Al otro lado del Estrecho de Gibraltar se encuentra la cosmopolita e internacional ciudad de Tánger. Muy cerca de España, pero con diferencias culturales notables, Tánger es un sitio emocionante que vale la pena visitar. Si estás pensando en viajar por Marruecos no dudes en hacer una parada en esta ciudad que puedes recorrer fácilmente en un día. Pasear por su medina o su puerto son solo algunas de las cosas que puedes hacer en ella. En el artículo de hoy te invitamos a descubrir qué ver en Tánger en 1 día y te brindamos la información necesaria para armar una ruta de un día en esta ciudad cargada de historia.
Tánger es la puerta de entrada al continente africano y una ciudad que desde muchos siglos atrás ha tenido un fuerte interés internacional, por ser el punto más al norte de África y estar a un paso del Mediterráneo.
La historia de Tánger
Creemos que no se puede descubrir a fondo un lugar sin conocer su historia. Y Tánger, es una ciudad en donde la historia se hace presente en cada rincón, por eso queremos hacerte un breve recorrido por ella.
Los orígenes de Tánger se remontan a la época en que llegaron los fenicios, quienes bautizaron la ciudad con el nombre de Tingis. Los romanos también dejaron su huella en Tánger (de hecho, hoy quedan algunos restos arqueológicos), al igual que los vándalos. Finalmente, en el año 705 llegaron los árabes y ocuparon la ciudad. En 1471 lo hicieron los portugueses y, dos siglos más tarde, los británicos, todos atraídos por su ubicación estratégica.
Llegando al final del siglo XVII, la ciudad de Tánger fue tomada por un sultán marroquí y a principios del siglo XX nuevamente se convirtió en un importante centro de interés para los extranjeros. La llegada del protectorado y la declaración de la zona internacional de Tánger dieron un giro en su historia.
Durante la época de protectorado francés, que tenía su capital en Fez y español, con capital en Tetuán, Tánger dependía de varios países. Entre ellos, Estados Unidos, Gran Bretaña, Bélgica, Holanda, Portugal, Francia y España. Los protectorados francés y español abarcaron, desde 1912 hasta 1956, la región norte de África, hoy conocida como Marruecos.
Durante los años 40 y 50 del siglo XX, Tánger fue una ciudad cosmopolita y el punto de reunión de los millonarios, agentes secretos, timadores y truhanes (estafadores). Finalmente, en 1956, Marruecos declara su independencia y adquiere la soberanía sobre Tánger. A partir de ese momento, la ciudad vivió años de declive y perdió todo interés turístico.
Pero, la historia no termina aquí porque, con el reinado de Mohamed VI, Tánger comenzó un proceso de modernización y recuperó su papel estratégico, abriéndose al mundo. Los delincuentes fueron perseguidos y grandes compañías multinacionales llegaron a la ciudad. Hoy en día, Tánger es un importante centro de producción industrial y sus años de historia la convierten en una ciudad muy interesante.
Descubre qué ver en Tánger en 1 día
Tánger es una ciudad que perfectamente puede recorrerse en un día. Su gran tamaño no debe intimidarte, puesto que moverse por ella es sencillo. A continuación, te contamos qué ver en Tánger en 1 día y te invitamos a descubrir sus sitios más emblemáticos.
La medina de Tánger
Si te preguntas qué ver en Tánger en 1 día la respuesta es muy sencilla: comienza por su medina, un lugar imprescindible de todas las ciudades de Marruecos. ¿Qué es una medina? La palabra medina tiene origen árabe que significa ciudad y hace referencia a una zona protegida por una fortificación. Aclarado esto, te contamos todo sobre la medina de Tánger.
La puerta de entrada a la medina es la plaza más famosa de Tánger, conocida como el Gran Zoco y un importante punto de encuentro entre locales y turistas. Una vez que atravieses la puerta Bab Fahs habrás ingresado a la medina, que se caracteriza por sus miles de callejuelas laberínticas y estrechas, que hacen que no perderse sea prácticamente una misión imposible. No hay GPS ni mapa que sirva, solo tu memoria y el sentido de la ubicación. Y en eso radica especialmente su encanto. Así que, déjate llevar y sigue tu instinto, de esa manera podrás disfrutarla al máximo.
