Paseo por la laguna de Guatavita

Una de las mejores escapadas para hacer desde Bogotá es a la laguna de Guatavita, un espejo de agua envuelto en leyendas que involucra ciudades de oro y rituales indígenas. Si planeas pasar unos días extras en la capital colombiana, escaparse a esta hermosa laguna rodeada de los majestuosos Andes es un plan increíble, especialmente para los amantes del ecoturismo y la naturaleza.

El día de hoy te contamos todo sobre la laguna de Guatavita, cómo llegar, qué hacer allí y qué ver en sus alrededores. También, te damos algunos consejos para que aproveches el viaje al máximo.

La laguna de Guatavita se encuentra situada en un área protegida a las afueras de Bogotá, concretamente a 73 km. Conocida también como laguna del Cacique Guatavita (por la leyenda asociada a ella), es un destino que enamora por la belleza de su entorno, en plena zona montañosa del macizo colombiano.

A su vez, permite sumergirse en la riqueza cultural de los muiscas, un pueblo precolombino que se caracterizaba por usar objetos de oro en sus ceremonias. ¿Sabías que la laguna fue escenario de muchos rituales? ¿O que de ella proviene la leyenda de El Dorado? Todo esto y más descubrirás el día de hoy.

¿Dónde se encuentra y cómo llegar a la laguna de Guatavita?

La laguna de Guatavita se sitúa a 3.100 metros sobre el nivel del mar, en la Cordillera Oriental de los Andes colombianos, en el municipio de Sesquilé (Cundinamarca) y a 70 km al norte de Bogotá.

El núcleo urbano más cercano a ella es Guatavita, un asentamiento que fue reubicado luego de que el anterior pueblo quedase sumergido para la construcción del Embalse de Tominé. Si bien en edad es muy reciente, lo cierto es que este pequeño poblado conserva un patrimonio arquitectónico único, gracias a sus casas blancas de estilo colonial con tejas de barro. Por ende, te aconsejamos pasar por él antes o después de ir a la laguna.

Llegar en auto desde Bogotá

Es posible llegar a la laguna de Guatavita en auto desde Bogotá. Para eso hay que tomar la autopista norte y conducir hasta el desvío de Sesquilé, para desde allí continuar hacia la laguna. La misma se ubica a 7 km por la carretera que se abre a la izquierda luego de bordear el embalse de Tominé (10 minutos antes de llegar al pueblo de Guatavita).

Llegar en transporte público desde Bogotá

Si bien rentar un coche es la opción más cómoda, también se puede llegar a la laguna en autobús desde Bogotá y gastar menos dinero. Para eso hay que tomar alguno de los buses que salen de la Terminal de Transporte Salitre o desde la Estación de Transmilenio de Portal del Norte. Hay varias agencias que operan esta ruta por un costo aproximado de 10.000 COP el trayecto (unos 2,60 USD).

El viaje hasta la laguna dura algo de una hora y media y transcurre por hermosos paisajes montañosos. Deberás decirle al chofer que deseas ir a la laguna, puesto que el bus sigue hasta el pueblo con el mismo nombre. Una vez en la entrada hay unos 7 km hasta la laguna que se pueden sortear caminando o contratando algún servicio de transporte.

Otra alternativa (especialmente si viajas con equipaje) es ir al pueblo de Guatavita, alojarse en un hotel para disfrutar de su ambiente y desde allí tomar un bus urbano o un taxi a la laguna. Lo único que tienes que tener en cuenta es que las busetas generalmente solo operan en temporada alta.

Ir a la laguna de Guatavita en excursión

Otra opción cómoda para visitar la laguna de Guatavita es tomar un tour de un día desde Bogotá. Los paseos comienzan alrededor de las 8 am e incluyen la recogida y el regreso al hotel o alojamiento de Bogotá.

Esta excursión a Guatavita + Casa al Revés incluye un recorrido por el pueblo de Guatavita, incluyendo la visita a la famosa Casa al Revés, donde podrás tomar divertidas fotografías. Luego, un guía local llevará al grupo a la laguna, mientras les cuenta la famosa leyenda del Dorado. Tendrás también tiempo libre para caminar por los alrededores y tomar fotografías de este hermoso cuerpo de agua rodeado de las verdes montañas de los Andes.

