Carvoeiro es un pequeño y tranquilo pueblo de la región de Algarve que regala algunos de los paisajes más hermosos del sur de Portugal. Su entramado urbano, con casitas blancas que llegan hasta la playa, sus enormes acantilados y el azul del Atlántico son los elementos fundamentales que componen esta postal de enorme belleza.
Carvoeiro es el destino ideal para un viaje familiar, para alejarse de la rutina y descansar en su ambiente cálido y acogedor. ¿Te gustaría saber todo lo que puedes hacer en Carvoeiro? En esta guía de viaje te lo contamos.
Carvoeiro comenzó siendo un pueblo de pescadores que cambió su historia cuando fue descubierto como uno de los pueblos más lindos del Algarve. Desde ese momento y hasta el día de hoy, el turismo no ha hecho más que crecer año tras año. Algo tendrá, ¿no crees?
Este pintoresco destino se sitúa a 5 km de la Lagos, a menos de una hora por carretera de la ciudad de Faro y a mitad de camino entre Albufeira y Portimão. Esto quiere decir, que su posición es privilegiada, puesto que permite acceder fácilmente a otras ciudades y pueblos de Algarve que también guardan mucho encanto.
Carvoeiro es fantástica para caminar y capturar bellos momentos con tu cámara de fotos. Los escenarios naturales que envuelven la villa te dejarán boquiabiertos. Lo mejor de la naturaleza confluye aquí: hermosas playas, enormes acantilados de piedra caliza, grutas y cuevas imposibles (la de Benagil es la más famosa).
Lo mejor de todo es que a pesar del creciente turismo, Carvoeiro mantiene el ambiente tranquilo que siempre lo caracterizó. Aquí no encontrarás edificios altos, grandes hoteles ni cadenas de fast food. Carvoeiro conserva su esencia de pueblo marinero, y en ello radica su principal encanto. A pesar de eso, cuenta con todas las comodidades para el viajero. En conclusión, no hay motivos para no visitar Carvoeiro.
Las mejores experiencias para vivir en Carvoeiro
Qué hacer en Carvoeiro es una pregunta fácil de responder: ¡muchísimas cosas!
Cuando descubras todo lo que puedes vivir en este pequeño rincón del Algarve, querrás teletransportarte inmediatamente. La oferta turística no se limita únicamente a tirarse en la playa a tomar sol. Ojo, que si quieres hacer eso está perfecto, pero hay un buen número de cosas que puedes hacer tanto en el pueblo como en sus alrededores.
Actividades como el senderismo, visitar cuevas y grutas, dar paseos en kayak o en barco, conocer las diferentes playas, explorar los alrededores y saborear la comida local, son solo algunas de las cosas que te propondremos a lo largo del artículo.
1- Pasear por el pueblo
Lo primero que tienes que hacer cuando llegues a Carvoeiro es dar un paseo por las tranquilas y pintorescas calles de la villa. Una de las arterias principales es Largo da Praia, la cual se encuentra llena de restaurantes en los que podrás probar platos típicos de la zona, y tiendas de artesanías para adquirir algún recuerdo de tu viaje.
Igual de hermosa es la Rua do Paraíso, una vía llena de casitas blancas que llega hasta el mirador Alto da Praia do Carvoeiro. Si te detienes a tomar algo en alguno de los bares frente a la playa, la experiencia será todavía más agradable.
Carvoeiro es un destino que invita a disfrutar de las cosas simples: caminar a orillas del mar, compartir una cerveza entre amigos o una comida en familia o simplemente sentarse a contemplar el océano.
2- Recorrer de punta a punta el paseo marítimo de Carvoeiro
Otra de las mejores experiencias para vivir en Carvoeiro es recorrer su Boardwalk. Esta pasarela de madera construida sobre los acantilados que rodean el pueblo regala unas vistas maravillosas del Atlántico y de algunas de las playas más bonitas de Europa. Recorrer este sendero de punta a punta y dejarte sorprender por las formaciones rocosas que caracterizan la zona donde está enclavada Carvoeiro será uno de los mejores recuerdos de tu viaje.
El Broadwalk o paseo marítimo de Carvoeiro comienza en la Ermita de Nuestra Señora de la Encarnación y continúa hasta la zona de Algar Seco, uno de los tesoros mejor guardados de la villa. En total, la pasarela de madera se extiende a lo largo de un kilómetro y medio que se pueden recorrer en cualquiera de las dos direcciones.
