? Según la leyenda, este municipio antiguamente se llamaba Fuentesaúco. Esto cambió durante la reconquista de la provincia de Cuenca, cuando el rey Alfonso VIII y su pequeño ejército se enfrentaron en estas tierras con los musulmanes. Como los cristianos eran minoría, el capitán pidió ayuda a la Virgen de los Desamparados, quien intercedió y el ejército cristiano terminó ganando la batalla. Dicen que ante la victoria el capitán dijo a sus soldados «¡Buen día hemos echado!», y desde ese entonces el pueblo adoptó el nombre de Buendía.
El día de hoy vamos a descubrir todo lo que Buendía tiene para ofrecer a los turistas que lo visitan, además de su popular Ruta de las Caras.
¿Qué ver en Buendía?
Muchos viajeros llegan a Buendía para hacer el recorrido de la Ruta de las Caras, aunque, lo cierto es que vale la pena dedicar parte del día a recorrer este pintoresco pueblo. Allí las calles siguen el patrón medieval, con la Plaza Mayor en el centro, el Ayuntamiento y la Iglesia en torno a ella.
Murallas de Buendía
Antiguamente, la villa de Buendía estaba rodeada por murallas de cal y canto y contaba con 5 puertas que daban acceso al recinto (la puerta Calzada, la Puerta del Castillo, el camino del Convento, la calle Botica y el camino de La Isabela). Actualmente, solo quedan en pie las estructuras originales de la puerta del Castillo y la del Convento. Asimismo, pueden verse los restos de los muros del sector norte y este de la muralla.
Plaza Mayor
Lo más destacado de Buendía es el maravilloso conjunto arquitectónico que forman la Iglesia y la Plaza Mayor, alrededor de las cuales se distribuye el casco urbano.
La Plaza Mayor de Buendía es conocida también como la Plaza de Arriba y se encuentra unida por una esquina con la Plaza de Abajo. Es la típica plaza castellana porticada con arcos de medio punto. Desde aquí se aprecian algunos de los edificios más importantes de la localidad (el Ayuntamiento, la Cámara del duque y la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción).
Iglesia Nuestra Señora de la Asunción
La Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción impresiona por su tamaño, su torre de cuatro cuerpos y su fachada herreriana. Se trata de una de las iglesias más grandes de la comarca, cuya superficie es superior a los 1000 m². Fue construida entre los siglos XV y XVI en estilo gótico, destacando su fachada de estilo barroco y herreriano.
Dato curioso: si te acercas bien a su puerta, verás unos pinchos en donde eran castigadas las personas durante la época de la Inquisición (las aplastaban contra la puerta).
Su interior también es muy llamativo, especialmente por su tamaño y majestuosidad. Destaca la piedra caliza de sus paredes y sus muros de arenisca, que proceden de las canteras de los alrededores de Buendía. También destacan sus capillas, que antes eran propiedad de las familias adineradas de la villa, que luego se incorporaron a la Iglesia. Lo mismo sucede con el coro, el altar mayor y la pila bautismal de estilo románico construida en 1415.
Museos de Buendía
En Buendía puedes visitar también algunos museos. Uno de ellos es el Museo de la Botica, ubicado muy cerca de la Plaza Mayor, en donde se encontraba una antigua botica que funcionó hasta 1981. Hoy en día, se ha convertido en un museo que permite a los visitantes conocer el laboratorio, el salón, la farmacia, un laboratorio químico y una sala llena de libros antiguos. Es una visita interesante que te permitirá conocer sobre los boticarios a quienes perteneció y ver reliquias como el libro de registro (donde podrás corroborar cómo fueron cambiando los precios).
Dato curioso: el Museo de la Botica exhibe casi 400 recipientes con plantas, esencias, químicos y otros productos que se usaban en el tratamiento de dolencias y en la fabricación de medicinas.
