La capital de Perú es una ciudad repleta de atractivos culturales, históricos, naturales y gastronómicos. Prácticamente, todos los viajeros que pasan por este país mágico dedican un día completo a descubrir Lima. Lo cierto es que podrías pasar más días y no dejar de descubrir cosas. Pero, si el tiempo apremia, el centro de Lima debería ser tu prioridad. Por eso, te invitamos a hacer un recorrido por la parte histórica de la ciudad y descubrir su rico patrimonio.
El centro de Lima se encuentra dentro del distrito de Lima Metropolitana, en la Región Lima. Las calles, iglesias y edificios coloniales del casco histórico son una delicia para los sentidos. Poder pararse en el sitio donde el conquistador español Francisco Pizarro fundó la ciudad, allá por 1535, es todo un privilegio.
Conocida como la “Ciudad de los Reyes” por haber sido la capital del Virreinato del Perú hasta 1821, el centro de Lima atesora notables ejemplos de arquitectura monumental española. Podríamos definirlo como una máquina del tiempo al cual puedes acudir para conocer, al menos un poco, cómo era la Lima de épocas de antaño.
Si bien la Lima moderna que se aprecia desde los acantilados de la Costa Verde se presenta imponente, el centro histórico es quien verdaderamente se roba el corazón de los viajeros.
¿Listo para conocer el centro de Lima? ¡Allá vamos!
El centro de Lima: Patrimonio de la Humanidad
El centro de Lima es Patrimonio de la Humanidad y bien merecida tiene dicha mención. La parte antigua de la ciudad es conocida también con el nombre de “Damero de Francisco Pizarro”, gracias a su diseño en forma cuadrática militar. La Plaza de Armas es el corazón de esta zona y el punto de partida para descubrir los atractivos que resguardan las calles del centro de Lima.
Cada calle, plaza y rincón del casco histórico habla de su historia. El Jirón de la Unión, la Casa Osambela, el Palacio del Márquez de Torre Tagle… Todos ellos son ejemplos claros de esto. Aunque, para comenzar este viaje al pasado hay que situarse en la Plaza de Armas.
La Plaza de Armas o Plaza Mayor de Lima fue el sitio donde Francisco Pizarro fundó la Ciudad de los Reyes el 18 de enero de 1535. No fue hasta la destrucción de la Muralla de Lima en el siglo XVIII que la ciudad comenzó a expandirse. La modernización comenzó en los albores del siglo XX, durante el gobierno de Augusto B. Leguía, y en ese momento se perdieron muchas construcciones coloniales, causando revuelo entre los limeños.
Por suerte, la Municipalidad de Lima creó a mediados del siglo XX un programa y una junta de especialistas con el fin de identificar y proteger los monumentos históricos y artísticos del caso histórico. Gracias a ello, el centro de Lima es testimonio vivo de su historia y se ganó la mención de Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1988.
Tip viajero: cuando camines por el centro de Lima verás muchas casonas que tienen un logo de color negro y blanco pegado en su fachada. El mismo señala que dicha construcción forma parte de la UNESCO.
¿Qué ver en el centro de Lima?
Hay varios puntos interesantes por descubrir en el centro histórico de Lima: plazas, monumentos, casonas con balcones coloniales, iglesias que atesoran valiosas obras de arte, claustros, santuarios, tabernas y restaurantes llenos de tradición.
Allí puedes simplemente perderte por sus calles y dejarte llevar. O bien, optar por algunos de estos recorridos guiados:
- Tour por la Lima colonial y el Barrio Chino
- Free tour por Lima
- Tour por las casas coloniales de Lima
Como te dijimos antes, una de las primeras cosas que tienes que conocer es la Plaza de Armas y todo lo que se levanta a su alrededor. Luego, puedes dar un paseo por la larga y siempre concurrida Jirón de la Unión (la calle más importante del centro de Lima), hasta desembocar en el Barrio Chino, solo por dar un ejemplo.
Plaza de Armas
La Plaza de Armas de Lima (aunque, lo correcto sería decir la Plaza Mayor), está dentro de las más hermosas de Sudamérica. Este ícono indiscutido de la ciudad fue testigo de dos de los acontecimientos más relevantes en la historia de Perú: la fundación de Lima en 1535 y la proclamación de la Independencia del Perú en 1821.
