Zempoala, un pueblo mágico en Hidalgo

En el extremo sur del estado de Hidalgo, se encuentra Zempoala. Se trata de un pueblo mágico, cuyo nombre proviene de «Cempoalla». Es decir, se deriva de las raíces «Cempoalli» que significa «Veinte» y «Lan» o «Tlan» que significa, «lugar de». Originalmente, el municipio fue habitado por toltecas y chichimecas, por lo que, tiene una gran importancia en la historia de la época prehispánica.

La riqueza de Zempoala, en el estado de Hidalgo, radica en sus paisajes, actividades y gastronomía que te llevan a un viaje por México de antaño; habitado por toltecas y chichimecas en la edad prehispánica.

También destaca por su exquisita comida, así que, si buscas un pueblo mágico para conocer el fin de semana, Zempoala puede ser ese destino soñado que necesitas visitar.

¿Qué hay en Zempoala Hidalgo?

En el municipio de Zempoala se encuentran monumentos arquitectónicos e históricos de singular belleza e interés. Actualmente es considerado un punto de referencia en cuanto a comercio, movilidad y diversidad cultural.

Acueducto del Padre Tembleque

Fue construido por los lugareños y los franciscanos de la zona, encabezados por Fray Francisco de Tembleque. La idea era llevar agua desde un área cercana a Zempoala al sediento distrito de Otumba. La obra se llevó a cabo entre 1554 y 1572.

El sistema completo toma agua de varias fuentes y tiene varios ramales con una longitud de 48 km. Consta de cinco palacios, de los cuales el más famoso y majestuoso es Tepeyahualco, que alcanza una altura de 39,65 metros y fue el más alto del mundo hasta el siglo XVI.

Haciendas ganaderas y pulqueras

Los relatos históricos hablan de más de 20 granjas en el área de lo que ahora es Zempoala. Hoy solo quedan una docena, que sigue siendo un gran número para una ciudad de solo 31.000 hectáreas. Con sólo el dos por ciento del área total de Hidalgo, Zempoala mantiene el seis por ciento de las 200 fincas contadas en Hidalgo.  

La magnificencia de las antiguas plantaciones de Zempoala, si bien puede apreciarse al por mayor, tiene un brillo especial en cada una de ellas. Se pueden encontrar y comparar características comunes, pero siempre hay grandes diferencias. Una visita a ellos merece la pena dedicar unos días.

Ex Convento de Todos los Santos

Edificio franciscano construido entre 1570 y 1580, tiene una torre alta y esbelta y una fachada discreta de rasgos clásicos. En el interior del templo aún se conservan murales con escenas religiosas, así como en las paredes del monasterio vecino, donde todavía se pueden ver pinturas que representan escenas de la Pasión del Señor Jesús. El ministerio mantiene una capilla abierta con dos grandes puertas de arco y dos plazas.

Plaza de Armas

La Plaza de Armas se encuentra la parroquia y el Ex Convento de Todos los Santos de fachada plateresca, construido entre 1570 y 1585 por los monjes franciscanos. Tiene una alta torre para espadaña y una gran capilla abierta con dos grandes arcos de acceso, además de la iglesia y el convento.

El complejo religioso está asociado al principal atractivo de Zempoala, el Acueducto del Padre Tembleque, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2015, ya que el edificio religioso se encuentra dentro del área de protección.

Junto al ex convento se encuentra la Hacienda Casa Grande, la única de la región que no producía pulque, ya que los propietarios, la familia Enciso, tenían la Hacienda Los Olivos dedicada a la elaboración de esta tradicional bebida espirituosa.

Así que la Casa Grande funcionaba como posada y vendía pan, velas, jabón y verduras de su huerta. Hacienda Casa Grande se puede visitar para apreciar sus magníficas habitaciones amuebladas con piezas traídas directamente de Europa.

El recorrido propone un viaje en el tiempo al siglo XIX a través de su cocina y baños, la biblioteca, el comedor con una extraña mesa en forma de herradura, los dormitorios y la capilla. De hecho, Cesáreo Enciso fue quien donó el terreno para construir la actual plaza principal de Zempoala.

Deleita el paladar con los platos de Zempoala

Su cocina es el orgullo de Zempoala. Nadie puede irse sin probar los platillos que preparan como: pollo en pulque, barbacoa, consomé, ceviche de hongo seta, los ximbotes de caracol y escamol, tlacoyos de frijol, alverjón, papa o requesón, quesadillas de huitlacoche, el caldo de malva, salsa de xoconostle.

En esta ciudad puedes encontrar platillos como el mixiote, preparado con una salsa picante en tela de penca de maguey. Consomé y la barbacoa, elaborado con cordero envuelto en hojas de maguey, cocido en horno subterráneo, probablemente de origen otomí.

El escamole o guigues, que son huevos de hormiga negra, cocidos adecuadamente, formando caviar esponjoso. Gusanos blancos de maguey, los chinicuiles y el quiote o flor de maguey, la flor de calabaza, verdolagas, quelites, quintoniles, malvas, flores de palma, entre otros, conforman platos muy sabrosos.

Los platos de nopales, cuya preparación es variada y delicada, pueden ser asados ​​y rellenos de pimiento verde en mezclas y preparados en ensaladas. También hay una serie de platos europeos, en su mayoría de origen español, como la ternera o el cordero, o el caldo especiado y otros platos preparados con aves o carne de monte, conejo y zarigüeya, entre otros.

Hay una amplia gama de platos para mencionar, por ejemplo, varios moles derivados de la palabra náhuatl ‘milly’ mezclados con carne de res, cerdo y aves. También es costumbre tomar tamales, así como atole de atl, hecho con agua, y tlaollo, maíz molido endulzado con agua miel, una deliciosa bebida caliente.

También se preparan platos típicos: gorditas, pinchos, enchiladas, tlacoyos, así como chilaquiles, quesadillas de flor de calabaza y de huitlacoche. La tuna es una fruta muy rica y original, el maíz cocido y horneado, los esquites de maíz tierno y las gorditas tlaxcales de maíz tierno. La bebida distintiva de esta región es la pulpa, que se disfruta según el gusto y la tradición, sola o salada, en este caso con frutas de temporada.

Cómo llegar a Zempoala

Zempoala posee una ubicación muy céntrica, con rápidas vías de comunicación que lo conectan con los estados de Querétaro, Puebla, Tlaxcala, Veracruz, San Luis Potosí́, Nuevo León y Tamaulipas, favorecido por el Arco Norte, y muy cercana a la Ciudad de México por la autopista México – Pachuca.

Como viajero, puedes acceder por autotransporte saliendo de la Central del Norte. Cabe resaltar que Zempoala tiene un Centro de Control y Comando C2 que cuenta con más de 200 cámaras de video vigilancia enlazadas con el C5i Hidalgo, que están ubicadas en puntos estratégicos para el cuidado de los habitantes y turistas.

Ubicado a 26.3 kilómetros de la Pachuca, la capital del estado, el trayecto entre estas dos localidades es de aproximadamente 30 minutos por la carretera México 88.

Ruta desde Distrito Federal, México hasta Zempoala, Hidalgo en automóvil. 107 km, tiempo estimado 1h 46 min.

Ruta desde Beristain, Puebla, México hasta Zempoala, Hidalgo en automóvil. 85,6 km, tiempo estimado 1h 4 min.

Zempoala es otro de los pueblos mágicos que deben ser visitados en México, para sentirte en tiempos antiguos y conocer más sobre la historia y cultura. Además, lo mejor de todo, es que puedes disfrutar de una de las mejores gastronomías de la región.