A diferencia de cualquier paseo marítimo que corre junto al mar, el de Carvoeiro discurre por sus acantilados, es decir, por encima del mar. El resultado no puede ser mejor: unas vistas inmejorables de las playas más bonitas del Algarve.
A medida que avances irás topándote con paneles informativos sobre la flora y fauna del lugar y con explicaciones de cómo se han formado los acantilados y cuevas que caracterizan este tramo costero. A mitad del camino es posible dejar las pasarelas de madera y adentrarse un poco en las formaciones rocosas por medio de unas escaleras esculpidas en la misma piedra. Ten en cuenta que muchas de las playas son inaccesibles, aun así, podrás sentir el intenso azul del océano de cerca.
3- Explorar las cuevas de Algar Seco
Como te anticipamos, si algo caracteriza a la costa de Algarve son sus impresionantes formaciones rocosas y acantilados. En este sentido, el Algar Seco es uno de los ejemplos más impactantes y una de las visitas obligadas para hacer en Carvoeiro.
Siguiendo el paseo marítimo es posible llegar a este lugar moldeado con el tiempo por la poderosa acción de las olas y el viento sobre las rocas. No por nada, miles de turistas visitan cada año las cuevas de Algar Seco. La belleza de este lugar es difícil de describir, por eso, lo mejor es que puedas presenciarlo con tus propios ojos.
¿Qué es concretamente Algar Seco? Un monumento natural que consiste en una serie de formaciones rocosas, cuevas escarpadas y piscinas naturales con aguas azules. Las enormes cavidades en las rocas parecen ser ventanas y balcones que vigilan las cosas. En definitiva, estas figuras curiosas son un ejemplo más de los caprichos de la naturaleza. Los balcones, cavidades y pasadizos de las cuevas de Algar Seco exigen ser descubiertas, de allí que no querrás irte de Carvoeiro sin antes vivir esta experiencia.
Aquí se encuentra la famosa formación conocida como “A Boneca” (la muñeca), una pequeña cueva con dos arcos naturales que parecen ser los ojos de una muñeca, desde los cuales se aprecia el azul intenso del mar. Un poco más abajo se encuentra uno de los túneles del complejo que te hará comprender por qué Algar Seco está dentro de las áreas naturales más increíbles del planeta.
En la base de los acantilados se encuentra la parada perfecta luego de tanta caminata y exploración. En Boneca Bar podrás comer y beber algo mientras disfrutas de las postales mágicas del Algarve.
4- Visitar el faro de Alfanzina
A 2 km de Carvoeira se encuentra uno de los puntos de la costa más recomendables para contemplar el atardecer: el Faro de Alfanzina.
Este hermoso faro fue construido en lo alto de un promontorio rocoso en 1920 y hasta el día de hoy sirve como guía para los barcos que surcan las aguas del Atlántico. Además de eso, permitía a los pescadores de Carvoeiro pescar calamares por las noches.
El faro abre al público los miércoles entre las 2 pm y las 5 pm. Lo mejor es hacer la visita un día despejado, cuando el paisaje es todavía más impresionante. Y, como te dijimos antes, acercarte a última hora de la tarde y esperar la puesta del sol sobre el horizonte.
5- Disfrutar de las playas de Carvoeiro
Los acantilados, rocas y cuevas que caracterizan a las playas de Carvoeiro las convierten en algunas de las más lindas de la costa del Algarve. De hecho, ningún paseo por la villa está completo si no visitas las playas de la zona, como es el caso de la Praia do Carvoeiro, la Praia de Benagil o la Praia da Marinha. Esta última es considerada como una de las 10 playas más bonitas de Europa y una de las 100 más bellas del mundo, así que te imaginarás que vale muchísimo la pena conocerla.
Praia Do Carvoeiro
La Playa do Carvoeiro es la principal de la localidad. Si bien no es la más grande de la zona, las hermosas vistas que regala y la gran variedad de deportes acuáticos que se pueden practicar en ella, hacen que sea una de las más populares. Además, al estar protegida por grandes peñascos, sus aguas son tranquilas y seguras, ideales para que grandes y chicos disfruten de ella.
