A 65 km de Barcelona encontramos uno de los destinos de veraneo más populares de la Costa Brava: Lloret de Mar. Situada en la comarca de La Selva, esta bella localidad ofrece una dosis perfecta de sol, playa, cultura y muchas propuestas de ocio pensadas para toda la familia.
Son muchos los motivos por el cual escaparse a Lloret de Mar es una gran idea. Por empezar, sus más de 7 km de costa salpicada de playas y calas familiares y salvajes; sus restaurantes y terrazas que funcionan día y noche, su buen ambiente nocturno, los Caminos de Ronda y muchos rincones históricos.
En definitiva, Lloret de Mar es la escapada perfecta para un fin de semana, o por qué no, unas vacaciones más largas. De paso, puedes aprovechar y conocer otros destinos de playa de la Costa Brava, como la cercana Tossa de Mar.
A continuación, te presentamos una lista con 15 sitios para visitar en Lloret de Mar que te ayudarán a planificar tus días allí. ¿Nos acompañas?
¿Dónde se ubica y cómo llegar a Lloret de Mar?
La ciudad catalana de Lloret de Mar se sitúa en plena Costa Brava, a 40 km de Girona y a unos 65 km de Barcelona. A ella llegan miles de turistas cada año para gozar de su buen clima, la excelencia de sus playas y su movida nocturna. Por ende, es un destino muy bien comunicado con el resto de Cataluña y otras comunidades españolas.
En avión desde Girona y Barcelona
La forma más rápida de llegar a Lloret de Mar, si viajas de sitios más alejados de España o incluso otro país, es en avión aterrizando en los aeropuertos de Barcelona y Girona.
El Aeropuerto de Girona se encuentra a menos de 30 km de Lloret de Mar y recibe vuelos de varias compañías low cost (como Transavia o Ryanair) desde muchas ciudades europeas. La mayor frecuencia de vuelos es en julio y agosto, mientras que el resto del año la cantidad de vuelos disminuye.
A 90 km de Lloret se encuentra el Aeropuerto de Barcelona. La ventaja de este es que operan las grandes agencias aéreas del mundo, así como muchas low cost con mayor frecuencia durante todo el año. Además, desde las terminales 1 y 2 parten todos los días autobuses de la compañía Sarfa que llegan a Lloret en una hora y media. Por el contrario, desde el aeropuerto de Girona hay que movilizarse hasta el centro de la ciudad y una vez allí coger un bus a Lloret de Mar.
En autobús desde otras ciudades de Cataluña
En caso de que viajes en autobús desde Barcelona, tendrás que dirigirte a la Estación Nord, en pleno centro. La misma está muy bien comunicada con varias líneas urbanas de bus y cerca de la parada de metro de Arc de Triomf. El viaje hasta Lloret de Mar es de una hora y el precio del billete ronda los 11 EUR.
Desde Girona, Blanes y Tossa de Mar también se puede llegar en autobús. En el primer caso la compañía que opera esta ruta es Sagalés, el billete cuesta 6 EUR y el viaje demora 40 minutos. Desde Blanes y Tossa de Mar opera la compañía Pujol y los trayectos son más cortos.
En tren desde distintos puntos de España
Finalmente, puedes llegar a Tossa de Mar en tren desde ciudades más lejanas, como es el caso de Madrid. Lo que hay que hacer es coger el tren de alta velocidad AVE que te llevará a la estación de tren de Sants en Barcelona. Una vez allí, toma la línea R1 de los trenes de Rodalies de Catalunya, que llevan a la estación de Blanes en una hora y media. Ya en Blanes, puedes tomar un autobús y en 20 minutos llegar a Lloret.
En coche desde Barcelona
Muchos viajeros optan por alquilar un coche y moverse por cuenta propia. Esto es una excelente idea, especialmente porque te permitirá hacer una ruta por los pueblos y ciudades más bonitos de la Costa Brava o del interior de Cataluña.
Desde la capital catalana el viaje a Lloret de Mar se puede hacer a través de dos carreteras. Ambas (la AP-7 y la C-32) son de pago y te llevarán a destino en aproximadamente 75 minutos. La diferencia es que en temporada alta conviene ir por la primera y salir por Vidreres, ya que de ese modo evitas el tramo de Blanes a Lloret de Mar que suele estar muy concurrido.
¿Qué ver en Lloret de Mar?
