El 24 de julio de 2023, un Boeing 767 de Delta Air Lines experimentó daños significativos en su radomo, motor y ala después de enfrentar una tormenta de granizo durante su vuelo. La aeronave, con matrícula N189DN, operaba como el vuelo DL185 desde el Aeropuerto de Milán Malpensa hacia el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy de Nueva York. Mientras ascendía desde la pista 35R de Malpensa, el vuelo encontró una severa tormenta de granizo, lo que llevó a la tripulación a tomar acción inmediata y declarar una emergencia debido a la intensa turbulencia y el granizo.
En respuesta a la situación de emergencia, la tripulación decidió detener el ascenso a una altitud de FL230 y optó por desviar la aeronave al Aeropuerto de Roma Fiumicino en Italia. Aviation Herald reportó el incidente, indicando que el vuelo aterrizó de manera segura en Roma aproximadamente 65 minutos después de partir de Milán, sin más problemas.
Imágenes que circulan en internet muestran la magnitud del daño en la aeronave, incluyendo perforaciones en el ala derecha, los conos de los motores, y daños en las palas del ventilador de ambos motores. Además, el radomo fue perforado y los bordes de ataque de las alas presentaron abolladuras.
Delta Air Lines flight DL185 makes emergency landing at Rome Fiumicino Airport after being damaged by a hailstorm on departure from Milan. pic.twitter.com/cbEbhtk2qz
— Breaking Aviation News & Videos (@aviationbrk) July 24, 2023
Afortunadamente, no se reportaron lesiones entre los pasajeros y la tripulación, pero la aeronave sufrió daños sustanciales debido a las severas condiciones climáticas encontradas durante el vuelo.
Un portavoz oficial de Delta Air Lines confirmó el incidente y declaró que la aeronave se encontró con condiciones climáticas adversas poco después del despegue de Milán, lo que llevó a la decisión de desviarse a Roma Fiumicino. Los pasajeros desembarcaron de manera segura al llegar a Roma.
El incidente ocurrió en medio de una violenta tormenta eléctrica que pasaba por el norte de Italia, causando inundaciones repentinas y granizos del tamaño de pelotas de tenis en la región. Se cree que la aeronave encontró la tormenta poco después del despegue y, en un corto período de nueve minutos, las piedras de granizo golpearon el radomo, lo que llevó a los extensos daños presenciados durante el vuelo.
Flight Emergency mencionó que el vuelo DL185 de Delta sufrió daños en su cono de nariz durante su salida de Milán, lo que fue un factor contribuyente en la decisión de desviarse a Roma.
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