La isla de Madeira es considerada la “Perla del Atlántico”. Este paraíso indescriptible es un destino por el que hay que pasar al menos una vez en la vida. Montañas escarpadas, enormes cascadas, miradores de película, las famosas levadas, playas de ensueño… Todo esto y más es Madeira. Hoy nos detendremos en un rincón puntual de la isla: Machico, su segunda ciudad más grande y un destino que rebosa historia y naturaleza. ¿Nos acompañas a descubrirlo?
Machico es un municipio conformado por cinco parroquias (Água de Pena, Caniçal, Machico, Porto da Cruz e Santo António da Serra) que se encuentra al este de Funchal, la capital de Madeira. La ciudad está atravesada por el río con el mismo nombre, quien culmina su recorrido en el Atlántico, y asentada en una hermosa bahía con forma de medialuna rodeada de verdes montañas.
Las opciones de turismo en la ciudad y sus alrededores son muchas. Por eso, nuestro consejo es que le dediques al menos un fin de semana completo, aunque puedes estar más tiempo recorriendo sus parroquias, playas, monumentos históricos y disfrutando de distintas rutas de senderismo.
¿Cómo llegar a Machico?
Está claro que para llegar a Machico primero hay que arribar a la isla de Madeira. Esto no será ningún problema, ya que en todo el mundo hay muchos operadores turísticos con conexiones regulares por avión y en barco.
Lo más rápido es arribar al Aeropuerto Internacional de Madeira, la puerta de entrada más frecuente para quienes visitan la isla. El mismo se ubica a unos 7 km del centro de Machico, en un viaje en coche de poco menos de 10 minutos.
Si vienes desde Funchal (la capital de la isla), tendrás que conducir por unos 20 minutos por la carretera ER101. El trayecto de 25 km es sumamente tranquilo y apacible.
Si prefieres la comodidad de los viajes organizados, puedes apuntarte a este tour por Madeira al completo en 2 días. No solo conocerás Machico, sino la isla completa.
Un poco de la historia de Machico
El sitio donde hoy se asienta la ciudad de Machico fue el primer punto de la isla de Madeira que descubrieron los navegantes portugueses Tristão Vaz Teixeira y João Gonçalves Zarco en 1419.
También hay una leyenda local que habla de sus orígenes. Según la misma, Machico fue descubierta por un par de amantes (una dama inglesa y un caballero de la corte del rey Eduardo III de Inglaterra) que se fugaron de su hogar de Bristol, allá por el siglo XIV. Se dice que la pareja naufragó en la Bahía de Machico luego de que su barco desviara su curso tras una tormenta. La pareja murió, pero la tripulación logró escapar en una balsa. A su regreso, llevaron noticias de la existencia de esta isla, que más tarde sería explorada por João Gonçalves Zarco.
Luego del desembarco comenzó la colonización portuguesa de la isla. Hacia el año 1.440, la villa de Machico se había constituido como la primera Capitanía de Madeira. A su vez, su excelente clima y la abundancia de agua la habían convertido en un importante centro de producción azucarera. Machico fue clave para el desarrollo del municipio, en parte gracias a su puerto y el de Caniçal, que proveían a los pobladores de la zona de frutos de mar, así como elementos básicos traídos de Portugal.
Desde ese entonces y hasta la actualidad, Machico jugó un papel fundamental para el desarrollo de la isla. Hoy en día, mantiene viva su historia y sus tradiciones se complementan con su cara más moderna. De ese modo, el viajero que la visita se encuentra con un lugar que aúna patrimonio histórico, natural y cultural, además de una oferta turística que anda tiene que envidiar a la de otros destinos europeos.
¿Qué ver en Machico?
Machico es un destino con una larga tradición y una arquitectura inigualable, con edificios que se remontan al año 1.450 y que se han mantenido casi impolutos al paso del tiempo. Allí podrás visitar el faro más antiguo de la isla, dar paseos en barco por la riviera, caminar por el malecón, descansar en su bonita playa y hacer alguna ruta de senderismo por sus levadas.