Fue allí donde el general don José de San Martín proclamó su discurso de independencia el sábado 28 de julio de 1821. En esta ceremonia pública y solemne nació la República del Perú y comenzó una nueva etapa en la historia de la nación.
La plaza fundadora es el mejor punto de partida para explorar los atractivos del centro de Lima. Así tengas muchos o pocos días para recorrer la ciudad, pasar por la Plaza de Armas es algo obligado. No solo tomarás contacto con la vida de los limeños, sino que verás algunos de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Por si fuera poco, es atravesada por el Jirón de la Unión, Jirón Carabaya, el Jirón Junín y el Jirón Huallaga, algunas de las vías más concurridas de Lima.
La Plaza de Armas se encuentra rodeada de edificios que datan del periodo colonial: la Catedral, la Casa del Oidor, la Pileta de Agua; y otras del período republicano (después de 1821), como el Palacio de Gobierno (hogar del presidente de turno) y el Palacio Municipal (sede principal de la Municipalidad Metropolitana de Lima).
La Pileta de Agua ocupa el centro de la Plaza de Armas y hasta hace unas décadas era conocida como el “kilómetro 0”, puesto que marcaba el punto desde el cual se empezaban a medir los kilómetros para señalizar las carreteras.
Tip viajero: una de las mejores cosas para hacer en la Plaza de Armas del centro de Lima es presenciar la ceremonia de cambio de guardia. La misma se realiza todos los días por el cuerpo militar en el patio de honor del Palacio Presidencial. ¡No te lo pierdas!
Catedral de Lima
La Basílica Catedral Metropolitana de Lima y Primada del Perú o la Catedral Basílica San Juan Apóstol y Evangelista, es el primer edificio religioso construido en la época colonial y uno de los sitios más distinguidos de la ciudad.
En 1535 Francisco Pizarro colocó la piedra angular del templo original, solo que unos años después fue destruido por un terremoto. De allí que el templo que verás hoy en día data del año 1746 y se distingue por su mezcla de estilos neoclásicos, renacentistas y barrocos.
Si llegas a Lima con la intención de hacer turismo religioso, por aquí deberías comenzar el recorrido. El interior de la catedral resguarda las obras de arte eclesiástico más antiguas de la época colonial. También descansan allí los restos de Francisco Pizza; como también se observan hermosos retablos de estilo barroco.
Otra de las cosas interesantes de la visita a la Catedral de Lima es poder ingresar a las criptas ocultas bajo las capillas del templo. Las mismas forman parte de un circuito de espacios sepulcrales en los que se realizaban entierros in situ durante la época virreinal. Una teoría dice que las criptas estaban unidas a las Catacumbas del Convento de San Francisco, aunque esto nunca fue demostrado.
La visita a la Catedral de Lima es gratuita. Pero, si deseas conocer la colección del Museo de Arte Religioso deberás pagar 10 soles por adulto.
Junto a la Catedral se encuentra el Palacio Arzobispal, otro de los edificios más destacados del centro de Lima. Sus paredes están ricamente decoradas con cedro y caoba y azulejos de Sevilla.
Palacio Municipal
Otro de los edificios más bonitos del centro de Lima es el Palacio Municipal.
Su fundación data del año 1548 y tuvo lugar en el mismo lugar que ocupó el primer cabildo de la colonia, aunque la construcción actual corresponde a 1939. Allí acontecieron muchos hechos relevantes en la historia de Perú, como la firma del Acta de la Independencia el 15 de Julio de 1821.
Los imperdibles de la visita al Palacio Municipal de Lima son su hermoso hall con esculturas y escaleras de mármol y ónix; y sus grandes salones y corredores, cuyo diseño y belleza es a destacar. También cuenta con hermosos balcones coloniales de madera, galerías de arte y una importante colección de pinturas coloniales peruanas, entre otras cosas.
Palacio de Gobierno
El Palacio de Gobierno es un edificio emblemático e histórico del centro de Lima. Por él pasaron todos los jefes de estado del Perú desde tiempos virreinales.