Otro paseo original y curioso es al Museo del Carro, en el cual mediante una visita guiada podrás aprender muchos datos curiosos sobre estos carros. Se encuentra ubicado en la parte baja de la antigua Casa Tercia, uno de los edificios más antiguos de Buendía, de origen visigodo.
Como te podrás imaginar, este antiguo edificio guarda una colección de carros que te transportarán a épocas pasadas. Observarás carruajes de todo tipo, algunos de los cuales se utilizaban para transportar pasajeros y otros para la agricultura. Además, a través de ellos conocerás parte de la geografía española. ¿Te lo vas a perder?
Cuevas de Buendía
¿Sabías qué? Buendía se asentó sobre suelo de piedra arenisca, motivo por el cual sus habitantes construyeron muchas cuevas. Hoy en día, esas cuevas se han convertido en un atractivo turístico y se usan para guardar el vino artesanal que se realiza en la localidad.
La Ruta de las Caras
La Ruta de las Caras es el recorrido turístico más popular para hacer en Buendía. Se encuentra ubicado en plena Alcarria Conquense, en un entorno lleno de encanto. Se trata de un museo al aire libre en donde verás formas y figuras esculpidas en la roca caliza, muchas relacionadas con el hinduismo y el budismo. Sin dudas se trata de un trekking sencillo, súper interesante e ideal para hacer en familia.
Como nos encanta la historia, te vamos a situar un poco en cómo surgió este atractivo. Para eso debemos remontarnos a mediados del siglo XX, época en la que Buendía estaba deforestada por el pastoreo intensivo y la tala masiva. Afortunadamente, la construcción de la presa en el río Guadiela modificó positivamente el paisaje y la zona se repobló con pinos para evitar la erosión de los márgenes del río.
Eulogio Reguillo y Jorge Juan Maldonado son los creadores de esta popular ruta. La brillante idea de esculpir esculturas en la piedra arenisca surgió en 1992, mientras acampaban por la zona. De ese modo, se pusieron manos a la obra y dieron origen a la primera escultura de la Ruta de las Caras, conocida como “La Monja”. La misma fue el punto de partida del cual nació este gran proyecto que hoy día cuenta con más de 15 esculturas.
Las esculturas de la Ruta de las Caras están inspiradas en diferentes cosas. Por ejemplo, algunas de ellas lo están en dioses de la India, como Krishna, mientras que otras lo están grandes en compositores como Beethoven o en duendes mágicos. Incluso, verás una escultura de la patrona de Buendía, Nuestra Señora de los Desamparados.
Ahora, ¿en qué consiste el paseo? La Ruta de las Caras es una agradable caminata de 1,5 km de longitud que regala hermosas vistas de la Sierra de Altamira. Es un recorrido sencillo, con poco desnivel que puede hacerse en una hora. No solo disfrutarás de las estructuras, sino también de unas hermosas postales del embalse de Buendía y los pinares de la zona.
El recorrido es circular y pasa por todas las caras que conforman la ruta. El acceso puede hacerse en coche, que se deja en una zona habilitada como aparcamiento. Prácticamente, todo el trayecto transcurre a la sombra de altos árboles y, si bien posee algunos escalones y tramos un poco más incómodos, cualquier persona puede hacerlo. Procura llevar calzado cómodo, agua y traje de baño, en caso de que quieras darte un chapuzón en alguna playa del embalse.
La Ruta de las Caras de Buendía se divide en 3 grupos y el trayecto puede comenzar desde el 1 o el 3. Al ser una ruta circular, sea como sea verás todas las esculturas. Sin embargo, te sugerimos que comiences el recorrido por el grupo 3, puesto que las caras más impresionantes son las del primer grupo (dejar lo mejor para el final siempre es un estímulo). Además, el grupo 1 es el más cercano al parking.
Ahora sí, haremos un recorrido por las diferentes esculturas que encontrarás en la Ruta de las Caras de Buendía.
Grupo 1
Como te mencionamos antes, en este grupo se encuentran algunas de las más grandes y atractivas de la Ruta de la Caras.