Además de joyas arquitectónicas, la ciudad es la sede del Mercado Quinhentista, un colorido festival que se celebra en junio de cada año y recrea las tradiciones medievales de Machico, algunas de las cuales tienen más de 500 años de antigüedad.
Otros eventos que tienen lugar en Machico son la Semana Gastronómica, el Festival de Arte y Pesca y las fiestas de la Inmaculada Concepción. Para todas estas ocasiones, las ricas y antiguas tradiciones de la ciudad son recordadas y celebradas por sus habitantes y admiradas por los turistas que pasan por ella.
En definitiva, Machico cuenta con monumentos históricos, una hermosa playa, levadas y puertos deportivos en donde podrás disfrutar de muchas actividades en contacto con el agua. Aquí te dejamos algunas propuestas imperdibles para disfrutar de Machico.
Patrimonio monumental
Si bien la ciudad de Machico es pequeña, su patrimonio monumental es bastante amplio. La larga historia de esta villa madeirense dejó como legado una buena cantidad de sitios históricos cuya visita combina a la perfección con una jornada de playa.
La mayor parte de los monumentos y edificios históricos de Machico se concentran en el casco histórico, aunque en el resto del municipio hay repartidas otras joyas patrimoniales. La Iglesia Matriz del siglo XV, la Casa da Capela, la Fuente de São Roque y los Fuertes de Nossa Senhora do Amparo y de São João Baptista son algunos de los miembros del amplio catálogo monumental de Machico. Cada uno de ellos conserva una arquitectura impecable y permite conocer los orígenes de la ciudad.
A ellos se suman el Faro de la Punta de São Lourenço, el Ingenio del Norte, en Porto da Cruz; el conjunto arqueológico Solar do Riberrinho, la Iglesia Matriz de Santa Beatriz, en Água de Pena; y las capillas de San Roque y Nuestra Señora de Gracias.
- La Iglesia Matriz de Machico (Nossa Senhora da Conceição) es el ejemplo más relevante del patrimonio religioso de Machico. Fue levantada a finales del siglo XV y posee un bonito estilo gótico manuelino, manierista y barroco.
- La Capela do Senhor dos Milagres es el templo más antiguo de Machico. De estilo barroco, fue construida sobre los restos de una ermita del siglo XV. Hoy en día, es la sede de una de las festividades más importantes de la ciudad, la Festa do Senhor dos Milagres.
- El Paços do Concelho es un edificio de influencia neoclásica y una de las muestras más importantes de la arquitectura civil de Machico. Es también la sede de los servicios administrativos y de gestión del municipio.
- El Fuerte de Nossa Senhora do Amparo es un bastión defensivo de principios del siglo XVIII que se erigió para proteger a la población de los ataques de piratas y corsarios. Está ubicado a espaldas de la playa de San Roque.
- Otro antiguo fuerte de Machico es el de São João Baptista. Su construcción data del siglo XVIII, en el extremo norte de la bahía y su historia está ligada al primer desembarco en la isla. Hoy en día es parte del patrimonio cultural de la Región Autónoma de Madeira.
Museos y otros espacios culturales
La oferta cultural de Machico es muy amplia. En las parroquias del municipio encontramos muchos museos y espacios destinados a que el visitante descubra las tradiciones, historia y el folklore de esta zona de la isla.
Uno de los más importantes es el Museo de la Ballena de Madeira. Situado en el pueblo de Caniçal, su exposición cuenta la historia de la caza de ballenas en la isla y todas las actividades asociadas a ella. En su momento la pesca de estos cetáceos fue una de las actividades económicas más fuertes de Madeira. Hoy en día (y afortunadamente), la actividad ya no se practica y la isla se ha convertido en un santuario para estos gigantes del océano.
Dentro del museo se exhibe una reproducción a escala real de una ballena, fotografías, utensilios y todo lo referente a las antiguas técnicas de la pesca de la ballena.
Otros espacios interesantes son el Centro Arqueológico de la Región Autónoma de Madeira y el Solar Ribeirinho. Este último alberga el Museo de Machico, donde encontrarás una muestra interesante e interactiva que cuenta los 600 años de historia del municipio.