El edificio cuenta con recintos y salones ceremoniales de mucha belleza arquitectónica, como el Salón Dorado, un espacio totalmente recubierto de pan de oro y con una decoración inspirada en el Palacio de Versalles. No dejes de mirar para arriba y admirar su techo abovedado. Por momentos sentirás que estás bajo el cielo nocturno de los Andes peruanos.
Si deseas conocer la historia y los increíbles salones del Palacio de Gobierno, puedes apuntarte a una visita guiada. Las mismas tienen lugar los sábados y domingos a las 9 y 10 am y tienen una hora de duración. La actividad es gratuita y vale mucho la pena.
Pasaje Santa Rosa y monumento a Taulichusco
Otra de las calles emblemáticas del centro de Lima es el pasaje Santa Rosa, al cual se accede desde la Plaza Mayor. Desde él podrás admirar la arquitectura del Palacio Municipal y tomar un par de fotografías de recuerdo al Monumento a Taulichusco.
Esta enorme roca del tipo Wanka de Granodiorita (una piedra basal andina) se erigió en honor al último curaca limeño en 1985 y es un modo de recordar el rico legado cultural de la ciudad y mantener vivo su pasado indígena. Taulichusco era un cacique del valle de Rímac cuyo palacio estaba localizado donde hoy se encuentra el Palacio de Gobierno.
Basílica y Convento de Santo Domingo
La Basílica y Convento del Santísimo Rosario, conocida popularmente como Santo Domingo, es otro de los imperdibles del centro de Lima.
Se trata de uno de los conventos más antiguos de la ciudad. De hecho, sus orígenes se remontan al mismo año de la fundación de Lima, en enero de 1535.
Vale la pena visitar su interior para admirar la decoración con azulejos sevillanos, los techos abovedados y las muestras pictóricas de sus corredores.
Monasterio de San Francisco y sus catacumbas
Otro de los lugares para visitar en el centro de Lima es el impresionante Monasterio de San Francisco, ubicado muy cerca de la Plaza de Armas.
Si bien el monasterio es conocido principalmente por sus catacumbas, también posee una increíble biblioteca repleta de textos antiguos, algunos de la época de la conquista española, una hermosa basílica y un claustro.
Las catacumbas de San Francisco representan el cementerio más antiguo de la ciudad de Lima. Su construcción data del siglo XVII y se atribuye a la orden franciscana. Se estima que en ellas descansan unas 70.000 personas que fueron enterradas allí. Incluso, algunos de los cadáveres se colocaron en criptas repletas de huesos (supuestamente, con fines decorativos). Cada una de estas criptas tiene unos 10 metros de profundidad y 5 pozos interconectados por túneles angostos y de muy poca altura.
Como te contamos antes, hay algunas leyendas que hablan de una posible conexión entre los túneles de las catacumbas de San Francisco con la cripta de la Catedral de Lima. También se dice que estaban comunicadas con el Palacio Presidencial y con la Fortaleza Real San Felipe, en el puerto de Callao.
Sin dudas, la visita a las catacumbas es una de las actividades más curiosas e interesantes que hay para hacer en el centro de Lima.
La iglesia abre todos los días de 7 am a 11 pm y de 4 am a 6 pm. Únicamente se permite recorrer su interior y las catacumbas con una visita guiada. La entrada tiene un costo de 15 soles (3,87 USD).
Jirón de La Unión: la calle más importante del centro de Lima
Toda ciudad tiene su calle más famosa o emblemática. En el caso del centro de Lima es el Jirón de La Unión, una concurrida vía peatonal construida en la época colonial. En aquel entonces se llamaba “Calle de Los Mercaderes”, puesto que era el epicentro de la vida comercial de la capital. Al día de hoy, continúa siendo una importante vía comercial y un paseo obligado para los turistas que visitan Lima.
En las primeras décadas del siglo XIX se cambió su nombre por “Jirón de la Unión“, puesto que une la ciudad vieja con la parte republicana de la ciudad, que comienza en la Plaza San Martín.