- Moneda de la Vida: es la primera escultura que conforman el grupo 1 y quien te da la bienvenida al paseo. Consiste en una estructura circular que representa el origen del cosmos y de la vida. La parte circular del diseño habla del universo, en cambio, los huesos y el círculo interior representan el cuerpo de la madre.
- La Cruz Templaria: muestra la figura que se utilizaba para decorar las velas de las naves que usó Colón en sus viajes a América. Es una de las esculturas más sencillas de todas, por lo que si no prestas atención puede pasar desapercibida.
- Krishna: siguiendo el recorrido te encontrarás con la cara de uno de los dioses más venerados de la India: Krishna. La escultura de 3,8 metros de alto y 2,2 de ancho es tan fiel que incluye la pluma de pavo real con la que se transportaba el dios. La belleza de la escultura y la prolijidad de los detalles es verdaderamente sorprendente.
- Chamán: los Chamanes eran brujos capaces de sanar el cuerpo y el espíritu de las personas gracias a sus poderes. Por supuesto que no podía faltar una escultura dedicada a ellos en la Ruta de las Caras de Buendía. Una curiosidad de esta escultura tan llamativa es que sus escultores demoraron 8 años en terminarla (fue la que más tiempo implicó de todo el circuito). Resulta que la piedra usada era dura y se agrietaba con facilidad, lo cual dificultaba el trabajo.
- Maitreya: regresamos al Budismo y nos encontramos con la cara del dios Maitreya, el sucesor de Siddhartha Gautama para los budistas. Un detalle de la escultura es el tercer ojo que aparece entre ceja y ceja, el cual representa la iluminación y la conciencia.
- Arjuna: te advertimos que el Budismo estaba muy presente en la Ruta de las Caras. En este caso, la siguiente escultura con la que te encontrarás es la de Arjuna, un heroico guerrero. Para la mitología hindú, este dios fue el vencedor de una de sus más grandes leyendas. Apréciala bien, porque es la última cara del circuito inspirada en culturas orientales.
- La Espiral del Brujo: la última escultura del grupo 1 es la llamada Espiral del Brujo y representa la organización del tiempo en el espacio, el movimiento y el cambio. Algunos creen que la misma puede haberse inspirado en el movimiento de las galaxias.
Grupo 2
El grupo 2 se compone de 7 figuras: la monja, el duende negro, el chemary, Beethoven, el duende indio, el paleto y el duende de la grieta.
- La Monja: como te contamos al principio, esta escultura fue la primera en realizarse. Se trata de una escultura sencilla y de menor tamaño que otras del paseo.
- Chemary: muestra la figura de un gigante dormido que a su vez transmite la paz y la quietud de un bosque. Muchos le encuentran también forma de gnomo que parece estar meditando.
- Virgen de las Caras: fue construida en honor a la patrona de Buendía: Nuestra Señora de los Desamparados.
- Beethoven: el gran compositor alemán y director de orquesta no podía no estar representado en la Ruta de las Caras. La expresión de la escultura lo muestra con semblante pensativo, como si estuviera creando su próxima sinfonía. Sin dudas, se trata de una de las esculturas más famosas del paseo.
- Los duendes: también están presentes en la Ruta de las Caras. Entre ellos resalta la escultura del Duende Negro, que es el que presenta rasgos más similares al ser humano.
Grupo 3
Las esculturas del grupo 3 se encuentran centradas en el pantano.
- La Muerte: es una de las obras más llamativas de la Ruta de las Caras, además, es la única que mira hacia el este, como esperando la salida del sol. Ya desde el camino puede divisarse, elevada sobre una gran roca. No dudes en acercarte a ella y disfrutar del mirador con vistas al embalse.
- La Dama del Pantano: en la base de la misma roca se encuentra esta escultura que representa a una bella mujer. Cuando el embalse de Buendía alcanza su máximo nivel, la cara de la Dama del Pantano se refleja en sus aguas.
