Inti Raymi, la Fiesta del Sol de los incas

Una de las cosas más hermosas de viajar a Perú es poder conocer sobre la cultura andina y las tradiciones milenarias que al día de hoy se siguen celebrando a lo largo del país. De ellas, la más trascendental, emotiva e impresionante de todas es el Inti Raymi.

Esta celebración cusqueña reivindica el ‘Wawa Inti Raymi’, la antigua ceremonia que protagonizaban los incas en Cusco, la capital de su imperio, para rendir culto al Dios Sol. Es tal la importancia de esta celebración que ese día es feriado nacional, de manera que el pueblo completo pueda participar de ella.

El día de hoy te contamos todo sobre el Inti Raymi, que es mucho más que una ceremonia religiosa inca. Es más bien una reivindicación de la lucha de los pueblos originarios por su identidad. Si tienes la suerte de poder ser testigo de ella, habrás vivido un encuentro con las raíces más profundas del Perú.

¿Qué significa Inti Raymi? El término Inti Raymi proviene del quechua y traducido al español se lee como Fiesta del Sol.

La celebración atrae a miles de turistas cada año y permite mantener viva la cultura ancestral incaica. Hoy en día, es una celebración a la que asisten cusqueños y personas de todas partes del mundo, con el fin de vivir en carne propia una de las manifestaciones culturales más importantes de este país andino. Podríamos decir que el Inti Raymi es una manera de mantener vivo al Tahuantinsuyo, quien fue el imperio más grande y poderoso de América del Sur.

El Inti Raymi no solo es la festividad más importante del Cusco, es también el segundo festival más grande de Sudamérica, por detrás del famoso y colorido Carnaval de Río de Janeiro, en Brasil. Además, es la época del año que más turismo moviliza en Cusco y Machu Picchu.

Por eso, si deseas visitar Cusco y una de las 7 Maravillas del Mundo Moderno, sin dudas que el Inti Raymi es un gran momento para hacerlo.

¿Qué es la fiesta del Inti Raymi?

Un poco ya lo explicamos. El Inti Raymi es una fiesta milenaria que se celebra en Cusco y otros países andinos que escenifica y reivindica la ceremonia incaica del Wawa Inti Raymi (en quechua Fiesta del niño Sol)

El Wawa Inti Raymi marcaba el inicio del solsticio de invierno (día más corto del año), el fin del año agrícola y el comienzo de las nuevas cosechas. A su vez, mediante esta celebración los incas legitimaban su dominio sobre cada punto de inmenso imperio. Recordemos que el Tahuantinsuyo (Imperio Inca) se extendía por varias regiones de los actuales países de Perú, Ecuador, Bolivia, Colombia, Argentina y Chile.

Los incas veneraban a muchos dioses (el sol, la tierra, el agua, la luna, las estrellas) y para cada uno de ellos realizaban diferentes ofrendas, con el fin de evitar desgracias y pedir favores de la naturaleza. El Dios Sol era la máxima divinidad del Tahuantinsuyo. De allí que el Inti Raymi fue creado para rendir culto al «Apu Inti» (Dios Sol en español), a quien también se lo conocía en ciertos sectores como “Apu P’unchau” (Dios Día).

De acuerdo a su cosmovisión, era el esposo de la luna y tenía el poder de regir las cosechas, curar las enfermedades y brindar alivio a las personas. Tan reverenciado fue, que la nobleza inca construyó templos en su honor a lo largo de todo el territorio, siendo el más importante el de Qorikancha, en la ciudad de Cusco.

Cada uno de estos templos era cuidado por las vírgenes del sol, las jóvenes más bellas del imperio. Ellas no podían ser vistas por nadie, excepto por el emperador (que era considerado el hijo del Dios Sol) y la sacerdotisa que las custodiaba.

Los incas realizaban diferentes ofrendas al Dios Sol y cumplían con diversos ritos. Hacían ayuno, sacrificaban llamas y alpacas, ofrecían objetos de oro y plata, bailaban y más. El Wawa Inti Raymi era una ceremonia multitudinaria (al día de hoy lo sigue siendo) y de ella participaban representantes de todo el imperio.

Hoy en día, el Inti Raymi celebrado en Cusco es una explosión de vida. La ceremonia involucra trajes coloridos, banquetes de lujo, música animada y recreaciones históricas. Sin dudas, es una de las mejores experiencias previas a la visita a Machu Picchu.

Historia del Inti Raymi

El origen de esta festividad se remonta al siglo XV, concretamente al año 1430, según cuentan los cronistas. Se dice que la fiesta del Wawa Inti Raymi habría sido instaurada por el emperador inca Pachacútec (1418-1471), el mismo que habría mandado a construir el Machu Picchu.

