Viaje a la colorida Quebrada de Humahuaca

La colorida Quebrada de Humahuaca es un imperdible de cualquier viaje por el Noroeste Argentino. Este precioso valle andino se encuentra en la provincia de Jujuy y se extiende a lo largo de unos 155 km que se recorren a ambos lados del Río Grande.

Con una larga historia por detrás y paisajes que te dejarán con la boca abierta, la Quebrada de Humahuaca es uno de los grandes tesoros de Argentina. Como queremos que puedas conocer este sitio único, hemos armado una guía de viaje muy completa por uno de los enclaves más bellos del país. ¿Nos acompañas?

La Quebrada de Humahuaca se ubica a más de 2.000 metros de altura y en algunos puntos supera los 4.000 metros sobre el nivel del mar. Flanqueada por altas cadenas montañosas y labrada laboriosamente por el río Grande con los años, este destino jujeño combina paisajes increíbles con atractivos culturales, históricos y arqueológicos. Sus pueblos, tradiciones y forma de vida son muy diferentes al resto del país. De allí que realmente sea un sitio único.

Hoy en día los habitantes de la Quebrada de Humahuaca pertenecen a la etnia coya. Pero, a lo largo de los años ha sido hogar de distintas culturas ancestrales, entre ellos los Omaguacas, quienes le dieron el nombre al lugar. Por eso, otra de las cosas por las que se destaca la Quebrada de Humahuaca es por su riqueza histórica.

Importancia histórica de la Quebrada de Humahuaca

La historia de la Quebrada de Humahuaca se puede palpar en sus tradiciones, en sus edificios coloniales, sus pinturas rupestres y en sus yacimientos arqueológicos. A lo largo de los años, este valle andino jugó un rol protagónico en el desarrollo cultural de la región y países vecinos de América del Sur. Desde siempre funcionó como una vía de interacción permanente entre diferentes territorios, vinculando pueblos y culturas entre sí.

Si quisiéramos repasar la historia de la Quebrada de Humahuaca deberíamos remontarnos unos 10.000 años en el tiempo, cuando los Omaguacas habitaron estas tierras. Esta civilización andina se dedicaba a la caza y la recolección y, como ya sabes, fue quien le dio el nombre al lugar.

Años más tarde arribó a la zona otra etnia, los Diaguitas, quienes se dedicaban a la cerámica y construyeron importantes fortalezas, como el famoso Pucará de Tilcara. Alrededor de 1480 llegó el Imperio Inca, en su avance por América del Sur, con el firme objetivo de apropiarse de las tierras. Luego de la conquista incaica, el intercambio de mercancías en la región se intensificó, se mejoró el comercio y el sistema de transporte.

Además de servir de ruta para los incas, la Quebrada de Humahuaca fue paso obligado los colonizadores y una importante ruta comercial durante la etapa virreinal. Por ejemplo, fue clave para el comercio entre el Río de la Plata y Potosí a través del Camino Real.

Los conquistadores españoles arribaron a la quebrada hacia el siglo XVI, con la intención de tomar control sobre estas tierras prósperas. Tras una serie de enfrentamientos en los cuales los indígenas pusieron una fuerte resistencia, finalmente en 1598 los nativos fueron derrotados.

La llegada y el apoderamiento de los españoles a la Quebrada de Humahuaca produjo un profundo cambio demográfico, debido a la llegada de una gran cantidad de inmigrantes y la progresiva desaparición de los indígenas. Los recursos naturales del valle fueron explotados y el comercio creció a niveles excepcionales. Tan es así que en el siglo XVIII las relaciones comerciales entre Buenos Aires y la zona alta de Perú alcanzaron su mejor momento.

A pesar de la colonización, se considera que la Quebrada de Humahuaca es uno de los pocos lugares del país en donde las tradiciones indias siguen vivas. De allí que su riqueza cultural e histórica le valió el título de Patrimonio de la Humanidad, el 2 de julio del 2003.