En la playa de Carvoeiro podrás alquilar una tabla de paddle surf o un kayak y explorar la zona de esta manera, como también una moto acuática y experimentar un subidón de adrenalina. El buceo, el snorkel y los paseos en bote por sus cuevas son otras opciones para disfrutar de este arenal. Además, cerca de ella hay muchos restaurantes y cafeterías, de manera que la estadía será con todas las comodidades.
La postal de la playa, con el pueblo blanco y luminoso por detrás y las barquitas coloridas de pescadores ubicadas en la arena es realmente encantadora. Por el costado, los acantilados le suman atractivo a una imagen que no puede ser mejor.
Tip viajero: un detalle a tener en cuenta en esta playa es la posibilidad de que se produzcan desprendimientos de piedras en los acantilados, por lo que se recomienda mantener una distancia prudencial de ellos.
Praia Do Vale De Centeanes
A poca distancia del centro de Carvoeiro se encuentra la Praia do Vale de Centeanes, un arenal pequeño al cual se puede acceder siguiendo la calle Estrada Do Farol.
La playa se encuentra protegida entre acantilados y curiosas formaciones rocosas que esconden pequeñas grutas y el acceso se realiza por una larga escalinata. En temporada alta suele estar bastante concurrida, por lo que se recomienda llegar temprano para tener tu espacio. Los servicios son básicos, aunque hay un pequeño restaurante que sirve comidas rápidas y refrescos y servicio de socorrista durante todo el día.
Si bien el oleaje suele ser un poco más fuerte que en la Praia do Carvoeiro, no deja de ser una playa relativamente segura para nadar. Las aguas cristalinas invitan a darse un buen chapuzón y explorar la vida marina con tu máscara de snorkel o buceando.
Tip viajero: esta playa es el punto de partida de una de las rutas de senderismo más famosas de Carvoeiro: Sete Vales Suspensos.
Praia Da Marinha
A 7 km de Carvoeiro se encuentra la Praia da Marinha, considerada como una de las playas más hermosas del Viejo Continente.
El arenal de la Praia Da Marinha es pequeño y se encuentra custodiado por altos acantilados erosionados por el viento y el agua a lo largo de los años. Como resultado se han formado arcos, cuevas y pozas naturales que son el sello distintivo de esta playa tan especial. Esta belleza se ve aumentada con el contraste del mar color turquesa y cristalino con el color dorado de la roca. Si a ello le sumamos su formación característica y postal más famosa, un doble arco marino, la estampa se vuelve realmente única.
La Praia Da Marinha es perfecta para el buceo, gracias a que las paredes rocosas bajo el agua son habitadas por una gran variedad de peces de colores, anémonas, erizos, estrellas de mar y gambas. De hecho, es uno de los mejores rincones del Algarve para explorar la flora y fauna marina.
La única desventaja de la playa es que el acceso se realiza por unas escaleras que descienden por el acantilado. De todos modos, los senderos que recorren la parte superior regalan unas vistas realmente maravillosas, de manera que también podrás disfrutarla desde lo alto.
Si puedes descender a la playa, aprovecha cuando la marea esté baja para explorar las calas y cuevas que hay en torno a ella. Otra opción es observar la playa desde otra perspectiva, es decir, a bordo de alguno de los muchos barcos que efectúan paseos por esta zona.
Tip viajero: si no eres amante de las muchedumbres, entonces te sugerimos que evites ir a la Praia da Marinha durante el mes de agosto. En este momento recibe una afluencia masiva de viajeros de todo el mundo. En este caso, lo mejor es visitarla temprano y entre semana.
Praia Do Carvalho
Otra de las playas que puedes visitar en Carvoeiro es la Praia do Carvalho, situada apenas a 5 km. El motivo principal por el cual esta playa es tan famosa es la oportunidad de practicar clavadismo desde lo alto de sus acantilados. En el lado derecho de la playa una saliente rocosa de 7 metros de altura es elegida a diario por clavadistas experimentados. Hacia el lado izquierdo hay un punto más alto, ideal para quienes buscan vivir emociones más intensas. Las aguas profundas hacen que lanzarse al agua sea seguro, aunque nunca está de más ser precavido.