La lista de lugares que ver en Lloret de Mar es bastante extensa. Entre sus atractivos encontramos la cala Boadella, los jardines de Santa Clotilde, el Castell d’en Plaja y el Museo del Mar, solo por mencionar algunos.
Aquí te dejamos un listado con todos los atractivos de Lloret de Mar, incluyendo sus playas más famosas, los Caminos de Ronda y muchos sitios históricos y culturales.
Dicho esto, veamos qué hay de interesante en Lloret de Mar.
1- Jardines de Santa Clotilde
Comenzamos por una de las visitas más famosas para hacer en Lloret de Mar: los Jardines de Santa Clotilde. Este espacio relajante está situado en lo alto de un acantilado, entre la cala Boadella y la playa de Fenals, por lo que ofrece unas vistas alucinantes de la Costa Brava.
Su estética es impecable, con una arquitectura laberíntica llena de fuentes y estatuas que se alternan entre naranjos, tilos, pinos y cipreses. Si has visto la precuela de la popular serie Games of Thrones (House of the Dragon), seguramente te sonará haber visto este sitio, ya que varias escenas se rodaron allí. Después de todo, está dentro de los mejores jardines históricos mediterráneos de Europa, por lo que tiene lógica que su belleza haya cautivado a los productores de la serie.
Durante tu paseo por los jardines verás terrazas, escalinatas, bustos, esculturas de estilo clásico, un estanque y miradores al Mediterráneo y la cala Sa Boadella. De hecho, son accesibles a pie desde esta última y desde la playa de Fenals.
La visita a los jardines cuesta 6 EUR para adultos y 3 EUR para jubilados, estudiantes y personas con discapacidad. Se pueden visitar todos los días de 10 am a 8 pm (en temporada alta) y de 10 a 5 pm en temporada baja (en invierno).
No olvides tu cámara de fotos, puesto que te cansarás de capturar la belleza del lugar desde distintos ángulos.
2- Ermita y playa de Santa Cristina
Santa Cristina es la patrona de Lloret de Mar y la protectora de la gente de mar, de allí que tenga dos sitios que llevan su nombre: una playa y la ermita.
La ermita de Santa Cristina es una construcción de finales del siglo XVIII en cuyo interior se resguardan algunas reliquias de la santa y una colección de barcos en miniatura. El templo es de estilo neoclásico y destaca también su altar mayor de mármol hecho en Italia.
En la plaza que hay junto a la ermita y bajo la sombra de un pino centenario se celebra cada 24 de junio la Fiesta Mayor en honor al día de Santa Cristina. Para la ocasión se realiza un almuerzo de un tradicional estofado que reúne a todos los pescadores. Allí mismo hay un mirador desde el cual se obtienen hermosas vistas de la costa.
La ermita se sitúa a unos 3,5 km del centro de Lloret de Mar y la entrada es gratuita, así que no dudes en hacerle una visita.
Desde el aparcamiento se puede descender hasta la playa de Santa Cristina. Esta última es de carácter familiar y goza de un emplazamiento privilegiado, ya que está rodeada de mucha vegetación y custodiada por dos grandes cerros que la resguardan del viento y las olas, por lo que el mar es muy calmo. En temporada alta es una alternativa muy buena para quienes buscan escapar de las muchedumbres.
Se puede llegar tanto a la ermita como a la playa tomando la carretera lleva a Blanes y dejar el coche en un parking de pago cercano. En temporada alta hay un barco que zarpa desde la playa de Lloret y llega a la de Santa Cristina. Finalmente, los amantes de la caminata pueden llegar andando desde Cala Sa Boadella siguiendo un sendero que bordea la costa. Vale aclarar que los últimos 15 minutos antes de llegar a la playa de Santa Cristina se realizan al costado de la carretera.
3- Cala Sa Boadella
La cala Sa Boadella es una de las más bonitas de la Costa Brava y uno de los rincones más emblemáticos de Lloret de Mar.
Esta playa de apenas 250 metros de longitud tiene como principal atributo su tranquilidad y su ambiente prácticamente virgen. La costa está bañada por las aguas cristalinas propias de la Costa Brava, por lo que su entorno es idílico, con una gran cantidad de pinos y rocas que le dan mucho encanto.