Playas de Machico
La isla de Madeira es un destino de veraneo muy popular entre los portugueses y turistas europeos. La Bahía de Machico goza de un mar tranquilo y cristalino que contrasta con las verdes montañas a su alrededor, conformando una hermosa postal. En ella encontramos dos bonitas playas: la praia de São Roque y la praia da Banda Além, a las cuales se suman otros hermosos arenales repartidos a lo largo del municipio.
Banda d’Além
Con 125 metros de largo y 70 de ancho, la praia de Banda d’Além se caracteriza por su arena dorada traída de Marruecos. Está situada a la derecha de la desembocadura de la Ribeira de Machico (mirando desde el mar) y cuenta con un pequeño puerto deportivo protegido por dos espigones.
La praia de Banda d’Além pone a disposición del bañista todos los servicios que una playa urbana debe tener, incluyendo parkings, restaurantes, duchas, socorristas y más. Es ideal para disfrutar de una jornada relajante o practicar diversos deportes acuáticos.
São Roque
A diferencia de la anterior, la praia de São Roque está formada por cantos rodados y algo de arena negra (lo cual da nota del origen volcánico de la isla) y ocupa en gran medida la bahía de Machico.
Su ambiente agradable y tranquilo la convierten en una de las zonas de recreo más populares de la región. Es de acceso libre y dispone de diversas infraestructuras que aseguran la comodidad y seguridad de los bañistas, desde aseos y duchas, hasta socorrista y puesto de primeros auxilios. También cuenta con una buena cartera de restaurantes y bares en sus inmediaciones.
La playa se sitúa también en la desembocadura de la Ribeira de Machico (hacia la izquierda, mirando desde el mar), próxima a la capilla de São Roque. Cuenta con un pequeño muelle y está flanqueada por una amplia explanada que une el Forum Machico con el Fuerte de Nossa Senhora do Amparo. A lo largo de esta encontramos restaurantes, bares, un parque infantil y más.
Praia da Alagoa (Porto da Cruz)
Esta bonita playa se encuentra en Porto da Cruz, una de las parroquias que conforman el municipio de Machico, en la costa noreste de la isla de Madeira. La playa de Alagoa es otra de las que dispone de todas las condiciones necesarias para que los veraneantes disfruten de encantadoras jornadas junto al mar. Cuenta con una zona restaurantes, un bar, aseos, vestuarios, tumbonas y sombrillas disponibles para alquilar, aparcamiento público y más.
Su paisaje es una delicia para la vista, con el azul cristalino del agua, la montaña salpicada del verde hacia un lado y la arena negra en el centro. Por las condiciones del mar, la praia de Alagoa es muy popular entre los surfistas y los aficionados a los deportes náuticos.
Praia de Maiata (Porto da Cruz)
Situada en la costa noreste de la isla, la praia de Maiata es otra de las favoritas de los aficionados del surf y otros deportes acuáticos.
Este hermoso balneario se distingue por la tonalidad negra de su arena mezclada con guijarros, las aguas cristalinas del mar y las montañas tapizadas de verde a su alrededor. Nuevamente, estamos ante un entorno natural de película.
La praia de Maiata no es la más adecuada para darse un baño, pero sí para poner a prueba tus habilidades con la tabla de surf. El oleaje es excelente y se amolda a practicantes de todos los niveles, ya sean principiantes o expertos. De allí que cuente también con escuelas y servicios relacionados con este deporte.
Praia Ribeira do Natal (Caniçal)
Otra de las mejores playas del Municipio de Machico es Ribeira do Natal, en la vecina parroquia de Caniçal. Este rincón natural se ubica en un entorno único, con las imponentes montañas verdes contrastando con el azul cristalino del Atlántico.
La praia Ribeira do Natal está custodiada por el paseo marítimo que conecta Machico con Caniçal y está bañada por aguas calmas y claras que son una delicia para los amantes de la natación. Por su parte, el paseo marítimo es perfecto para quienes disfrutan de caminar acompañado de hermosos paisajes marinos.
Si bien no es muy conocida, posee una amplia gama de infraestructuras e instalaciones para que los bañistas se sientan cómodos y seguros. Por ende, es una opción más que perfecta para tus vacaciones en Machico.