Tip viajero: si bien la medina es una zona muy concurrida, en algunos puntos puede estar bastante desolada, por lo que debes evitar andar solo, especialmente de noche.
El Gran Zoco de Tánger
El Gran Zoco era el lugar en donde se encontraba el mercado de la ciudad. Actualmente, está repleta de cafés, bares, restaurantes y hoteles, mientras que los históricos puestos de mercado se han ido reubicando en las calles de los alrededores de la plaza. Uno de los sitios más destacados de la plaza es la mezquita de Sidi bou Abid, que data del año 1917 y tiene un bello alminar de azulejos polícromos.
Muy cerca de esta plaza se encuentra la Iglesia Anglicana de St. Andrew, cuyo interior está compuesto por una fusión de estilos, entre los que predomina el andalusí. Junto a la iglesia encontrarás un cementerio anexo en donde están enterradas algunas importantes personalidades. El Parque de la Mendubia también se encuentra muy cerca de la plaza y es un lugar agradable para relajarse y aislarse un poco del bullicio de la medina. El parque posee una gran variedad de plantas exóticas y árboles, entre los que destaca un árbol de banyan de más de 800 años de antigüedad.
Otros sitios emblemáticos dentro de la medina de Tánger
Si quieres comprar artesanías debes entonces caminar por la Rue des Siaghins, repleta de pequeñas tiendas que venden productos y artesanías locales. Por esa calle encontrarás también la iglesia católica de la Purísima Concepción, dueña de una hermosa fachada de estilo oriental. Más adelante se encuentra Dar Niaba, un antiguo palacio de estilo renacentista que funcionó antiguamente como la oficina del consulado francés.
El Petit Zoco o Pequeño Zoco, se encuentra a continuación y es el corazón de la medina. Aquí encontrarás una plaza de estilo español que es uno de los lugares más atractivos y característicos de la ciudad. Sus balcones y rejas de hierro forjado, las viejas cafeterías y hoteles que rodean la plaza le dan un aire muy especial.
La plaza de los Aisauas se encuentra situada a la izquierda del zoco chico y muy cerca de ella, la famosa perfumería Madini, famosa por sus fieles reproducciones de perfumes y colonias a un precio accesible.
Si deseas conocer algún museo puedes ir entonces al Museo de la Fundación Lorin, dedicado a Marisha Lorin una amante de las artes de Tánger y de Marruecos. El museo se ubica en la calle Tuahin, en el interior de una sinagoga que contiene una gran colección de fotografías, partituras, caricaturas y documentos de la primera mitad del siglo XX de la ciudad de Tánger.
Otra de las cosas qué ver en Tánger en 1 día es la Gran Mezquita, fundada en 1684 por Moulay Ismail. En su interior encontrarás restos del capitolio romano y vestigios de lo que fue la Catedral del Espíritu Santo, durante la ocupación portuguesa. Por fuera de la mezquita llegarás a un mirador que posee hermosas vistas del puerto de Tánger.
Otro imperdible de Tánger es el Hotel Continental, el más antiguo de Marruecos. Si viste la serie El tiempo entre costuras posiblemente te suenen sus habitaciones, en donde se filmaron varias escenas de la serie. Además, personalidades destacadas, como Winston Churchill o Ava Gardner, se hospedaron en este hotel, lo que lo hace aún más emblemático.
La Kasbah es otro punto emblemático dentro de la medina de Tánger. El acceso se realiza por una puerta llamada Bab el Assa (Puerta de los centinelas), donde antiguamente se torturaban y ejecutaban presos. En esta plaza se encuentra Dar el Majzen, el Museo de la Kasbah que puede visitarse de forma gratuita los martes de 1 pm a 4 pm y los viernes de 9 am a 12 y de 1 a 4 pm. Este edificio era el antiguo palacio del sultán y la residencia de los gobernadores franceses y portuguesas. Es un sitio muy famoso en Tánger y en Marruecos y su arquitectura destaca por sus techos de cedro y sus paredes de estuco.