Recorrer la Quebrada de Humahuaca es sumergirse en un mundo de formaciones naturales increíbles, pueblos coloniales y tradiciones que te harán retroceder en el tiempo. La experiencia es inolvidable y conmovedora. ¿Te animas a vivirla?

¿Cómo llegar a la Quebrada de Humahuaca?

Lo mágico de la Quebrada de Humahuaca no es solo el destino en sí mismo, sino también el viaje para llegar a ella. Si llegas desde provincias ubicadas más al sur que Jujuy, tendrás que atravesar algunos de los rincones más hermosos del Noroeste Argentino a lo largo de tu travesía.

Otra alternativa es tomar un vuelo a las ciudades de Salta o San Salvador de Jujuy y desde ellas emprender un recorrido hacia el norte por vía terrestre hasta arribar a la quebrada.

Partiendo desde la capital salteña es posible llegar a Jujuy de diferentes maneras. Lo clásico es tomar la Ruta Nacional 34 y luego empalmar con la 66. Si bien esta vía es la más ágil, si prefieres un camino más emocionante, puedes optar por una hermosa ruta conocida como La Cornisa.

La Cornisa transcurre por la Ruta 9, un camino estrecho que se interna en el intenso verde de las Yungas. La travesía es un todo un espectáculo visual que no olvidarás. La ruta se encuentra en buenas condiciones y asfaltada en su totalidad. Pero, tal cual lo indica su nombre, atraviesa puntos de cornisa y por momentos es muy angosta, al punto tal que hay que conducir con cuidado. De todos modos, si viajas despacio y con buena luz, no tendrías que tener ningún problema para llegar a la capital jujeña habiéndote deleitado con paisajes de película.

Otra manera poco habitual de llegar a la Quebrada de Humahuaca es entrando desde San Antonio de los Cobres, en la provincia de Salta. Para eso deberás atravesar las Salinas Grandes, sortear la Cuesta de Lipán y finalmente llegar al encantador pueblo de Purmamarca. Una vez en Purmamarca ya estarás dentro de la Quebrada de Humahuaca y puedes continuar viaje hacia el norte, sin tener que retroceder. Nuevamente, estás ante una ruta cuyos paisajes no tienen desperdicio.

Aquí te dejamos un mapa con estas tres opciones de caminos desde Salta a Jujuy, de manera que puedas optar por el que creas más conveniente. En los dos primeros casos, una vez que llegues a la capital jujeña no tienes más que continuar por la Ruta 9 y poco a poco te irás adentrando en los paisajes de la Quebrada de Humahuaca.

Los pueblos de la Quebrada de Humahuaca

La Quebrada de Humahuaca da cobijo a algunos de los pueblos más hermosos de la República Argentina. Hablamos de localidades como Purmamarca, Tilcara y Humahuaca, aunque hay otros. Estos pueblitos quebradeños enlazan y atesoran historia y tradiciones de raíces ancestrales que se mantienen vivos gracias a su gente. De allí que visitarlos sea toda una experiencia cultural que sumerge al visitante en antiguas creencias religiosas, arte, música, ritos y técnicas agrícolas que son un patrimonio viviente.

¿Qué encontrarás en los pueblos de la Quebrada de Humahuaca? Construcciones de adobe, calles estrechas y empedradas, capillas coloniales, ruinas prehispánicas, mercados coloridos, artesanías de todo tipo y gente muy amable que se muestra feliz de recibir al turista en su tierra.

¿Cuál es el pueblo mejor preparado para el turismo? Sin dudas, Tilcara. Por eso, una buena alternativa es hacer base allí y aprovechar la rica y variada oferta hotelera y gastronómica que ofrece. Tilcara es un punto estratégico dentro de la Quebrada de Humahuaca, puesto que se encuentra muy cerca de Purmamarca, Maimará, Uquía, Yavi, Humahuaca y destacados puntos de la región.

¿Vale la pena conocer cada pueblo? Si viajas con tiempo, definitivamente sí. Los enclaves son pequeños y no necesitas invertir muchas horas para recorrerlos. Por otro lado, cada uno tiene su particularidad y su atractivo. Además, al visitarlos contribuyes con la economía de sus habitantes, que por cierto, está muy golpeada por la fuerte crisis que atraviesa el país.