El Jirón de la Unión fue también la cuna de la aristocracia limeña. Se dice que en el siglo XX albergó a los cafés más destacados de la ciudad e importantes establecimientos de mercancías importadas y joyerías finas. Hoy en día, está llena de tiendas, restaurantes, galería y da cobijo a muchos artistas callejeros que se ubican en su extensión para animar el ambiente y dar a conocer su talento.
Plaza San Martín
La Plaza San Martín es uno de los puntos más animados y concurridos del centro de Lima. Lo más probable es que durante tu paseo en algún momento pases por ella, y sino, apuntala para tu recorrido.
La construcción de esta hermosa plaza data de inicios del siglo XX y se distingue por la estatua del Libertador Don José de San Martín (gestor de la independencia de Perú) que luce en su parte central. A su alrededor encontramos edificios importantes de Lima, como el Teatro Colón, el edificio Giacoletti y el Gran Hotel Bolívar, uno de los más antiguos y famosos de Lima (además, se dice que aquí se sirve el mejor Pisco Sour de la ciudad).
La mejor manera de visitar la Plaza San Martín es partir desde la Plaza de Armas y caminar por el Jirón de la Unión hasta dar con este agradable espacio.
Casas coloniales del centro de Lima
El centro de Lima está lleno de casas coloniales que son parte del patrimonio histórico y arquitectónico de la ciudad.
Una de las más famosas es la Casa Aliaga, también conocida como Palacio de los Conquistadores. Es considerada la casa más antigua de las Américas y su valor no es solo histórico, sino también artístico, gracias a la belleza de sus espacios y pasillos.
Se trata de una de las construcciones más antiguas de Lima y un imperdible paseo. Lo más interesante, es que sus dueños, la familia Aliaga, son descendientes directos de uno de los socios de Francisco Pizarro.
La Casa Aliaga se encuentra situada a un costado del Palacio de Gobierno y se puede visitar por dentro. En ese caso te sugerimos contratar esta Visita guiada por la Casa de Aliaga. De la mano de un guía, podrás recorrer cada uno de los lujosos salones y habitaciones decoradas con muebles antiguos, alfombras francesas y jarrones japoneses. A la par, irás haciendo un viaje en el tiempo para conocer la historia de esta familia que lleva 17 generaciones viviendo en el lugar.
Otra de ellas es la Casa Fernandini. Esta casona colonial diseñada por el arquitecto francés Claude Sahut, es un exponente por excelencia del Art Nouveau en Lima. Erigida entre 1912 y 1913 en concreto y ladrillo, acogió uno de los primeros ascensores que llegaron a Perú.
También tenemos la Casa Barragán, de 1913. Esta casa modernista es otro ejemplo del Art Nouveau limeño y en su momento funcionó como cine, café y bar en donde se reunían las personalidades más importantes del país.
Y, si de palacios históricos del centro de Lima hablamos, sin dudas tenemos que mencionar la Casa Osambela – Oquendo, sitio donde se alojó José de San Martín después de la Independencia de Perú. Su hermosa fachada de 4 niveles, con balcones de cajón, es una auténtica maravilla que tienes que ver.
Palacio del Marqués de Torre Tagle
Otro de los sellos de identidad del centro de Lima son los balcones de algunas de sus construcciones más antiguas.
El Palacio del Marqués de Torre Tagle es una edificación de dos pisos famosa por sus balcones de madera tallada y otro sitio qué ver en el casco histórico. También se distingue por su portada labrada en piedra y su oratorio de estilo barroco lleno de espejos y pinturas coloniales.
El palacio fue construido por órdenes del Marqués de Torre Tagle, quien fue Tesorero de la Armada Real Española. Por su elegancia y riqueza arquitectónica se convirtió prontamente en uno de los símbolos de Lima. Tras varios años de deterioro, en 1954 y 1956 fue restaurada por el arquitecto español Andrés Boyer.
Mapa del centro de Lima
¿Qué te pareció este recorrido por el centro de Lima? Sin dudas que la capital peruana es mucho más que su famoso barrio de Miraflores. Esperamos que con esta guía encuentres inspiración y te animes a dedicarle un día o unas horas a pasear por sus calles.
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