El museo de la Kasbah exhibe una colección de piezas de arte marroquí y antigüedades y cuenta también con una sección arqueológica. Entre su colección destaca un gran mosaico de la antigua ciudad romana de Volúbilis, y un gran mapa mural que muestra la antigua ocupación árabe alrededor del mundo.
La Ville Nouvelle o ciudad moderna de Tánger
Una vez que hayas visitado la medina puedes pasear por la zona moderna de la ciudad. De hecho, esta es otra de las cosas qué hacer en Tánger en 1 día. Vale la pena apreciar el contraste entre lo antiguo y lo moderno de una zona y otra. Además, aquí se encuentra un lugar emblemático de la ciudad, el puerto.
La Ville Nouvelle fue construida por los europeos durante el siglo XX y su centro neurálgico es la Plaza de Francia, en donde se encuentra el legendario Café de París. Cuenta la historia que en este lugar se reunían los espías de la Segunda Guerra Mundial.
Una buena forma de iniciar el recorrido es caminando por el Boulevard Pasteur, la calle principal de la ciudad moderna de Tánger. A media que la recorras encontrarás varios lugares interesantes, como la Plaza de Faro, que posee varios cañones de origen portugués. El Gran Teatro Cervantes, de estilo Art Decó, también es otro punto importante de este paseo. Y por supuesto, observarás aspectos culturales de Tánger y Marruecos, como las mujeres cubiertas de velos, los balcones y edificios característicos.
Para tener una vista panorámica del puerto puedes dirigirte a la Plaza de la Alcazaba, otro imperdible de Tánger. Lo mismo sucede con el Barrio Marshan, famoso por sus pintorescas calles y fachadas, en donde se encuentran gran parte de las atracciones de la ciudad.
Si quieres ver algo realmente llamativo, dirígete entonces a la necrópolis púnica, compuesta por 98 tumbas. Algunas de ellas están talladas en una roca al borde de un acantilado, por lo que las vistas del Estrecho de Gibraltar son realmente bellas.
Otras cosas qué ver en Tánger en 1 día: la playa y el paseo marítimo
Una visita de un día a Tánger no puede dejar de lado un paseo por su playa de 5 km de longitud y su pintoresco paseo marítimo. Este último cuenta con varias zonas de ocio y tiene como telón de fondo impresionantes rascacielos y modernos hoteles de las más afamadas cadenas del mundo. La zona es muy concurrida por turistas y locales, como también por patrullas de soldados armados, que cumplen una función de protección ante posibles atentados terroristas.
La importancia del puerto de Tánger
Un punto emblemático y otra cosa qué ver en Tánger en 1 día es el puerto. El nuevo enclave portuario de la ciudad, conocido como Tánger-Med es un símbolo del crecimiento de la ciudad. Está destinado al tránsito de mercancías, vehículos y pasajeros a través del Estrecho de Gibraltar y contribuyó al desarrollo del proyecto Tánger Marina Bay, que ha transformado y ampliado el viejo puerto.
Gracias al proyecto se construyeron nuevos muelles, con capacidad para recibir simultáneamente hasta tres grandes cruceros de última generación. Cuenta, a su vez, con 1.400 amarres para embarcaciones deportivas y de recreo. Otro objetivo del proyecto es ampliar la oferta turística mediante la construcción de nuevos hoteles, restaurantes, centros comerciales, espacios culturales y de ocio, extendidas a lo largo del paseo marítimo.
El Cabo Espartel
Si dispones de tiempo, puedes finalizar el día viajando a otro destino realmente increíble, ubicado a solo 20 km de Tánger. El Cabo Espartel es el sitio ideal para relajarse después de un día a pura caminata y disfrutar de hermosas vistas del Estrecho de Gibraltar. Este sitio es el punto en que las aguas del Mar Mediterráneo y el Océano Atlántico se unen, configurando un bello paisaje. En la época clásica, este lugar marcaba la distinción entre el mundo habitable y el inhabitable.