Por eso, nuestra recomendación es que te tomes varios días (una semana sería lo óptimo), para recorrer los pueblos de la quebrada y otros atractivos naturales a fondo. Así podrás llevarte un panorama completo de lo que es y representa este sitio patrimonial. Hablar con su gente, escuchar su historia, conocer su forma de vida… Todo ello enriquece el viaje de manera profunda. La Quebrada de Humahuaca es un lugar que más que conocerlo, tienes que vivirlo. Y eso únicamente puedes hacerlo con calma y tiempo.

A continuación, encontrarás una guía con los principales pueblos de la Quebrada de Humahuaca y sus atractivos. Hemos organizado el recorrido de esta manera, porque cada uno de ellos tiene su encanto y diferentes puntos de interés que vale la pena visitar. Al final te dejamos un mapa con los sitios mencionados.

Volcán

Rodeado por cerros y montañas y a 2078 metros sobre el nivel del mar se encuentra la pequeña localidad de Volcán, punto que marca el inicio de la Quebrada de Humahuaca. Si bien no posee el mismo interés turístico que otros integrantes de este circuito, su paisaje silencioso y la hospitalidad de sus habitantes hacen que merezca la pena dedicarle un poco de tu tiempo.

Para llegar a Volcán desde San Salvador de Jujuy no tienes más que conducir por la RN 9 durante 42 km, hasta que las primeras casas del pueblo se hagan visibles a un costado de la ruta.

En Volcán puedes visitar su Mercado de Artesanías, donde encontrarás todo tipo de productos realizados por los lugareños: artículos de cuero y madera, tejidos, telares, piezas de alfarería, instrumentos musicales, cesterías y más.

También puedes hacer un paseo de 5 km hasta la Laguna de Gronda, la cual se encuentra enmarcada por los Cerros de Chilcayoc. La caminata es muy pintoresca y permite llegar a un punto panorámico desde el cual se obtiene una bella postal del pueblo y su entorno.

Al igual que el Pucará de Tilcara, aquí puedes visitar el Pucará de Volcán. Se trata de las ruinas de lo que en algún momento fue un poblado indígena organizado. El acceso no es sencillo, pero vale la pena por la belleza de los paisajes.

Tumbaya

A tan solo 7 km de Volcán se encuentra Tumbaya, una pintoresca localidad de la Quebrada de Humahuaca. Este antiguo poblado de ascendencia prehispánica se encuentra inmerso en paisajes coloridos y recibe a sus visitantes con un espíritu norteño muy vivo y diferentes propuestas. Si bien no está dentro de los pueblos más turísticos de la quebrada, no dejes de darte una vuelta por él

Además de caminar por sus calles estrechas, puedes visitar la iglesia colonial de Nuestra Señora de los Dolores, que data del siglo XVII; o el sitio arqueológico de Huajra, más conocido como esquina de Huajra. Este antiguo emplazamiento incaico jugó un papel importante en la explotación de bienes procedentes de las Yungas orientales.

En Tumbaya también puedes vivir una experiencia gastronómica y cultural visitando la casa Doña Celestina. El lugar invita a tomar el té con hierbas de la zona y panificados caseros, a aprender todo acerca de su elaboración y a escuchar sobre diferentes ritos y ceremonias indígenas.

Si quieres hacer un poco de deporte, puedes hacer la caminata Raya Raya – Purmamarca, la cual transcurre por un antiguo camino de mina que une Tumbaya Grande con Purmamarca. El paseo es de 11 km que se sortean en unas 5 horas. Se parte a una altura de 2100 metros sobre el nivel del mar y se culmina a los 2422, por lo que hay que sortear desnivel.

Purmamarca

Uno de los pueblos más turísticos de la Quebrada de Humahuaca es Purmamarca. Este precioso enclave rodeado de montañas multicolores no solo destaca por su belleza, sino también por su ubicación estratégica para conocer algunos de los puntos más destacados de la provincia de Jujuy, como las Salinas Grandes. Para muchos, Purmamarca es el pueblo más bonito de Argentina. Tendrás que visitarlo y sacar tus propias conclusiones, ¿no crees?