Otro de los sellos distintivos de la Praia do Carvalho es que el acceso se realiza caminando por un túnel artificial excavado en la roca. Una vez que lo cruces, llegarás a esta playa paradisíaca de aguas azules y cristalinas. Además, tiene la ventaja de que suele estar menos concurrida de gente.
La Praia do Carvalho posee arena dorada, fina y suave y un mar cristalino y limpio que invita a hacer snorkel. Como se encuentra protegida por los acantilados las aguas tienden a ser tranquilas, aunque a medida que te alejas de la costa las corrientes son más fuertes, por lo que se recomienda tener cuidado. De todos modos, la playa cuenta con servicio de vigilancia y socorrismo.
A diferencia del resto de las playas, no hay servicios ni instalaciones, de manera que se recomienda venir preparado para pasar el día. Por las tardes, los acantilados proyectan sombra sobre la arena, por lo que se presta para explorar la zona y caminar hacia el oeste por la línea costera y llegar a la Praia do Vale de Centeanes.
6- Hacer una excursión a la Cueva de Benagil
Si te encuentras en Carvoeiro, no puedes dejar de hacer una excursión al Algar de Benagil o Cueva de Benagil, el monumento natural más conocido del Algarve. Si dudas de si vale la pena, ten en cuenta que la Guía Michelin lo considera como la decimoquinta cueva más hermosa del mundo. Su abrumadora belleza es difícil de describir, de manera que lo mejor que puedes hacer es visitarla e intentar hacerlo por tu cuenta. Además, las excursiones en bote a Algar Seco también incluyen la visita a la Cueva de Benagil, de manera que puedes matar dos pájaros de un tiro.
La Cueva de Benagil es uno de los hitos naturales más famosos de Portugal. Se encuentra situada en la costa del Algarve, junto al pueblo pesquero de Benagil, a 15 minutos de Lagos, 25 de Portimao y 45 de Faro.
Posiblemente, te preguntes qué tiene de especial. En primer lugar, el hecho de que se encuentra junto a la playa con el mismo nombre, la cual es encantadora. Aunque, sin dudas que lo más llamativo es la enorme gruta con un agujero en el techo que posee esta cueva. Esta especie de ojo ilumina las arenas doradas y las aguas turquesas de su interior, haciendo que adquieran tonalidades únicas. Además, si miras hacia arriba te toparás con el azul del cielo. ¿Se puede pedir más?
Un consejo que te damos, es que evites ir en julio y agosto, momento en que puede estar abarrotada de gente. Muchas veces, la presencia de muchedumbres le quita un poco de encanto a los atractivos naturales. Si piensas como nosotros, entonces lo mejor es que vayas fuera de temporada. En este sentido, la primavera y el otoño pueden ser una buena idea.
Tip viajero: la hora del día es otro factor a considerar. Si quieres ver la cueva iluminada por el sol, el momento perfecto para ir es alrededor de media mañana o al final de la tarde. La desventaja de hacer esto en temporada alta es que es el momento de mayor afluencia de visitantes. En cambio, fuera de temporada está bastante más tranquila.
¿Cómo visitar la Cueva de Benagil?
La cueva marina de Benagil se puede admirar desde lo alto, aunque el acceso únicamente se realiza por vía marítima. Las opciones son ir en bote, kayak, paddle board o nadando. Con cualquiera de estas apuestas, podrás explorar la cueva a tus anchas y no atarte al itinerario de un tour. Eso sí, en caso de que pienses llegar nadando, te recomendamos tener mucha precaución y experiencia en el mar.
Los recorridos en kayak a la cueva de Benagil cuestan alrededor de 40 euros por persona, mientras que las excursiones de stand up paddleboard, unos 50 euros por persona. Las travesías duran entre 2 y 3 horas y te dan algo de 20 minutos para explorar la cueva. Si prefieres hacer esto por tu cuenta y tener el tiempo que quieras en la cueva, asegúrate previamente de chequear las condiciones climáticas.
Las excursiones en barco desde Carvoeiro son una de las alternativas más elegidas por los turistas. Además, de esta manera podrás conocer muchas otras cuevas y formaciones a lo largo de la costa. La desventaja es que no todas las excursiones te permiten bajar del barco y explorar la cueva. Por eso, deberás averiguar muy bien cómo es el tour antes de contratarlo.