Durante la época romana el Cabo Espartel era conocido como Cabo Ampelusia, que recibió el nombre de los islotes ubicados entre España y Marruecos, que componen el archipiélago de Espartel. Este conjunto de islas desapareció luego de un fuerte terremoto, dando lugar a lo que hoy se conoce como banco de arena de Majuán o Espartel. La leyenda cuenta que este archipiélago es el lugar en el que se ubicó la mística ciudad de Atlántida.
El punto más emblemático del Cabo Espartel es el famoso faro, que fue el primero de la red de señalización marítima de las costas marroquíes. Su construcción finalizó en 1864 y fue un pedido de los representantes consulares de las potencias europeas para poner fin a la cantidad de naufragios que se producían en la zona. La visita al faro dependerá de que el farero esté disponible, así que no es garantía que puedas ingresar a conocerlo. De todas formas, ya verlo desde afuera vale la pena.
La playa Robinson rodea al Cabo Espartel y cuenta con varias terrazas desde las cuales podrás disfrutar de un hermoso atardecer para coronar el día.
Las cuevas de Hércules
Otra de las cosas qué ver en Tánger en un día son las famosas Cuevas de Hércules, ubicadas a solo 5 km del Cabo Espartel y dueñas de una antigua leyenda.
Según la leyenda, estas cuevas fueron el lugar en donde Hércules descansó después de llevar a cabo su undécimo trabajo: robar las manzanas del Jardín de las Hespérides. Sin embargo, Anteo, el gigante dios del mar se enfureció porque estaba invadiendo su territorio, entonces intentó echarlo. De ese modo, ambos dioses se enzarzaron en una gran pelea, de la cual Hércules fue vencedor. Durante la batalla, con un golpe de espada, Hércules abrió el Estrecho de Gibraltar, separando de ese modo a Europa de África. Luego de la batalla colocó una columna a ambos lados del surco que, durante siglos, simbolizarían los límites entre el mundo conocido y el desconocido.
Dejando de lado la leyenda, las cuevas fueron descubiertas a finales del siglo XIX y son un lugar realmente muy peculiar. Sin embargo, se cree fueron habitadas unos 700 años antes de Cristo, así lo confirma las figuras de barro descubiertas en 1930. Su sello más distintivo son las dos aberturas que poseen, de las cuales una mira hacia tierra y otra hacia el mar, adquiriendo la forma invertida del mapa de África.
Las Cuevas de Hércules son una interesante combinación de lo natural con lo artificial. Si bien son un producto de la naturaleza, que se formó por la erosión del viento, también han sido intervenidas por la mano del hombre. De hecho, se cree que fueron los fenicios quienes crearon la apertura que dan la vista al mar. Lamentablemente, la fuerte concurrencia turística ha hecho que el lugar sea objeto de remodelaciones que le hicieron perder, en parte, su encanto natural. Aun así, creemos que es un lugar que vale la pena visitar.
Cuando llegues a las cuevas podrás dejar el coche en el estacionamiento y dar un rápido paseo por las tiendas de souvenirs que hay a su alrededor. La primera cueva se encuentra atravesando la plaza blanca, y se accede a ella bajando por una pequeña cuesta. Es la más pequeña y posee tres niveles y un mirador en su ingreso. Las tiendas de artesanías también se hacen presentes en su interior, junto a algunos músicos y fotógrafos locales.
Un poco más abajo de esta primera cueva, accederás a través de una puerta de hierro y un pequeño pasillo a la segunda cueva. Allí se encuentra el famoso mapa invertido de África, uno de los sitios más fotografiados del lugar.
¿Cómo llegar a Tánger?