Baía d’Abra (Ponta de São Lourenço)
Situada en la Ponta de São Lourenço, en el extremo oriental de la isla de Madeira, la Baía d’Abra recibe a sus visitantes con un paisaje peculiar y árido de enorme belleza. Es uno de esos rincones que invitan a disfrutar de la calma y la contemplación de la naturaleza, puesto que aquí la misma revela toda su grandiosidad.
En este punto de la isla los acantilados y la escasa vegetación contrasta fuertemente con los tonos verdes del resto de la isla. A su vez, es hogar de una flora y fauna exótica que le valieron el título de Reserva Natural Parcial.
Cais do Sardinha (Ponta de São Lourenço)
En el extremo oriental de la isla de Madeira encontramos Cais do Sardinha, un sitio que poco tiene que ver con las playas tradicionales. Aún así, es un rincón de Ponta de São Lourenço que no puedes dejar de visitar.
Cais do Sardinha está situada al final de la Vereda da Ponta de São Lourenço (PR 8), un paseo que recorre esta hermosa península de origen volcánico que constituye el punto más oriental de Madeira. Aquí la belleza de los paisajes áridos, los acantilados costeros y la claridad del agua regalan una postal de película. Sin dudas, es el broche de oro de la caminata.
Eso sí, si planeas visitar Cais do Sardinha debes saber que no hay servicio de socorrista, por lo que tendrás que tener mucho cuidado a la hora de ir al agua. De lo contrario, vale la pena acercarse para contemplar una amplia panorámica sobre el Atlántico, con las islas Desertas y Porto Santo en el horizonte.
Puerto deportivo y recreativo de Machico
Además de acoger dos hermosas playas, la bahía de Machico es un buen lugar para que los amantes de los deportes náuticos se saquen las ganas de practicar alguno de ellos. Windsurf, SUP, pesca deportiva, buceo y paseos en barco son apenas algunas de las opciones.
Dentro del municipio encontramos dos puertos deportivos con capacidad para más de 300 amarres: el puerto recreativo de Machico y el puerto deportivo de Quinta do Lorde. Este último está situado en el sureste de la isla de Madeira, junto al complejo turístico Quinta do Lorde, a 10 km de Machico y a 4 km del centro de Caniçal.
Por su parte, el puerto recreativo se ubica en las inmediaciones del puerto de la ciudad y en un entorno paisajístico privilegiado. Un bonito paseo marítimo lo conecta con centro de Machico en menos de 5 minutos a pie.
Los mejores deportes náuticos para practicar en Machico
Uno de los deportes más nuevos en Machico es el Coasteering, una actividad llena de adrenalina que combina escalada, salto, natación y buceo. Justamente, esta ciudad y su entorno es el mejor lugar de Madeira para disfrutar de esta nueva tendencia en el entretenimiento. Concretamente, las bahías de aguas cristalinas y las cuevas de la Ponta de São Lourenço representan el mejor escenario.
Otro de los deportes populares de la isla es el windsurf. De hecho, en Madeira vive el atleta olímpico João Rodrigues, uno de los deportistas con mayor número de participaciones en la historia de los Juegos Olímpicos en lo que a este deporte respecta. La costa este, donde se asienta Machico, es ideal para la práctica del windsurf gracias a que se dan las condiciones justas para ello.
Los amantes de la pesca deportiva tienen también un motivo de sobra para viajar a Machico. Peces de gran tamaño como el pez espada y el atún abundan en sus inmediaciones. Tan es así que la ciudad es considerada la Capital del Atún en Madeira.
Otra actividad que te recomendamos disfrutar son los viajes en barco. Machico cuenta con muchas agencias que llevan a los turistas a explorar la belleza de la costa este de la isla. Además, existe la posibilidad de tener un encuentro cercano con ballenas, delfines, tortugas y, con un poco de suerte, lobos marinos. Aquí te dejamos una propuesta interesante: avistamiento de cetáceos en Caniçal.