Sin dudas que la Ruta de las Caras es un imperdible de cualquier viaje a Buendía. Lo mejor de todo, es que tanto la entrada como el parking son gratuitos y permanecen abiertos los 365 días del año.
Embalse de Buendía
Si pensaste que hasta aquí llegaba el artículo con las mejores cosas para ver y hacer en Buendía, te equivocas. Aún nos queda hablarte de otro de sus orgullos y atractivos turísticos: el embalse.
El embalse de Buendía es una obra de ingeniería de 78 metros de altura y 315 metros de longitud, que lo convierten en el cuarto más grande de España. Fue construido en 1958 de manera paralela al embalse de Entrepeñas y se encuentra comunicado a él mediante un túnel-canal de 5 km de longitud.
Además de las vistas y el color del agua, lo atractivo del embalse es que cuenta con algunas zonas de baño donde podrás refrescarte en los calurosos veranos. Uno de ellos es el llamado «La Cespera», que se encuentra al norte de Buendía y cerca de un camping. También hay una agradable zona de baño cerca de la Ermita San Andrés de Poyos, la cual está repleta de pinares que dan muy buena sombra natural y mucho encanto al paseo. Un dato curioso de la ermita es que está próxima a un antiguo pueblo llamado Poyos, que quedó sepultado bajo las aguas del embalse.
Las mejores postales de las aguas azules del embalse de Buendía se obtienen desde el paseo de la Ruta de las Caras, especialmente desde el mirador ubicado en la escultura de La Muerte. Además, podrás hacer una ruta de senderismo que conduce al mirador Peña de la Virgen, desde donde se obtienen vistas muy bonitas.
El embalse se encuentra sobre la carretera CM-2000 y cuenta con aparcamiento a ambos lados, así que no te lo puedes perder.
¿Qué ver en los alrededores del pantano?
Si tienes ganas de más, en los alrededores del embalse de Buendía encontrarás varias rutas de senderismo. Una de ellas es la ruta llamada PR-CU 47, también conocida como Geo-ruta cañón río Guadiela. Consiste en una caminata de 12 km y unas 4 horas de duración, que atraviesa paisajes muy bonitos. La misma avanza hacia el fondo del cañón del río Guadiela y culmina en la ermita de la Virgen de los Desamparados, que está excavada en la roca.
Comienza en el embalse de Buendía y transcurre junto al río Guadiela durante todo el recorrido. Pasarás por varios puntos atractivos hasta llegar a la ermita de la Virgen de los Desamparados. Lo más llamativo sin dudas es su importancia geológica, que se aprecia en las paredes del cañón. Las mismas poseen capas de diferentes materiales que datan de los períodos jurásico, cretácico y cuaternario hasta tiempos actuales.
El sendero solo es exigente en algunos tramos donde hay pendientes pronunciadas, pero en general es bastante plano y sencillo.
¿Cómo llegar a Buendía?
Buendía se encuentra a 156 km de Madrid, por lo que es un destino de fin de semana muy visitado por quienes viven en la capital. Si viajas desde Madrid en coche, deberás tomar la A-2 dirección Guadalajara y luego N-320. Otra alternativa es hacer el viaje por la A-3 hasta Tarancón (provincia de Cuenca). En ambos casos el viaje te llevará un poco menos de 2 horas. Una vez en el pueblo, encontrar un sitio para aparcar no es problema, pero se sugiere hacerlo fuera del centro. También puedes viajar en autobús desde Cuenca y Guadalajara sin problemas.
Hasta aquí nuestro recorrido por Buendía y la Ruta de las Caras. Como verás, una visita a Buendía no está completa sin hacer esta popular ruta, a la vez que el pueblo en sí mismo tiene mucho encanto. Definitivamente, es un excelente plan para pasar un fin de semana diferente, alejado de los ritmos acelerados de las grandes urbes y en pleno contacto con la naturaleza.