Existen diversas formas de llegar Tánger, ya sea desde España u otros puntos de Marruecos, como Rabat. Si viajas desde España una forma muy rápida y económica de llegar a Tánger es en avión. Su aeropuerto es el cuarto en tráfico aéreo del país y posee muchas conexiones internacionales. Las empresas Royal Air Marruecos, Iberia y Air France realizan vuelos desde distintos puntos de Europa y del mundo.
Viajar en ferry es también una buena alternativa. En ese caso, debes llegar hasta Algeciras, situada en el extremo sur de España, para embarcarte y cruzar el Estrecho de Gibraltar. El precio del ferry a Tánger es de alrededor de 66 euros ida y vuelta por persona. Si viajas con vehículo propio el precio puede ser un poco más elevado. También puedes tomar ferries desde Sete (Francia), pero en este caso el viaje dura unas 36 horas.
Si viajas desde Rabat, capital de Marruecos, la forma más simple de llegar a Tánger es en tren, que demora unas 5 horas.
La gastronomía marroquí
La gastronomía es una parte importante de cualquier viaje. Por eso, en esta guía de qué ver en Tánger en 1 día queremos contarte un poco sobre su gastronomía y lugares recomendados para comer. Como en todo Marruecos, es posible comer comida buena y económica en Tánger. La ciudad se encuentra llena de bares y restaurantes que sirven bocadillos y platos propios de la gastronomía marroquí.
La comida marroquí es variada y sabrosa, con recetas exóticas e ingredientes de gusto inconfundible. Platos típicos como la bastela, una famosa empanada de paloma, hasta el tajín o tajine, se hacen presente en todos los restaurantes. Este último destaca por la riqueza de sus ingredientes y por su forma de servirse en un plato de barro cocido y barnizado. Sobre el mismo se agrega una característica tapa con forma de cono para mantener el calor y el vapor.
Su bebida popular es el té con menta o té moruno, que además de su rico sabor, es un símbolo de la hospitalidad marroquí. En verano o invierno, cualquier época del año es válida para tomar este té que cuenta con grandes propiedades diuréticas, tonificantes y digestivas. Sus ingredientes claves son el agua, té verde, menta o hierbabuena y azúcar moreno.
Dato curioso: beber alcohol no es un hábito bien visto en Marruecos, más allá de que no está prohibido.
Sitios para comer en Tánger
Si quieres comer algo en un restaurante típico de la zona, dirígete entonces a Le Saveur du Poisson, ubicado en la calle Escalier Waller 2, donde podrás disfrutar de una rica comida local por unos 20 euros por persona. Para comer comida italiana, una de las mejores opciones es Dall’Italiano, en la Avenue Mohamed VI N. 42. Ubicada en pleno paseo marítimo de Tánger, este restaurante ofrece platos elaborados por un prestigioso chef venido directamente de Italia.
Si deseas comer pescados, tienes varias alternativas. Una de las mejores es el restaurante L´Ocean, ubicado a 20 minutos del centro de Tánger, sobre la playa del Atlántico. Su ambiente bohemio, más la buena comida, lo colocan entre las mejores opciones de Tánger. El Tangerino, en el 186 Boulevard Mohamed VI, es también un lugar muy recomendable para comer pescado de buena calidad.
Entre los muchos cafés y bares de Tánger destaca el Cafe Le Detroit, Awtar Cafe Restaurant y el mítico Cafe Hafa. Este último es famoso por sus mesas ubicadas en terrazas de varios niveles con vistas hacia España. Un lugar realmente imperdible de Tánger.
Finalmente, para comer la mejor comida marroquí, mientras disfrutas de un baile de la danza del vientre, debes dirigirte a los restaurantes Marhaba y Damasco en la Alcazaba.
Aquí finaliza nuestra guía de qué ver en Tánger en 1 día. Como habrás descubierto, esta ciudad es realmente interesante, a pesar de no estar entre las más turísticas del norte de África. En los próximos días estaremos subiendo más contenido sobre Marruecos, así que no dejes de leernos y seguirnos en nuestras redes sociales. ¡Nos vemos en el próximo destino!