Como ya sabes, el surf es otra de las posibilidades que permite esta zona del litoral de la isla. Machico cuenta con tres puntos de referencia para la práctica de dicho deporte situados entre las parroquias de Porto da Cruz y Machico. Como ya sabes, el primero de ellos es sin dudas el mejor sitio de Madeira para surfear.
Desembocadura de la Ribeira do Natal
La desembocadura de la Ribeira do Natal es otra muestra clara del patrimonio natural de Machico. Se trata de uno de los espacios más vírgenes de la costa este de Madeira y un lugar ideal para escaparse del ajetreo y el bullicio. Aquí el paisaje marcado por las montañas verdes y las aguas azules del Atlántico es una delicia para los sentidos.
Además, muy cerca se encuentra la praia de Ribeira do Natal, la cual ofrece a los bañistas todos los servicios e instalaciones para que disfruten de una jornada de verano; y del Museo de la Ballena. Por otro lado, los amantes de la caminata encontrarán un bonito sendero que conecta las parroquias de Machico y Caniçal. El paseo transcurre cerca de la costa, lo cual permite disfrutar de una visual única del paisaje circundante.
Miradouro do Pico do Facho y el Miradouro do Senhor dos Milagres ou da Queimada
Para llevarse la postal más bonita de la ciudad y el Atlántico tienes que subir a alguno de sus miradores. Machico cuenta con dos puntos panorámicos desde los cuales apreciar la belleza del paisaje y tomar hermosas fotografías de recuerdo. Hablamos del Miradouro do Pico do Facho y el Miradouro do Senhor dos Milagres ou da Queimada.
Desde el Miradouro do Pico do Facho se divisa un panorama inmejorable, con montes, valles, las construcciones de la zona y la Ponta de São Lourenço. Desde el Miradouro do Senhor dos Milagres ou da Queimada, en cambio, se aprecia toda la ciudad de Machico con el aeropuerto de Funchal y las Islas Selvagens de fondo.
Caniçal
El municipio de Machico está conformado por cinco parroquias (Água de Pena, Caniçal, Machico, Porto da Cruz), cada una con su encanto. Aunque, si hay una que te recomendamos visitar, esa es Caniçal.
Esta pequeña parroquia también conjuga historia, cultura y naturaleza. A pesar de su aridez, sorprende gratamente al viajero con algunos de los paisajes más hermosos de Madeira. Además de hermosas playas, el Ponta de São Lourenço es un ícono máximo de su belleza natural.
Por si fuera poco, en este acogedor pueblo de pescadores podrás disfrutar de los más deliciosos manjares del mar a muy buenos precios. Te recomendamos probar especialmente las lapas, las tapas de camarón y el pan «bolo do caco».
En cuanto a las playas, la hermosa Prainha sorprende con su arena negra propia del origen volcánico de la isla. Aquí el mar tiene una temperatura ideal, las aguas son calmas y permiten nadar sin problema. La playa cuenta con un bar-restaurante, vestuarios y alquiler de sombrillas y tumbonas.
Otros atractivos son el complejo Balnear da Ribeira de Natal y las piscinas de Caniçal. Estas últimas ponen a disposición de sus visitantes todo tipo de servicios y comodidades, por lo que resultan ideales para las familias que viajan con niños.
Península de São Lourenço
Uno de los paisajes más hermosos de Madeira es la Punta de São Lourenço, en el extremo nororiental de la isla. Sus acantilados de los colores amarillos, anaranjados y marrones son una delicia visual.
Esta península azotada por el viento y las olas salvajes del Atlántico es reserva natural desde 1982 y uno de los espacios más vírgenes y mágicos de la isla. Aquí el visitante se encuentra con paisajes desérticos, casi lunares, en los cuales se puede caminar a través de senderos de lava solidificada. De hecho, la ruta de la Península de São Lourenço es una de las más populares de Madeira.
Te recomendamos caminar por el sendero que parte desde el parking y llega al Mirador de la Bahía d’ Abra. Aquí te espera un paisaje de rocas volcánicas increíble y el comienzo de una ruta que en 3 horas recorre la Península de São Lourenço. De camino encontrarás miradores desde los cuales se aprecian los islotes Ilhéu de Fora, con su faro, y el Ilhéu dos Desembarcadouros.