Purmamarca fue fundado en el año 1594, con un trazado urbano planificado en torno a la Iglesia Santa Rosa de Lima. Por su riqueza arquitectónica, histórica y cultural fue declarado Sitio Histórico Nacional. A su vez, allí se encuentra uno de los puntos más fotografiados de Argentina, el Cerro de Siete Colores. Por esto y más, Purmamarca es un imperdible de cualquier viaje por la Quebrada de Humahuaca.

¿Dónde se ubica Purmamarca? A 60 km al norte de la capital jujeña. Para llegar hay que conducir durante unos 45 minutos por la RN 9 (pasar las localidades antes mencionadas) y luego hacer un breve desvío por la RN 52. Esta misma carretera es la que te llevará a la bella Cuesta de Lipán y las Salinas Grandes, un paseo que sin dudas tienes que hacer.

¿Qué hacer en Purmamarca? Básicamente, recorrer las calles del pueblo, visitar su iglesia en donde se lucen ornamentos y pinturas realizadas por los indígenas, recorrer sus puestos de artesanías y probar la comida local. Los puestos ubicados en torno a la plaza venden todo lo que puedas imaginar: ponchos de lana de vicuña y llama, tapices, bufandas y gorros tejidos, sonajeros de semillas, pulseras de alpaca y plata y mucho más. Las tiendas son una explosión de color a las cuales no podrás resistirte.

Junto a la Iglesia Santa Rosa de Lima se encuentra otro de los sellos de identidad de Purmamarca: el Algarrobo Histórico. Este ejemplar de algarrobo negro tiene unos 620 años de edad y, según la leyenda, a sus pies fue apresado el cacique local Vitilpoco en 1594 por Francisco de Argañaraz y Murguía (el Gobernador de Jujuy en aquel entonces). Además, a principios del siglo XIX este árbol fue testigo de la campaña del General Manuel Belgrano al mando del Ejército del Norte.

Otra construcción histórica de Purmamarca es el Cabildo. Lo distinguirás fácilmente por su galería de arcos y porque se encuentra frente a la plaza central. Su construcción data de mediados del siglo XIX, aparentemente con motivo de las celebraciones de la Revolución de Mayo.

Con gruesas paredes de adobe, representa el Cabildo más pequeño de la Argentina y todo un ícono arquitectónico, histórico y social de la Quebrada de Humahuaca. Además, es uno de los últimos 10 cabildos tradicionales que persisten en el país. No dejes de visitarlo, conocer su historia y admirar sus exposiciones.

Llevarte una foto del Cerro de Siete Colores es algo que obligadamente tienes que hacer en Purmamarca. Esta maravilla de la naturaleza conformada por sedimentos marinos, lacustres y fluviales regala una de las postales más maravillosas del Noroeste Argentino. Lo ideal es subir a su mirador por la mañana y hasta el mediodía, cuando los colores lucen todo su esplendor gracias a la luz del sol.

Si quieres hacer una caminata corta y de baja dificultad, entonces no te pierdas el Paseo de los Colorados. Este circuito de unos 3 km recorre parte del lecho del río Tumbaya, a espaldas del Cerro de Siete Colores y sumerge al visitante en paisajes de enorme belleza. Puedes hacer la caminata por tu cuenta, o bien contratar un paseo nocturno y apreciar el manto de estrellas que se levanta frente a este lugar.

Purmamarca es uno de los pueblos de la quebrada mejor preparados para el turismo. Al igual que Tilcara, cuenta con una cartera de alojamientos muy variada y para todos los bolsillos. Lo mismo sucede con su oferta gastronómica, que sin dudas vale la pena explorar.

Maimará

Maimará es un pueblo de la Quebrada de Humahuaca que se encuentra situado a 2383 metros sobre el nivel del mar, de espaldas a cerros multicolores que son conocidos como la Paleta del Pintor.