Pachacútec fue uno de los principales responsables de las conquistas y las maravillas arquitectónicas que lograron los incas. Durante el siglo XV el emperador logró vencer a sus enemigos chancas (máximos adversarios de los incas por el control del territorio); expandió las fronteras del reino y lo convirtió en el más grande de Sudamérica; construyó caminos, templos, monumentos y ciudades increíbles, siendo Machu Picchu el ejemplo más claro de ello.

Tan es así, que todos los cronistas coinciden en que fue el emperador más grande del Imperio Incaico. El historiador inglés Clement Markham lo define incluso como el “más grande hombre que la raza aborigen de América haya producido”.

El emperador inca Pachacútec murió aproximadamente en 1471 y fue sucedido por su hijo, Túpac Inca Yupanqui. Hasta el día de hoy, la ubicación de su cuerpo momificado sigue siendo un misterio.

Del rico legado dejado por este emperador, el Inti Raymi es uno de los más importantes. Sus sucesores, Tupac Inca Yupanqui, Amaru Inca Yupanqui, Huayna Capac, Huáscar y Atahualpa fueron quienes dirigieron la ceremonia durante años.

Cuando los españoles llegaron a Perú comenzaron a eliminar de manera obligatoria toda creencia diferente a la fe católica. En 1532 el virrey Toledo determinó que el Inti Raymi era una ceremonia pagana que iba en contra de lo que profesaba el catolicismo.

A pesar de que la celebración fue reprimida, los incas no renunciaron tan fácilmente a sus creencias y siguieron realizando los festejos a escondidas. Lo que buscaban con esto era evitar los castigos físicos impuestos por los españoles e, incluso, la muerte; además de mantener vivas sus tradiciones.

Perú tuvo que esperar 400 años para poder celebrar nuevamente el Inti Raymi con libertad. En 1944 la costumbre se reivindicó y hasta el día de hoy se mantiene, aunque con algunas variaciones en comparación a la original.

En el 2001 el Inti Raymi fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación y Acto Principal y Ceremonia Ritual de Identidad Nacional. Hoy en día, se celebra en el templo del Qorikancha, la Plaza de Armas y la fortaleza de Sacsayhuaman, en Cusco.

¿Cómo se celebraba la Fiesta del Sol en la época inca y cómo se hace hoy en día?

Por aquel entonces participaban de la ceremonia del Inti Raymi el Inca y su familia, los sacerdotes, jefes y nobles. Todos ellos se congregaban en Huacaypata (la Plaza de Armas de Cusco) para presenciar esta increíble celebración.

La entrada del inca a la Plaza de Armas y a la explanada de Saqsayhuaman estaba presidida por los “Acllas”, quienes rociaban flores; y los «Pichaq», hombres que con escobas de paja se encargaban de ahuyentar a los malos espíritus. El inca siempre estaba acompañado de su “kumillo”, un enano jorobado que portaba la “Achiwa”, una especie de paraguas hecho de plumas de colores.

Según las crónicas, los festejos involucraban el traslado de momias ancestrales desde templos y santuarios cercanos. También se procedía con el sacrificio de al menos 200 llamas, el teñido de Huacaypata con sangre y se bebía una abundante cantidad de chicha (bebida sagrada inca). Había bailes especiales, quema de hojas de coca y los festejos comenzaban al amanecer y se extendían hasta el ocaso.

Hoy en día, se realiza una recreación más moderna del Inti Raymi, aunque se conserva su majestuosa gloria. Claro que no involucra la procesión de momias antiguas ni el sacrificio de animales, pero sí es un espectáculo digno de admirar.

La puesta en escena involucra a más de 700 artistas que se visten con trajes típicos de la época. El papel principal lo tienen el Willaq Umo, sumo sacerdote, la nobleza incaica, el inca y su esposa la coya. También se personifica el séquito del inca y los delegados de los cuatro rincones del Tahuantinsuyo.

Las celebraciones del Inti Raymi comienzan por la mañana en la explanada abierta del antiguo Templo Inca del Sol. Representantes de los cuatro suyos del Imperio Inca (Collasuyo, Contisuyo, Antisuyo y Chinchaysuyo) llegan al lugar y el Sapa Inca da inicio a las fiestas invocando la alabanza al Sol. Luego, sigue una procesión a la Plaza de Armas de Cusco.

Posteriormente, se lleva a cabo una lectura ceremonial de la Sagrada Hoja de Coca, la cual permite ver qué depara el próximo año. La etapa final de la ceremonia se lleva a cabo en el Recinto Arqueológico de Sacsayhuaman, donde se dan cita espectadores de todo el mundo.