Sin dudas, esta península es un paraíso para los amantes del senderismo y para los geólogos, ya que este sitio es excelente para comprender el origen tectónico y volcánico de la isla de Madeira.
El acceso se realiza por la carretera ER-109, la cual lleva hasta Caniçal, el cual se alza en una de las extremidades de la península de São Lourenço.
Levadas y veredas de Machico
Uno de los mayores atractivos de Madeira son las levadas repartidas a lo largo y ancho de todo su territorio. Las mismas se vuelven algo irresistible para los amantes del senderismo, gracias a la red de 2.200 km de levadas y senderos que hay disponible. Las mismas forman parte del patrimonio cultural de la isla y son una muestra de cómo el hombre es capaz de hacer grandes obras en armonía y consonancia con la naturaleza.
¿Qué son precisamente las levadas? Se trata de antiguos canales de agua construidos a mediados del siglo XVI con el fin de aprovechar las fuentes hídricas de ciertas regiones de la isla. En algunos casos constituyeron verdaderas obras de ingeniería que permitieron surtir de agua las zonas deshabitadas de Madeira. Al mismo tiempo, favorecieron la producción agrícola y en muchos casos sirvieron como fuentes de energía hidroeléctrica.
Los más de 2.000 km de levadas en Madeira se pueden recorrer por senderos paralelos a las mismas y en ocasiones sobre las mismas levadas. Algunas discurren por el interior de la isla, otras por acantilados sobre el mar, algunas son muy estrechas, mientras que otras parecen auténticas avenidas. Como sea, las levadas de Madeira llevan al senderista a recorrer los paisajes más espectaculares de la isla y a descubrir rincones recónditos. Un ejemplo de esto último es el bosque de Laurisilva, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1999.
Antes de contarte cuáles son las levadas para hacer en Machico te damos algunos consejos útiles. No olvides llevar una campera impermeable, repelente de insectos, bloqueador solar y calzado cómodo si vas a hacer alguna ruta de senderismo. Según la época puedes llevar también traje de baño. Tampoco olvides tener a mano suficiente agua y algún bocadillo, al igual que tu cámara de fotos. Te esperan paisajes impresionantes, cascadas, acantilados pronunciados, bosques, campos de cultivos coloridos y otras postales que seguro querrás capturar en una foto.
¿Cuál es la diferencia entre las levadas y las veredas? Esta es otra aclaración que debemos hacer. Mientras que la levada es un camino que transcurre por un canal de agua, una vereda es también un camino, pero sin la presencia de un curso o canal de agua. En todo caso, ambos son paseos comunes y populares para hacer en la isla de Madeira.
Ahora sí, las levadas más importantes de Machico son las de Caniçal, Portela, Nova, Castelejo, Blandy y Penha d’Água. Por su parte, las veredas más populares son la de Ponta São Lourenço, Pico do Facho, Pico do Suna, vereda Boca do Risco, Chão das Feiteiras y la vereda Cais da Sardinha.
Te recomendamos especialmente la ruta de Caniçal y Península de São Lourenço. La misma transcurre por el extremo más nororiental de Madeira te permitirá apreciar uno de los paisajes más peculiares de la isla. La de San Lorenzo es una estrecha península salvaje que se interna en el Océano Atlántico a lo largo de unos 5 km.
Sus paisajes áridos y desolados poco tienen que ver con la húmeda selva Laurislva que se ve en el interior de la isla. En San Lorenzo el contraste de colores, el clima y la vegetación crean un paisaje de película digno de admiración.
La vereda da São Lourenço, por su parte, es un paseo de 8 km que también te sugerimos hacer. Durante la caminata se divisa fácilmente las islas de Porto Santo y las Desertas. Eso sí, siempre y cuando el día esté despejado. Al final del paseo te encontrarás con el Cais da Sardinha, donde podrás darte un chapuzón.
Mapa de Machico y alrededores
Aquí tienes un mapa de Machico y alrededores. Como puedes ver, los atractivos del municipio son muchos y variados. Además, si extiendes tu viaje por toda la isla de Madeira seguro disfrutarás de unas vacaciones mágicas.
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