Es una de las playas menos accesibles de Lloret del Mar, lo cual la convierte en un lugar adecuado para quienes huyen de las muchedumbres y del ruido. El acceso se realiza a través de un pinar, pudiendo dejar el coche en la carretera que lleva a la Ermita de Santa Cristina. La playa cuenta con algunos servicios, incluyendo un chiringuito donde se pueden comprar refrescos y helados
Un detalle a tener en cuenta de la cala Sa Boadella es su tradición nudista, puesto que aquí está permitida esta actividad. La zona derecha de la cala está limitada por varias rocas y es el área donde habitualmente se practica el nudismo.
4- Playa de Fenals
Otra de las mejores playas de Lloret de Mar es la de Fenals. Se encuentra en el barrio residencial con el mismo nombre, a 750 metros al oeste de la playa principal de la ciudad. Un agradable paseo marítimo la acompaña a lo largo de su casi 1 km de longitud, por lo que encontrarás muchas opciones para comer y tomar algo con vistas al mar.
La playa de Fenals también está al abrigo de dos colinas que la protegen de los vientos y el fuerte oleaje. De allí que sea idónea para dar tranquilos paseos en kayak, hacer paddle surf y snorkel, puesto que el mar es cristalino en todo momento. La arena es más gruesa que en otras playas y en algunos tramos hay pequeños guijarros.
En el extremo norte de la playa de Fenals aparece su rincón más bonito: la Punta D’en Sureda, dos hermosas calas rodeadas de rocas que se aprecian mejor desde un mirador situado en lo alto de un acantilado.
5- Castillo de Sant Joan
En lo alto de la montaña que separa la playa de Fenals de la de Lloret de Mar se encuentra esta fortaleza defensiva erigida en el siglo XI que conserva su torre principal de 18 metros de altura. El Castillo de Sant Joan es uno de los exponentes del patrimonio cultural de la ciudad y otro sitio qué ver en Lloret de Mar.
Luego de la Batalla de Trafalgar en el siglo XIX el castillo quedó en ruinas y cayó en el abandono, hasta que en 1965 comenzó su recuperación. Pero, no fue hasta 1983 que el Ayuntamiento de Lloret consiguió finalmente los permisos para reconstruir la torre que al día de hoy se puede visitar. No dejes de hacerlo, porque desde su terraza superior se obtiene una hermosa perspectiva de la ciudad y toda la costa.
Para subir al castillo puedes tomar el Camino de Ronda que parte desde el extremo sur de la playa de Fenals. La entrada tiene un costo de 3 EUR y el horario de visita es de 10 a 1 pm (de octubre a mayo) y de 10 am a 1 pm y de 5 pm a 7 pm entre junio y septiembre, de lunes a domingo.
6- Cala Banys
Luego de visitar el castillo puedes bordear la costa por el Camino de Ronda y bajar por las escaleras que conducen a la pintoresca Cala Banys. Este fotogénico rincón del litoral de Lloret de Mar es especial para hacer snorkel, ya que cuenta con rocas que dan cobijo a mucha vida marina.
Además, en esta cala se encuentra uno de los bares más conocidos de Lloret. Por ende, antes o después de explorar el fondo marino puedes tomar algo y disfrutar de su entorno privilegiado.
Si deseas seguir el Camino de Ronda, llegarás hasta el mirador de la Dona Marinera, un punto panorámico desde el cual se disfrutan de las mejores vistas de la playa de Lloret de Mar. El lugar lleva este nombre por una escultura de bronce que rinde homenaje a las mujeres de los marineros que se quedaron en sus casas cuando estos salieron a buscar su fortuna.
7- Playa de Lloret de Mar
Con 1630 metros de longitud, es la playa principal y más extensa de Lloret de Mar. Se sitúa en el centro de la ciudad, es fácilmente accesible y, al ser una playa urbana, cuenta con todos los servicios que puedas imaginar.
La playa de Lloret de Mar es de arena blanca y gruesa y está bañada por aguas cristalinas. Muy cerca de ella se encuentran los principales hoteles y alojamientos de la ciudad, así como las zonas de ocio más importantes. De allí que en temporada estival sea la playa más masificada de la zona.
Cuenta con chiringuitos, un aparcamiento de pago e instalaciones para disfrutar de muchos deportes diferentes, desde voley de playa hasta paseos en kayak, motos acuáticas y parasailing. También dispone de servicio de socorrismo desde el 15 de mayo al 15 de octubre y sillas anfibias para facilitar el acceso a la playa de personas con movilidad reducida.