Para llegar a Maimará desde San Salvador de Jujuy tienes que tomar la RN 9 y conducir a lo largo de 71 km por una ruta completamente asfaltada y en perfectas condiciones. El paseo es hermoso, especialmente a medida que te adentras en el mundo de color y formas que es la Quebrada de Humahuaca.

¿Cuál es el atractivo principal de Maimará? Su postal más conocida es la de la Paleta del Pintor, un cerro cuyos colores le dan al pueblo un marco auténticamente quebradeño. Sus atractivas tonalidades se prestan para tomar fotografías desde diferentes ángulos y contemplar lo maravillosa que es la naturaleza.

Maimará es un pueblo muy tranquilo por el que da gusto pasear. Allí puedes visitar su acogedora plaza y la Iglesia Nuestra Señora de la Candelaria; comprar productos frescos en su mercado y recorrer las quintas frutihortícolas que rodean el pueblo. A ambos márgenes del río y en las quebradas adyacentes hay algunos viñedos que también merecen una visita. Un plan recomendado es rentar una bici y recorrer el pueblo en dos ruedas. ¡Vale mucho la pena!

Otra de las propuestas turísticas de Maimará es recorrer la Quebrada del Cementerio, la cual se encuentra adyacente al Río Grande. La caminata al lugar es motivada por los paisajes increíbles que despliega esta zona y por la posibilidad de descubrir la cultura e historia local de la mano de un guía. El objetivo es llegar al Puente Natural, una increíble formación geológica emplazada en esta quebrada.

Si te gusta el senderismo, también puedes hacer la ruta que asciende el Cerro General San Martín, donde se encuentra la majestuosa Paleta del Pintor. Esto te permitirá contemplar desde lo alto los hermosos paisajes de Maimará, con el río y las quintas a su alrededor. Por este mismo sendero todos los años marchan los lugareños hacia el santuario de la Virgen de Punta Corral.

Para más información de estas rutas, no tienes más que acercarte a la Oficina de Informes Turísticos de Maimará, punto desde el cual parten las expediciones.

Tilcara, el pueblo más turístico de la Quebrada de Humahuaca

La hermosa localidad de Tilcara es la favorita de los turistas para hacer base y recorrer la Quebrada de Humahuaca. Al igual que sus compañeros, se trata de un pueblo de calles estrechas, edificios de adobe y mucha belleza paisajística. Tilcara conserva el encanto especial que caracteriza a las comunidades de esta zona, a la vez que está bien preparada para recibir a los viajeros que llegan desde diferentes partes del país y del mundo.

Tilcara se sitúa en la confluencia del Río Grande, el cual recorre toda la Quebrada de Humahuaca, y el río Huasamayo; a 84 km de San Salvador de Jujuy y a menos de 10 km de Maimará.

Si bien es más grande que otros pueblos de la quebrada, Tilcara posee un tamaño ideal para recorrer a pie. Cuenta con una buena oferta hotelera, cultural, gastronómica y toda la vida nocturna que no tienen sus vecinos. De allí que sea muy frecuentada por grupos de jóvenes que no viajan con más que su mochila. Sus calles estrechas están adornadas con coloridos murales que le dan mucha vida al pueblo. En los mismos se ven representados motivos locales, paisajes norteños y tradiciones. En definitiva, estamos seguros de que te encantará conocer Tilcara.

¿Qué ver en Tilcara? Al igual que el resto de los pueblos de la Quebrada de Humahuaca, concentra su mayor actividad alrededor de su plaza central. Tanto en ella como en sus alrededores encontrarás muchos puestos de artesanías que venden productos regionales, algunos hechos por los locales y otros traídos de Bolivia.

Las calles de su alrededor albergan al correo, el Museo Arqueológico y el Museo Regional de Pintura. Además, una serie de bares, restaurantes y otras tiendas de artesanías terminan de completar el conjunto.

Otro de sus sitios de interés es la Iglesia Nuestra Señora del Rosario, un templo sencillo construido con materiales típicos de la zona: adobe y techos de madera. Con una historia que se remonta al XVII, es otro de los sitios de la Quebrada de Humahuaca que fue declarado Monumento Histórico Nacional.