Aunque, si deseas vivir una experiencia aún más increíble, te sugerimos unirte a este tour organizado que llevará a conocer también la Catedral de Sal de Zipaquirá. El recorrido incluye el transporte de ida y regreso desde Bogotá, una caminata de 2 horas por la laguna sagrada de Guatavita y la visita al parque de las minas de sal de Zipaquirá. Es decir, conocerás dos destinos fascinantes en un mismo día.

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La laguna de Guatavita y la leyenda del Dorado

Tal como te anticipamos, la laguna de Guatavita está asociada a la leyenda de El Dorado, la ciudad de oro que inspiró cientos de libros, películas y hasta videojuegos. Pero, ¿qué hay de cierto en todo esto? ¿De veras existió esta ciudad indígena en donde todo estaba hecho de oro?

Cuenta la leyenda que el Cacique Guatavita (a quienes los conquistadores españoles conocían como El Dorado) tenía la costumbre de cubrir su cuerpo con polvo de oro y luego se sumergía en la laguna, mientras los miembros de la tribu muisca (los habitantes originarios de la región), arrojaban estatuillas y otros objetos de oro para ofrendar a los dioses.

Esta misma leyenda llevó a que los conquistadores y exploradores buscaran durante muchos años y de manera incansable este sitio lleno de oro. Claro que nunca lo encontraron, por lo que la existencia de El Dorado no es más que un mito.

Sin embargo, se cree que esta comunidad indígena tenía un gran talento para fabricar objetos de oro, por lo que quizás algo de verdad hay. Como sea, El Dorado seguro seguirá siendo fuente de inspiración para las mentes creativas y los buscadores de tesoros.

De esta leyenda te empaparás mientras caminas por el sendero que conduce a la laguna. Desde el punto más alto se aprecia una vista de 360º del cuerpo de agua con las montañas y la vegetación típica del páramo a su alrededor.

¿Cómo visitar la laguna de Guatavita?

Lo primero que hay que hacer cuando llegues a la laguna de Guatavita es abonar el ingreso al parque. Una vez allí, te asignarán un guía (incluido en el precio de la entrada) que será tu acompañante durante la caminata. No se permite llegar a la laguna por cuenta propia, ya que es fácil perderse por el camino boscoso.

La senda hasta la laguna tiene aproximadamente 2 km y va ascendiendo de a poco hasta llegar a los 3.100 msnm y a los distintos miradores desde los cuales se puede apreciar la belleza y los colores del paisaje. El paseo dura unas 2 horas, es apto para adultos y niños y transcurre en todo momento en el ecosistema de páramo, donde se ven los característico frailejones, bromelias y líquenes.

Además del trekking hacia la laguna, aprenderás sobre tradiciones muiscas y cómo era su vida en el altiplano cundiboyacense. Incluso, en la primera parte del recorrido verás una “Chunzua” o casa ceremonial, la cual era usada por los muiscas para sus rituales.

Horario y precio de la entrada a la laguna de Guatavita

La laguna de Guatavita se puede visitar todos los días de 8:30 am a 4pm. La entrada tiene un costo de 13.500 COP para turistas nacionales y 19.500 COP – 5 USD, para extranjeros (recuerda que el mismo incluye el guía que te llevará a la laguna). El ingreso es gratis para los menores de 5 años y los mayores de 65.

Recorrer el pueblo de Guatavita

El complemento perfecto de la visita a Guatavita es hacer un recorrido por las calles del pueblo con el mismo nombre. Este precioso enclave que mantiene sus aires coloniales está repleto de referencias a la leyenda de El Dorado y cuenta con muchas tiendas donde podrás adquirir piezas de artesanía local y restaurantes donde comer algún platillo típico.