8- Museo del Mar
En pleno paseo marítimo de Lloret de Mar encontramos la casa indiana de Can Garriga, un sitio de enorme valor histórico que alberga el Museo del Mar. Como podrás imaginar, en este espacio descubrirás el fuerte vínculo que tuvo la ciudad con el mar y la navegación a lo largo de su historia, desde la época en que en la playa de Lloret se construían barcos hasta el momento de los viajes a América.
La casa indiana que acoge el museo perteneció a Enric Garriga, quien regresó en 1887 a Lloret de Mar (luego de haberse ido a las Américas) con una buena fortuna. Fue así que mandó a construir esta vivienda para su mujer y sus hijos. En 1981 el Ayuntamiento la adquirió y la convirtió en el Museo del Mar en 2007, pero conservó los techos, paredes, muebles y suelos originales del siglo XIX.
Además de conocer la historia de los navegantes y marineros de la época dorada de Lloret de Mar, podrás disfrutar de una colección de maquetas navales, artículos de la época y textos explicativos. Sin dudas, es una de las visitas culturales más interesantes para hacer en Lloret.
El precio de la entrada es de 4 EUR para adultos y 2 EUR para jubilados, estudiantes y personas con discapacidad.
9- Ruta indiana de Lloret de Mar
Muchos antes de que Lloret de Mar se convirtiese en un destino turístico, fue un pueblo de pescadores y luego un punto muy importante de comercio de ultramar. El año 1778 se promulgó el Decreto del Libre Comercio con las colonias americanas, lo cual llevó a la construcción de grandes barcos para que los navegantes lloretenses pudieran ir a América a hacer su fortuna.
Fueron ellos en gran medida los responsables de la transformación urbanística que sufrió Lloret de Mar, ya que erigieron grandes mansiones y otros edificios modernistas que cambiaron su cara para siempre.
Si quieres conocer más sobre el legado indiano de Lloret de Mar puedes hacer esta ruta que comienza en Casa Garriga (Museo del Mar). El recorrido atraviesa el Paseo de Jacint Verdaguer, pasa por el Ayuntamiento (que es uno de los pocos edificios que se conservan de aquella época), la Iglesia de Sant Romà y Can Font. Esta última fue la casa de Nicolau Font i Maig, un lloretense que hizo su fortuna en Cuba con la caña de azúcar.
10- Iglesia parroquial de Sant Romà
En pleno centro histórico de Lloret de Mar se encuentra la Iglesia de Sant Romà. Esta construcción del siglo XVI es otro de sus lugares más bonitos. El exterior con mosaicos de colores en los tejados y las torres modernistas no pasan desapercibidas, así que seguramente pasarás por ella.
La Iglesia de Sant Romà refleja dos momentos constructivos muy diferentes que se ven reflejados en su arquitectura. La parte frontal luce un estilo gótico, mientras que en los laterales se aprecia el movimiento modernista que imperó en la villa a finales del siglo XIX. Por su parte, el interior del templo es mucho más austero y sencillo.
El templo se ubica a 100 metros de la Plaza del Ayuntamiento y se puede visitar de manera gratuita.
11- Plaza del Ayuntamiento
La plaza del Ayuntamiento está situada junto a la playa de Lloret de Mar y es un lugar ideal para empezar a explorar el centro histórico. Tal cual lo indica su nombre, allí se ubica el edificio neoclásico del Ayuntamiento, cuyo origen se remonta al siglo XIX. A su alrededor hay una amplia selección de bares y restaurantes que invitan a sentarse a comer y beber algo.
12- Sa Caleta
Otra de las playas de Lloret de Mar es Sa Caleta. Situada a los pies del Castillo d’en Plaja, es uno de sus rincones más pintorescos y fotogénicos.
La pequeña Sa Caleta está situada junto a la playa de Lloret y en el inicio del Camino de Ronda que une esta ciudad con Tossa de Mar. Su situación privilegiada se ve embellecida por la presencia de coloridas barcas de pescadores a orilla del mar. La arena es gruesa y el mar tiene un atractivo color verde turquesa. A su vez, la transparencia del agua la hace perfecta para disfrutar del snorkel o iniciarse en el submarinismo.
13- Castillo de Lloret – Castillo “d’en Plaja”
Dominando la estampa de Sa Caleta aparece el Castillo d’en Plaja, un excelente mirador al Mediterráneo y otro de los reclamos turísticos más destacados de Lloret de Mar.