Los viajes en barco duran entre 1 a 3 horas, según el itinerario, y cuestan entre 20 y 60 euros por persona. En temporada alta los precios suelen ser más caros y los paseos más frecuentes.
Finalmente, desde la playa de Benagil también es posible visitar la cueva. Si bajas por las escaleras hasta la costa, verás botes de pescadores que llevan turistas a la cueva. Las embarcaciones son más pequeñas y más económicas que los tours, por lo que son una buena opción. La desventaja es que no podrás bajar y explorar la cueva.
7- Disfrutar del senderismo
Hay otras formas de explorar las maravillas naturales que envuelven Carvoeiro, por ejemplo haciendo senderismo. A través del sendero de los Siete Valles Colgantes disfrutarás de los infinitos acantilados y las maravillosas e imposibles formaciones rocosas de esta zona del Algarve. Precisamente, esta ruta corre por el borde de los acantilados de la costa, regalando unas vistas que parecen sacadas de una postal. Por eso, si te gusta caminar, aquí tienes una de tus mejores opciones.
El sendero de los Siete Valles Colgantes comienzan en la Praia de Vale Centeanes y finaliza en la bellísima Praia de Marinha. El recorrido ida y vuelta tiene poco más de 11 km que no te llevarán mucho más de 3 horas, según el tiempo que inviertas en bajar a las playas y tomar fotografías. Ya sea desde uno u otro punto, no dejes de hacer esta caminata que pasa por escenarios realmente encantadores. Si bien hay muchas playas a las cuales no se puede acceder, las vistas desde lo alto valen mucho la pena.
Además, a lo largo del sendero pasarás por muchos sitios memorables de esta zona, como la recién mencionada Cueva de Benagil y el Faro de Alfanzina.
8- Visitar Sand City
Otro buen plan para hacer en Carvoeiro, especialmente si viajas con niños, es visitar Sand City, a tan solo 7 km de la villa. Este parque de esculturas de arena tiene la fama de ser el más grande del mundo, por lo que es un excelente plan para compartir en familia.
El parque se encuentra situado en una gran explanada en donde se han montado verdaderas obras de arte hechas con más de 40.000 toneladas de arena. Además, la temática de la exposición varía cada año, de manera que siempre verás algo nuevo.
El paseo por las esculturas de arena es especialmente atractivo al atardecer, cuando las mismas se iluminan con los rayos naranjas del sol. Además, la zona posee muy pocas áreas de sombra, por lo que se recomienda evitar las horas más calurosas.
9- Probar los sabores típicos de Carvoeiro
Además de ser famoso por sus playas y monumentos naturales, Carvoeiro se distingue por su rica gastronomía. En este rinconcito encontrarás muchos bares y restaurantes en los que podrás saborear platos con pescados y mariscos y otras delicias portuguesas e internacionales. A lo largo de la calle principal, Largo da Praia, es donde más alternativas gastronómicas se presentan.
Como buen pueblo de pescadores, los platos típicos de Carvoeiro tienen que ver con el mundo marino. Las sardinas a las brasas, pescados como la lubina y el atún preparados de diferentes maneras, pulpos y langostinos son moneda corriente. De todos modos, si te apetece comer algo que no sea pescado, el pato y el cordero también están entre los platos populares. Del mismo modo, hay establecimientos que preparan comidas exóticas, delicias asiáticas, pastas y mucho más.
Si a la experiencia culinaria le sumas la posibilidad de comer con excelentes vistas al mar, tendrás un motivo más para enamorarte de Carvoeiro.
10- Explorar los alrededores de Carvoeiro
Finalmente, no te quedes únicamente con lo que veas Carvoeiro. Anímate a explorar la zona y hacer que el viaje valga todavía más la pena. Las cercanas ciudades de Lagoa, Porches, Portimão y Vilamoura son grandes alternativas. Un poquito más lejos, se encuentra la bella ciudad de Faro, que también vale mucho la pena.
Definitivamente, Carvoeiro es un destino que lo tiene todo: buena comida, playas, vistas de infarto, naturaleza por todos lados y la posibilidad de vivir un gran número de experiencias. Las playas del sur de Portugal son un verdadero espectáculo, y Carvoeiro es un claro ejemplo de ello. ¡No te pierdas la posibilidad de presenciar algunos de los escenarios naturales más impactantes del país!
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