Con respecto a esto último, destacan platos dulces como la mazamorra y salados como la trucha que se obtiene en el gran embalse de Tominé. Al mismo se puede llegar sin problema desde el pueblo. Una vez allí, encontrarás un cuerpo de agua de 18 km de largo ideal para la práctica de deportes acuáticos.

Guatavita cuenta con varias opciones de alojamiento de distinta categoría y aptos para todos los presupuestos. Además, al estar tan próximo al embalse de Tominé cuenta con muchos glampings (campings de lujo) que ofrecen el mismo confort que los hoteles, pero en entornos naturales increíbles.

Durante tu paseo por el pueblo de Guatavita no dejes de conocer el Templo Parroquial Nuestra Señora de los Dolores, el Museo Indígena, el Monumento a la Cacica, la Plaza de los Artesanos y el Teatro San José.

Plan complementario: conocer la Catedral de Sal de Zipaquirá, una maravilla arquitectónica y religiosa de Colombia

Además de la visita al pueblo y la laguna de Guatavita, puedes aprovechar la ocasión para explorar otros atractivos cercanos a la ciudad de Bogotá. Si rentas un coche, tendrás la libertad de moverte a tus anchas y destinar el tiempo que quieras a cada lugar. De lo contrario, recuerda que existen muchas excursiones distintas para conocer los alrededores de la capital colombiana.

La Catedral de Sal de Zipaquirá es uno de los grandes reclamos turísticos que tiene Colombia. Puesto que se encuentra a medio camino entre Bogotá y la laguna de Guatavita, un excelente plan es explorar la laguna por la mañana y destinar la tarde a conocer este templo de sal.

Este sitio único acoge un templo completamente tallado en sal que tiene la particularidad de encontrarse a 180 metros bajo tierra. Es un atractivo que no verás en muchas otras partes del mundo, por ende bien merece una visita.

Antes de convertirse en el atractivo turístico que es hoy en día, fue una pequeña capilla construida por los trabajadores de la mina. Con el tiempo, los canales de esta zona fueron abandonados y la capilla pasó a ser la majestuosa catedral que verás hoy en día, a la cual llegan turistas de todo el mundo atraídos por su imponente belleza visual y espiritual.

El interior de la Catedral de Sal se encuentra dividido en varias secciones, entre ellas el viacrucis, la cúpula, la rampa de descenso con los balcones y las naves centrales. A su vez, un espectáculo de luces acentúa la textura de la roca de sal, creando una postal realmente asombrosa.

Consejos finales para viajar a la laguna de Guatavita

Si vas a visitar la laguna de Guatavita, toma nota de los siguientes consejos que te ayudarán a disfrutar al máximo del paseo.

Por empezar, lleva ropa abrigada e impermeable, puesto que por la altitud suele estar frío (la temperatura promedio del lugar es de 13°C) y las lluvias son habituales. Tampoco dejes de llevar botas de montaña o calzado adecuado para transitar por senderos empedrados.

Otro factor a considerar es la altitud. Puesto que la laguna se ubica a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar, la exposición al sol puede ser intensa, así que incluye también en tu equipaje bloqueador solar, sombrero y suficiente agua. La altura puede jugar una mala pasada, así que no está de más tener unas hojas de coca a mano.

Por último, no olvides que la laguna está bajo la administración de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca y que es una reserva. La misma no cuenta con zonas para camping o picnic y se prohíbe el ingreso con mascotas y el ingreso de comida y bebida.

No dejes basura (si llevas agua que sea en un termo), no te salgas de los senderos y recuerda que para los habitantes primitivos de la zona era un lugar sagrado, por ende, hay que tenerle respeto.

Mapa de la laguna y alrededores

Ya tienes toda la información que necesitas para visitar la laguna de Guatavita. Por ende, solo resta organizar tus días en Bogotá y destinar una jornada completa a visitar la laguna y, de paso, la Catedral de Sal. Aunque, otro plan atractivo puede ser pasar la noche en el pueblo de Guatavita y alejarse un poco del bullicio de la capital. ¡Seguramente te quedarás maravillado con el despliegue de paisajes andinos que rodea este hermoso cuerpo de agua!