El Castillo de Lloret fue construido en 1935 en estilo neogótico por el industrial gerundense Narcís Plaja como su residencia de veraneo. La obra finalizó recién en los años 40, luego de que hubiera acabado la Guerra Civil Española.
Hoy en día, se ha convertido en uno de los símbolos más importantes del municipio. Incluso, en abril del año pasado se inauguró allí un espacio inmersivo sobre los efectos del cambio climático. También consta de una terraza donde se puede tomar algo y disfrutar de unas vistas hermosas.
14- Cementerio Modernista de Lloret de Mar
El Cementerio Modernista es otro rincón de Lloret de Mar en donde se puede palpar su pasado indiano. Aquí las familias adineradas de la época hicieron construir panteones e hipogeos con destacados arquitectos, dando lugar a esta suerte de museo al aire libre que es otro de los íconos del modernismo en Cataluña.
Además de ser uno de los íconos de Lloret, forma parte de la Ruta Europea de Cementerios y es uno de los principales ejemplos de arte fúnebre del siglo XIX de Cataluña.
Durante el recorrido por el cementerio verás auténticas obras de arte modernista llenas de detalles asociados a la simbología fúnebre. Los mausoleos más vistosos e importantes están en la parte alta del cementerio, mientras que los mausoleos más pequeños y los hipogeos están en la parte izquierda. Hacia la derecha, en cambio, están los nichos.
15- Camino de Ronda en Lloret de Mar
Los Caminos de Ronda son uno de los emblemas de la Costa Brava. A lo largo de todo el litoral aparecen estos senderos que llevan a las mejores playas, calas y miradores. Como es de esperar, en Lloret de Mar hay un tramo del Camino de Ronda que cualquier amante de la caminata tiene que hacer.
El sendero tiene 12 km y empieza en la parte baja del Castillo d’en Plaja y une Lloret de Mar con Tossa de Mar. Al principio de la ruta están las ruinas del poblado ibérico de Turó Rodó, que es otro de los rincones interesantes del municipio.
Quienes no desean caminar tanto pueden hacer un primer tramo de 1 km que conduce a Cala Trons desde Sa Caleta, con la posibilidad de caminar 3 km más y llegar hasta Cala Canyelles.
¿Cuántos días son necesarios para conocer Lloret de Mar?
Un día completo es suficiente para conocer todos los puntos de interés de Lloret de Mar. Aunque, para aprovechar mejor sus playas, hacer alguna ruta de senderismo por los Caminos de Ronda y practicar algún deporte acuático, lo ideal es contar con un mínimo de 2 días. De allí que Lloret de Mar sea una escapada perfecta de fin de semana.
¿Cuál es la mejor época para viajar a Lloret de Mar?
Si bien cualquier momento del año es bueno para escaparse a Lloret de Mar, tienes que tener en cuenta que es una de las ciudades más visitadas de la Costa Brava y de toda Cataluña (especialmente en verano), por lo que su cara varía según el momento del año en que lo visites.
Los meses entre junio y septiembre es cuando Lloret de Mar recibe la mayor cantidad de visitantes. El motivo salta a la vista: sus hermosas playas y calas. Por ende, esta es la época del año en que los precios son más altos y las playas están más abarrotadas de gente. Si no eres muy amigo de las muchedumbres, te recomendamos evitar especialmente julio y agosto, que son los meses de mayor movimiento turístico. En cambio, junio y septiembre están dentro de la temporada alta, pero no en el momento pico.
Los días soleados de invierno también son un buen momento para viajar a Lloret de Mar. Especialmente si deseas disfrutar de los Caminos de Ronda. Aunque, si tenemos que elegir una estación, la primavera y el otoño compiten entre sí por el primer puesto. Tanto mayo (primavera) como octubre (otoño) son meses con buen clima y días con suficientes horas de sol para disfrutar al aire libre. Además, la mayoría de los hoteles y restaurantes continúan funcionando con normalidad.
En conclusión, los meses más adecuados para viajar a Lloret de Mar (teniendo en cuenta el clima, los precios en los alojamientos y la cantidad de gente) son mayo, junio, septiembre y octubre.
Mapa de Lloret de Mar
Como pudimos ver, Lloret de Mar es uno de los municipios más atractivos de la Costa Brava catalana. Su patrimonio histórico, cultural y natural es único, con infinidad de cosas por hacer. Por eso, si planeas unas vacaciones o unos días de descanso en la playa, aquí tienes una propuesta a la que difícilmente podrás resistirte.
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