El Mercado Municipal es otro imperdible de Tilcara y una de las mejores maneras de tomar contacto con la forma de vida de los habitantes de la quebrada. Se encuentra ubicado en el galpón cubierto de la Municipalidad Indígena y vende todo lo que puedas imaginar: frutas y verduras, quinoa y otros cereales, especies, hojas de coca y vestimenta típica de la zona.

Tampoco puedes irte de Tilcara sin visitar su Pucará. Este importante sitio arqueológico tiene 1200 años de antigüedad y en su momento cumplió funciones defensivas. De hecho, la palabra “pucará” en quechua significa “fortaleza”.

El Pucará de Tilcara cuenta con una gran concentración de estructuras arqueológicas distribuidas a lo largo de más de 8 hectáreas. Lo que hoy puede apreciarse es una reconstrucción realizada por arqueólogos de la Universidad de Buenos Aires entre 1911 y 1948. Fue un trabajo conjunto con la comunidad de Tilcara, a través del cual se intentó pensar y reconstruir las diferentes viviendas y centros religiosos basándose principalmente en la cosmovisión de la época.

Junto al Pucará de Tilcara se encuentra el Jardín Botánico de Altura. Fundado en 1968, cuenta con una colección de especies vegetales que crecen en la Puna. La misma está dividida en 7 secciones: cactáceas, hierbas de altura, plantas alimenticias, medicinales, árboles y arbustos, muestra de rocas y vegetación de pantanos. Sin dudas, otro sitio muy interesante para visitar en Tilcara.

Finalmente, una opción más para disfrutar de Tilcara es la Garganta del Diablo, a la cual se accede a través de un camino de ripio y cornisa. Se trata de una formación rocosa cuyo principal atractivo es una importante caída de agua. Se encuentra a 7 km de Tilcara y se puede llegar a pie o en vehículo. La travesía lleva casi una hora y media y es bastante exigente, dado que es en subida y en altura, pero vale mucho la pena.

Uquía

Otro pueblito poco conocido de la Quebrada de Humahuaca es Uquía. Este pequeño enclave no posee grandes atractivos, salvo la sencilla Iglesia de San Francisco de Paula, edificada en 1691. Aun así, su interior esconde una rica colección de pinturas realizadas en el XVII por indígenas de la Escuela Cuzqueña, en la época colonial.

Su atractivo más interesante es la Quebrada de las Señoritas, una increíble formación geológica por la que da gusto caminar. Las tonalidades grises, verdosas y azuladas de sus rocas, sumado a la arenisca roja y arcillita le da un toque único al lugar.

Por otro lado, Uquía es uno de los pueblos más baratos de la Quebrada de Humahuaca para comprar artesanías. Los puestos se encuentran en la entrada del pueblo y frente a la iglesia, de manera que no tendrás problema para llegar a ellos.

Humahuaca

Humahuaca es el pueblo que le da el nombre a la quebrada, Situado al norte de la misma, a 3.000 metros sobre el nivel del mar y a 126 km de San Salvador de Jujuy, es otro de los lugares imperdibles del paseo.

Este poblado de unos 6.000 habitantes es famoso por sus callecitas empedradas, sus casas de adobe y sus callejones estrechos. Al igual que en otros pueblos de la quebrada, es frecuente ver a la gente vestida con trajes típicos y escuchar música tradicional en cada uno de sus rincones. De allí que pasear por sus calles sea sinónimo de vivir la esencia del Noroeste Argentino.

La plaza central de Humahuaca, también conocida como Plaza Dr. Ernesto Padilla, es el corazón del pueblo. Alrededor de ella se ubican puestos de artesanos que venden productos regionales y músicos callejeros interpretando melodías andinas. Mezclados con los nativos del lugar, verás un desfile de turistas con el infaltable mate en la mano.

Entre sus principales monumentos encontramos el Cabildo Histórico y la Iglesia Catedral Nuestra Señora de la Candelaria. Esta última fue construida durante los años 1631 y 1634 y es todo un emblema del pueblo. Por su parte, el Cabildo funciona como museo y posee una imagen móvil de San Francisco Solano que todos los días a las 12 del mediodía sale a bendecir a todas las personas que pasean por la plaza.