¿Cuándo se celebra la Fiesta del Sol?

La ceremonia del Inti Raymi se celebra el 24 de junio cada año durante el solsticio de invierno, y marca el inicio del Año Nuevo Andino. Según las crónicas del escritor peruano Inca Garcilaso de la Vega, el Inti Raymi duraba 15 días, pero actualmente solo dura una jornada.

El Inti Raymi en Cusco

Junio es un mes especial para viajar a Cusco. Durante esta época se celebran muchas festividades tradicionales, además del Inti Raymi. La Fiesta del Corpus Christi, el Festival Gastronómico del Chiriuchu y otros desfiles folclóricos y tradicionales que se dan a lo largo del mes son algunos ejemplos. Si a ello le sumamos que Cusco es una de las ciudades más bellas de Perú (y de Sudamérica, nos atrevemos a decir), el combo es perfecto.

En definitiva, poder ser testigo de la celebración más solemne del calendario inca es una experiencia que todo viajero debería vivir.

Los festejos del Inti Raymi en Cusco tienen lugar en la explanada del Templo del Qorikancha, en la Plaza de Armas y en el Parque Arqueológico de Saqsayhuaman. En el primero se recepciona a las delegaciones de los cuatro suyos o rincones del Imperio. En el segundo se produce el encuentro de los dos mundos. Sacsayhuamán, por su parte, es el escenario principal y lugar donde se realiza la Fiesta del Sol.

El Templo del Sol o Qorikancha es el sitio donde inicia la Fiesta del Sol, concretamente en el denominado jardín de oro. La ceremonia comienza con la aparición del inca y rituales en donde se ofrendan hojas de coca, alpacas, llamas y más (recuerda que hoy en día ya no se sacrifican animales).

La puesta en escena generalmente comienza a las 9 am y dura unos 45 minutos. Para presenciarla debes acercarte a la Avenida del Sol en las primeras horas de la mañana.

La Plaza de Armas (el corazón del centro histórico de Cusco) es el punto neurálgico donde tienen lugar las celebraciones. El inca es cargado en un andas que es transportado por ocho sirvientes y se procede a la Ceremonia de la Coca.

Los espectáculos del Inti Raymi celebrados tanto en el Qorikancha como en la Plaza de Armas no cuentan con asientos. Es decir, hay que presenciar el espectáculo de pie. Por eso, se sugiere llegar temprano para poder conseguir un buen lugar, puesto que hay una gran aglomeración de gente. La ceremonia inicia alrededor de las 11 de la mañana y dura algo de una hora.

Finalmente, en la explanada Chuquipampa de la fortaleza Sacsayhuaman se monta el escenario principal de la ceremonia del Inti Raymi. Aquí únicamente puede ingresar el público que haya adquirido su boleto de ingreso para poder ocupar su lugar en alguna de las 3 plataformas o tribunas acondicionadas al turista.

La celebración comienza a las 1:30 pm y tiene una duración aproximada de dos horas.

A este festejo central se suman los habitantes del Cusco, quienes organizan eventos para los turistas nacionales e internacionales, con el objetivo de que se lleven un recuerdo imborrable de la experiencia. Bailes tradicionales e increíbles muestras de la gastronomía local es otra forma de conocer la historia de los antepasados incas y hacer de esta fiesta algo majestuoso.

¿Cuánto cuesta ver el Inti Raymi?

Como te contamos antes, los espectáculos del Inti Raymi que se celebran en el Templo Qorikancha y la Plaza de Armas son gratuitos. Pero, si deseas presenciar el espectáculo que tiene lugar en la explanada de Sacsayhuaman, el costo va de los 180 a los 240 USD, según el asiento que escojas.

Para los turistas que van a presenciar el espectáculo en la Plaza de Armas se recomienda reservar con tiempo una mesa en alguno de los restaurantes, bares y cafés situados en los portales. La mayoría de ellos tienen balcones desde los cuales es posible presenciar todo el show en detalle. Claro que esto representa un gasto adicional, pero vale mucho la pena.

Las entradas para el espectáculo se venden a través de internet. El ticket incluye servicio de guiado, alimentación y transporte.

Si bien el precio puede ser un poco excesivo, vale la pena presenciar semejante espectáculo. El Inti Raymi es uno de los legados culturales más importantes dejado por el Imperio Inca. Por eso, si tienes pensado viajar a Cusco, no dejes de considerar hacerlo en junio. En cualquier momento la ciudad y sus alrededores ofrecen una experiencia inolvidable, pero durante el Inti Raymi lo es aún más.