Aunque, la estrella de Humahuaca es el Monumento a los Héroes de la Independencia. Esta mole de 70 toneladas rinde homenaje a los pobladores del norte argentino que lucharon durante la guerra de Independencia. Para llegar a él tendrás que subir una larga escalinata desde la cual se contempla todo el pueblo. Sin dudas, estás frente al monumento más fotografiado de la Quebrada de Humahuaca.

Junto al monumento se encuentra la Torre de Santa Bárbara, el campanario de una antigua iglesia del año 1695 que hoy ya no está. Desde la misma se obtiene una vista muy bonita del pueblo y sus paisajes circundantes.

Desde Humahuaca se puede visitar uno de los lugares más hermosos del Noroeste Argentino. Si te sorprendiste con la belleza del Cerro Siete Colores, espera a ver la Serranía del Hornocal. ¡El lugar es increíble!

Situada a 25 km de Humahuaca, esta serranía es única por varios motivos, principalmente por su dimensión y por la cantidad de colores que reúne. De hecho, es conocida como el “Cerro de los 14 Colores”, puesto que su paleta incluye el blanco, ocre, amarillo, rojo y más.

Para apreciar esta maravilla natural tendrás que tomar una tráfic desde Humahuaca o conducir por tu cuenta hasta un mirador ubicado frente a ella, a 4.344 metros sobre el nivel del mar. No olvides tomar mucha agua y comer liviano, para poder hacer frente al mal de altura.

Tres Cruces

Muchos viajeros dan por finalizado su viaje por la Quebrada de Humahuaca en el último pueblo mencionado. De todos modos, nosotros te invitamos a que vayas más allá y te animes a explorar la localidad de Tres Cruces.

Situada al norte de la quebrada y sobre la RN 9, aparece este encantador pueblo inmerso en paisajes ocres. El mismo se halla a los pies de una formación geológica llamada el Espinazo del Diablo. Es decir, que sus paisajes son igual de fascinantes que los de sus compañeros.

El pueblo de Tres Cruces se encuentra situado a casi 3.700 metros sobre el nivel del mar y se distingue por su clima seco. Aquí los días son soleados y las noches sumamente estrelladas. La variación térmica es considerable, llegando a alcanzar los 40 °C en verano y los -10 °C en invierno.

¿Qué tiene de interesante Tres Cruces? Principalmente sus artesanías. El pueblo destaca por su producción de cerámicas y tejidos en fibra de llama y oveja que podrás adquirir a buen precio. Además, sus artesanos invitan a los turistas a conocer cómo elaboran cada prenda o elemento.

Un buen plan respecto a esto último es visitar el Paraje Chicorioj, a 3 km del pueblo. Aquí encontrarás una familia gustosa de mostrar al turista el proceso de elaboración de piezas de cerámica. También ofrecen a sus visitantes una merienda campestre en un entorno natural privilegiado.

Mapa de la Quebrada de Humahuaca

Llegamos al final de este recorrido por la Quebrada de Humahuaca. Seguramente te han dado ganas de visitar este destino, ¿no es cierto? Si es así, no dudes en ponerte en marcha y planificar una escapada. ¡Estamos seguros de que no te arrepentirás de hacerlo!

Aquí tienes un mapa con cada localidad de la quebrada y sus puntos de interés. Cada una de ellas está marcada con un color diferente, de manera que puedas organizar de manera más práctica qué sitios visitar y cómo hacerlo. Pero, de más está decir que llegar a cada pueblo de la Quebrada de Humahuaca es sumamente sencillo. La RN 9 está en perfectas condiciones y transitar por ella es un verdadero placer.

¿Te animas a más? Puedes entonces llegar a La Quiaca, en el límite con el fascinante país vecino de Bolivia.

Con esta invitación a descubrir la Quebrada de Humahuaca nos despedimos. ¡Hasta el próximo destino!